Introducción
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera a las enfermedades cardiovasculares (ECV) la principal causa de muerte en el mundo1. Personas con estilo de vida saludable manejan cifras tensionales de aproximadamente 4 a 5 mmHg menores a personas que no siguen estas recomendaciones, independientemente de factores genéticos subyascentes2. Diferentes guías de práctica clínica enfatizan en la importancia del manejo no farmacológico como pilar fundamental en el abordaje integral del paciente con enfermedad crónica no transmisible3-5.
La hipertensión, un trastorno médico a largo plazo caracterizado por una elevación persistente de la presión arterial (PA) en los vasos sanguíneos, es un factor de riesgo primario de ECV, y se calcula que, en todo el mundo, la elevación de la presión arterial es la causa de 7.5 millones de muertes, aproximadamente el 12.8% de la mortalidad global6.
Un metaanálisis de 48 ensayos aleatorizados en los que se evaluó el efecto de diferentes fármacos antihipertensivos frente a placebo, o el efecto aislado de determinados grupos farmacológicos antihipertensivos, mostró que una reducción de 5 mmHg de la PA sistólica se asociaba a una reducción del 10% de aumento del riesgo de eventos cardiovasculares mayores, independientemente de los diagnósticos previos de enfermedad cardiovascular, e incluso con valores de presión arterial normales o ligeramente elevada. Por lo tanto, es esencial considerar otras intervenciones para reducir la PA7.
Las estrategias de tratamiento actuales incluyen intervenciones farmacológicas y/o no farmacológicas, como las terapias de medicina alternativa. La medicina complementaria y alternativa se define como una variedad de formas que incluyen diferentes sistemas médicos y sanitarios, diversas prácticas y muchos productos que no se utilizan como parte de la medicina convencional8.
Debido a su gran aceptación pública, muchos enfermos crónicos utilizan ampliamente estas terapias en todo el mundo. Además, la salud integrativa ha ido ganando fuerza porque combina enfoques convencionales y complementarios de forma coordinada, y adicionalmente, hace hincapié en las intervenciones multimodales, que son dos o más intervenciones, como la atención sanitaria convencional y los enfoques de atención sanitaria de terapias complementarias y alternativas8. Este estudio tuvo como objetivo investigar la eficacia de las terapias de medicina alternativa para el tratamiento complementario de pacientes adultos con hipertensión arterial.
Materiales y método
En todo el manuscrito se siguieron las directrices de los Elementos de Información Preferidos para Revisiones Sistemáticas y Metaanálisis (PRISMA)9. El protocolo se presentó al Registro Prospectivo Internacional de Revisiones Sistemáticas (PROSPERO) y se aprobó con el número de registro CRD42021283725. Dos investigadores realizaron el proceso de tamizaje de forma independiente y aplicaron criterios de inclusión y exclusión preestablecidos para seleccionar los estudios para lectura completa.
Estrategia de búsqueda
En junio de 2021, se realizaron búsquedas en PubMed/MEDLINE, Google Scholar y Cochrane Library. Los términos generales de búsqueda utilizados fueron: “acupuntura” OR “yoga” OR “mindfulness” OR “meditation” OR “Tai Chi” OR “dietary supplements” AND “pressure, blood” OR “pulse pressure” OR “systolic pressure” OR “diastolic pressure”. Los términos podían encontrarse en cualquier parte del artículo, título o resumen. Se utilizó la aplicación web Rayyan® para organizar la lista de referencias, eliminar duplicados y obtener los documentos completos a revisar. Además, se examinaron las listas de referencias de los artículos seleccionados.
Criterios de inclusión
Según la pregunta PICO, la población, la intervención, la comparación y los resultados se muestran en la tabla 1.
Componentes | Características |
---|---|
Población | Pacientes adulas con aumento de la presión arterial. |
Intervenciones | Acupuntura |
Yoga | |
Mindfulness (mente– cuerpo) | |
Meditación trascendental y no trascendental | |
Taichi | |
Suplementos dietarios, nutraceúticos | |
Fitoterapéuticos con propósitos medicinales | |
Comparadores | Placebo o algún brazo control |
Resultados | Eficacia |
Cambio en la presión arterial sistólica y diastólica | |
Cambio en la presión sistólica (≥ 5 mm Hg) | |
Control de la presión arterial durante la intervención |
– Estudios: se incluyeron revisiones sistemáticas de ensayos controlados aleatorizados (ECA) en humanos con o sin metaanálisis.
– Años de búsqueda: los últimos cinco años, 2016-2021.
– Informe de resultados: estudios que informan estimaciones de efectos agrupados o individuales para cada estudio de investigación atribuible a la comparación de interés y al menos un resultado.
– No se aplicaron restricciones de idioma o país.
Recolección y análisis de datos
Búsqueda, selección y extracción de los estudios
Dos revisores (DVB y LSM) realizaron la selección del total de referencias identificadas en la búsqueda mediante el examen de los títulos y resúmenes según criterios de elegibilidad predefinidos de forma independiente. Se seleccionó un número menor de estudios del grupo de referencias preseleccionadas. Los revisores verificaron que cada estudio cumpliera los criterios de elegibilidad leyendo el texto completo de cada publicación. Los desacuerdos se resolvieron mediante consenso. Para extraer la información, se utilizó una herramienta Excel estandarizada, que los revisores probaron antes de utilizarla. La estructura se basó en la recopilación de información sobre las características básicas de cada estudio, como participantes, intervención, comparadores y resultados. La extracción de datos se realizó por duplicado y fue verificada por los investigadores implicados, que compararon los datos extraídos con los estudios.
Los revisores extrajeron las estimaciones del efecto para la comparación y los resultados críticos a partir de los valores informados en los estudios.
Evaluaciones del riesgo de sesgo y de la certeza de la evidencia
Se utilizó la herramienta ROBIS para evaluar los siguientes dominios: criterios de elegibilidad de los estudios, identificación y selección de los estudios, recopilación de datos y valoración de los estudios, y síntesis y conclusiones (http://www.robis-aol.info/). Cada dominio tiene preguntas señaladas y un juicio de preocupación sobre el riesgo de sesgo del dominio (bajo, alta o poco claro). La certeza de la evidencia se midió utilizando los perfiles GRADE10. Un único revisor calificó el riesgo de sesgo y la certeza de la evidencia para cada estudio, y un segundo revisor verificó las calificaciones.
