INTRODUCCIÓN
Las tasas de mortalidad global por enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT), para el año 2012 fueron similares en hombres y mujeres1 . Entre las ECNT se destaca la enfermedad cardiovascular y dentro de ésta, sobresale la enfermedad coronaria (EC), como la principal causa de muerte en mayores de 45 años con un incremento en la prevalencia para infarto agudo de miocardio sobre todo en mujeres de 35-54 años. No obstante, la EC, es una enfermedad subestimada por parte de ellas mismas, siendo asumida como una condición normal, con la cual la mujer se acostumbra a vivir2 , 3 .
Para ejercer algún control en el incremento de las estadísticas de la enfermedad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera necesario y prescindible realizar ajustes regionales, con el fin de implementar recomendaciones acordes a la diversidad del entorno: las diferencias de perfiles regionales, culturales y sociales en los que se desarrolla el proceso salud-enfermedad con el fin de encontrar soluciones a la problemática4 .
Conocer las características, cualidades o rasgos de las (los) habitantes de las diferentes regiones puede contribuir en la realización de esos ajustes para el control de la EC. Las características socioculturales de los grupos humanos hacen parte y están inmersas en los determinantes de salud, y se definen como las propiedades fundamentadas en el estilo de vida que se afectan por la variedad de corrientes sociales, económicas y políticas, que influencian la calidad de salud de las personas5 y permiten el abordaje y entendimiento del proceso salud- enfermedad6 .
La cultura está constituida por todas las maneras, estilos y expresiones (género, nivel de educación, religión, etnia, lengua, hábitos, valores, creencias, costumbres y cosmovisión), que identifican a una población y determinan su condición de salud6 . La cultura modela las conductas homogenizando comportamientos sociales, los riesgos para la salud están principalmente creados por la cultura. Existe una relación compleja entre cultura y salud que constituye todo un reto para las sociedades6 .
Existen pruebas que han demostrado el nexo entre lo psicosocial y socio económico con enfermedad coronaria, se considera que las mujeres de estrato bajo, con ingresos socioeconómicos igualmente bajos y que ejercen labores no jerárquicas, muestran mayores tasas de enfermedad coronaria; el carácter personal, el estrés, el escaso apoyo social, carga de responsabilidades, son factores de riesgo para la mujer7 .
Tajer observó que los conceptos tradicionales de factores de riesgo cardiovascular tales como cigarrillo, presión arterial alta, la diabetes mellitus, la edad, el sexo, los antecedentes familiares, el sedentarismo, solo forman una pequeña parte del contexto en el que se desarrolla la enfermedad, destaca así los fenómenos de: sobreadaptación, las diferencias de afrontamiento según la situación social, el desequilibrio de la institución familiar como factores influyentes en la generación de los factores de riesgo y por tanto de EC8 y efectivamente en la mujer se ha encontrado mayor prevalencia de la EC con la hipertensión arterial, dislipidemias, diabetes y en menor proporción con el tabaquismo en comparación con los hombres9 , 10 , estudios recientes reportan mayor frecuencia de obesidad y escasa actividad física en las mujeres11 . Se ha considerado que la existencia de factores colectivos, sociales o culturales, pueden agravar la situación: lugar donde vive la mujer (lugar de residencia), la característica de la sociedad (etnias, culturas, constitución familiar), nivel de capital social que posee (pobreza, riqueza), su relación con el resto de los habitantes (apoyo social y redes) y su mayor o menor capacidad económica12 . Se considera que las desigualdades económicas o inequidades sociales constituyen un riesgo para la mayoría de enfermedades conocidas13 , pero por otra parte la EC no es percibida por parte de la mujer como la principal enfermedad que la afecta, incluso puede pasarla como desapercibida14 , de manera que la edad, y la herencia se han convertido en elementos de aceptación y resignación para la enfermedad pues ésta se asume como normal y ligada al proceso de envejecimiento de la mujer7 .
Un estudio previo sobre caracterización de la angina de pecho en mujeres realizado en la ciudad de Pasto, entre los años 2008-2009 mostró algunos aspectos de índole cultural que denotan la existencia de una “cultura del aguante”15 de la enfermedad como una respuesta de afrontamiento de la mujer frente a la enfermedad y su prevención, la categoría encontrada se denominó: “callar para no preocupar”15 la cual engloba expresiones sobre comportamientos asumidos frente a la experiencia de la enfermedad.
