I. Introducción
PENSAR en educación requiere tener una mirada global que permita abarcar todos los elementos que esta encierra. Con el pasar de los días y con los avances que se dan en la sociedad en general, se hace indispensable contemplar la educación como un espacio de desarrollo no solo académico sino también personal, social y emocional, que le permita a un individuo el desarrollo de las competencias necesarias para asumir los retos que la vida ofrece [1].
La educación ha jugado un papel muy importante en la sociedad, de donde se desprenden muchas relaciones que no son solo académicas; también se involucran otros aspectos del ser humano, como el reconocimiento del ser, la forma de solucionar los problemas cotidianos, el cómo enfrentar los retos que se le presentan dentro de la realidad constante que vive, y todas estas acciones le permiten cambiar su realidad, mejorar sus condiciones y potencializarse de manera individual y social [2].
Desde las entidades promotoras de la educación, se busca proponer alternativas que apunten a subir el nivel educativo. Es el caso del Ministerio de Educación Nacional, “que trabaja para que la educación sea la principal herramienta de transformación social cumpliendo estándares de calidad” [3], razón por la que se está en constante búsqueda y reflexión sobre las diferentes formas de abordar el tema.
Son muchas las propuestas que han salido desde las diferentes organizaciones, grupos o personas relacionados con la educación, y aunque cada una de ellas tiene sus puntos positivos, es necesario revisar sus características, para tomar de ellas lo que más favorezca a la comunidad educativa en la cual se va a implementar [4].
De esta manera, para los docentes se convierte en un reto diario la búsqueda de diversas formas de afrontar los procesos educativos, debido a que los estudiantes de hoy en día ven y piensan la vida de una forma diferente. Esto sin desconocer que cada ser humano tiene un contexto y una realidad distinta, elementos que indiscutiblemente son factores importantes a tener en cuenta [5].
Todo esto nos lleva a contemplar que el docente, “en su quehacer pedagógico, debe explorar los diferentes caminos y rutas para desarrollar procesos educativos pertinentes y acordes a las realidades y necesidades de los sujetos en formación” [6] entendiendo la complejidad de la labor que desempeña y todos los componentes que debe integrar para conseguir el alcance de los resultados esperados.
Este trabajo entrega la sistematización de un proceso de revisión y análisis de una obra de literatura universal, situada en la experiencia de un profesor universitario, y los logros en términos de aprendizajes significativos con su propia experiencia y la de sus estudiantes.
El proyecto de investigación parte de la obra El Principito, y es seguido de una serie de reflexiones y análisis de los aprendizajes logrados como lecciones aprendidas e incorporadas como victorias tempranas en las clases; la visualización se da en un contexto de la investigación interdisciplinaria desde un programa de investigación que lleva más de 10 años de trabajo en búsqueda de una sistematización y una ampliación de ciencias y disciplinas en las cuales se pueda desarrollar; posteriormente, se presentan algunas discusiones con los resultados obtenidos para finalizar con unas conclusiones.
II. La investigación
Sobre el programa de investigación
Desde el año 2012 se ha considerado el interés por problematizar sobre los modelos educativos que subyacen en las obras literarias universales; pero dado el alcance en términos de cantidad de obras, posibilidades de modelos e implementación de los mismos, se hace necesario concebir un programa de investigación como el “conjunto articulado y coherente de proyectos y actividades de CTei orientado a dar respuesta a las necesidades y problemas nacionales e internacionales complejos desde una perspectiva interdisciplinaria, interinstitucional y/o intersectorial” [7].
En tal sentido, es necesario que se comprenda esta investigación como una estrategia genérica pensada inicialmente para problematizar la educación, la literatura y la tecnología, en la búsqueda de la creación y el desarrollo de prácticas de clase que apunten al análisis, la reflexión y la apropiación de situaciones cotidianas que sean aplicables dentro de un grupo de educación en ingeniería, de manera que puedan verse reflejadas en un aumento positivo de los resultados académicos de los estudiantes.
