Introducción
El mundo experimentó una pandemia producida por el virus COVID-19, este hecho se notificó por primera vez a finales del año 2019 y afectó a variedad de países, entre ellos Colombia (Organización Mundial de la Salud [OMS], s.f.). Esta situación dio lugar a cambios en diferentes esferas, entre ellas la familiar y la educativa. Una de las medidas de bioseguridad que se adoptó fue el aislamiento preventivo, lo cual provocó que las familias permanecieran mayor tiempo en casa e incrementó los niveles de estrés y la frecuencia de eventos de violencia verbal, física y psicológica (Ruiz y Ramiréz, 2021; Bermúdez, 2021). De forma simultánea, se evidenció un cambio en la tarea de educar a los niños, niñas y adolescentes, pues si bien antes de la pandemia esta labor se les atribuía especialmente a los centros educativos, en medio de la contingencia sanitaria los principales cuidadores tuvieron que convertirse en facilitadores del proceso de enseñanza-aprendizaje y en un apoyo vital para la educación de los menores. Esta tarea resultó compleja debido a dinámicas laborales, familiares e inexperiencia en procesos educativos (Vásquez et al., 2020; Rojas, 2020; Ruiz y Ramiréz, 2021; Bermúdez, 2021).
Lo anterior afectó mayormente a las familias en condición de vulnerabilidad, en razón a factores socioculturales, como difícil acceso al sistema de salud, bajos ingresos económicos, bajo nivel educativo, condiciones de vivienda, entre otros (Franco y Mendoza, 2002; Nasution et al., 2021). Estos aspectos complejizaron las dinámicas familiares y el apoyo brindado en casa en los procesos de enseñanza-aprendizaje, ya que la mayor preocupación era generar ingresos para el sustento económico del hogar (Quiñones de Mendoza, 2010).
Teniendo en cuenta el impacto de la pandemia en las esferas familiar y educativa, y la relación de estas en el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes, ha sido necesario impulsar la articulación entre la escuela y la familia, en razón a que esta última es considerada como el núcleo fundamental de la sociedad, en la que existe amor y solidaridad mutua, con el importante rol de ser un agente educador primario que aporte de forma significativa al desarrollo integral de los menores (Alcalay et al., 2005; Fernández et al., 2007; Cano y Casado, 2015; Razeto, 2018; Rodríguez, 2021; Mina, 2022).
Considerando lo anterior, las instituciones educativas de Colombia han mostrado interés en brindar espacios de formación y reflexión a los cuidadores en pro de la promoción de factores protectores y la prevención de factores de riesgo, mediante programas de escuela para familias (Pérez, 2000; González, 2011; Díaz et al; 2020). La escuela para familias es entendida como un espacio de formación y reflexión, que aporta en el fortalecimiento de vínculos familiares, a través de la enseñanza de estrategias de afrontamiento efectivas para lograr que los padres, madres y cuidadores brinden una educación integral a sus hijos, favoreciendo su desarrollo y previniendo la aparición de alteraciones psicológicas significativas en la infancia y la adolescencia (Pérez, 2000; González, 2011; Rodríguez, 2021). Estos espacios se han desarrollado mayormente de manera presencial; sin embargo, debido a la aparición del virus COVID-19, fue necesario realizar ajustes en la modalidad de aplicación de estos programas, incluyendo y construyendo estrategias que permitieran brindar una ayuda a las familias a través de espacios virtuales, que orienten a los cuidadores en su rol de padres y que potencialicen las competencias para educar desde casa (Rodríguez, 2021).
Para esta importante tarea, las TIC mostraron ser las herramientas idóneas que derribaron las barreras entre la escuela y la familia, ya que permitieron a los padres una mayor facilidad para participar en estos programas y el logro en el desarrollo de los contenidos desde cualquier lugar al ajustar el tiempo destinado al aprendizaje y proteger su salud (Quiñones de Mendoza, 2010; Vásquez et al., 2020).