Teniendo en cuenta que las características sociales y culturales influencian la experiencia de la enfermedad, su manifestación y la expresión de los síntomas15 , se considera necesario indagar más a fondo sobre estos supuestos, y estudiar en forma comparativa dichas características en mujeres diagnosticadas con EC (casos) y en mujeres ausentes de ella (controles) y comprobar que existen diferencias en la asociación en mujeres con EC y sin ella, desde un análisis que involucre las características socio culturales y su asociación con la EC con el fin de contribuir a la búsqueda de estrategias específicas que favorezcan la promoción y prevención de la salud cardiovascular y coronaria en la mujer.
MATERIALES Y MÉTODOS
Se realizó un estudio observacional, analítico con diseño de casos y controles. La muestra fue calculada con un nivel de confianza de 95%, un poder del 80%. Asumiendo una proporción de enfermedad en los no expuestos de 30%, una prueba unilateral, un riesgo relativo de 3, y relación de caso-control 1:3, obteniendo en total: 35 casos incidentes para el periodo estudiado (enero 2015- enero 2016) y 105 controles sin EC, ambos grupos provenientes de dos instituciones de salud referentes para todo el departamento de Nariño. El tipo de muestreo fue no probabilístico, por conveniencia.
Criterios de inclusión para casos
-Mujeres que reportaron un riesgo cardiovascular >10% según la tabla de predicción del riesgo cardiovascular: AMR-B de la OMS/IHS para contextos en que no se puede medir el colesterol16
y con reporte de cateterismo cardiaco positivo para enfermedad coronaria quienes fueron hospitalizadas en la unidad Cardioquirúrgica de referencia para el departamento de Nariño durante el periodo estudiado.
-Mujeres con un estado mental y comunicativo conservado, procedentes y residentes en el departamento de Nariño.
Criterios de inclusión para controles
-Mujeres que reportaron un riesgo cardiovascular < 10% en la tabla de predicción del riesgo cardiovascular: AMR-B de la OMS/IHS para contextos en que no se puede medir el colesterol16 , mujeres hospitalizadas en una institución de referencia para el departamento de Nariño con diagnóstico diferente a enfermedad coronaria durante el periodo estudiado.
-Mujeres con estado mental y comunicativo conservado, procedentes y residentes en el Departamento de Nariño.
Las pacientes fueron reclutadas al momento de su hospitalización en las dos instituciones de salud. La fuente de datos fue primaria directamente de las pacientes, quienes proporcionaron información respecto a aspectos demográficos, sociales y culturales, paralelamente se utilizó como fuente secundaria la historia clínica de donde se tomó y verificó diagnósticos y situación de salud (casos-controles) y reporte de cateterismo cardiaco (casos).
Variable de respuesta: Enfermedad coronaria
Variables de exposición:
Comorbilidad: presencia de hipertensión arterial, diabetes, obesidad.
Antecedentes familiares para enfermedad coronaria (EC) e infarto agudo de miocardio (IAM). Edad.
Características sociales y culturales:
· Procedencia (urbana-rural), residencia actual (urbana-rural), estrato socioeconómico, escolaridad, ocupación, estado civil.
Análisis estadístico
Se exploró normalidad para la edad mediante pruebas de Shapiro -Wilk y Kolmogorov – Smirnov y se determinó diferencias estadísticamente significativas para mediana de la edad entre los grupos mediante: U Mann Whitney. Se llevó a cabo análisis bivariado (crudo) entre variables sociales, culturales, comorbilidades y la presencia de EC, se estimó los Odd ratios (OR) como medida de asociación.
Con el fin de identificar el mejor ajuste posible, se realizó una regresión con todas las variables del estudio; no obstante, se mantuvo las que mostraron significancia estadística (p valor), su respectivo intervalo de confianza del 95%. Se aplicó la prueba estadística de χ2 asumiendo un p valor < 0,05 como estadísticamente significativo.
Se utilizó el programa estadístico SPSS versión 18, con licencia de la Universidad CES y el programa para análisis de datos epidemiológicos EPIDAT 4.1. El estudio respetó los principios éticos fundamentales contemplados en la declaración de Helsinki. Se trató de una investigación sin riesgo según resolución 8430 de octubre 04 de 1993, aprobada por los comités de ética en investigación de la Universidad CES código 420 y acta 081 de junio 2015 y de las instituciones de salud participantes (C0615). El 100% de las mujeres incluidas en el estudio otorgaron su consentimiento informado para las preguntas complementarias. El cuestionario fue sometido a validación del ítem mediante revisión de experto obteniendo una valoración de aceptable, posteriormente fue llevado a prueba piloto en un grupo de 10 mujeres (5 casos y 5 controles) quienes cumplieron criterios de inclusión, la prueba permitió evaluar y ajustar aspectos de redacción y comprensión con el fin de disminuir sesgos de información, la prueba fue aplicada por los investigadores.
