Introducción
En el ámbito internacional son bien conocidas las estadísticas alarmantes y crecientes del empleo informal en Latinoamérica, pues oficialmente la Organización Internacional del Trabajo (OIT)1 ha confirmado una tasa promedio del 50% en la región, lo que significa que aproximadamente 140 millones de personas en América Latina trabajan en este tipo de empleos. Los empleos informales se caracterizan por la existencia de condiciones de trabajo precarias donde no se cuenta con contratos formales, esquemas de seguridad en salud, de protección social, no hay representación sindical, y se presenta exposición a riesgos laborales de diversa índole, lo que es cada vez más común para la mayor parte de la fuerza laboral en la región. El informe sobre Trabajo Decente en las Américas2 , señala que la estructura del mercado laboral en América Latina está típicamente fragmentado: casi un tercio del mercado laboral total se encuentra en las áreas rurales, mientras que el 50% de la población restante se ocupa en trabajos independientes y domésticos, incluyendo trabajo familiar no remunerado o trabajo asalariado en microempresas (con hasta cinco empleados), los que tienden a representar la mayor concentración de pobreza, informalidad y falta de trabajo digno. En México, la prevalencia reciente de trabajo informal es de aproximadamente 57,2%3 , de las más altas en la región, aunque contribuye con el 22,7% del producto interno bruto y la mayoría se concentra en comercio al pormenor4 , es decir, comerciantes ambulantes o en negocios pequeños.
Sin embargo, a pesar del tamaño de este sector en la fuerza laboral, en Latinoamérica, existen pocos estudios que exploren los problemas de salud ocupacional en personas que trabajan en la informalidad. Algunos estudios han reportado la exposición a riesgos ambientales, químicos y ergonómicos en estos trabajadores5,6, así como jornadas largas de trabajo e ingresos muy bajos7 , pero son casi inexistentes los estudios dirigidos a identificar factores psicosociales del trabajo y su relación con la salud psicológica, sobre todo en quienes se dedican específicamente al comercio informal en la región.
Se pueden encontrar algunas tesis y trabajos en muestras pequeñas de distintos países; por ejemplo, en Guatemala se halló que comerciantes informales enfrentan adversidades tales como: las bajas ventas, malas condiciones de trabajo, problemas de salud y dificultades familiares y económicas de diversa índole8 ; en Nicaragua se encontró que comerciantes informales reportaron altos ritmos de trabajo, aunque no correlacionaron con estrés9 ; y en Colombia, que los factores psicosociales más predominantes fueron demandas de esfuerzo físico, jornadas laborales extensas, conflicto trabajo-familia, y altos niveles de estrés en general10, aunque este estudio presentó retos y problemas psicométricos serios tratando de adaptar el instrumento utilizado a esta población. Cabe destacar que un estudio cualitativo mexicano en vendedoras ambulantes encontró que al mismo tiempo que reportaban cansancio y estrés, expresaron sentimientos de alegría, felicidad y cariño ligados al trabajo11. No se encontraron estudios en comerciantes informales sobre consecuencias psicológicas populares en la literatura, tales como el desgaste emocional o burnout12 en su aspecto negativo, o el entusiasmo laboral o engagement13 en su aspecto positivo.
Por lo que respecta a los factores psicosociales, hasta ahora, son visibles tres elementos que caracterizan el estado de la investigación en el comercio informal; el primero, es que la investigación es muy escasa; el segundo, es la heterogeneidad de factores psicosociales encontrados, y el tercero, es la ausencia de un enfoque que recupere los factores positivos en este ámbito. En cuanto a la heterogeneidad, la explicación de las diferencias entre los factores psicosociales reportados en los estudios puede estar relacionada con las metodologías utilizadas y su especificidad inter o intracontextual, por ejemplo, se observa que, mientras que las exploraciones cualitativas permiten identificar estresores psicosociales relevantes o exclusivos dentro del contexto (v.gr bajas ventas), las exploraciones cuantitativas hallan solo aquellas que pueden aplicarse entre contextos (v.gr demandas físicas, jornadas, ritmos, etc.). Vale la pena decir que en el caso de estas últimas, no siempre son totalmente equivalentes entre contextos o no son tan específicas para entenderlas en términos del diseño de intervenciones.