En distintos países, diferentes autores se han interesado por realizar estudios relacionados con la importancia de articular la familia y la escuela en entornos virtuales, aprovechando las ventajas de las TIC. En Guatemala, Rojas (2020) desarrolló un estudio que tuvo como objetivo diseñar una propuesta que facilite y promueva la participación continua de los padres de familia de una institución educativa en la escuela para padres. La investigación tuvo cuatro fases: diagnóstico de las necesidades del establecimiento, análisis de información, revisión de antecedentes y evaluación de la propuesta por expertos. Los resultados indicaron que el desarrollo de una escuela para familias en modalidad virtual produjo un aumento en la participación, debido a que los cuidadores tenían la oportunidad de desarrollar destrezas y actitudes ajustando su ritmo de aprendizaje. En Perú, Tupac et al. (2020) desarrollaron una investigación que tuvo como propósito ejecutar un programa en modalidad virtual para padres y madres de niños en edad preescolar durante el confinamiento provocado por el COVID-19. En el estudio participaron 80 padres y madres de niños en edad preescolar de instituciones educativas de diferentes distritos de Lima Metropolitana. El programa se desarrolló en 12 sesiones virtuales a través de la plataforma ZOOM. Los resultados mostraron que los encuentros virtuales contribuyeron de manera positiva al desarrollo del programa de escuelas de padres durante el aislamiento preventivo.
En México, Nuño et al. (2006) llevaron a cabo una investigación que tuvo como objetivo evaluar el efecto a corto plazo sobre el ambiente familiar del programa escuela para padres, así como conocer las diferencias entre los padres que participan y los que no participan en el programa. En este espacio participaron un total de 112 cuidadores. El programa se desarrolló mediante 15 sesiones interactivas sobre la relación padres e hijos, comunicación familiar, entre otros elementos. Los resultados sugieren que el programa facilitó la búsqueda de apoyo profesional y se concluye que las familias más vulnerables tienden a estar más pendientes de los programas de escuela para familias.
En Colombia, se llevó a cabo un estudio que tuvo como objetivo diseñar una escuela virtual para padres y madres de familia de una institución educativa. En la investigación participaron 25 familias, con las cuales se realizó un diagnóstico de necesidades mediante el análisis DOFA. Lo anterior permitió evidenciar la necesidad de desarrollar estos programas en modalidad virtual. Los hallazgos indicaron que los padres de familia perciben las aulas virtuales del programa de escuela para familias como un medio útil y rápido para informarse acerca de elementos importantes para educar a sus hijos y la manera de aplicar lo aprendido (Lopez, 2010).
Rodríguez (2021) realizó un estudio que tuvo por objetivo analizar la pertinencia de la implementación de una escuela de padres a distancia, mediada por las TIC para el mejoramiento del desempeño académico de los estudiantes de un salón de clases del Colegio Gran Yomasa, durante la pandemia. Los resultados sugieren que las TIC son una estrategia adecuada para educar a los padres en medio de la pandemia y que contribuye de forma positiva en el rendimiento académico de los estudiantes. Es importante mencionar que, si bien se pueden presentar barreras para acceder a las TIC, es posible superarlas con el apoyo de la institución.
Teniendo en cuenta lo anterior, y considerando los exiguos estudios en el contexto nariñense sobre el desarrollo de programas orientados a trabajar escuela y familia de forma mancomunada, la presente investigación tuvo como objetivo implementar un programa de escuela para familias en modalidad virtual, en aras de fortalecer el rol de la familia en el sano desarrollo de niños, niñas y adolescentes en condición de vulnerabilidad. Además, se pretende ser un insumo para que otros profesionales retomen elementos que faciliten llevar a cabo este tipo de programas en distintas instituciones educativas, teniendo en cuenta las estrategias utilizadas, la metodología de aplicación y las temáticas trabajadas.
Método
El presente estudio se enmarcó dentro del paradigma metodológico cualitativo, ya que se buscó comprender el sentido que los participantes le otorgan a la implementación del programa de escuela para familias, mediante la interpretación y el diálogo (Sandoval, 2002). Además, contó con un paradigma epistemológico crítico-social y un tipo de estudio de investigación acción, retomando las fases de planificación, ejecución y evaluación de resultados (Lewin, 1946), a través de las cuales se brindaron espacios que permitieron a las familias reflexionar sobre las dinámicas familiares, el impacto de estas en los menores y la importancia de trabajar mancomunadamente para que los niños, niñas y adolescentes gocen de entornos protectores y una crianza positiva, siendo los padres y principales cuidadores los agentes del cambio.