RESULTADOS
Caracterización de los grupos
Participaron en total 140 mujeres: 25% (35 mujeres) pertenecientes al grupo de caso y 75% (105 mujeres) del grupo control. Por reporte de cateterismo cardíaco los casos evidenciaron: enfermedad coronaria aterosclerótica de un vaso en 37,10% (13 casos), de un vaso principal 17,10% (6 casos), de dos vasos 17,10% (6 casos); de tres vasos 17,10% (6 casos); de dos vasos principales 2,90% (1 caso); de tres vasos y uno principal 2,90% (1 caso), de 3 vasos principales 2,90% (1 caso) y de rama secundaria 2,90% (1 caso). En los controles según la clasificación diagnóstica CIE-10 se evidenció: Enfermedades del sistema digestivo 37.10% ( 39 controles), diferentes tipos de neoplasias 17,10% (18 controles), enfermedades del sistema nervioso con Glasgow 15/15 sin alteraciones de la memoria, juicio y raciocinio 12,40% (13 controles); enfermedades circulatorias 7,60% (8 controles), de la piel y de tejido subcutáneo 7.60% ( 8 controles), endocrinas y nutricionales 4,80% (5 controles), genito-urinarias 4,80% (5 controles), traumatismos y envenenamientos 2,90% ( 3 controles), del sistema respiratorio 1,90% ( 2 controles), infecciosas y parasitarias 1,90% (2 controles), del sistema osteomuscular y tejido conectivo 1,0% ( 1 control), de ojo y sus anexos 1,0% ( 1 control).
La media de edad fue de 66,69 años (D.E: 12,21) para casos y 63,38 años (D.E: 14,37) en controles. La distribución fue estadísticamente normal (p= 0,88) (Shapiro-Wilk) para los casos, pero no distribuye estadísticamente normal (p= 0,01) (Kolmogorov - Smirnov) en los controles. Según estadístico de prueba: U Mann Whitney, la mediana de la variable edad no tuvo diferencias estadísticamente significativas (p=0,23), para los grupos de investigación (caso y control). Tabla 1 .
Variable | Casos | Controles | p valor |
---|---|---|---|
(35) | (105) | χ2 | |
Edad Media DE | 66.6 ± 12.2 | 63.3 ±14.3 | 0.88* casos |
0.01**controles | |||
Edad Mediana (Rq) | 67 (16) | 63 (22) | 0.23*** |
Comorbilidad | |||
HTA | 29 | 35 | 0.0001 |
DM | 8 | 15 | 0.235 |
Obesidad | 11 | 16 | 0.035 |
Escala AMR-B | |||
Riesgo Bajo | 5 | 92 | <0.0001**** |
Riesgo Moderado | 4 | 13 | |
Riesgo Alto | 8 | 0 | |
Riesgo muy alto | 18 | 0 |
* Shapiro-Wilk. ** Kolmogorov – Smirnov.
***U Mann Whitney. **** χ2 p valor <0,05
Fueron hipertensas el 82,90% (casos) y 33,3% (controles), obesas el 31,40% (casos) y 15,2% (controles), diabéticas tipo II el 22,9% (casos) y 14,3% (controles) Tabla 1 .
Antecedentes familiares para EC en primer grado de consanguineidad: en padres y hermanos 42,90%, (15 casos) y 13,30% (14 controles).
Según las tablas de predicción de riesgo cardiovascular de la OMS-AMR-B para contextos en que no se puede medir el colesterol16 , los casos presentaron riesgo alto y muy alto para enfermedad coronaria con un 74,3%. En los controles se observó mayor proporción para riesgo bajo en 87,60% y moderado en 12,40% de las mujeres Tabla 1 .
Características socio-culturales:
El ser casada fue el estado civil más frecuente en 42,90% (casos) y 41,90% (controles), procedentes de área urbana de diferentes municipios del departamento 60% (casos) y 48% (controles) y residentes en zona urbana 80% (casos) y 62% (controles) de estratos 1 y 2, 71,4% (casos) y 85,8% (controles), con una escolaridad primaria 60% (casos) y 60% (controles). Refirieron poseer ocupaciones elementales (amas de casa, pensionadas) 65,7% (casos) y 81% (controles), con un ingreso menor a un salario mínimo en 42,9% (casos) y 52,4% (controles). Reciben apoyo social de familiares y/o vecinos 77,10% (casos) y 86,6% (controles), son mujeres jefes cabeza de familia el 51,4% de casos y en el mismo porcentaje los controles, pertenecientes a la religión católica 88,60 (casos) y 89,50 (controles), predominó la raza mestiza en 91,4% (casos) y 89,5% (controles).