Síntesis de datos
Los datos resumidos se agregaron en tablas. Las diferencias de medias (DM) y los correspondientes intervalos de confianza del 95% (IC 95%) se extrajeron de las publicaciones. Debido a la superposición esperada de los estudios y a la heterogeneidad entre las revisiones (en particular respecto a las intervenciones y los brazos de comparación), se realizó una síntesis narrativa de los hallazgos en lugar de un agrupamiento de los metaanálisis de los estudios incluidos.
Resultados
Resultados de la búsqueda bibliográfica
La estrategia de búsqueda arrojó 1020 artículos potencialmente relevantes para su inclusión. Tras eliminar 101 títulos duplicados, quedaron 919. Una vez tamizados, se identificaron 37 artículos potencialmente elegibles, y los dos revisores recuperaron y revisaron los estudios a texto completo. De estos trabajos, 23 se incluyeron en este resumen; las razones de exclusión de los artículos eliminados en esta fase se presentan en la figura 1.
Las 23 revisiones incluidas se publicaron entre 2016 y 2021 y se originaron en nueve países. Las revisiones sistemáticas incluidas investigaron las siguientes terapias: medicina tradicional china y acupuntura (n = 3)11-13, terapias mente-cuerpo (n = 10)14-23 y suplementos dietéticos/nutracéuticos (n = 10)24-33 (Tablas 2 y 3).
Autor, año (referencia) | País | No. de estudios clínicos con la población y desenlace de interés | Intervención (n) | Control (n) | Seguimiento | PAS | PAD | ||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Diferencia de medias (mmHg) | Heterogeneidad I2 (%) | Certeza de la evidencia | Diferencia de medias (mmHg) | Heterogeneidad I2 (%) | Certeza de la evidencia | ||||||
Gao et al. (2020)7 | China | 14 | Acupresión auricular + medicamentos antihipertensivos (n = 464) | Medicamentos antihipertensivos (n = 465) | 20 min hasta 12 semanas | –5.06 (–6.76 a –3.36) | 32% | ⨁⨁⨁◯ Moderada | –5.30 (–6.27 a –4.33) | 0% | ⨁⨁⨁◯ Moderada |
Chen et al. (2018)8 | China | 8 | Acupuntura (n = 270) | Medicamentos antihipertensivos (n = 271) | 15 días hasta 8 semanas | 1.40 (–1.32 a 4.12) | 57% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 2.04 (–0.59 a 4.67) | 83% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
1 | Acupuntura (n = 15) | Sin tratamiento (n = 15) | 5.20 (–2.99 a 13.39) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | 6.10 (1.27 a 10.93) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
3 | Acupuntura (n = 51) | Acupuntura simulada (n = 55) | 1.59 (–4.63 a 7.80) | 65% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.01 (–2.59 a 2.57) | 15% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
3 | Acupuntura + estilo de vida (n = 123) | Estilo de vida (n = 123) | 10.38 (6.72 a 14.04) | 86% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 5.74 (1.94 a 9.54) | 91% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
5 | Acupuntura + antihipertensivos (n = 194) | Medicamentos antihipertensivos (n = 171) | 9.80 (2.95 a 16.65) | 94% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 7.82 (4.67 a 10.96) | 79% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
2 | Acupuntura + antihipertensivos (n = 87) | Acupuntura simulada + antihipertensivos (n = 83) | 8.82 (5.10 a 12.54) | 35% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 4.44 (1.70 a 7.19) | 36% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
3 | Electroacupuntura (n = 100) | Medicamentos antihipertensivos (n = 100) | 1.63 (–3.25 a 6.52) | 57% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.98 (–4.58 a 0.62) | 31% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
1 | Electroacupuntura + antihipertensivos (n = 30) | Medicamentos antihipertensivos (n = 29) | 9.12 (3.96 a 14.28) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | 4.46 (–0.25 a 9.17) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
Conversano et al. (2021)10 | Italia | 6 | reducción del estrés basada en la atención plena (REBMF); Terapia cognitiva basada en la atención plena (TCBM) o protocolo basado en la atención plena adaptado de estos y manteniendo un formato comparable (NR) | Control (NR) | 8 hasta 10 semanas | –3.9 (– 7.7 a –0.1) | 20% | ⨁⨁⨁◯ Moderada | –2.03 (–3.7 a –0.4) | 0% | ⨁⨁⨁◯ Moderada |
Lee et al. (2020)11 | China | 3 | La reducción del estrés basada en la atención plena (REBMF) o TCBM indica terapia cognitiva basada en la atención plena (NR) | Control (NR) | 3 hasta 6 meses | –10.2 (– 22.0 a 1.6) | 81% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –5.8 (–9.1 a –2.5) | 0% | ⨁⨁⨁◯ Moderada |
Zhong et al. (2020)12 | China | 9 | Tai Chi (NR) | Educación/Sin Tratamiento (NR) | 12 hasta 24 semanas | –14.8 (–19.6 a – 9.9) | 94% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –7.0 (–9.1 a –4.9) | 74% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
5 | Tai Chi (NR) | Otros ejercicios (NR) | –7.9 (– 14.2 a – 1.7) | 94% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.9 (–6.5 a –1.2) | 73% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
15 | Tai Chi (NR) | Medicamentos antihipertensivos (NR) | –9.1 (– 14.0 a – 4.1) | 97% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –5.6 (–8.8 a –2.4) | 96% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
Park et al. (2017)13 | Corea del Sur | 3 | Meditación (n = 217) | Control (n = 217) | 12 hasta 24 semanas | –7.54 (–8.47 a –6.61) | 96% | ⨁⨁◯◯ Baja | –5.71 (–6.27 a –5.15) | 95% | ⨁⨁◯◯ Baja |
4 | Yoga (n = 241) | Control (n = 241) | –9.44 (–12.17 a –6.72) | 69% | ⨁⨁◯◯ Baja | –2.38 (–4.07 a –0.69) | 0% | ⨁⨁⨁◯ Moderada | |||
Shi et al. (2017)14 | Estados Unidos de América | 1 | Meditación trascendental (n = 36) | Meditación no trascendental (n = 38) | 12 semanas | –10.7 (–16.3 a –5.0) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.4 (–10.3 a –2.5) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja |
1 | Meditación trascendental (n = 41) | Meditación no trascendental (n = 44) | 12 semanas | –8.9 (–9.8 a –7.9) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.3 (–6.9 a –5.7) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Meditación trascendental (n = 71) | Meditación no trascendental (n = 67) | 29 semanas | –1.1 (–4.9 a 2.7) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | 2.4 (–0.3 a 5.1) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Meditación trascendental (n = 54) | Meditación no trascendental (n = 44) | 52 semanas | –2.2 (–8.3 a 3.4) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.1 (–5.6 a –0.6) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Meditación trascendental (n = 51) | Meditación no trascendental (n = 52) | 16 semanas | –6.2 (–6.9 a –5.4) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||||