Para la selección de la unidad de análisis se tuvieron en cuenta los siguientes criterios de inclusión: a) vinculación de al menos un miembro de la familia con la institución educativa y b) disposición a participar del estudio, manifiesto en el consentimiento informado. En total, participaron 90 familias, entre ellas colombianas e inmigrantes. El estudio contempló como criterio de exclusión que las familias no presentaran interés o disposición a participar en el programa.
Para llevar a cabo la investigación, se tuvieron en cuenta los principios brindados por Beauchamp y Childress (1999) −no maleficencia, beneficencia, autonomía y justicia−; además, se retomó lo establecido en la ley 1090 del 2006, por la cual se reglamenta el ejercicio de la profesión de psicología, se dicta el Código Deontológico y Bioético y otras disposiciones (Ley 1090, 2006), salvaguardando la confidencialidad de la información suministrada, garantizando igualdad de oportunidades para todos los participantes y propiciando en todo momento el bienestar de los mismos.
Instrumentos y/o materiales
Para la recolección de información se utilizaron las técnicas de revisión documental, entrevista grupal y grupo focal. En la primera técnica se revisó la ley 2025 del 23 de julio de 2020, con el propósito de conocer los lineamientos para la implementación de las escuelas para familias en instituciones de educación preescolar, básica y media de Colombia (Ley 2025, 2020). Además, se examinaron los documentos suministrados por la institución educativa, en los cuales se brindan pautas para el desarrollo de escuela para padres. Adicionalmente, se llevó a cabo la técnica de entrevista grupal, con el propósito de conocer los aspectos a fortalecer y los recursos de las familias de la institución educativa (Amezcua, 2003).
La tercera técnica, denominada grupo focal, se empleó con el objetivo de conocer las percepciones y aprendizajes de las familias frente a los componentes que comprendió el programa de escuela para familias virtual (Sandoval, 2002).
Para el análisis de información, se empleó el software ATLAS.ti versión 9, el cual facilitó el proceso de sistematización, categorización y triangulación de los datos (Friese, 2021).
Procedimiento
El presente estudio retomó las fases de planificación, ejecución y evaluación de los resultados del modelo de Lewin (1946), considerando la coherencia de este modelo con los objetivos de la investigación (véase en la figura 1).
Fase de planificación
Se revisó la ley 2025 del 23 de julio de 2020, la cual permitió reconocer los lineamientos para la implementación de las escuelas para padres, madres de familia y cuidadores, en las instituciones de educación preescolar, básica y media de Colombia; y las orientaciones del Ministerio de Educación Nacional (MEN) (2024). El MEN es la entidad responsable de la implementación de la ley en el país y brinda autonomía a las instituciones para que adapten estas orientaciones de acuerdo a las necesidades de la comunidad educativa, al definir objetivos, contenido y modalidad de aplicación. En adición, se revisaron y analizaron los lineamientos de la institución educativa para el trabajo del programa de escuela para familias. Así también, se desarrolló la técnica de entrevista grupal virtual, conformada por los principales cuidadores de cada familia. Estos espacios permitieron conocer los aspectos a fortalecer en las familias vinculadas a la institución educativa y los recursos de las mismas.
La aplicación de las anteriores técnicas permitió delimitar las temáticas a trabajar en el programa, al tener en cuenta las necesidades, problemáticas y los recursos de la comunidad. El programa virtual quedó conformado por los componentes de entornos protectores y crianza positiva.
Fase de ejecución
Considerando los componentes de entornos protectores y crianza positiva, se diseñaron tres talleres para el primer componente (estilos de vida saludables, prevención de riesgo en el uso de las TIC, uso y aprovechamiento del tiempo libre) y dos talleres para el segundo componente (educando en amor y límites, comunicación asertiva en familias). Para la elaboración de insumos virtuales se utilizaron aplicaciones como Canva, versión 2.5; Renderforest, versión 2.8.0; y Animaker, versión 9.8, en las cuales se elaboraron diapositivas, folletos digitales, infografías y vídeos animados. En estos productos se plasmó información teórica y práctica sobre cada taller, utilizando un lenguaje acorde a la población participante.
La información se difundió de forma asincrónica, por medio de la aplicación WhatsApp, versión 2.22.18.75. Adicionalmente, se realizaron llamadas telefónicas a las familias que participaron del programa, con el objetivo de resolver inquietudes respecto a la información suministrada, brindar mayor información sobre temáticas que las familias consideraban importantes y abrir un espacio de escucha para las familias que experimentaron dificultad para adaptarse a las condiciones generadas por la contingencia sanitaria causada por el COVID-19.