Respecto al afrontamiento los mayores porcentajes en casos como en controles fueron para el buscar ayuda médica, seguida por la actitud de “callar para no preocupar” con 28,6% para los casos y 22,9% controles. Refieren consumo de cigarrillo 34,3% de casos y 2,9% controles siendo importante recalcar que un 22,9% de mujeres casadas se comportaron como fumadoras pasivas (cónyuge o hijos fumadores). El consumo de licor se presentó en 14,3% de casos y 4,8% controles, por su parte la actividad física fue ocasional en 45,7% casos y 28,6% controles.
En el análisis bivariado al comparar la residencia actual según la presencia de EC, se encontró que el riesgo crudo de presentar EC es de 2,46 (95% IC: 1,98-6,16) veces más probables para aquellas mujeres que residen en área urbana que para las que residen en área rural. Siendo la diferencia estadísticamente significativa (p<0,05), Tabla 2 .
Variable | Caso (n=27) | Control (n=70) | OR | (IC 95%) | Valor P* | ||
---|---|---|---|---|---|---|---|
No | % | No | % | ||||
Estado Civil | 0,83 | ||||||
Soltera | 7 | 20 | 23 | 21,90 | 1,16 | (0,34-4,01) | |
Casada | 15 | 42,90 | 44 | 41,90 | 1,31 | (0,45-3,82) | |
Unión Libre | 5 | 14,30 | 9 | 8,60 | 2,13 | (0,52-8,77) | |
Viuda | 6 | 17,10 | 23 | 21,90 | - | ||
Separada | 2 | 5,70 | 6 | 5,70 | 1,28 | (0,20-8,01) | |
Procedencia | |||||||
Rural | 14 | 40 | 55 | 52 | 0,54 | (0,24-1,18) | 0,08 |
Urbana | 21 | 60 | 50 | 48 | 1 | - | |
Residencia actual | |||||||
Rural | 7 | 20 | 40 | 38 | 1 | - | 0,04 |
Urbana | 28 | 80 | 65 | 62 | 2,46 | (1,98-6,16) | |
Estrato Socioeconómico | 0,02 | ||||||
Uno | 13 | 37,10 | 66 | 62,90 | 1 | - | |
Dos | 12 | 34,30 | 24 | 22,90 | 2,54 | (1,02-6,33) | |
Tres | 7 | 20 | 14 | 13,30 | 2,54 | (0,86-7,51) | |
Cuatro | 1 | 2,90 | 1 | 1 | 5,08 | (0,29-86,45) | |
Cinco | 2 | 5,70 | 0 | 0 | 0,00 | NA | |
Escolaridad | 0,99 | ||||||
Sin escolaridad | 4 | 11,40 | 11 | 10,50 | - | ||
Primaria | 21 | 60 | 63 | 60 | 0,92 | (0,26-3,19) | |
Bachillerato | 7 | 20 | 22 | 21 | 0,87 | (0,21-3,64) | |
Tec-técnologo | 1 | 2,90 | 4 | 3,80 | 0,69 | (0,06-8,14) | |
Universidad | 2 | 5,70 | 5 | 4,80 | 1,100 | (0,15-8,12) | |
Ocupación | 0,17 | ||||||
Empleada | 5 | 14,3 | 9 | 8,60 | 2,05 | (0,63-6,72) | |
Independiente | 7 | 20 | 11 | 10,50 | 2,35 | (0,82-6,74) | |
Ocupación elemental | 23 | 65,70 | 85 | 81 | 1 | - | |
Ingresos | 0,74 | ||||||
Sin ingresos | 5 | 14,30 | 14 | 13,30 | 1 | - | |
Menos de un mínimo | 15 | 42,90 | 55 | 52,40 | 0,76 | (0,24-2,46) | |
Un salario mínimo | 9 | 25,70 | 19 | 18,10 | 1,33 | (0,36-4,83) | |
Mayor de un mínimo | 56 | 17,10 | 17 | 16,20 | 9,22 | (2,90-29,32) | |
Apoyo Social | 0,02 | ||||||
Familiares y Vecinos | 7 | 20 | 14 | 13,30 | 0,35 | (0,08-1,54) | |
Familiares o Vecinos | 20 | 57,10 | 77 | 73,30 | 0,18 | (0,05-0,65) | |
No Sale/Recibe visita | 1 | 2,90 | 9 | 8,60 | 0,08 | (0,01-0,84) | |
No Sale /No Recibe | |||||||
Visita | 7 | 20 | 5 | 4,80 | 1 | - | |
Rol en núcleo familiar | 0,76 | ||||||