Como ejemplo de lo anterior, un estudio realizado en instructores comunitarios con una técnica mixta cualicuantitativa14 encontró que la dimensión psicosocial de carga de trabajo se reflejaba en tareas muy variadas y diferenciadas por su relación con el desgaste emocional; particularmente, el “diligenciamiento de reportes” representaba la variable con mayor impacto y a su vez la que tenía mayor necesidad de intervención en relación con otras actividades de la misma dimensión. Esto permitió detectar la falta de consideración de subdimensiones intra-contextuales en categorías globales de factores psicosociales en los cuestionarios tradicionales, sobre todo al aplicarse en contextos diferentes a los que fueron creados15. En este sentido es importante señalar la ausencia en la literatura de modelos e instrumentos cuantitativos estandarizados ad hoc para investigar tales factores en este grupo y todo parece indicar que su aproximación necesita de metodologías cuanti-cualitativas complementarias que permitan no solo la identificación de factores propios o específicos de los contextos, sino también de determinar su nocividad o relación con la salud16.
En cuanto a los aspectos positivos, aunque existen diversas definiciones, aquí se concibe a los factores psicosociales como: “Hechos sociales de la actividad laboral que en combinación o interacción dinámica con condiciones del individuo y mediante mecanismos biopsicosociales patogénicos o salutogénicos del estrés, influyen en el proceso salud-enfermedad”17. El carácter positivo de los factores psicosociales y del estrés ha sido reconocido desde sus marcos conceptuales originales18,19, lo que sugiere que es muy importante explorar las dimensiones positivas y negativas del proceso psicosocial laboral, tanto en el ámbito de sus factores, como de sus efectos psicológicos. Esto puede ayudar a comprender la dinámica y especificidad en contextos propios del trabajo informal, así como desarrollar sistemas de evaluación e intervenciones más apropiadas y enfocadas a la realidad de los trabajadores en este sector.
El tema de los factores psicosociales del trabajo ha sido de amplio desarrollo en el ámbito internacional20, aunque las bases de su investigación se han centrado principalmente en empleos de economía formal, por lo que es urgente su estudio en el sector informal en Latinoamérica. En este marco y como parte de un proyecto más grande, el objetivo de este escrito es mostrar resultados preliminares de la exploración de los factores psicosociales del trabajo y su relación con efectos psicológicos negativos y positivos, en una muestra de comerciantes informales en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, México.
Metodología
Participantes
Participaron 116 comerciantes informales ubicados en calles, locales y pequeñas tiendas en Cuernavaca, Morelos, México, quienes fueron invitados a colaborar en este estudio mediante un muestreo no probabilístico guiado por participantes directamente en sus lugares de trabajo. La tasa de respuesta fue aproximadamente del 70% de las personas invitadas originalmente. Los criterios de inclusión fueron que supieran leer y escribir, que fueran mayores de edad, que no contaran con seguridad social, y que su participación fuera voluntaria, siguiendo todos los principios éticos para la investigación con seres humanos señalados en la declaración de Helsinki21, el artículo 21 y 22 del Reglamento de la Ley General de Salud y el artículo 19 del código civil del Estado de Morelos. No hubo procedimientos invasivos y todos los participantes firmaron un consentimiento informado, autorizando su participación en la investigación, con pleno conocimiento de la naturaleza del estudio, con la capacidad de libre elección y sin coacción alguna. El 50% eran mujeres y la edad promedio fue de 31,38 años (DT=11.90). El 47,4% tuvo solo estudios de primaria o secundaria, el 41,4 bachillerato y el 11,2% tenía estudios universitarios terminados.
Diseño e instrumentos
Como parte de un proyecto más grande en trabajadores informales, y mediante un diseño transversal, correlacional y observacional, se utilizó una estrategia metodológica mixta de exploración simultánea cualicuantitativa para obtener información sobre los factores psicosociales experimentados por los comerciantes informales, la que ya se ha utilizado en otros estudios16. Entendido el estrés patogénico como una relación particular entre las personas y su entorno que es evaluado como amenazante al bienestar22, esta aproximación metodológica de carácter heurístico, enmarca conceptualmente a los factores psicosociales negativos como equivalentes a estresores percibidos por los trabajadores, lo cual ha sido confirmado empíricamente en estudios cualitativos donde se han analizado las representaciones sociales del estrés y de factores de riesgo psicosocial en distintas ocupaciones23,24,25. Por otro lado, aunque son más escasos los estudios sobre los factores psicosociales positivos, se han identificado predictores psicosociales de entusiasmo laboral (engagement) que son diferentes o independientes a aquellos relacionados con consecuencias psicológicas negativas (v.gr burnout), además tienen un rol de amplificación o salutogénesis que va más allá de su simple rol protector, y son percibidos como placenteros y estimulantes por los trabajadores13,26.