Con el programa de investigación se pretende encontrar la posible influencia de los modelos educativos en la sociedad en comparación con el aporte que pueda lograr la literatura. Se trata de obras literarias importantes, como forma de arte, que pueden tener un impacto significativo en la forma en que las personas ven y comprenden el mundo; y en la forma en que aprenden lo que tienen que aprender para ser mejores desde sus propias realidades y posibilidades.
El programa de investigación comprende todos los enfoques y, en cada caso, su propia rigurosidad científica. Esto resulta claro, pero no necesariamente sencillo, por los sistemas complejos que entretejen la propuesta, dado que “la sociedad es un sistema complejo, y dentro de él, la educación se constituye en otro sistema, con una complejidad propia” [8]. Por ende, al ser la educación un problema complejo y multifacético, no puede ser comprendido desde una sola disciplina o campo de estudio.
En tal sentido, el programa de investigación se sustenta desde un enfoque interdisciplinario que procura “establecer una relación o intercambio íntimo de principios, métodos y conceptos entre disciplinas diferentes” [9], para lograr conocimiento y pensamiento más amplio sobre el campo investigado.
En cada situación, la sociedad ha encontrado un modelo educativo para resolver los problemas: “Cada modelo educativo ha respondido a las necesidades de cada época histórica, por lo que se puede concluir que todos, en su momento, brindaron el soporte necesario para el correcto desempeño de los educandos en ámbitos exigentes” [10].
Finalmente, este programa comparte el propósito superior de contribución al campo de la educación desde la literatura universal, con nuevas perspectivas y enfoques para el diseño y la implementación de sistemas de educación más efectivos, que logren aprendizajes más significativos, al tiempo que desarrollen en los individuos más y mejores competencias blandas, como la lectura y el pensamiento críticos, la relación con el otro y con lo otro, y la comprensión de una sociedad que le requiere más instruido para que participe activamente de su desarrollo sostenible.
Por su enfoque, la investigación interdisciplinaria se sustenta en un diseño metodológico acorde a los procesos, y parte de problemas relacionados que permiten dar cuenta de una investigación aplicada a cada campo de estudio. Los siguientes son algunos niveles de análisis que hacen parte del diseño metodológico [11].
Estudio comparativo: Este diseño compara diferentes obras literarias con el fin de identificar similitudes y diferencias en términos de temas, personajes, estructura, estilo, entre otros aspectos. Este tipo de análisis se utiliza para identificar cómo diferentes obras se relacionan entre sí y cómo influyen en el desarrollo de un tema o una idea en cualquier campo disciplinar.
Análisis de contenido: Este se enfoca en analizar el contenido de las obras literarias para identificar patrones, tendencias y temas recurrentes desde una disciplina específica. El análisis de contenido se utiliza para identificar las conexiones entre diferentes obras literarias, textos o contextos, y cómo estos se relacionan entre sí.
Estudio de caso: Este se enfoca en analizar una obra literaria específica y su relación con otras obras literarias, textos o contextos de casos específicos a resolver en una disciplina. En este tipo de estudios se utiliza el análisis intertextual para explorar cómo la obra literaria en cuestión se relaciona con otras obras literarias o problemas disciplinares y cómo se inspira en ellas.
Análisis simbólico: Este se enfoca en analizar los símbolos utilizados en las obras literarias y cómo estos contribuyen al significado general de la obra, así como su relación con otros campos de conocimiento. El análisis simbólico suele utilizarse en conjunto con el análisis intertextual para explorar cómo los símbolos se relacionan entre diferentes disciplinas.
Para el caso del programa de investigación, el análisis y la observación son los orientadores del estudio a realizar, con una rigurosidad para la recolección de datos e información, de acuerdo con su alcance, y buscará ceñirse al diseño aplicado. La motivación y el comportamiento de los estudiantes durante las prácticas en clase reflejan una apreciación diferente en la visión de las situaciones cotidianas.
Involucrar en las preparaciones de clase frases, fragmentos o símbolos presentes en el libro El principito permitió darle una mirada diferente a dichos momentos académicos. Combinar la formación humana con el aprendizaje de la ciencia conlleva no solo preparar la mente, sino también el alma.
