Sr. editor:
La población geriátrica crece de forma progresiva en América Latina, probablemente por el impacto de las intervenciones de salud pública, los avances en medicina y los mejores niveles de vida 1. En consecuencia, las enfermedades neurodegenerativas como, por ejemplo, los diferentes tipos de trastornos neurocognitivos mayores, han tenido un incremento sustancial 2. Estas enfermedades comparten, dentro de sus características, el deterioro de funciones cerebrales tales como la memoria, la capacidad de desarrollar actividades diarias y el nivel intelectual y conductual 3. Lo anterior afecta la independencia del individuo y genera una necesidad de cuidado en la persona enferma que, en los países en vías de desarrollo, es, principalmente, cubierta por un cuidador del grupo familiar 4.
Dentro de las responsabilidades del cuidador del paciente con trastorno neurocognitivo mayor se encuentran: el manejo de los cuidados básicos de aseo y movilización del paciente, la administración de medicamentos, la coordinación de las citas médicas, el manejo de los pagos, el manejo de la alimentación y el apoyo emocional, entre otros 5. Estas labores, cuando no se cuenta con estrategias de afrontamiento y apoyo, constituyen la denominada "carga del cuidador", y pueden conducir a diversas repercusiones físicas y psíquicas 6. En este sentido, se ha encontrado que los cuidadores son más propensos a padecer de depresión, ansiedad, aislamiento social, disminución del nivel cognoscitivo, mayor dependencia de fármacos, exacerbaciones de sus enfermedades previas y hasta dificultades económicas debido al estrés que demanda el cuidado 7,8.
Existen diversas intervenciones para mejorar la calidad de vida y disminuir la morbilidad de los cuidadores, como son: psicoeducación, apoyo social, entrenamiento de habilidades para lidiar con el estrés del acto de cuidar (como terapias de relajación y manejo del estrés), actividades placenteras semanales y modificación del comportamiento del afectado 9. En tal sentido, se ha descrito en la literatura que brindar al cuidador información sobre la historia natural de la enfermedad, seguridad y apoyo psicológico mediante las mencionadas estrategias, conlleva a una reducción significativa en el agotamiento emocional y el nivel de depresión 10. Algunas de estas estrategias se pueden aplicar individualmente y de manera grupal, y también de forma indirecta mediante consejos y guía, por teléfono o vía Internet, por parte de un personal capacitado 11.
En el Perú, como en otros países de Latinoamérica, esta problemática ha sido pobremente abordada. No existen estudios que muestren la prevalencia aproximada de cuidadores informales a nivel nacional, ni estimaciones de los índices de patologías psiquiátricas y sobrecarga del cuidador de las personas con trastorno neurocognitivo mayor. Naturalmente, debido al impacto social y económico, así como a la carencia de estrategias nacionales frente este problema de salud pública, consideramos indispensable la creación de un registro nacional de personas encargadas del cuidado de pacientes enfermos dependientes. Esto permitirá tener información actualizada sobre los cuidadores informales y servirá para la posterior implementación de programas nacionales para su capacitación y monitoreo en salud, con el objetivo final de alcanzar la mejora de la calidad de vida de estos cuidadores.
Términos MESH: caregivers, depression, major neurocognitive disorder.