Fase de evaluación de resultados
Con el objetivo de conocer el sentir, pensar y actuar de los participantes frente al contenido y las estrategias utilizadas en el programa de escuela para familias virtual, se aplicó la técnica de grupo focal, haciendo énfasis en las percepciones frente a la modalidad utilizada, aprendizajes adquiridos, temáticas trabajadas y posibles oportunidades de mejora.
Resultados
El objetivo del estudio fue implementar un programa de Escuela para Familias en modalidad virtual en una institución educativa de la ciudad de Pasto-Colombia. Para lo cual, se tuvo en cuenta las siguientes fases: Planificación, ejecución y evaluación de resultados (Lewin, 1946). A continuación, se presentarán los hallazgos obtenidos en cada una de las fases.
Fase de planificación
La ley 2025 del 23 de julio del 2020 permitió identificar las temáticas que se pueden incluir en los programas de escuela para familias en Colombia: derechos de niños, niñas y adolescentes, crianza positiva, acompañamiento a procesos educativos, desarrollo de la autonomía, promoción de estilos de vida saludables, uso y aprovechamiento del tiempo libre, educación sexual, prevención de violencia, entornos protectores, técnicas de estudio y rutas de atención particulares de las instituciones. Por otra parte, la revisión de los lineamientos del centro educativo facilitó construir las estrategias y la metodología para desarrollar el programa.
Complementario a lo anterior, la técnica de entrevista grupal hizo posible identificar la necesidad de fortalecer relaciones familiares mediadas por la cercanía, el respeto, la empatía y la escucha, lo que promovió entornos protectores donde exista una relación positiva entre los miembros de la familia y se compartan actividades que aporten al sano desarrollo de los niños, niñas y adolescentes (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia [UNICEF], 2021).
El análisis de los elementos anteriores mediante matrices manuales permitió diseñar el programa en el marco de la ley, las necesidades, las problemáticas y los recursos de la comunidad, lo que mostró la importancia de trabajar en el fortalecimiento de elementos relacionados a crianza positiva y entornos protectores mediante cinco talleres, los cuales se describen a continuación (Tabla 1).
Fase de ejecución
Se aplicó el programa virtual en las familias de la institución educativa de manera asincrónica, mediante la aplicación WhatsApp, versión 2.22.18.75. Para ello, se creó un grupo con un miembro por familia (el cual quedó conformado por 90 participantes), quienes fueron los encargados de recibir y compartir la información del programa con los demás miembros de la familia. Este medio resultó ser conveniente, puesto que permitió que la información fuera de fácil acceso y brindó la flexibilidad de poder informarse desde cualquier lugar y momento, garantizando así las medidas de aislamiento preventivo y, a su vez, la protección de la salud de las familias. Adicionalmente, se hizo contacto con las familias vía llamada telefónica, con el propósito de resolver inquietudes que podían surgir frente a la información suministrada en cada taller. En este punto se evidenció una participación activa en la presentación de dudas, tanto de elementos teóricos como prácticos. Asimismo, se expresaron los aprendizajes adquiridos y la retroalimentación en cuanto a la metodología utilizada en la aplicación del programa.
Finalmente, cabe resaltar el compromiso de las familias para desarrollar las actividades propuestas en cada taller y enviar las evidencias al grupo de WhatsApp.
Fase de evaluación de resultados
Para la evaluación de resultados, se aplicó la técnica de grupo focal en modalidad virtual de forma sincrónica, mediante la plataforma Google Meet, versión 173.0.468251. Cada grupo estuvo conformado por 10 participantes, en total se desarrollaron nueve grupos focales, con los cuales se evaluó la implementación del programa de escuela para familias y se recogieron percepciones y aprendizajes de la aplicación del programa. A continuación, se presentan los hallazgos obtenidos en cada componente.
Entornos protectores. Se trabajó “estilos de vida saludables”, “prevención del riesgo en el uso de las TIC” y “uso y aprovechamiento del tiempo libre”. La mayoría de las familias manifestaron que los talleres fueron de gran utilidad para sobrellevar el aislamiento preventivo en medio de la pandemia, ya que se adquirieron y fortalecieron diferentes conocimientos; entre ellos, adoptar estilos de vida encaminados a cuidar la salud, proteger a los menores de posibles riesgos con el uso de dispositivos tecnológicos y acompañarlos en su proceso de desarrollo mediante actividades compartidas en familia. Al respecto, los participantes refieren.