Pensar en la interacción que se puede producir entre las emociones y el conocimiento, como componentes interactivos de trabajo en el aula, se convierte en un factor que ayuda a aumentar los niveles de participación e interés de los estudiantes durante los espacios educativos.
Después de este proceso, se pretende vincular otras personas expertas que hagan parte de un programa central de investigación, que formulen, desarrollen, transformen, produzcan academia y ciencia en diferentes campos de estudio.
El principito: un proyecto de investigación. Tras la huella de un modelo educativo
Los modelos educativos presentes en las obras de literatura universal pueden proporcionar una perspectiva única sobre cómo se han concebido y practicado diferentes formas de educación a lo largo del tiempo y en diferentes culturas. Puede ser que reconocer esas miradas ahora ayude a recuperar un tesoro perdido en el fondo de la literatura para aprovecharlo como alternativa en las necesidades modernas que enfrenta la educación.
Es aquí donde se busca el valor de la literatura como fuente de información: pero no cualquier fuente, sino una fuente rica y variada de información sobre lo que aprendieron las sociedades y culturas que la produjeron; esto, sistematizado con las herramientas y las posibilidades de hoy, puede llegar a ser analizado y descrito para proporcionar una comprensión más profunda (y más alternativa, si así se quiere) sobre los sistemas educativos históricos, contemporáneos y los nuevos descubrimientos hasta ahora ocultos en la literatura universal.
Diseño metodológico: investigación interdisciplinaria
Los diseños de investigación interdisciplinarios surgen de la necesidad de abordar problemas complejos y multifacéticos que no pueden ser comprendidos desde una sola disciplina. Este diseño permite que diferentes problemas disciplinares puedan ser abordados desde la comprensión de la obra El principito. Es allí donde se establece una ruta para esta investigación que permite configurar el diseño como un modelo de investigación aplicada a cualquier campo de estudio. En este orden de ideas, se desarrolla para el proceso metodológico una serie de momentos. (Los momentos hacen parte de las disciplinas que estén inmersas en el diseño, cada una de ellas generará sus propias preguntas de investigación y alcances). Esto se detalla a continuación.
Momento 1. Análisis literario: Este paso consiste en realizar un análisis detallado de la obra literaria El principito. En este, se analizan aspectos tales como los personajes, los símbolos, el lenguaje y la estructura de la obra, la relación con otras obras literarias y del cine (intertextualidad).
Momento 2. Análisis educativo: Este análisis se enfoca en cómo la obra literaria El principito puede utilizarse como recurso educativo para comprender procesos de calidad educativa, formulación de planes de estudio, resultados de aprendizaje, competencias, etc.
Momento 3. Análisis deontológico y ético: Este análisis consiste en abordar la obra El principito como herramienta para la comprensión de valores y normas éticas presentes en la construcción de ciudadanía.
Momento 4. Análisis psicológico: Este análisis se enfoca en cómo la obra literaria El principito refleja la psicología de los personajes y los temas psicológicos que se abordan en la obra, como la identidad, la autoestima y la pérdida.
Momento 5. Análisis sociológico: Este análisis se enfoca en cómo la obra literaria El principito refleja la sociedad de su época y cómo la sociedad influye en la forma en que los personajes interactúan entre sí.
La idea de investigación
Siendo adulto, un profesor de universidad le encuentra sentido a hacer las tareas que no hizo siendo niño. Allí se encuentra con “El principito” y emprende un viaje de investigación sobre la obra literaria y el aprendizaje significativo en la educación superior.
III. Análisis logrados a partir de la investigación con El principito
Con el pasar de los años las prioridades en la educación han venido cambiando y, por eso, algunas estrategias educativas se han planteado con el fin de apuntar y abarcar las nuevas tendencias que se generan en la actualidad. Por esta razón, “se planea teniendo en cuenta las necesidades reales de los sujetos” [12].
Todas aquellas propuestas que buscan trascender los procesos pedagógicos y que llegan a direccionar la educación deben estar en constante renovación, en aras de estar actualizadas, teniendo en cuenta las prioridades que presenta la sociedad en su proceso de desarrollo [13].