Jefe | 18 | 51,40 | 54 | 51,40 | 1 | - | |
Cónyuge | 15 | 42,90 | 41 | 39 | 1,10 | (0,49-2,43) | |
Otra | 2 | 5,70 | 10 | 9,50 | 0,60 | (0,12-2,10) | |
Religión | 0,98 | ||||||
Católica | 31 | 88,60 | 94 | 89,50 | 1 | - | |
Ninguna | 1 | 2,90 | 3 | 2,90 | 1,01 | (0,10-10,07) | |
Otra | 3 | 8,60 | 8 | 7,60 | 1,14 | (0,28-4,55) | |
Grupo social o etnia | 0,52 | ||||||
Mestiza | 32 | 91,40 | 94 | 89,50 | 1 | - | |
Otra | 3 | 8,60 | 11 | 10,50 | 1,25 | (0,327-4,76) | |
Afrontamiento a la enfermedad: | 0,04 | ||||||
Callar/no preocupar | 10 | 28,60 | 24 | 22,90 | 1 | - | |
Controlarse a sí misma | 9 | 25,70 | 46 | 43,80 | 0,47 | (0,17-1,31) | |
Busca ayuda médica | 16 | 45,70 | 35 | 33,30 | 1,10 | (0,43-2,82) | |
Hábitos: | |||||||
Al Cigarrillo | 12 | 34,30 | 3 | 2,90 | 17,74 | (4,63-67,99) | 0,00 |
Al licor | |||||||
Si | 5 | 14,30 | 5 | 4,80 | 3,33 | (0,90-12,29) | 0,07 |
Actividad Física | 0,22 | ||||||
Frecuentemente | 12 | 34,30 | 23 | 21,90 | 3,88 | (1,35-11,11) | |
Ocasionalmente | 16 | 45,70 | 30 | 28,60 | 3,96 | (1,46-10,72) | |
Nunca | 7 | 20 | 52 | 49,50 | 1 | - |
* χ2 p valor <0,05; 1: Población de referencia
Respecto al estrato y la presencia de EC, se determinó que quienes presentan el mayor porcentaje de EC se encuentran en los estratos 1 y 2 con un 37,1% y 34,30% respectivamente. Los menores porcentajes de mujeres con EC se encuentran en los estratos cuatro y cinco y no superan el 10%. Se evidenció asociación estadística entre el estrato 2 y la presencia de EC (p < 0,05), y lo confirma el valor del OR crudo calculado y su intervalo de confianza que no pasa por la unidad, Tabla 2 .
Según el apoyo social y la presencia de EC, se encontró que las mujeres con EC en un porcentaje del 57,10% reciben apoyo de familiares o vecinos, siendo los menores porcentajes en un 20% para aquellas mujeres coronarias que reciben apoyo de alguno de estos dos colectivos y en igual porcentaje aquellas mujeres con EC que no salen/no reciben visitas. El 73,30% de quienes no presentan EC refieren apoyo de familiares o vecinos, un porcentaje inferior al 10% de quienes no presentaron EC no contaban con apoyo social y no salían / recibían visitas o no salían/ no recibían visitas, tabla 2 . Se evidenció asociación estadística (p< 0,05) entre el apoyo social y la presencia de EC, y se reafirma con los valores de OR crudos calculados y los intervalos de confianza, entendiéndose que el apoyo social operó como un factor protector para las mujeres sin EC, Tabla 2 .
Para el consumo de cigarrillo (se consideró como fumadora a la persona que había fumado al menos un cigarrillo al día por un periodo de un año, según criterio de Doll y Hill), se determinó que quienes presentan el hábito de fumar 34,30% presentan EC. Los OR calculados indican que existe 17,74 (95% CI: 4,63-67,99) veces más riesgo de presentar EC por su consumo, el intervalo de confianza, indica que existe diferencia estadísticamente significativa que valida esta asociación, (p < 0,01), Tabla 2 .