De este modo y con base en la técnica señalada, se exploraron los factores psicosociales negativos y positivos mediante un formato con preguntas abiertas (v.gr “mencione los 3 aspectos más importantes en su trabajo que le causen mayor malestar o tensión”; “mencione los 3 aspectos más importantes en su trabajo que más le gusten y entusiasmen en su trabajo”), las que incluyeron adicionalmente la instrucción para marcar en una escala tipo Likert la frecuencia de experimentación (desde 1= nunca o rara vez, hasta 5= siempre, todos los días). Una vez obtenidas todas las respuestas de los participantes, se relacionaron en una hoja de excel; posteriormente, 5 jueces (2 investigadores autores de este artículo y 3 estudiantes de licenciatura de la carrera de psicología) realizaron una discusión, codificación y categorización abierta y jerárquica de las respuestas obtenidas, determinando las categorías emergentes con base en una lógica inductiva16. Adicionalmente, para evaluar los efectos psicológicos negativos y positivos, se aplicaron las siguientes escalas:
El MBI-GS (Maslach Burnout Inventory GeneralSurvey®)12,27, escala para medir el desgaste emocional o burnout, consta de 16 ítems que miden síntomas de agotamiento, indiferencia y baja autoeficacia por el trabajo. Ha mostrado validez e índices de confiabilidad aceptables en población mexicana (estructura tridimensional y α=,75-,85 entre dimensiones)27, las que coinciden también en otros trabajadores informales (estructura tridimensional y α=,76-,88 entre dimensiones)28. El manual del MBI-GS12 reconoce la ausencia de normas representativas a escala internacional y señala profundas diferencias culturales y ocupacionales como para tener un estándar universal, por lo que lo más idóneo puede ser usar la misma muestra como marco de comparación destacando puntualmente su uso solo para fines informativos y no clínicos. De esta forma, se definió como caso de burnout alto a aquellas personas que de manera simultánea presentaron valores por arriba de la mediana (≥ percentil 50) en las dimensiones de agotamiento e indiferencia, y valores por debajo de la mediana (< percentil 50) en la dimensión de eficacia profesional, criterio que ha tenido confiablidades tolerables en otros contextos en esta misma versión del MBI29.
El UWES®30 para evaluar el engagement o entusiasmo laboral, el cual consta de 15 ítems que integran las dimensiones de vigor, dedicación, absorción, y sus niveles de validez y confiabilidad han sido satisfactorios en población mexicana (estructura tridimensional y α=,79-,81 entre dimensiones)31, y un análisis preliminar no publicado en nuestro proyecto de trabajadores informales confirma indicadores similares (estructura tridimensional y α=,80-,83 entre dimensiones). Bajo el mismo fundamento metodológico expresado anteriormente, se definió como caso de entusiasmo alto a aquellas personas que presentaron valores por arriba de la mediana (≥ percentil 50) en los tres síntomas (vigor, dedicación y absorción).
El GHQ o cuestionario general de salud para valorar sintomatología negativa de salud mental, en su versión de 28 ítems, fue validada en población general mexicana con índices de sensibilidad y especificidad aceptables (72/73%)32. De acuerdo con este mismo estudio de validación, se definió como “caso” (problemas de salud mental) quienes presentaron más de 6 puntos.
Finalmente, y de manera complementaria a la exploración de los efectos psicológicos y los marcos conceptuales antes establecidos, se generaron 2 ítems únicos ad hoc para medir estrés laboral (“¿considera su trabajo estresante?”) y satisfacción laboral (“¿considera su trabajo satisfactorio?”), los que tuvieron 2 opciones de respuesta (No-Sí)33,34.