1 | Meditación trascendental (n = 26) | Meditación no trascendental (n = 26) | 8 semanas | –11.0 (–15.7 a –6.3) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –11.0 (–15.4 a –6.5) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Meditación trascendental (n = 102) | Meditación no trascendental (n = 99) | 12 semanas | –4.9 (–5.2 a –4.5) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.5 (–1.7 a – 1.3) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Meditación trascendental (n = 51) | Meditación no trascendental (n = 51) | 48 semanas | 0.00 (–2.8 a 2.8) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | 0.44 (–1.4 a 2.3) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Ooi et al (2017)15 | Australia | 5 | Meditación trascendental (n = 175) | Educación (n = 162) | 1 hasta 10 semanas | –1.10 (–5.2 a 3.04) | 57% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.58 (–4.2 a 3.06) | 75% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
2 | Meditación trascendental (n = 90) | Relajación muscular progresiva (n = 89) | NR | –4.30 (–8.02 a –0.57) | 26% | ⨁⨁⨁◯ Moderada | –3.11 (–5.0 a –1.22) | 0% | ⨁⨁⨁◯ Moderada | ||
3 | Meditación trascendental (n = 202) | Control (n = 211) | 13 hasta 52 semanas | –5.1 (–9.4 a –0.8) | NR | ⨁⨁⨁◯ Moderada | –2.1 (–5.4 a –1.3) | NR | ⨁⨁⨁◯ Moderada | ||
2 | Meditación trascendental (n = 90) | Control (n = 82) | 1 hasta 60 meses | –7.20 (–14.17 a –0.22) | 60% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –5.55 (–8.46 a –2.46) | 0% | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
Zou et al. (2017)16 | China | 5 | Ejercicios de respiración lenta (n = 99) | Control (n = 94) | 1 hasta 6 meses | –6.36 (–10.32 a –2.39) | 80% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.39 (–7.30 a –5.49) | 42% | ⨁⨁◯◯ Baja |
Solano et al. (2018)17 | Costa Rica | 5 | Programa de reducción del estrés basado en mindfulness (n = 131) | Otros tipos de mindfulness basados en intervenciones (intervenciones cognitivas basadas en la atención plena). terapia) o atención estándar, lista de espera y otras intervenciones no basadas en mindfulness (n = 136) | 8 semanas | Reducciones de –11 a –16.56 mm Hg | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.66 a –4.44 mmHg | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja |
Wu et al. (2019)18 | Estados Unidos de América | 15 | Técnicas de respiración de yoga (NR) | Control | NR | –11.3 (–14.6 a –8.1) | 77% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||
15 | Yoga sin técnicas de respiración (NR) | Control | –6.1 (–10.4 a –1.8) | 71% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||||||
14 | Meditación yoga/relajación mental (NR) | Control | –5.5 (–7.4 a –3.8) | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||||||
14 | Meditación yoga sin relajación mental (NR) | Control | –2.9 (–5.4 a –0.2) | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||||||
Niu JF et al. (2018)19 | China | 13 | Tai chi (n = 735) | Atención médica habitual (n = 726) | 6 hasta 48 semanas | –6.6 (–8.1 a –5.0) | 60% | ⨁⨁◯◯ Baja | –0.6 (–0.8 a –0.4) | 69% | ⨁⨁◯◯ Baja |
10 | Tai chi (n = 482) | Sin tratamiento (n = 392) | 8 hasta 48 semanas | –0.8 (–1.2 a –0.5) | 80% | ⨁◯◯◯ Muy baja | |||||
3 | Tai chi (n = 106) | Medicamentos antihipertensivos (n = 104) | 6 hasta 12 semanas | –0.8 (–1.4 a –0.2) | 76% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.8 (–1.6 a –0.1) | 88% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Tai chi (n = 27) | Atención médica habitual (n = 31) | NR | –0.3 (–6.7 a 7.2) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | 4.4 (2.6 a 5.5) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
2 | Tai Chi (n = 160) | Sin intervención (n = 146) | NR | –6.4 (–8.5 a –4.4) | 0% | ⨁⨁◯◯ Baja | –4.3 (–6.2 a –2.4) | 0% | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
1 | Qigong (n = 47) | Ejercicio (n = 41) | 8 semanas hasta 6 meses | 5.8 (1.4 a 10.2) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | 1.1 (–1.9 a 4.2) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
3 | Qigong (n = 70) | Sin intervención (n = 72) | NR | –18.3 (–21.8 a –14.7) | 12% | ⨁⨁◯◯ Baja | –13.1 (–16.6 a –9.5) | 65% | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
3 | Qigong (n = 71) | Sin intervención (n = 59) | 8 hasta 10 semanas | –14.4 (–21.1 a –13.7) | 33% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –10.2 (–13.9 a –6.3) | 61% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
4 | Qigong (n = 288) | Medicamentos antihipertensivos (n = 147) | 8 semanas hasta 4 meses | –7.9 (–16.8 a –1.0) | 82% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.1 (–9.6 a –2.6) | 73% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
2 | Qigong (n = 86) | Ejercicio (n = 83) | 16 semanas hasta 12 meses | –6.5 (–2.8 a –10.2) | 0% | ⨁⨁◯◯ Baja | 0.7 (–1.4 a 2.7) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
6 | Yoga (n = 158) | Atención médica habitual (n = 127) | 8 semanas hasta 6 meses | –5.4 (–8.5 a –2.4) | 86% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –7.6 (–12.2 a –2.9) | 91% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
2 | Yoga (n = 58) | Educación (n = 63) | 8 hasta 24 semanas | –5.6 (–55.1 a 43.8) | 99% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 2.3 (–5.6 a 10.3) | 82% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
3 | Yoga (n = 100) | Ejercicio (n = 96) | 8 semanas hasta 3 meses | –2.9 (–13.3 a 7.5) | 95% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 0.2 (–2.2 a 2.7) | 58% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
3 | Yoga (n = 132) | Sin intervención (n = 131) | 11 semanas hasta 3 meses | –8.1 (–24.1 a 7.9) | 94% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.5 (–19.6 a 6.6) | 95% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
3 | Masaje (n = 88) | Sin tratamiento (n = 83) | 20 días hasta 2 meses | –3.3 (–10.0 a 3.5) | 60% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –2.4 (–8.8 a 3.4) | 75% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
6 | Masaje (n = 207) | Medicamentos antihipertensivos (n = 203) | 20 días hasta 3 meses | –3.5 (–5.4 a –1.6) | 35% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.9 (–2.3 a 0.3) | 17% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