P88: “En mi hogar siempre se ha buscado tener buenos hábitos, sin conocer a fondo los beneficios… Ahora sé que son muy importantes para mantener la salud en mi familia y que mis hijos tengan un buen desarrollo” (Anónimo, comunicación personal, 19 junio, 2021.
P52: “Uno a veces por las ocupaciones les da el celular a los niños y no está pendiente de ellos… considerando los peligros que nos han expuesto en el taller, de ahora en adelante estaré más pendiente de la información que revisen mis hijos” (Anónimo, comunicación personal, 12, junio, 2021.
El taller “Uso y aprovechamiento del tiempo libre” tuvo una mayor acogida, debido a que las condiciones de la pandemia causaron que los niños permanecieran mayor tiempo en casa, lo que provocó un incremento en el tiempo empleado en el uso de dispositivos tecnológicos y redujo el tiempo dedicado a desarrollar conductas recreativas acordes con la etapa de desarrollo de los menores. El taller resultó funcional en la medida en que propició elementos para que las familias reconocieran la importancia de tener encuentros recreativos con los menores en casa. A continuación, se presentan algunas expresiones de los participantes.
P4: “El encierro nos estresó bastante y hacer este taller fue una oportunidad para salir de la rutina y compartir en casa…además aprendimos nuevas formas de pasar momentos en familia” (Anónimo, comunicación personal, 5, junio, 2021.
P25: “Uno no piensa que el juego es tan importante en la etapa de los niños, ahora trato de buscar más espacios para compartir con mis hijos” (Anónimo, comunicación personal, 5, junio, 2021.
Crianza positiva. El trabajo en el taller "Educando en amor y límites" permitió que los padres y principales cuidadores adoptaran estilos de crianza basados en la escucha y en la reducción de castigos físicos y verbales (gritos, golpes, uso de palabras soeces, entre otros), con el fin de corregir los comportamientos inadecuados, priorizando de esta manera el uso del reforzamiento positivo de conductas adecuadas. Frente a este taller, los padres manifestaron que el conocimiento y el uso del estilo de crianza democrático les permitió mejorar la relación con los menores al establecder acuerdos en conjunto, lo que mejoró la dinámica familiar. En coherencia con lo anterior, las familias reportan lo siguiente.
P31: "Uno como papá muchas veces utiliza métodos de crianza que tal vez no son muy adecuados… esta información me ayudó a comprender varias cosas" (Anónimo, comunicación personal, 12, junio, 2021.
P56: "La información de cómo criar a los hijos sin la necesidad de usar castigos físicos es muy buena porque siento que eso permite que uno tenga mayor confianza con el niño y que lo escuche los consejos que uno le brinda como papá" (Anónimo, comunicación personal, 12, junio, 2021.
El taller de comunicación asertiva permitió que las familias mejoraran sus habilidades para generar vínculos mediados por la confianza y el respeto, facilitando así la expresión y comprensión de sentimientos y pensamientos de cada miembro de la familia, lo cual tuvo un impacto positivo en la dinámica familiar en medio de la contingencia sanitaria del COVID-19. En consonancia con lo anterior, se retoman algunas apreciaciones de los padres.
P45: “Ahora entiendo que la forma de decir las cosas a los hijos, afecta en la respuesta que ellos dan y puede afectar de forma positiva o negativa la relación” (Anónimo, comunicación personal, 12, junio, 2021)
P16: “Trato de mejorar mi comunicación con mi hijo, el taller a uno le hace reflexionar sobre los errores que uno comente sin darse cuenta” (Anónimo, comunicación personal, 5, junio, 2021)
La ejecución del programa virtual en las familias, en el marco de la emergencia sanitaria por COVID-19, arrojó resultados favorables en tanto se logró afianzar elementos teóricos y prácticos de los componentes de entornos protectores y crianza positiva, lo cual aportó al sano desarrollo de niños, niñas y adolescentes de la institución educativa. Lo anterior fue posible gracias al trabajo mancomunado entre el área de psicología y la comunidad.