Estrategia de análisis de resultados
Además de la categorización cualitativa y la descripción de algunas respuestas tipo de los participantes, la aproximación cuantitativa se alcanzó mediante estimaciones de frecuencias, porcentajes, medias y desviaciones estándar de las mismas categorías obtenidas cualitativamente, pero sobre todo, con la estimación de su relación estadística con las variables de efectos psicológicos (burnout, engagement, sintomatología negativa de salud mental, estrés y satisfacción laboral), para lo que se codificó cada categoría psicosocial como variable ficticia o “dummy” (0=ausente, 1=presente) y se estimó el riesgo mediante asociaciones bivariadas con coeficientes de razón de momios (OR), incluyendo solo variables con al menos 10 casos en cada uno de sus valores dicotómicos, de manera que las estimaciones fueran confiables35. Las razones de momios (OR -odds ratio-) son estadísticos de riesgo utilizados en epidemiología para referirse a la división de la probabilidad de que ocurra un efecto de salud en un grupo frente a otro grupo con diferente exposición. Un OR mayor a 1 implica una relación directamente proporcional (positiva) y menor a 1 es indirectamente proporcional (negativa), y su robustez parece idónea también para establecer asociaciones entre variables categóricas de exposición psicosocial y consecuencias psicológicas en muestras pequeñas36. Adicionalmente y de acuerdo con la técnica original, se realizaron correlaciones de orden cero entre las frecuencias de la escala Likert (solo dentro de los casos que mencionaron cada categoría) y los efectos psicológicos negativos y positivos. Dado el pequeño tamaño de muestra y posible riesgo de error tipo II, se consideraron significancias estadísticas hasta p < ,1037.
Finalmente, para explorar y comprender las relaciones complejas que pudieran guardar todas las variables del estudio, y a sabiendas del incumplimiento de supuestos paramétricos de distribución y de hipótesis confirmatorias sobre las relaciones simultáneas entre dichas variables, el presente estudio al ser preliminar, cuali-cuantitativo, y exploratorio, optó por identificar las relaciones de proximidad entre todas las variables del estudio mediante escalamiento multidimensional (MDS), una técnica estadística robusta que permite identificar las similaridades o disimilaridades simultáneas entre grupos de variables o estímulos con base en la determinación de distancias euclidianas, las que pueden visualizarse en un mapa espacial de puntos, identificando el tipo y el número de dimensiones subyacentes que pueden explicar las relaciones entre los objetos38. Se utilizó el algoritmo ALSCAL (Alternating Least Squares Scaling), por configuración de estímulo derivado y mediante una aproximación no paramétrica bajo los índices de ajuste de S-Stress y el coeficiente de correlación al cuadrado (RSQ), donde el primero debe ser cercano a cero (0,0 y ,05= bueno, ,06 a 1,0= aceptable y >1,0= pobre ajuste), y en el segundo, el rango posible es de 0 a 1, siendo 0 un mal ajuste y cercano a 1 es un buen ajuste39. Se probó un modelo de dos y tres dimensiones para decidir el más interpretable y de mejor ajuste.
Resultados
Categorización de contenidos
Mediante las preguntas abiertas se detectaron 8 factores psicosociales con al menos 10 menciones cada uno, los que fueron fácilmente categorizables e identificables por las respuestas típicas expresadas por los participantes (Tabla 1).
En principio, se identificó que la frecuencia de los factores psicosociales positivos fue superior a los negativos en la muestra de comerciantes informales participantes, donde destacan las “tarea gratificante” (31,99%), “compartir con gente” (25%), “atender al cliente” (19,83%), y los efectos psicológicos positivos de engagement (48,2%) y una alta frecuencia de “trabajo satisfactorio” (84,8%). Mientras en los factores negativos solo 3 categorías alcanzaron a estar presentes, específicamente los “riesgos ambientales” (17,24%), “batallar con clientes” (15,52%) y “pocas ventas” (12,93%) como factores estresantes (Figura 1).
**<,05, *><,10 Notas: a) las razones de momio bivariadas (OR) se realizaron para variables categóricas con toda la muestra, mientras las correlaciones de orden cero (r) se realizaron usando la escala de likert solo para los casos que mencionaron dicha categoría. b) Un OR 9,33 significa que el momio de satisfacción laboral alta está estimado 9,33 veces para quienes mencionaron tarea gratificante que para quienes no la mencionaron.><,05, *<,10 Notas: a) las razones de momio bivariadas (OR) se realizaron para variables categóricas con toda la muestra, mientras las correlaciones de orden cero (r) se realizaron usando la escala de likert solo para los casos que mencionaron dicha categoría. b) Un OR 9,33 significa que el momio de satisfacción laboral alta está estimado 9,33 veces para quienes mencionaron tarea gratificante que para quienes no la mencionaron.