Finalmente, no se encontró asociación estadística entre el estado civil, la procedencia, escolaridad, ocupación, ingresos, rol que desempeña en el núcleo familiar, religión, grupos social o etnia a la que pertenece consumo de licor, actividad física y la presencia de EC (p > 0,05), y se confirma con los valores de los OR crudos calculados y los intervalos de confianza. Si bien se encontró significancia estadística (p<0,05) para el afrontamiento (variable cultural de interés para el estudio) y EC, Tabla 2 , los intervalos de confianza, muestran que no existe diferencia estadísticamente significativa que valide la asociación.
Se realizó un modelo multivariado de regresión logística con el fin de ajustar el riesgo de presentar Enfermedad Coronaria, con los 8 potenciales factores de riesgo y de protección (P<0,05), en el análisis bivariado Tablas 3 y 4. Hipertensión arterial, obesidad, antecedentes de familiares con enfermedad coronaria-IAM, estrato socioeconómico, apoyo social, residencia actual, afrontamiento frente a la EC y consumo de cigarrillo mostraron asociación estadística para EC. El ajuste mostró aumento del OR para el hábito de consumo de cigarrillo el cuál proporciono un riesgo de 21,12 veces más en las mujeres coronarias que en las no coronarias: (0R= 21,12; IC 3,97-112,26) mostrando un incremento al ajustarse por las variables más significativas. Se observó disminución del OR para la comorbilidad hipertensión arterial y diabetes, mantuvo significancia estadística (IC) la primera finalmente representó 9,47 veces más riesgo en las mujeres con EC, (OR= 9,47 IC (2,87-31,23) al igual que los antecedentes familiares que mostraron un riesgo mayor en 4,41 comparado con las mujeres del grupo control (OR =. 4,41 IC=1,35-14,44). Por su parte el estrato socioeconómico, residencia actual, apoyo social, afrontamiento perdieron también significancia. Tabla 3 .
Variables | OR c | IC 95% | OR A | IC 95% |
---|---|---|---|---|
Diagnóstico HTA | 9,67 | (3,67-25,45) | 9,47 | (2,87-31,23) |
Diagnóstico Obesidad | 2,55 | (1,05-6,21) | 2,06 | (0,65-6,53) |
Antecedente EC-IAM | 4,87 | (2,03-11,69) | 4,41 | (1,35-14,44) |
Estrato socioeconómico | - | 1,39 | (0,66-2,92) | |
Uno | 1 | - | ||
Dos | 2,54 | (1,02-6,33) | ||
Tres | 2,54 | (0,86-7,51) | ||
Cuatro | 5,08 | (0,29-86,45) | ||
Cinco | 0,00 | NA | ||
Apoyo social | - | 1,72 | (0,84-3,49) | |
Familiares y vecinos | 0,35 | - | ||
Familiares o vecinos | 0,18 | (0,08-1,54) | ||
No sale/recibe visitas | 0,08 | (0,05-0,65) | ||
No sale /no recibe visitas | 1 | (0,01-0,84) | ||
Residencia actual | (0,98-6,16) | 0,98 | ||
Rural | 1 | (0,26-3,73) | ||
Urbana | 2,46 | |||
Afrontamiento EC | 1,45 | (0,46-4,63) | ||
Callar/no preocupar | 1 | |||
Controlarse a sí misma | 0,47 | (0,17-1,31) | ||
Busca ayuda médica | 1,10 | (0,43-2,82) | ||
Consumo Cigarrillo | 17,74 | (4,63-67,99) | 21,12 | (3,97-112,26) |
1: Población de referencia
En el primer modelo saturado, se incluyeron todas las variables del estudio, luego se fueron retirando las variables que no indicaron asociación estadística, hasta llegar al modelo que mejor explica la aparición de la enfermedad coronaria. Tablas 3 y 4.
La asociación más fuerte para enfermedad coronaria se observó con el consumo de cigarrillo, el cual representa el riesgo más alto y que mostró un incremento de 3,37 al ajustarse por las variables más significativas del estudio (OR 21,11; IC 95% 3,97-112,26) entre los factores asociados.
La hipertensión arterial mostró un OR crudo de 9,67 y se disminuyó en un 0,20 al ajustarse por los demás factores, (OR=9,472; IC 95%, 2,87-31,23) después del riesgo encontrado para el consumo de cigarrillo.
Los antecedentes familiares para EC, mostraron un OR ajustado de 4,41, el cual disminuyo en un 0,46 con relación al dato crudo (OR= 4,41; IC 95% 1,35-14,44).
La variable de afrontamiento de la E.C se conservó, por cuanto fue una de las variables de interés para el estudio, dado su componente cultural. Tabla 4 .