6 | Masaje + Medicamentos antihipertensivos (n = 328) | Medicamentos antihipertensivos (n = 306) | 20 días hasta 3 meses | –6.9 (–10.1 a –3.8) | 63% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.6 (–6.2 a –1.1) | 80% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
15 | Relajación (n = 307) | Terapia simulada (n = 257) | 8 semanas hasta 5 años | –3.5 (–7.1 a 0.2) | 63% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.2 (–4.4 a 0.8) | 72% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
13 | Relajación (n = 330) | Sin intervención (n = 304) | 8 semanas hasta 1 año | –7.7 (–11.2 a –4.3) | 69% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –5.3 (–7.7 a –2.8) | 71% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
5 | Device-guided breathing (n = 101) | Musicoterapia o un dispositivo simulado (n = 102) | 8 hasta 9 semanas | 1.1 (–2.8 a 5.0) | 0.27% | ⨁⨁◯◯ Baja | 1.9 (–1.0 a 4.7) | 0.47% | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
2 | Musicoterapia (n = 42) | Control (n = 44) | 28 días hasta 4 semanas | –6.6 (–9.4 a –3.8) | 0% | ⨁⨁◯◯ Baja | –1.8 (–5.6 a 2.1) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
2 | Ventosas húmedas (n = 64) | Medicamentos antihipertensivos (n = 62) | 5 hasta 12 semanas | –7.7 (–12.2 a –3.2) | 0% | ⨁⨁◯◯ Baja | –8.4 (–14.1 a –2.7) | 67% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
3 | Ventosas húmedas + Medicamentos antihipertensivos (n = 66) | Medicamentos antihipertensivos (n = 63) | 6 hasta 12 semanas | 2.8 (–9.3 a 14.9) | 81% | ⨁◯◯◯ Muy baja | 2.7 (–1.5 a 6.9) | 45% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Moxibustion + Medicamentos antihipertensivos (n = 30) | Medicamentos antihipertensivos (n = 30) | 10 días | –9.6 (–10.8 a –8.3) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | –4.8 (–4.6 a –3.6) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
7 | Baduanjin + Medicamentos antihipertensivos (n = 282) | Medicamentos antihipertensivos (n = 278) | 12 hasta 24 semanas | –0.8 (–1.2 a –0.4) | 80% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.2 (–0.6 a 0.2) | 79% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
5 | Baduanjin (n = 202) | Educación (n = 199) | 4 hasta 12 semanas | –1.8 (–2.9 a –0.7) | 95% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.3 (–2.0 a –0.6) | 90% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Wang XQ et al. (2016)9 | China | 1 | Ejercicio tradi (n = 20) | Control (n = 20) | 10 semanas | –24.0 (–28.7 a –19.3) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –10.6 (–14.1 a –7.1) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja |
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 50) | Control (n = 18) | 12 semanas | –11.6 (–23.2 a 0.08) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –5.7 (–9.6 a –1.8) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 39) | Control (n = 39) | 4 hasta 16 semanas | –4.2 (–9.2 a 0.8) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.4 (–4.1 a 1.3) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Traditional Chinese exercise (n = 29) | Control (n = 29) | 10 semanas | –18.7 (–24.5 a –12.8) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –7.2 (–10.6 a –3.8) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 29) | Control (n = 29) | 10 semanas | –20.6 (–21.7 a –19.5) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –7.9 (–8.8 a –6.9) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 17) | Control (n = 19) | 8 semanas | –13.6 (–19.8 a –7.4) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –17.0 (–21.3 a –12.7) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 44) | Control (n = 40) | 6 meses | –12.1 (–14.7 a –9.5) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.4 (–4.4 a –2.5) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 51) | Control (n = 11) | 8 semanas | –11.2 (–36.6 a 14.2) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –24.4 (–68.0 a 19.2) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 24) | Control (n = 24) | 24 semanas | –10.0 (–12.9 a –7.0) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | –4.2 (–7.1 a –1.3) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 37) | Control (n = 39) | 12 semanas | –22.0 (–26.7 a –17.3) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | –12.2 (–16.1 a –8.3) | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | ||
1 | Ejercicio tradicional chino (n = 52) | Control (n = 52) | 10 semanas | –8.4 (–12.4 a –4.4) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –4.4 (–7.4 a –1.4) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja |
PAS: presión arterial sistólica; PAD: presión arterial diastólica; NR: No reporta; REBMF: reducción del estrés basada en mindfulness; TCBM: terapia cognitiva basada en mindfulness.
Autor, año (referencia) | País | No. de estudios clinicos con la población y desenlace de interés | Intervención (n) | Control (n) | Seguimiento | PAS | PAD | ||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Diferencia de medias, mm Hg | Heterogeneidad I2 (%) | Certeza de la evidencia | Diferencia de medias, mm Hg | Heterogeneidad I2 (%) | Certeza de la evidencia | ||||||
Schwingshackl et al. (2019)20 | Alemania | 1 | Aceite de oliva rico en polifenoles (n = 24) | Aceite de oliva sin polifenoles (n = 24) | Cada período dietético duró 2 meses con un período de lavado de 4 semanas entre dietas. | Línea de base: 134.14 ± 9.32. Aceite de oliva rico en polifenoles: –7.91 ± 9.51. Aceite de oliva sin polifenoles: –1.65 ± 8.22. p valor: < 0.001 | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | Línea de base: 84.64 ± 8.52. Aceite de oliva rico en polifenoles: –6.65 ± 6.63. Aceite de oliva sin polifenoles: –2.17 ± 7.24. p < 0.001 | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja |
Driscoll et al. (2018)21 | Australia | 1 | Cápsulas de Dichrostachys glomerata (hierbas y especias) (n = 72) | Cápsula de placebo: polvo a base de maíz con maltodextrina (n = 72) | 8 semanas | ↓ de 146.52 a 133.43 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ↓ de 92.52 a 80.7 mmHg | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja |
1 | Cápsulas de canela al día (hierbas y especias) (n = 29) | Cápsula de placebo (n = 30) | 12 semanas | ↓ de 140.8 a 137.1 vs. Grupo placebo de 130.7 a 132.7 (p = 0.06) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ↓ de 78.6 a 75.9 vs. Grupo placebo de 75 a 73.7 mmHg (p = 0.68) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Guo et al. (2018)22 | China | 1 | Docosahexaenoic acid (n = 15) | Placebo (n = 23) | 5 semanas | –4.4 (–13.8 a 5.0) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –2.4 (–8.9 a 4.1) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja |
Cardoso CA et al. (2018)23 | Brasil | 1 | Aceite de sésamo/Aceite de girasol/Aceite de maní (n = 499) | Control/nifedipina con aceite de girasol, sésamo o maní (n = 40) | 60 días | ↓ 31.8, p < 0.05 | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja | ↓ 16.4, p < 0.05 | No aplica | ⨁⨁◯◯ Baja |
1 | Aceite de sésamo (NR) | Control (NR) | 45 días | ↓ 20.4, p < 0.001 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ↓ 18.3, p < 0.001 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Aceite de sésamo (NR) | Control (NR) | 45 días | ↓ 19.37, p < 0.001 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ↓ 14.1, p < 0.001 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Cápsulas de harina de sésamo (n = 15) | Control (n = 15) | 4 semanas | ↓ 8.3, p < 0.05 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ↓ 4.2, NS | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
1 | Cápsulas de sésamina (n = 12) | Aceite/cápsula de germen de trigo (n = 13) | 4 semanas | ↓3.5, p < 0.044 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ↓1.9, p < 0.04 | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Fallah AA et al. (2017)24 | Irán | 5 | Suplementación con chlorella (n = 83) | Control (n = 80) | 8 a 24 semanas | –6.43 (–8.95 a –3.92) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.9 (–4.3 a –0.02) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
Khosravi-Boroujeni et al. (2017)25 | Australia | 5 | Consumo de sésamo (n = 486) | Control (n = 217) | 4 a 8 semanas | –11.47 (–19.47 a –3.47) | 99% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –8.77 (–13.53 a –4.00) | 99% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
Zhang H et al. (2016)26 | China | 4 | Extracto de semilla de uva (NR) | Placebo (NR) | 4 semanas | –10.8 (–20.4 a 1.16) | 97% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.79 (–6.71 a 0.86) | 79% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
2 | Extracto de semilla de uva (NR) | Placebo (NR) | 2 semanas | –1.34 (–3.53 a 0.84) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.57 (–2.28 a 1.34) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Borghi et al. (2016)27 | Italia | 1 | Dieta mediterránea + aceite de oliva virgen extra (n = 2441) | Control (n = 2350) | 3.8 años | 0.39 (–0.48 a 1.26) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.53 (–2.01 a −1.04) | No aplica | ⨁⨁⨁◯ Moderado |
1 | Dieta mediterránea + nueces (n = 2367) | Control (n = 2350) | 3.8 años | –0.72 (–1.58 a 0.13) | No aplica | ⨁◯◯◯ Muy baja | –0.65 (–1.15 a –0.15) | No aplica | ⨁⨁⨁◯ Moderado | ||
15 | Ácidos grasos poliinsaturados omega-3 (PUFAs) (NR) | Control (NR) | 4 a 26 semanas | –4.5 (–6.1 a –2.8) | P valor para heterogeneidad = 0.72 | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.0 (–4.3 a –1.7) | P valor para heterogeneidad = 0.72 | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
5 | Isoflavonas de soja (n = 252) | Control (n = 249) | 5 a 12 semanas | –5.9 (–10.5 a –1.3) | 83% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.3 (–6.5 a –0.2) | 70% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
13 | vitamina C (NR) | Control (NR) | 8 semanas | –4.8 (–7.7 a –2.2) | P valor para heterogeneidad = 0.28 | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.67 (–4.05 a 0.72) | P valor para heterogeneidad = 0.85 | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
3 | Coenzima Q10 (n = 58) | Control (n = 38) | 3 a 12 semanas | –10.7 (–13.7 a –7.6) | 0% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.6 (–8.1 a –5.2) | 62% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
7 | Melatonina (n = 131) | Control (n = 213) | 7 a 90 días | –6.1 (–10.7 a –1.5) (melatonina de liberación controlada); –0.3 (–5.9 a 5.30) (melatonina de liberación rápida) | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.5 (–6.1 a –0.9) (melatonina de liberación controlada); –0.2 (–3.8 a 3.3) (melatonina de liberación rápida) | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
9 | Preparación de ajo (n = 270) | Control (n = 212) | 8 a 26 semanas | –9.4 (–12.7 a –5.9) | 67% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –3.8 (–6.6 a –0.9) | 80% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
6 | Probióticos (n = 203) | Control (n = 185) | 8 semanas | –3.49 (–7.18 a 0.20) | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | –2.68 (–4.25 a –1.10) | NR | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
14 | Probióticos (NR) | Control (NR) | 4 a 24 semanas | –3.10 (–4.63 a –1.56) | 24% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –1.1 (–2.11 a –0.06) | 29% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Varshney et al. (2016)28 | Canadá | 3 | Suplementación con ajo (NR) | Control (NR) | NR | –16.3 (–26.2 a –6.2) | < 25% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –9.3 (–13.3 a –5.3) | <25% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
4 | Suplementación con ajo (n = 111) | Control (n = 110) | NR | –8.4 (–11.1 a –5.6) | 24% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –7.3 (–8.8 a –5.8) | 24% | ⨁◯◯◯ Muy baja | ||
Ried et al. (2016)29 | Australia | 14 | Suplementación con ajo (n = 233) | Control (n = 235) | 2 a 24 semanas | –8.4 (–10.6 a –6.1) | 48% | ⨁◯◯◯ Muy baja | –6.1 (–7.3 a –4.8) | 65% | ⨁◯◯◯ Muy baja |
PAS: presión arterial sistólica; PAD: presión arterial diastólica; NR: no reportado; NS: no significativo.
Medicina tradicional china y acupuntura
Gao et al.11 incluyeron 44 ECA en su revisión sistemática, de los cuales 14 artículos compararon la acupresión auricular más los fármacos antihipertensivos y los fármacos antihipertensivos (FAH), informando los valores de PA antes y después de la intervención, mostrando que la terapia acupresión auricular más FAH podría ser más eficaz que la de FAH sola en la reducción de los valores de presión arterial sistólica (PAS) y presión arterial diastólica (PAD) después del tratamiento (diferencia de medias [DM], -5. 06 mmHg; IC 95%, -6.76 a -3.36; I2 = 32% y DM: -5.30 mmHg; IC 95%: -6.27 a -4.33; I2 = 0%, respectivamente) (Tabla 2). La certeza de la evidencia fue moderada.
Los metaanálisis realizados por Chen et al.12 hallaron que la acupuntura o la electroacupuntura solas o con otras intervenciones no tuvieron un efecto mejor que sus comparadores en la reducción de la PA (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado de cambio en la PAS y PAD fue muy baja.