Una de las propuestas realizadas para mejorar los ámbitos educativos es el enfoque “STEAM, que se fundamenta en la necesidad de apostar por las ciencias (S), la tecnología (T), la ingeniería (E), las artes (A) y las matemáticas (M) de manera transversal e interdisciplinar” [14]. Este enfoque está pensado en integrar varios componentes, con el fin de potencializar este conjunto de ciencias para encarar los avances que presenta la humanidad.
El enfoque STEAM surge como una estrategia de competitividad mundial, que busca darle a la educación un perfil hacia la empleabilidad, por lo cual se pretende desarrollar habilidades como la inteligencia emocional y la flexibilidad cognitiva como parámetros importantes para su desempeño laboral [15].
Por eso “se puede afirmar que el objetivo de la educación STEAM es preparar al estudiante para el mundo del trabajo, formándolo como persona solucionadora de problemas creativos e innovadores” [16], donde no solo se aplique la academia, sino también todas sus capacidades de manera general.
Entonces, imaginemos un niño con muchas inquietudes y en necesidad de un mundo en el cual las pueda compartir; un niño que cuestiona, por ejemplo, su proceso de formación en su casa (B-612) y se dispone a iniciar un viaje por su sistema solar cercano (del B-325 al B-330) para llegar a su destino final (Tierra), donde encuentra interlocutores para sus inquietudes y, a partir de estos, un sentido de vida importante con base en el reconocimiento de su origen [17].
Otra línea de trabajo que fue pensada para contribuir con el desarrollo integral de la sociedad es la transdisciplinariedad, un enfoque que combina diferentes puntos del entorno sobre un tema específico y que se convierte en la forma de articular varios ambientes con un propósito común.
Para complementar lo anterior, se hace necesario combinar el conocimiento para comprender la realidad compleja que vivimos; establecer un dialogo entre las disciplinas, esa es una tarea que se cumple a través de la transdisciplinariedad [18]. El Principito logró dialogar con adultos, muy raros por cierto, cada uno de ellos con diferentes intereses y necesidades, pero siempre intentó leer la realidad a su manera: haciendo preguntas a las que nunca renunció una vez fueron formuladas [17].
Otro de los puntos que se deben contemplar como elemento fundamental de la educación es el desarrollo de las habilidades blandas, puesto que son aquellas que favorecen el comportamiento asertivo del ser humano, y que, aunque no se pueden medir en números, son de vital importancia para garantizar un desempeño adecuado en el ámbito profesional y relacional. El hecho de que las habilidades blandas hagan referencia a las habilidades para la vida y sean importantes para la interacción con otros [19] demuestra la necesidad que hay de desarrollarlas en los espacios académicos.
El Principito todo lo aprendió a partir de preguntas; sus aprendizajes demuestran la importancia del desarrollo de competencias blandas en un mundo de adultos que se demuestran interesados en los aprendizajes que redundan en competencias duras. Sin embargo, y dado que “lo esencial es invisible a los ojos” [17], el aprendizaje significativo del viaje del niño por sus asteroides vecinos concluye en la importancia de lo blando, de lo sutil, de lo humano, y luego lo demás.
También podemos retomar que “las habilidades blandas son un término simple para un conjunto complejo de cualidades personales que ayudan a que un individuo sea un miembro positivo y contribuyente de cualquier organización” [20], por lo cual es totalmente necesario trabajar y potencializar en los estudiantes estas características, de manera que favorezca su desempeño profesional.
Cuando enfrentamos a los estudiantes a situaciones que vienen de lecturas o creaciones hipotéticas, y les pedimos reflexionar sobre la forma en que se debe proceder o actuar frente a algo, son variadas las respuestas que se pueden obtener. Algunas pueden ser más objetivas y cercanas a la realidad, pero también pueden existir otras más osadas o impredecibles que llenan de cuestionamientos y reflejan la realidad que vive cada uno de los seres humanos.
Los procesos académicos deben concebir estos espacios de interacción y discusión con la realidad, para darles a los estudiantes una visión más amplia de la vida y los campos de acción a los que pueden o deben enfrentarse. Los límites son mentales.