Variables | OR | (IC95%) | Valor p |
---|---|---|---|
Diagnóstico HTA | 9,47 | (2,87-31,23) | 0,00 |
Diagnóstico Obesidad | 2,05 | (0,65-6,53) | 0,22 |
Antecedente EC-IAM | 4,41 | (1,35-14,44) | 0,01 |
Estrato socioeconómico | 1,39 | (0,66-2,92) | 0,38 |
Apoyo social | 1,71 | (0,84-3,49) | 0,13 |
Residencia actual | 0,98 | (0,26-3,73) | 0,98 |
Afrontamiento | 1,45 | (0,46-4,63) | 0,52 |
Consumo Cigarrillo | 21,11 | (3,97-112,26) | 0,00 |
DISCUSIÓN
La edad ha sido considerada una variable de predicción fuerte para enfermedad coronaria en mujeres17 y el estudio confirmó su presencia en las mujeres con edades post menopaúsicas2 , hecho que presumiblemente favorezca la percepción de que la EC es una condición normal del envejecimiento de la mujer2 , 7 , 14 favoreciendo de esa manera la “cultura del aguante” encontrada en estudios previos15 . Si bien Colombia atraviesa una acelerada trasformación demográfica con un rápido incremento de la población mayor de 60 años la cual ascenderá a 15,5 millones para el 205012 , amerita poner un cuidado prioritario a la situación, máxime cuando la EC se asume por la mujer como un suceso normal que ocurrirá en la adulta mayor.
El estudio evidenció cierta proporción de mujeres (22,9% de casos) convivientes con cónyuge fumador, mujeres que se comportaron como fumadoras pasivas, variable que no se tuvo en cuenta en la investigación pero que es importante destacar. Se conoce que el humo de flujo lateral presenta mayores niveles de alquitrán, CO2, metano y nicotina que el humo de flujo principal11 , aumenta la agregación plaquetaria y riesgo de trombosis. Culturalmente hablando, este fenómeno de actuar pasivamente frente a un hecho que resulta nocivo para la salud, fue denominado por Tajer8 como modelo de vulnerabilización específica, en el cual existe sobreestimación de los imperativos de la realidad, incluso por encima de sus propios deseos y necesidades; este aspecto refuerza también lo que se identifica con la “cultura del aguante”15 citada favoreciendo la aparición de los factores de riesgo y por tanto de la EC.
En el estudio la mayor proporción de los casos reportaron su residencia actual en áreas urbanas, especialmente en los municipios ubicados en la región centro del departamento de Nariño; comparando estos datos con los reportados para el área de procedencia, se observó un leve incremento en los datos que dan cuenta del sitio de residencia actual; en la actualidad el incremento en la concentración de personas en estas áreas se puede dar por fenómenos de desplazamiento voluntario o involuntario hacia la ciudad, donde las mujeres se enfrentan a nuevas culturas y hábitos derivados de los problemas de urbanización y desigualdad social tal como lo cita la comisión económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) para quien el fenómeno migratorio de mujeres, al interior de un país o una región, se genera por la presencia de necesidades propias de la pobreza, escases de oportunidades, “la complementariedad de los mercados laborales y la división sexual a nivel internacional”18 que obviamente conlleva al desajuste o desarrollo de comorbilidades como diabetes, obesidad e hipertensión especialmente19 . La hipertensión arterial se considera el principal factor de riesgo para EC y así se reporta en estudios como el de Borges Moreno donde el 62,3% de las pacientes fueron hipertensas2 . El problema de hipertensión, fue una característica sobresaliente entre las mujeres del grupo de casos, confirmando así lo encontrado en estudios que reportan prevalencias elevadas de HTA en las poblaciones urbanas sometidas a migraciones, cambios culturales rápidos, y movilidad socioeconómica, dado que las condiciones de las zonas urbanas crean el efecto contrario al observado en las poblaciones aisladas (rurales) que se destacan por sus cualidades sociales poco modificadas además de costumbres firmes donde sus habitantes presentan valores de tensión arterial baja durante su curso de vida. No obstante, para otros estudios las diferencias de hipertensión arterial en área rural o urbana no es concluyente19 .
