Introducción
La estructura de la educación superior es primordialmente disciplinar (1). Por eso el análisis desde el aporte de un campo del conocimiento a un sector económico o ámbito social es pertinente cuando se evalúa la extensión de su apropiación con el fin de entender cómo este contribuye al desarrollo de una región o país. También se justifica según los cuestionamientos sobre la pertinencia y calidad de la educación superior en Latinoamérica (2).
El caso del sector rural colombiano es un campo fértil para explorar la pertinencia disciplinar por varias razones. Las grandes brechas entre el campo y la ciudad son históricas; se evidencian aún hoy en día por las cifras de pobreza monetaria y pobreza multidimensional (tabla 1). Adicionalmente, las mediciones de rezago escolar, bajo logro educativo y analfabetismo sugieren la afectación al futuro por el mantenimiento de la exclusión educativa y social si no se cambia la situación (3).
Por lo tanto, las diferencias entre el campo y la ciudad en Colombia no pueden ser insensibles a ningún área del conocimiento, sobre todo cuando para obtener la autorización para el funcionamiento de cualquier programa académico de educación superior es necesario justificar las necesidades que se tienen en el país o región e identificar sus relaciones con el sector externo y la manera cómo impacta en la sociedad (4). En este contexto, y según las cifras citadas, la situación rural no puede pasarse por alto, especialmente en aquellas áreas que tienen vínculos explícitos con la producción primaria, como lo son las ciencias agrarias.
Este es el caso de las ciencias veterinarias (CV), categorizadas en el país dentro de las ciencias agrarias o agrícolas (1,5). De acuerdo con el Ministerio de Educación Nacional, el núcleo básico del conocimiento (NBC) Medicina Veterinaria se compone de dos disciplinas universitarias, la medicina veterinaria y la medicina veterinaria y zootecnia. Además, contiene programas de los niveles tecnológicos y de posgrado, este último de especialización, maestría y doctorado (1). Sin embargo, esta categorización del NBC Medicina Veterinaria no es universal, y por ende debe tener significados singulares y fundamentales en su aplicación en la sociedad colombiana y en las responsabilidades de las actividades de los servicios veterinarios en el país (6), que son bienes públicos mundiales los cuales deben ser considerados en el establecimiento de financiamientos públicos (7). En conclusión: tienen que desempeñar un papel fundamental en la reducción de la pobreza rural colombiana (8).
Los aportes sociales de las CV están documentados en Colombia, lo que es coherente con la percepción que tienen los profesionales de que la veterinaria es un motor para el desarrollo (9). Por otra parte, se carece de información sistemática sobre el comportamiento disciplinar a través del tiempo para visualizar la participación de las CV en las acciones para el progreso nacional (10). Entonces, la comprensión sobre qué y cómo están contribuyendo las disciplinas veterinarias a la ruralidad colombiana puede aportar información útil para retroalimentar a las instituciones educativas y de investigación para integrar acciones que den respuesta a los nuevos retos, como el que representa la propuesta de una reforma rural integral (11).
En el presente trabajo, la contribución de las CV a la ruralidad colombiana se evaluó mediante dos criterios: primero, por medio del aporte a la generación del conocimiento a partir de la capacidad nacional de investigación y la producción de nuevo conocimiento rural; segundo, a través de la visibilidad de las relaciones de las CV con la ruralidad en el contexto nacional, manifestada por la atención pública establecida del análisis de las tendencias de búsqueda de los usuarios de internet en Colombia (12).
Materiales y métodos
Evaluación de la generación del conocimiento
La capacidad nacional de investigación de las CV se aproximó a través de búsquedas en la base de datos de la plataforma ScienTI-Colombia, que pertenece a la red pública internacional ScienTI, la cual contiene información de currículos, grupos de investigación e instituciones (5). Las bases de datos consultadas fueron las hojas de vida de grupos (GrupLAC) con el fin de identificar los grupos de las CV registradas en julio de 2016.
Para entender en mayor profundidad su alcance científico, la consulta se amplió al concepto de grupo orientado por las CV, en extensión a aquellos categorizados en área del conocimiento CV. En consecuencia, se consultó la base de datos de los currículos de los investigadores -Currículum Vitae para Latinoamérica y el Caribe (CvLAC)- y se incluyeron los grupos que evidenciaban como líder a un profesional de la medicina veterinaria (MV o MVZ) o que estaban adscritos a un programa de pregrado/posgrado de CV. Se registraron las siguientes variables: nombre del grupo, año de creación, lugar (ciudad y departamento), área de conocimiento, Programa Nacional de Ciencia y Tecnología, número actual de integrantes, número actual de integrantes con dedicación de tiempo completo (mínimo 40 horas semanales), líneas de investigación y título de pregrado y posgrado (universitario, maestría, doctorado) del líder. Los datos fueron compilados en una hoja de Excel y se analizaron mediante gráficos y tablas dinámicas para determinar estadísticos descriptivos. Se realizó análisis de varianza (Anova) (IBM SPSS) para contrastar las variables.