Dentro de las personas que mencionaron tales categorías, el promedio de frecuencia de exposición en la escala Likert más alto fue para las positivas con “flexibilidad horaria” (=4,60) y “compartir con gente” (=4,54), los que se ubican entre “frecuentemente” (4) y “siempre” (5), mientras que los más bajos fueron los factores negativos de “pocas ventas” (=3,27) y “riesgos ambientales” (=3,72) que se ubican alrededor de “algunas veces” (3).
Vale la pena hacer notar que los efectos psicológicos negativos tales como los “síntomas negativos de salud mental”, el burnout alto y el “trabajo estresante”, fueron mencionados por el 27,6%, 40% y 27,6% de los participantes respectivamente, porcentajes qsue son incluso superiores a los reportados en otros estudios con trabajadores del sector formal40 y dejan ver algún tipo de coexistencia entre aspectos positivos y negativos (Figura 1).
Relación entre variables
El análisis de relación entre variables categóricas (en la muestra total) reveló pocas asociaciones estadísticamente significativas y con magnitudes de efecto importantes, entre ellas se encontró que las “tarea gratificante” se asoció positivamente con la satisfacción laboral (OR=9,33, p<,05) y con el engagement (1,95, p><,10), “batallar con clientes” también positivamente con el burnout (OR=3,70, p><,05), mientras que “atender a clientes” fue factor protector para los síntomas de salud mental (OR=,09, p><,05), todas estas relaciones esperadas teóricamente. Sin embargo, destacó la relación positiva inesperada de los “riesgos ambientales” y el engagement (OR=5,15, p><,05). Por otro lado, las correlaciones entre las frecuencias de las ><,05) y con el engagement (1,95, p<,10), “batallar con clientes” también positivamente con el burnout (OR=3,70, p<,05), mientras que “atender a clientes” fue factor protector para los síntomas de salud mental (OR=,09, p<,05) , todas estas relaciones esperadas teóricamente. Sin embargo, destacó la relación positiva inesperada de los “riesgos ambientales” y el engagement (OR=5,15, p<,05). Por otro lado, las correlaciones entre las frecuencias de las categorías obtenidas y los efectos psicológicos, fueron significativas entre “compartir con gente” y el burnout (r=,35, p<,10, n=29), “pocas ventas” y síntomas de salud mental “negativa” (r=,48, p<,05, n=11), esta última confirmada por la tendencia lineal exacta entre las 2 variables en los 11 participantes. Finalmente, las variables que componen el grupo de los efectos psicológicos mantuvieron asociaciones estadísticas significativas entre prácticamente todas ellas, exceptuando engagement y estrés laboral (OR ,71, p=ns), siendo la relación más alta entre estrés laboral y sintomatología negativa de salud mental, en la dirección esperada (OR=5,03, p<,05) (Tabla 1).
Dimensionalidad y relaciones multivariadas
Finalmente, el análisis de escalamiento multidimensional permitió identificar un modelo con buen ajuste para la determinación de las distancias entre las variables bajo estudio (S-Stress=,07731, RSQ=,97006), el cual presentó 3 posibles dimensiones subyacentes e interpretables: 1) dimensión de motivación extrínsecaintrínseca, donde se ubicaron coordenadas antagónicasextremas tales como satisfacción, engagement y tareas gratificantes por un lado (coordenadas ,3,8, ,1,86 y ,44, respectivamente), y por otro, ganancias monetarias, pocas ventas y disposición de tiempo (coordenadas -1,09, -1,04 y -1,05 respectivamente), 2) dimensión de aspectos positivos y negativos, donde las coordenadas fueron desde burnout y estrés (coordenadas 1,75 y 1,71 respectivamente) a engagement y conocer gente (coordenadas -1,12 y -,84 respectivamente); y 3) la dimensión de interacción hacia el trabajo vs las personas, donde fueron antagónicas tarea gratificante (coordenadas -1,24) en un extremo, y compartir con gente (coordenadas 1,00) en el otro extremo (Tabla 2).