Discusión y conclusiones
Considerando la importancia de los programas de escuela para familias en las instituciones educativas, en el presente estudio se buscó proporcionar espacios de acompañamiento para afrontar la pandemia en los contextos familiares, mediante la implementación de un programa virtual, salvaguardando así la salud de la comunidad. En coherencia a lo anterior, Rodríguez (2021) refiere que debido a la aparición del virus COVID-19 fue necesario realizar ajustes en la modalidad de aplicación de estos programas, incluyendo y construyendo estrategias que permitan brindar una ayuda a las familias a través de espacios virtuales, orientando a los cuidadores en su rol de padres y potencializando competencias para educar desde casa. Por su parte, Tupac et al. (2020) manifiestan que la virtualidad contribuye de manera positiva al desarrollo de un programa de escuela de padres durante la pandemia.
Los resultados obtenidos indican que las TIC son una buena estrategia a la hora de implementar programas de escuela para familias en modalidad virtual, ya que facilitan procesos de psicoeducación que contribuyen a fortalecer el rol de las familias en el sano desarrollo de niños, niñas y adolescentes, al hacer uso de diferentes recursos virtuales que permiten a los participantes conectarse desde cualquier momento y lugar, ajustando así su ritmo de aprendizaje. En consonancia con lo anterior, Vásquez et al. (2020) y Rodríguez (2021) resaltan que las TIC son herramientas idóneas para derribar barreras entre escuela y familia, pues le permiten a los padres una mayor flexibilidad al participar en estos programas y ofrecen la posibilidad de que ellos mismos sean quienes ajusten el tiempo para desarrollar las temáticas y actividades propuestas de estos espacios.
Si bien las TIC son una estrategia muy útil para ejecutar estos programas, pueden existir barreras de acceso en la población. En el presente estudio, se evidenció que algunas familias no contaban con conexión estable a Internet, lo cual dificulta desarrollar los talleres de forma sincrónica y hace necesario recurrir a una modalidad asincrónica, esto con el propósito de garantizar que la información llegue a todas las familias y que la comunidad tenga condiciones homogéneas al ser partícipes del programa. En consonancia con lo anterior, Rodríguez (2021) encontró en su estudio que las TIC resultan una estrategia apropiada para implementar programas de formación a padres y principales cuidadores en modalidad virtual; sin embargo, resalta que es posible que existan barreras de acceso, lo cual puede dificultar el proceso de implementación de estos espacios.
A pesar de las limitaciones expuestas, los padres de familia calificaron de forma positiva el programa, en razón a que les permitió aprender diferentes elementos relacionados con fortalecer entornos protectores para los menores, de la mano con una crianza basada en el amor y respeto, lo cual aporta de forma significativa al sano desarrollo de los niños, niñas y adolescentes. En su estudio, Lopez (2010) menciona que los espacios virtuales del programa de escuela para familias son percibidos como un medio útil y rápido para informarse acerca de los elementos que se deben tener en cuenta a la hora de educar a los menores y la manera de aplicar lo aprendido en la cotidianidad.
Se concluye que resultó funcional la implementación del programa en modalidad virtual, en cuanto permitió derribar la barrera entre escuela y familia, ya que facilitó llegar a los hogares en medio de la contingencia sanitaria COVID-19 y logró una participación activa de las familias. Lo anterior, considerando que los participantes recibieron y transmitieron la información del programa, desarrollaron las actividades prácticas, expresaron sus inquietudes sobre la información suministrada y brindaron retroalimentación del proceso llevado a cabo.
Adicionalmente, es importante resaltar que la mayoría de las familias tuvo una percepción positiva sobre el desarrollo del programa, y enfatizó en su importancia y aplicabilidad en eventos de la vida cotidiana. Los aprendizajes que más se destacaron fueron la promoción de ambientes basados en la tolerancia y el respeto, el manejo apropiado del tiempo libre y el establecimiento de conductas saludables en familia, lo que permitió cumplir con el objetivo de fortalecer el sano desarrollo de los niños, niñas y adolescentes de la institución educativa en medio de la pandemia.
Teniendo en cuenta los rápidos progresos en cuanto a la construcción y elaboración de herramientas virtuales, es importante que futuros investigadores identifiquen estos avances al momento de crear material audiovisual para implementar programas en modalidad virtual.
Adicionalmente, se recomienda realizar procesos de sensibilización con la población antes de implementar el programa, esto en aras de lograr un reconocimiento de su importancia e incrementar la motivación a participar en estos espacios.