Respecto a la ocupación sobresalieron en mayor proporción las labores elementales (ama de casa) en el 65,7% de los casos. Esto implica el hecho de que la mujer debe dedicarse al cuidado del hogar, y de la familia, y son ellas quienes circulan por instituciones de salud como cuidadoras informales de otros, volviéndose imperceptible de esta manera a la atención sanitaria18 . Además, el no reconocimiento económico del trabajo doméstico de cuidados de la salud, la falta de apoyo social y de retribución social y económica que realizan las mujeres tiene efectos en su salud y en los factores de riesgo para EC18 .
El apoyo social ha sido reportado en varios estudios, por su efecto protector directo y amortiguador contra la enfermedad, integridad física y psicológica de la persona a lo largo del tiempo20 , se afirma que los efectos de las relaciones sociales sobre la salud pueden ser importantes factores protectores20 , lo contrario se observa en mujeres aisladas con tendencia a la depresión, efectivamente las diferencias de género en la salud de las personas muestran mayor prevalencia de depresión entre las mujeres que entre los hombres, pudiendo además estar relacionada a las desigualdades de género entre otros aspectos18 . Se ha demostrado la relación entre el apoyo social y los asuntos relacionados con la salud en diferentes poblaciones, y que su ausencia desempeña un papel importante en la progresión hacia la muerte por EC post (IAM)20 . El estudio encontró que la mayor proporción de mujeres que reportaron recibir apoyo social, pertenecen al grupo control (89,6%). Se ha explicado que pacientes con escaso apoyo social tienden a experimentar mayor estrés y mostrar hostilidad, todos los cuales se han citado como factores de riesgo para EC y aquellos que reportan aislamiento social son los que tienen mayor riesgo de mortalidad temprana20 , 21 .
Es claro que la cultura actúa como un determinante de la forma como se distribuyen socio-epidemiológicamente las enfermedades por cuanto moldea el comportamiento de las mismas y las predispone a determinadas enfermedades, El presente estudio encontró una considerable proporción de mujeres del grupo casos quienes asumieron la conducta de: callar para no preocupar, como un modo de afrontamiento, reafirmando los hallazgos de otros estudios donde mujeres clasificadas como vulnerables y con dolor de pecho buscaron menos atención médica que las no vulnerables22 , 23 .
Se confirmó el hábito de fumar como un determinante mayor para desarrollar EC24 , el hábito de fumar se asume como una conducta inducida por otros factores individuales y de afrontamiento a diversas situaciones familiares, sociales, ocupacionales que la mujer debe enfrentar, presumiblemente asociado a hábitos y estilos de vida que han sido adoptados, sobre todo en los estratos bajos25 . Los resultados encontrados contrastan con los hallazgos de un estudio de Japón donde las tasas de tabaquismo en mujeres, fueron más bajas26 .
Es conocido por evidencia científica que las personas sedentarias o físicamente inactivas presentan mayor riesgo de desarrollar EC que las activas10 , el presente estudio no mostró diferencias significativas respecto al hábito de realizar actividad física, los autores presumen un posible sesgo de información (en grupo casos), y que la respuesta pudo estar condicionada para ocultar sentimientos de culpa frente al desarrollo de la enfermedad, especialmente en los casos.
Con relación a la religión y etnia tampoco hubo diferencias significativas para los dos grupos. Respecto a la etnia llamó la atención que siendo Nariño pluriétnica y multicultural25 y a pesar de haber reclutado pacientes de dos instituciones de salud que se consideran referentes importantes en el departamento, no se encontró porcentajes significativos de mujeres pertenecientes a los grupos afrodescendientes o mujeres pertenecientes a etnias indígenas con diagnóstico de EC.
Se consideraron como limitantes del estudio los relacionados con los estudios de casos y controles en los cuales asociación causal es débil, el marco muestral de tipo no probabilístico que no permite extrapolar resultados, el tamaño muestral refleja la amplitud de los intervalos encontrados especialmente para el consumo de cigarrillo, la ausencia de arteriografía coronaria en los controles.
CONCLUSIONES
Se considera que el estudio contribuye a la compresión de la problemática para plantear estrategias específicas de promoción y prevención para la población femenina en diferentes cursos de vida, siendo por tanto necesario sensibilizar sobre la enfermedad desde las edades tempranas de infancia y la adolescencia especialmente en los factores identificados: consumo de cigarrillo e hipertensión arterial y a futuro no se resignen y ni se acostumbren a coexistir con esta enfermedad crónica asumiendo que ella es normal. En este mismo sentido identificar la antecedencia de estos factores en la población femenina adulta-mayor que permitan identificar riesgos a tiempo y por, sobre todo, sensibilizar sobre la subestimación que se ha otorgado a la enfermedad por parte de las mujeres y los riesgos para su vida.