Las distribuciones espaciales de las dimensiones reflejan una clara separación entre factores psicosociales y efectos psicológicos, una mayor cercanía de la dimensión “interacciones positivas con la gente” con la “satisfacción” y el “engagement, aunque este último se vincula también a una tarea intrínsecamente gratificante, mientras que la variable “batallar con el cliente” parece la más cercana al burnout, estrés y síntomas de salud mental (Figura 2).
En general y confirmando los análisis bivariados, al parecer las variables dentro del cluster o dimensión de motivación intrínseca del trabajo fueron más cercanas a los efectos positivos (v.gr satisfacción, engagement), mientras que las variables y/o dimensión de interacción negativa con las personas, se vinculó más a los efectos negativos (v.gr burnout y pobre salud mental).
Discusión
El presente estudio exploratorio con metodología mixta, permitió identificar factores psicosociales positivos y negativos en una muestra de comerciantes informales que, por su especificidad contextual, era prácticamente imposible detectarlos con los cuestionarios disponibles para medir factores psicosociales laborales. Como ejemplo de lo anterior puede mencionarse el hallazgo de las “tareas gratificantes”, las que resultaron altamente relacionadas a la satisfacción laboral y se reflejaron en acciones tan simples como cobrar, despachar, acomodar o tender el puesto, entre otras. Estas actividades de los comerciantes informales difícilmente pueden encontrarse, con ese nivel de especificidad, en los modelos psicosociales más conocidos, tales como el modelo demanda/control42 o el modelo desequilibrio esfuerzo/recompensa43.
Los resultados destacaron la presencia de los factores positivos enfocados más en la interacción agradable con personas y los aspectos intrínsecos gratificantes de la tarea, antes mencionados. Estos aspectos positivos fueron más frecuentes en comparación con los negativos (riesgos ambientales percibidos, batallar con clientes, bajas ventas), ofreciendo así una panorámica de factores psicosociales positivos y negativos muy particulares en los comerciantes informales.
Por otro lado, se observaron hallazgos contradictorios en términos de la co-existencia de altos porcentajes de efectos psicológicos de satisfacción laboral y engagement por un lado, y porcentajes relativamente altos de burnout, estrés y pobre salud mental por el otro, lo que sugiere que estos fenómenos no son necesariamente excluyentes entre sí, aunque se ha documentado que mantienen una correlación inversa. Aceptando incondicionalmente la superioridad indiscutible de los aspectos positivos encontrados en este estudio (p. ej. 84,8% de satisfacción), la discordancia prevalece ante el hecho de saber que los comerciantes informales pertenecen a los grupos laborales de mayor precariedad en el mundo, contradicción que también se ha mostrado en otros estudios latinoamericanos44,45,46. Una posible interpretación es que funcione como una forma de afrontamiento que las personas usan para sobrellevar las precariedades atribuidas a la informalidad del empleo, sin embargo, es necesaria investigación que aporte evidencia en este sentido47. Esto también se refleja en la correlación positiva entre engagement y riesgo ambiental que, descartando un artefacto estadístico, sugiere que los motivadores que las personas encuentran en estos trabajos son intrínsecos (tareas que disfrutan, interacción con gente) más que extrínsecos (ganancias, ambiente físico o prestaciones laborales), lo que puede contribuir a su permanencia en estos trabajos a pesar de los limitados beneficios materiales o el ambiente físico, sin embargo, son necesarios también más estudios, sobre todo cualitativos, para probar estas interpretaciones.
Asimismo, la correlación positiva entre la frecuencia de “compartir con gente” y burnout, puede deberse a que la interacción con personas en determinado nivel de intensidad o frecuencia, se convierte en algo desgastante psicológicamente, es decir, a una relación estrictamente no lineal, donde a partir de cierto nivel de interacción social, el factor psicosocial puede transformarse de algo positivo a algo no favorable. El tamaño de la correlación (,35), la significancia obtenida (,06), la muestra de personas que señalaron esta categoría (n=29), así como el diseño utilizado (transversal), impiden tener una certeza de la conexión causal de estas variables. Debe notarse que el análisis categórico en toda la muestra (116) sí muestra la dirección esperada como factor protector (OR=,51), aunque no alcanzó significancia. Será importante profundizar en estas relaciones en los pasos subsecuentes de nuestro proyecto y estudios futuros.