El principito: una relación entre la fantasía y el conocimiento
Pensar en la lectura como estrategia de trabajo es algo normal, pero en ocasiones es subvalorada debido a que se convierte en una actividad cotidiana y a veces monótona, por su poca aplicabilidad. Sin embargo, la lectura, desde una visión más amplia, es una estrategia inagotable con la que se tiene la posibilidad de cambiar al texto, a un sujeto y a su propio contexto, además de que permite la creación de otras nuevas posibilidades donde se puede imaginar o intercambiar todos estos elementos [21].
Partiendo de lo anterior, El principito es una obra literaria que ha permitido visualizar desde la perspectiva de un niño la realidad que lo rodea. Si se mira desde esa perspectiva, aplicada al diario vivir, ayudaría a que la vida se viese de forma más sencilla, sin tantas complicaciones, como suelen hacerlo los adultos. Los adultos son muy raros [17], se cuestionaba a menudo el Principito [22].
Reconocer que una historia como la del Principito pueda generar diferentes emociones, visualizar y entender que a través del alma se puede encontrar el verdadero amor, y que desde allí se puede dar el verdadero valor a las cosas [22] son situaciones que llevan a la reflexión y a la validación de las experiencias de vida; son ejemplos que forman y que pueden definir el carácter de los seres humanos.
Entonces, si se quiere dar una explicación a los sucesos narrados en el libro, se vuelve totalmente prioritario reconocer que se necesita de la fantasía y de la capacidad de imaginar para ver con otros ojos dichas situaciones. A veces se encuentran escenas similares a las que se presentan en la cotidianidad, pero, aunque los contextos son diferentes para cada uno, no se puede pretender que todos los seres humanos asuman de igual manera los retos que se le presentan.
Cada una de las experiencias narradas en El principito proporciona la posibilidad de reflejarlas en una situaron real de nuestra cotidianidad. Cada momento narrado puede expresarse como experiencia de vida, por eso “las habilidades blandas tienen una gran repercusión en la efectividad laboral y personal de un individuo” [23], porque permiten desarrollar en los estudiantes capacidades que lo lleven a trabajar en el hoy y a mejorar el mañana.
Desde otra perceptiva, el libro también puede hacer alusión a como a los adultos se les olvida que fueron niños, y llama a un cambio en la visión de la realidad, de forma que el adulto deje de verla desde lo útil y lo operativo, y pase a tener visiones diferentes, más creativas, y que las conecte con el mundo y su cotidianidad [24].
El principito y otras experiencias de viaje que enriquecen el saber
La revisión literaria de una obra como El principito ha llevado a la investigación a descubrir una especie de modelo educativo que subyace no solo en esta obra, sino también en otras reconocidas como de literatura universal.
Cada persona tiene un gusto especial al momento de seleccionar un libro que desea leer. Por esto, hay una variedad en la oferta de libros disponibles, dentro de las cuales se puede encontrar que “los libros de viajes reflejan, en cierta manera, los intereses, las inquietudes y preocupaciones de cada época, cultura y situación implicadas en el itinerario abarcado por el relato” [25], lo que posibilita la creación de una conexión con el mundo a pesar de la distancia.
Pensar que la vida es un viaje nos lleva a darle un toque de sensatez a lo que nos ocurre, contemplar que “el viaje es el deseo de salirse de sí para descubrir al otro” [26] se convierte en una necesidad que tienen los seres humanos de compartir con los que le rodean. Al igual que el Principito, conocer a los personajes de su historia le permitió ampliar su panorama y aprender emociones nuevas que no habría podido descubrir solo, parámetros que fueron abarcados con los estudiantes de ingeniería.
Cada una de las experiencias de vida que se tienen generan un aprendizaje; de igual manera los libros que se leen transmiten vivencias diferentes, enmarcadas en las características de vida de sus personajes. Así como en el libro Los viajes de Gulliver [27] el protagonista se enfrenta a seres diferentes en cada uno de sus recorridos, también el Principito tuvo que reconocer comportamientos distintos en cada uno de los lugares a los que llegaba. Y si este escenario se aplica en la vida real, el solo hecho de compartir con otros ya genera confrontación entre lo que se piensa y lo que se siente.