Wang et al.13 realizaron una revisión sistemática para determinar los efectos del ejercicio tradicional chino (ETC) en pacientes con enfermedades cardiovasculares. En la síntesis de los resultados incluyeron 35 estudios, de los cuales 13 eran en pacientes con hipertensión, y de esos, sólo 11 comunicaron datos sobre la presión arterial. Ocho estudios informaron que el ETC podía mejorar los valores de PAS y PAD con diferencias estadísticamente significativas, mientras que uno sólo informó reducción de la PAD. Los dos estudios restantes no mostraron diferencias entre el grupo que recibió ETC y el grupo control (Tabla 2). La certeza de las pruebas para el resultado del cambio en la PAS y la PAD fue muy baja.
Terapias mente-cuerpo
El análisis agrupado de Conversano et al.14 incluyó seis estudios y halló pruebas sólidas de la reducción de los valores de PAS y PAD (DM: -3.9 mmHg; IC 95%: -7.7 a -0.1; I2 = 20% y DM: -2.03 mmHg; IC 95%: -3.7 a -0.4; I2 = 0%, respectivamente) en el postratamiento de la comparación de la reducción del estrés basada en mindfulness (REBMF) frente al grupo de control. Sin embargo, Lee et al.15, que evaluaron la misma intervención (REBMF frente al grupo control), informaron que sólo hubo una reducción de la PAD con una diferencia estadísticamente significativa (DM; -5.8 mmHg; IC 95%: -9.1 a -2.1; I2 = 0%), en tanto que el estudio de Solano et al.21 no encontró diferencias estadísticamente significativas entre la REBMF frente al grupo control a partir de un análisis agrupado de cinco estudios (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado del cambio en la PA fue moderada para los estudios de Conversano et al.14 y Lee et al.15, y muy baja para el de Solano et al.21
Los metaanálisis realizados por Zhong et al.16 y Niu et al.23 mostraron que, en comparación con la educación sanitaria, otra terapia de movimiento diferente al taichi, la atención médica habitual o FAH, el taichi presentaba una diferencia estadísticamente significativa en la reducción de la PAS y la PAD (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado de cambio en la PAS y PAD fue entre baja y muy baja).
Por otro lado, el estudio de Park et al.17 indicó que la meditación y el yoga parecían disminuir tanto la PAS como la PAD, y la reducción fue estadísticamente significativa (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado del cambio en la PAS y la PAD fue entre moderada y baja.
Zou et al.20 observaron que la práctica de ejercicios de respiración lenta presentaba reducciones de la PAS (DM: -6.36 mmHg; IC 95%: -10.32 a -2.39; I2 = 80%) y de la PAD (DM: -6.39 mmHg; IC 95%: -7.30 a -5.49; I2 = 42%) en comparación con los controles (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado del cambio en la PA fue baja. De forma similar, en el metaanálisis realizado por Wu et al.22, encontraron que los participantes en las intervenciones de técnicas de respiración con yoga o yoga sin técnicas de respiración redujeron la presión arterial en comparación con el grupo control (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado del cambio en la PA fue muy baja. No obstante, los metanálisis realizados por Niu et al.23 mostraron que, en comparación con la educación, la no intervención o el ejercicio, el yoga no mostró una diferencia estadísticamente significativa en la disminución de la PA, y sólo hubo diferencias en la disminución de la PA con la intervención en comparación con el grupo control que recibió atención médica habitual. Este estudio también evaluó otras terapias como el qigong, el masaje más FAH y la relajación, que mostraron una reducción de la PA en comparación con el grupo control23. La certeza de la evidencia para el resultado de cambio en la PAS y PAD fue entre baja y muy baja.
Shi et al.18 informaron de ocho estudios que evaluaron la meditación trascendental en comparación con la meditación no trascendental, de los cuales cinco mostraron una disminución de la PAS y la PAD en el grupo de intervención, pero en los tres restantes no hubo diferencias entre los grupos (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado de cambio en la PAS y PAD fue muy baja. En cuanto a los metaanálisis realizados por Ooi et al.19, mostraron que, en comparación con la relajación muscular progresiva y otros grupos de control, la meditación trascendental presentaba diferencias estadísticamente significativas en la disminución de la PAS y la PAD. Por el contrario, el metaanálisis que comparó esta intervención con la educación sanitaria, no mostró diferencias estadísticamente significativas en la PA (Tabla 2). La certeza de la evidencia para el resultado de cambio en la PAS y PAD fue entre moderada y baja.
Suplementos dietéticos/nutracéuticos
Algunos nutracéuticos y alimentos funcionales se relacionan con beneficios en la reducción de la presión arterial en diferentes estudios. La suplementación con extracto de ajo (Allium sativum) tiene un potencial beneficio para la prevención cardiovascular. Los resultados de los metaanálisis de los estudios de Borghi et al.31, Varshney et al.32 y Ried et al.33 mostraron una disminución estadísticamente significativa tanto de la PAS como de la PAD (Tabla 3). La certeza de la evidencia para el resultado del cambio en la PAS y la PAD fue muy baja. Además, Borghi et al.31 mostraron que un conjunto relativamente amplio de pruebas apoya el uso de vitamina C, flavonoides de soja, coenzima Q10, melatonina de liberación controlada, ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga omega-3 (AGPI omega-3), dieta mediterránea más aceite de oliva virgen extra y probióticos para el control de la presión arterial en pacientes hipertensos (Tabla 3). Sin embargo, la certeza de la evidencia de estas intervenciones en el cambio de la PAS y la PAD fue muy baja, excepto en el estudio que evaluó la dieta mediterránea, cuyo resultado presentó una certeza de la evidencia moderada31.
Schwingshackl et al.24 informaron de un estudio cruzado de intervención dietética, en el cual, después de un periodo inicial de cuatro meses (valores basales), se utilizaron dos dietas: una con aceite de oliva rico en polifenoles y otra con aceite de oliva sin polifenoles. Cada período dietético duró dos meses con un período de lavado de cuatro semanas entre las dietas. Al compararlo con los valores basales, sólo la dieta con aceite de oliva rico en polifenoles produjo una disminución significativa (p < 0.01) de 7.91 mmHg en la PAS y de 6.65 mmHg en la PAD (Tabla 3). La certeza de la evidencia de estas intervenciones en el cambio de la PAS y la PAD fue baja.