Aunque se encontraron muy pocas relaciones estadísticamente significativas y de magnitudes de efecto muy altas entre los factores identificados y los efectos psicológicos, éstas tienen implicaciones prácticas en términos de su consideración para intervenciones focalizadas, pues dependiendo la consecuencia psicológica que se pretende disminuir (v.gr burnout) o incrementar (v.gr engagement), las acciones de intervención debieran enfocarse a los diferentes factores específicos que resultaron asociados. Ello puede aumentar la probabilidad de que una intervención funcione y puede considerarse un aporte del estudio con la aproximación mixta utilizada. Por ejemplo, se encontró que el burnout alto fue de mayor riesgo para quienes mencionaron el factor negativo de “batallar con clientes”, mientras que al mismo tiempo “atender al cliente” fue un factor protector para los comerciantes, lo que querría decir que la disminución del burnout en este grupo es más probable que se alcance trabajando específicamente en las interacciones con los clientes difíciles y no interviniendo ciegamente en las interacciones con todos los clientes o sobre variables que no demostraron vinculación alguna con el desgaste emocional. Las limitaciones de intervenciones no focalizadas pueden darse también en los casos donde los diagnósticos se hacen bajo categorías tan generales tales como “demandas psicológicas” (¿cuáles demandas en particular?), las relaciones interpersonales (¿relaciones con quién exactamente?), o recompensas (¿qué recompensas específicas?), etc.
Por otra parte, el modelo de escalamiento multidimensional permitió identificar patrones de relaciones entre todas las variables del estudio de manera importante, pues se ubicaron tres posibles dimensiones que pueden ayudar a comprender mejor los fenómenos investigados. La primera, la dimensión de motivación intrínseca-extrínseca (con extremos desde tareas satisfactorias a ganancias monetarias -por ejemplo-), la segunda, la dimensión interacción trabajopersonas (con extremos desde interacción con tareas a compartir con gente), ambos componentes resultaron relacionados diferencialmente a la tercera dimensión, la que refiere a aspectos psicológicos positivos y negativos en los diferentes extremos (Figura 2). Destaca el hecho que las dos primeras dimensiones, son rubros clásicos y abordados desde la antigüedad en la psicología organizacional, pero pobremente abordados en los marcos conceptuales recientes de factores de riesgo psicosocial, manteniéndose presente y con más claridad la visión de la dimensión positiva-negativa en algunas perspectivas recientes de la psicología de la salud ocupacional13.
La principal limitación del presente estudio es el tamaño de muestra en relación con las variables estudiadas, sin embargo, la robustez de los estadísticos elegidos, así como la elección de la metodología mixta, permitieron tener alguna certeza de los hallazgos presentados. Se concreta así esta evidencia inicial de variables psicosociales en comerciantes informales dentro de un proyecto más grande que aún se está realizando. Son necesarios estudios futuros que ayuden a explicar el comportamiento heterogéneo y la escasez de las relaciones estadísticas encontradas entre factores y consecuencias en los análisis bivariados, lo que quizás puede deberse a la dicotomización de las consecuencias psicológicas o las posibles incompatibilidades de significado en la categorización cualitativa, que luego se agrupó para analizarse cuantitativamente. No obstante, parecen ser más las ventajas prácticas de la metodología mixta utilizada (preguntas abiertas cualitativas que luego se analizan por medio de modelos bivariados y multivariados cuantitativos), y se desconocen estudios de otros autores con esta aproximación, aunque este estudio forma parte del potencial desarrollo de esta metodología hacia el futuro. Los hallazgos aquí presentados servirán también para refinar pesquisas futuras y coadyuvar al estudio de dimensiones trascendentes en el sector de comerciantes informales, lo que incluye la elaboración de escalas estandarizadas para evaluar factores psicosociales del trabajo en este grupo con las dimensiones aquí encontradas.
Consideraciones éticas
Como se expresó en la sección de métodos, este trabajo siguió los principios éticos para la investigación con seres humanos señalados en la declaración de Helsinky21, el artículo 21 y 22 del Reglamento de la Ley General de Salud y el artículo 19 del código civil del Estado de Morelos en México. No hubo procedimientos invasivos y todos los participantes firmaron un consentimiento informado, autorizando su participación en la investigación, con pleno conocimiento de la naturaleza del estudio, con la capacidad de libre elección y sin coacción alguna.