Casi siempre que se lee una obra que se considera un clásico, se hace necesario leerla varias veces, y cada vez que se lee se aprecian detalles diferentes en su contenido, puesto que con el paso del tiempo se adquiere mayor madurez y mayor conocimiento que hace que se interpreten los mensajes de forma distinta [28].
Por su parte, si se comparan dos obras literarias, Don Quijote de la Mancha [29] y Los viajes de Gulliver [27], se pueden encontrar dos contextos que pueden ser a veces similares y a veces inversos, “mientras uno va de la locura a la cordura, el otro parte de la cordura para acabar loco” [30]. Esto refleja que a veces las condiciones de los sucesos que se viven pueden ser asumidas dependiendo de las particularidades que se tengan en el momento.
Entender que los libros nos ofrecen la posibilidad de conocer el mundo no es sencillo, no todas las personas están dispuestas a sumergirse en un mundo de lugares que no reconoce. El libro de Los viajes de Marco Polo describe vivencias durante 17 años y cómo termina en la cárcel por situaciones políticas de la época. Escribir un libro contando sus historias le permitió sobrellevar la realidad del momento [31].
El principito y su apropiación para mejorar el aprendizaje
Ahora bien, si se hace la tarea de buscar formas de trabajo que incluyan o encierren todos estos componentes requeridos por el entorno académico y laboral, el libro El principito se convierte en una herramienta potencial que abarca diferentes perspectivas y posibilidades, de manera que fortalece en el ser humano las competencias necesarias para desenvolverse en todos los ámbitos en que se desempeñe.
Todo enseña y cada uno decide lo que aprende. El Principito recibió del zorro un gran mensaje con aprendizaje significativo para la humanidad: “no es la rosa, es el tiempo que perdió con la rosa” [17], metáfora que, al ser trasladada y apropiada en un modelo educativo, lleva a un sinnúmero de líneas interpretativas, como, por ejemplo, el tiempo que estuvimos con los estudiantes, el tiempo que pasamos leyendo, el tiempo que “perdimos” con la familia; un tiempo perdido que recobra la significancia de que lo que la persona consideró que era perdida y termina siendo su gran tesoro.
Pensar en la lectura nos lleva a contemplar las diversas posibilidades que se tienen: por su placer y gozo intelectual se requiere de concentración para poder darle sentido a lo que se lee, además ayuda a conectar nuestros conocimientos previos con nuestras emociones y opiniones [32]. Esto prueba que los procesos de lectura permiten ir más allá de comprender el mensaje, se tiene también la posibilidad de aplicarlo en la cotidianidad y de reflexionar sobre las diferentes formas de actuar partiendo de dichas experiencias.
Dentro de las tareas de los docentes está la de incentivar en los jóvenes el amor por la lectura, con el fin de llevarlos hacia la comprensión y el desarrollo de habilidades competenciales; por esa razón, fortalecer la imaginación por medio de la literatura se vuelve una posibilidad real para el alcance de dicho propósito [33].
El libro El principito encierra una variedad de temas en su contenido, y cada uno de ellos permite hacer una conexión con alguna área específica del conocimiento: hablar de asteroides, de plantas, de negocios, estrellas, ciudades, mares, entre otros. Esto permite realizar una visualización desde el enfoque STEAM, pues son factores que ayudan a potenciar el conocimiento.
Pero el libro no solo hace referencia a temas concretos, también hace alusión a algunas emociones, como la vanidad, la melancolía, y hasta el amor, lo que permite realizar un trabajo desde la parte emocional: “la obra literaria nos ofrece la oportunidad de ejercitar la inteligencia interpersonal, que consiste en conocerse a uno mismo” [34], lo que también es prioritario para enfrentar los retos a los que estamos expuestos todos los seres humanos.
Una de las partes que es pertinente resaltar del libro es la que hace referencia a que el Principito “nunca olvidaba una de sus preguntas” [17], pues esta es una de sus principales fuentes de búsqueda de información. Preguntar lleva a investigar, a consultar y a concretar conceptos específicos; este proceso aumenta el nivel de curiosidad y genera cada vez más interrogantes.