El estudio de Driscoll et al.25, que comparó cápsulas de Dichrostachys glomerata frente a placebo: cápsulas de polvo a base de maíz con maltodextrina y canela frente a cápsulas de placebo, no encontró diferencias entre los grupos en la reducción de la PA. De forma similar, no hubo diferencias en este resultado en el estudio de Guo et al.26, que comparó ácido docosahexaenoico frente a placebo y en el estudio de Zhang et al.30, que comparó extracto de semilla de uva frente a placebo (Tabla 3). La certeza de la evidencia de estas intervenciones en el cambio de la PAS y la PAD fue muy baja.
Por otro lado, los estudios de Cardoso et al.27 y Khosravi-Boroujeni et al.29 mostraron que el sésamo disminuye significativamente la PAS y la PAD. En cuanto al estudio de Fallah et al.28, que comparó la suplementación con Chlorella frente a un grupo de control, se observó que la intervención ayudaba a reducir la PA. La certeza de la evidencia de estas intervenciones en el cambio de la PAS y la PAD fue entre baja y muy baja.
Intervenciones con una reducción de la PAS ≥ 5 mm Hg
Las intervenciones que presentaron datos metaanalizados que mostraron una reducción de la PAS de al menos 5 mmHg fueron la acupresión auricular más los fármacos antihipertensivos, el taichi, el yoga, la meditación, las isoflavonas de soja, la coenzima Q10, la melatonina y los suplementos de ajo (Tablas 2 y 3).
Calidad de las revisiones incluidas
La herramienta ROBIS se divide en cuatro dominios (Tabla 4). Sobre el dominio 1, que evaluó cualquier preocupación respecto a la especificación de los criterios de elegibilidad de los estudios, ocho revisiones (8/23 = 34.7%) alcanzaron una calificación global de bajo riesgo de sesgo11-16,20,24. El dominio 2 evaluó las preocupaciones respecto a los estudios de identificación y selección, y siete estudios (7/23=30,4%) alcanzaron una calificación de bajo riesgo de sesgo13,15-17,20,24,29. El dominio 3 evaluó las preocupaciones en cuanto a los métodos utilizados para recopilar los datos y evaluar los estudios, y doce estudios (12/23 = 52.2%) alcanzaron una calificación de bajo riesgo de sesgo11-17,19,20,23-25,29. En lo concerniente al dominio 4, que evaluó las preocupaciones respecto a la síntesis y los hallazgos, trece (13/23 = 56.5%) fueron evaluados como de bajo riesgo11-17,19,20,23,24,26,29. La sección final proporciona una clasificación para el riesgo general de sesgo de las revisiones; nueve (9/23 = 39.1%) obtuvieron una clasificación baja11-17,20,24, diez una clasificación alta (10/23 = 43.5%)18,19,21,25,27,28,30-33, y cuatro fueron clasificadas como poco claras (4/23 = 17.4%)22,23,26,29.
Autor, año (referencia) | Estudio elegibilidad criterio | Identificación y selección de estudios | Recolección de datos y apreciación de los estudios | Síntesis y resultados | Riesgo de sesgo en la revisión |
---|---|---|---|---|---|
Gao et al. (2020)7 | ☺ | ? | ☺ | ☺ | ☺ |
Chen et al. (2018)8 | ☺ | ? | ☺ | ☺ | ☺ |
Conversano et al. (2021)10 | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ | |
Lee et al. (2020)11 | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ |
Zhong et al. (2020)12 | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ |
Park et al. (2017)13 | ? | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ |
Shi et al. 201714 | ? | ? | ? | ||
Ooi et al. (2017)15 | ☺ | ☺ | |||
Zou et al. (2017)16 | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ |
Solano et al. (2018)17 | ? | ? | ? | ||
Wu et al. (2019)18 | ? | ? | ? | ? | ? |
Niu et al. (2018)19 | ? | ? | ☺ | ☺ | ? |
Wang et al. (2016)9 | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ |
Schwingsackl et al. (2019)20 | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ | ☺ |
Driscoll et al. (2018)21 | ? | ? | ☺ | ||
Guo et al. (2018)22 | ? | ? | ? | ☺ | ? |
Cardoso et al. (2018)23 | ? | ? | ? | ||
Fallah et al. (2017)24 | ? | ? | ? | ||
Khosravi-Boroujeni et al. (2017)25 | ? | ☺ | ? | ☺ | ? |
Zhang et al. (2016)26 | ? | ? | |||
Borghi et al. (2017)27 | |||||
Varshney et al. (2016)28 | |||||
Ried et al. (2016)29 |
Ética y otros permisos
No fue necesaria la aprobación ética para este estudio porque no se recogieron datos de pacientes.
Discusión
Estos resultados muestran que algunas terapias utilizadas en medicina alternativa para el tratamiento complementario de pacientes adultos con PA elevada son prometedoras y pueden contribuir a un programa de cambio del estilo de vida para ayudar a reducir la PA. Se observó que el nivel de certeza de la evidencia para el resultado de cambios en la presión arterial varió de moderado a muy bajo para las intervenciones evaluadas. Entre los hallazgos más importantes se encuentran las intervenciones que contribuyen a reducir la PAS en cinco mmHg o más. Es crucial destacar entre estas: acupresión auricular más fármacos antihipertensivos11, taichí16,23, yoga17, meditación17,20, isoflavonas de soja31, coenzima Q1031, melatonina31 y suplementos de ajo31-33 (Tablas 2 y 3). En consecuencia, el uso de estas intervenciones puede ser considerado en pacientes con hipertensión, particularmente en aquellos interesados en terapias de medicina alternativa.
La acupuntura es una forma de intervención terapéutica basada en la teoría del sistema médico de la medicina tradicional china. La estimulación de puntos específicos del cuerpo por medio de la inserción de agujas, presión y/o masaje local, produce estímulos que, a través de la activación del sistema nervioso, vascular, endocrino e inmune genera respuestas orgánicas34. Desde la década de los setenta, se ha propuesto la acupuntura como un tratamiento eficaz en la reducción de la presión arterial35. Además, sus efectos han sido probados en la reducción del estrés oxidativo y el incremento del óxido nítrico endotelial en animales de experimentación con hipertensión arterial inducida36. En cuanto a la acupuntura, se observó que no hubo un efecto positivo en la reducción la PA elevada12. Por el contrario, los estudios que evaluaron acupresión auricular, combinada con antihipertensivos11, y las terapias mente-cuerpo, como el mindfulness17,20,23, mostraron beneficios significativos en la reducción de la PA en pacientes con hipertensión. Los estudios presentaron niveles moderados de certeza de la evidencia.