Además, en la lectura de El principito nos encontramos con realidades que reflejan la falta de interacción y el aislamiento social que invade nuestra sociedad, cuando dice: “los hombres ya no tienen tiempo de conocer nada; todo lo compran ya hecho. Y como en las tiendas no se venden amigos, los hombres ya no tienen amigos” [17]. Este un reflejo de la soledad con la que las nuevas generaciones pueden sentirse identificadas. Los juegos, las redes sociales, la tecnología absorben cada vez más los espacios de socialización y convierten a las personas en seres apáticos para compartir y establecer vínculos con los demás.
IV. CONCLUSIONES
Es importante reconocer que leer una obra una y varias veces permite adquirir la facultad de hablar de ella, así como las competencias de la lectura y el pensamiento críticos, a partir de los aprendizajes instalados. El principito es una obra que, en términos filosóficos y metafóricos, narra situaciones que permiten dejar instalados muchos aprendizajes en clave del lector. Leer una obra un número plural de veces permite encontrar mensajes directos y, a la vez, el trasfondo de lo que pudo haber sido el propósito al escribirla [35]; permite reconocer, por ejemplo, la manera como [17] descarga una serie de pensamientos que, al ser manifestados por escrito, permiten, en sentido ecocrítico, reconocer la estrecha y enorme relación del hombre con la naturaleza.
Contemplar este libro como una estrategia de trabajo en el aula se convierte en una posibilidad que agrupa diversas formas de ver la realidad, permite convertirla en una experiencia real y cotidiana, y brinda herramientas que ayudan a fortalecer el criterio y la adquisición de las habilidades blandas necesarias para una completa formación como ser humano integral. Así, se logra mayor incorporación y apropiación de lo que ocurre en el aula por parte de los protagonistas del aprendizaje -educador y educandos-, y se logra aprender más y mejor de ciencia, de literatura, de humanidades y de los campos de estudios que configuren el propósito de aprendizaje del momento [36].
Un niño como el Principito, que nunca renunció a una pregunta una vez la formuló, evidenció también una calidad de vida que, en forma de viajes, determinó la calidad de su pensamiento. Esto va en la línea de [37], cuando describe que “La calidad de nuestro pensamiento, a su vez, la determina la calidad de nuestras preguntas, ya que las preguntas son la maquinaria, la fuerza que impulsa el pensamiento. Sin las preguntas, no tenemos sobre qué pensar. Sin las preguntas esenciales, muchas veces no logramos enfocar nuestro pensar en lo significativo y sustancial”. En tal sentido, llevar una obra como El principito al aula permitirá abrir la puerta a un sinnúmero de preguntas, siempre más preguntas, porque las respuestas dependerán de la calidad de estas. Es decir, las respuestas podrán llegar, inclusive, con las mismas preguntas. Por ejemplo “¿Y cuál es la consigna? ¡La consigna es la consigna!” [17].
Desde la perspectiva de la transdisciplinariedad, El principito permite retomar las realidades que cada uno tiene, ayuda a combinar aprendizajes en aras de facilitar los procesos educativos, debido a que integra saberes y busca su aplicabilidad mediante la combinación de muchos elementos para conseguir mejores resultados. La transdisciplinariedad busca aplicar procesos más productivos, donde el estudiante parta desde sus propios conocimientos, construya y resuelva sus problemas cotidianos con mayor facilidad.
“En Colombia se entiende la educación, en términos de competitividad, como estrategia para lograr una formación integral” [38], razón por la que algunos enfoques educativos como la transdisciplinariedad y el STEAM están enfocados en priorizar las necesidades que el medio actual requiere, no solo en el ámbito académico y de desarrollo de las ciencias, sino también en esa parte humana y de relación con los demás que forma a un ser completo, con lo cual se reconoce que la educación no se basa solo en contenidos académicos; es ante todo un espacio de reflexión y de análisis de la cotidianidad, que ofrece visiones diversas de la realidad.