Se destaca que diferentes aproximaciones investigativas han relacionado prácticas como la meditación y diferentes tipos de ejercicio terapéutico con la disminución de las cifras tensionales en pacientes sanos y enfermos17,37. Estas prácticas actúan atenuando el estrés crónico, un factor de riesgo independiente para la hipertensión arterial y la enfermedad cardiovascular y que puede asociarse a conductas mal adaptativas con el entorno que lo generan3.
Por otro lado, nutracéutico se define como una sustancia natural bioactiva concentrada, que se administra por medio de un vehículo (cápsula, tableta, polvo, etc.) y que se presenta como un suplemento dietético. Se asume que esta sustancia tiene un efecto añadido sobre la salud al encontrarse en una dosis superior a la encontrada en las fuentes alimentarias38. Algunos nutracéuticos y alimentos funcionales se relacionan con beneficios en la reducción de la presión arterial en diferentes estudios en la literatura científica.
La suplementación con extracto de ajo (Allium sativum) tiene potencial para la prevención cardiovascular. Su componente activo, la alicina, tiene efectos relacionados con la inhibición de la angiotensina II, la disminución de especies reactivas de oxígeno, la estimulación de la producción de glutatión, la relajación del músculo liso y la vasodilatación33.
Suplementos como la coenzima Q10, los ácidos grasos omega 3 y la vitamina C se enlistan como potenciales reductores de la presión arterial. Su efecto se debe a diferentes acciones, como la producción de energía mitocondrial, la disminución de la resistencia vascular periférica y la reducción del estrés oxidativo a través de acciones antioxidantes, antitrombóticas y antiinflamatorias, que inducen la expresión y activación de la óxido nítrico-sintasa (eNOS)39-41. Además, la coenzima Q10 ha sido ampliamente estudiada en enfermedad cardiovascular, asociándose su actividad a la corrección de una deficiencia de provitamina endógena, favoreciendo la función diastólica; posee, además, un efecto antiaterogénico y favorecedor en la disminución en la secreción de aldosterona42-45.
Por otro lado, la literatura científica ha demostrado ampliamente como la disbiosis se encuentra ligada a procesos, como la inflamación, la resistencia a la insulina, la obesidad, la aterosclerosis, la susceptibilidad trombótica y la hipertensión arterial, que afectan la salud cardiovascular, por lo que el equilibrio de la microbiota es fundamental en el soporte de diferentes funciones fisiológicas, de modo que la manipulación de la microbiota con prebióticos y probióticos entra a ser un blanco de acción en el manejo no farmacológico46,47.
Por lo anterior es evidente que un número importante de los denominados nutracéuticos y alimentos funcionales está relacionado con algún grado de beneficio en la reducción de los niveles de PA. El uso de nutracéuticos31, como los ácidos grasos omega 3, la coenzima Q10, las isoflavonas de soja, los probióticos, la vitamina C, el resveratrol, y la introducción en el contexto de una dieta saludable de alimentos funcionales, como el aceite de oliva virgen extra24 y el ajo31-33, pueden considerarse en el tratamiento coadyuvante de la hipertensión arterial. Estas se justifican por sus documentados efectos beneficiosos sobre diferentes mecanismos implicados en la fisiopatología de la hipertensión arterial, como su acción antioxidante, antitrombótica y antiinflamatoria, la reducción del estrés oxidativo con la liberación de óxido nítrico a nivel endotelial, y la vasodilatación entre otros33. Sin embargo, es importante destacar que los hallazgos de estos estudios sobre la disminución de la PA son limitados teniendo en cuenta el bajo nivel de evidencia. Por tanto, se necesitan investigaciones con una calidad metodológica más alta para respaldar con mejor evidencia el uso de estas intervenciones en el manejo de la hipertensión.
Puntos fuertes y limitaciones
Esta revisión presenta varias limitaciones que deben tenerse en cuenta. En primer lugar, la búsqueda se restringió a dos bases de datos y a una fuente para recuperar la literatura gris, lo que podría contribuir al sesgo de publicación en esta. En segundo lugar, esta revisión sólo incluyó revisiones que incluían ECA; no se incluyeron otros diseños de estudio que analizan datos de la vida real, que pueden proporcionar conclusiones más fiables y representativas para la población hipertensa. Además, hay pocas pruebas de la efectividad a largo plazo de las terapias utilizadas en la medicina alternativa descritas en esta revisión. Esto se debe al hecho que los ensayos informados en las revisiones sistemáticas incluidas, generalmente tuvieron un seguimiento corto, excepto el ECA que evaluó la intervención de dieta mediterránea más aceite de oliva extra virgen, que tuvo una mediana de seguimiento de 3.8 años31. Por otro lado, es necesario destacar que el nivel de evidencia del desenlace evaluado en esta revisión, que consistió en cambios en la PA, osciló entre moderado y muy bajo. Esto se debió principalmente a que muchos ECA no tenían información clara sobre los procesos de generación de secuencias aleatorias, ocultamiento de la asignación, cegamiento de los participantes y del personal (cuando fue posible), cegamiento de la evaluación de resultados y datos de seguimiento. Asimismo, el pequeño tamaño de las muestras y los análisis realizados según protocolo son aspectos que podrían generar incertidumbre en los resultados. Por último, otra limitación es que el resultado evaluado es un desenlace subrogado. Sin embargo, se ha demostrado que la magnitud de la PA está directamente relacionada con la incidencia de ictus, muerte cardiovascular e infarto de miocardio, y se ha estimado que una reducción de 5 mm Hg en la PAS contribuiría a una reducción del 10% en el aumento del riesgo de eventos cardiovasculares mayores7.
Implicaciones para la práctica
Es necesario promover un modelo sanitario que garantice una atención coordinada entre los distintos proveedores e instituciones, combinando enfoques convencionales y complementarios para el cuidado integral de la persona con hipertensión. En la actualidad, se busca implementar terapias combinadas en personas con hipertensión para reducir los múltiples factores de riesgo cardiovascular.
Conclusión
Diversas terapias utilizadas en medicina alternativa pueden considerarse parte de un enfoque basado en la evidencia para el tratamiento complementario de la hipertensión. El beneficio potencial de estas intervenciones justifica una mayor investigación que evalúe los resultados cardiovasculares críticos. Intervenciones como la acupresión auricular y las terapias cuerpo-mente, como el taichí, el yoga, el qigong y la meditación, pueden considerarse complementos del tratamiento antihipertensivo. Los nutracéuticos y fitoterapéuticos, como los ácidos grasos omega 3, la coenzima Q10, la vitamina C, los probióticos, el resveratrol, las isoflavonas de soja, el extracto de ajo y el aceite de oliva extra virgen, pueden recomendarse como parte de una dieta saludable (tipo mediterránea o DASH).