La producción del nuevo conocimiento que contribuye a la ruralidad colombiana se identificó por la producción bibliográfica comprendida en 2006 y 2016, evidenciada en las secciones "Artículos publicados", "Libros publicados" y "Capítulos de libros publicados", en el GrupLAC de cada grupo. La información registrada se evaluó, analizó, filtró y complementó a través de la consulta en motores de búsqueda y bases de datos (Cabi, EBSCO, Google, Google Scholar, Latindex, Publindex, PubMed, Scielo y Scopus) y los sitios de las revistas y libros. Se realizó la lectura de las publicaciones o resúmenes para evidenciar su contribución al área rural colombiana de acuerdo con dos criterios: 1) trabajo realizado en el campo rural nacional; 2) relación directa para entender o responder a una problemática rural nacional. Se excluyeron revisiones de estudios, duplicados dentro de los grupos y publicaciones que no pudieron verificarse.
La información se clasificó según la naturaleza del conocimiento en las categorías: ambiental, bienestar animal, comportamiento, desarrollo rural, educación, epidemiología, política, producción, salud animal y salud pública. En el caso que correspondiera a dos o más, se seleccionó la que definiera el efecto principal.
Visibilidad de las relaciones de las ciencias veterinarias con la ruralidad colombiana
La medición de la actividad en internet puede ser un indicador dinámico y significativo de la intensidad de las relaciones de la práctica de las CV con la ruralidad colombiana, como resultado del interés público motivado por el efecto de dicha práctica (12). Con el fin de explorar esta relación, se realizaron consultas a través de Google Trends de los términos de búsqueda "veterinaria AND rural", "veterinaria rural" y "medicina veterinaria", y los criterios "Colombia", intervalo de tiempo 2006-2016 y "Todas las categorías". También se consultó el motor de búsqueda Google utilizando las palabras claves "veterinaria" y "veterinaria, rural" con la restricción "País: Colombia", en ventanas temporales anuales julio-junio en 2006-2016. Para entender los motivos que llevaron a la publicación y consulta por estos temas, individualmente se revisó el encabezado y las dos primeras líneas de los resultados del periodo 01/06/2016-30/06/2016, siguiendo los criterios: "Todo resultado", "País Colombia", "Cualquier idioma", "ordenados por fecha" y "Todos los resultados". Los datos se analizaron mediante tablas y gráficos para determinar estadísticos descriptivos.
Adicionalmente, se profundizó en la consulta de las páginas del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR) (13), entidad responsable de la formulación, coordinación y evaluación de las políticas nacionales del sector agropecuario y el desarrollo rural, y del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) (14), entidad adscrita y responsable de la sanidad animal y la inocuidad en la producción primaria.
Resultados
Capacidad de investigación de las ciencias veterinarias en Colombia
En julio de 2016, la plataforma ScienTI-Colombia (1) registraba 4638 grupos de investigación divididos en seis áreas del conocimiento (figura 1), entre los cuales 249 correspondían a ciencias agrícolas, la cual era, de todas, el área menos representada (5,4 %).
Fuente de datos: Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias). Plataforma ScienTI-Colombia [internet] 2016. [citado 2016 jul 5]. Disponible en: http://www.colciencias.gov.co/scienti
Dentro de las ciencias agrícolas, en el área CV se registraron 68 grupos (27,3 %), la segunda más frecuente después de agricultura, silvicultura y pesca (58,6 %), por encima de ciencias animales y lechería (5,6 %) y biotecnología agrícola (2,8 %). A su vez, representaba el 1,47 % del total nacional, en una relación de aproximadamente 1:5 con las áreas más conspicuas (> 300 grupos): economía y negocios (8,6 %), medicina clínica (8,5 %), ciencias biológicas (7,7 %) y ciencias de la educación (7,5 %).
Al acceder a las páginas de los grupos (GrupLAC) a través del filtro del Programa Nacional de Ciencia y Tecnología, la consulta arrojó 62 vínculos para el área de las CV. Se identificaron, además, 23 grupos pertenecientes a otras áreas (agricultura, silvicultura y pesca; ciencias animales y lechería; ciencias biológicas, y otras ingenierías y tecnologías) con líderes profesionales de la medicina veterinaria (MV y MVZ) y otros seis que no habían sido incluidos en los dos filtros anteriores, pero que pertenecían a un programa o facultad de las CV (en las áreas de otras ciencias agrícolas, ciencias animales y lechería, agricultura, silvicultura y pesca). Como resultado, se contabilizaron 91 grupos orientados por las CV de los 395 listados en el programa Ciencia, Tecnología e Innovación en ciencias agropecuarias, como programa principal o secundario.
De los grupos orientados por las CV, 90 de 91 evidenciaron contribución a la ruralidad colombiana a través de sus líneas de investigación y productos. De acuerdo con la figura 2, se concentraron en las capitales de los departamentos, principalmente en las regiones culturales Andina oriental (Boyacá, Cundinamarca, Norte de Santander y Santander) y noroccidente-central (Antioquia, Caldas, Quindío, Risaralda). No se registraron grupos en las regiones culturales Amazonía (Caquetá occidental pertenece a la región Tolima Grande-Centro Antiguo) y Pacífico (15).
Fuente de datos: Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias). Plataforma ScienTI-Colombia [internet] 2016. [citado 2016 jul 5]. Disponible en: http://www.colciencias.gov.co/scienti
Los 90 grupos registraron un total de 1553 integrantes (media = 17,3, mínimo = 3, máximo = 56, desviación estándar = 10,915). No se observó que el número de integrantes estuviera determinado por la antigüedad del grupo (Anova: n = 90; F = 1,282; p = 0,262 > 0,05) o su localización geográfica (Anova: n = 90; F = 0,933; p = 0,560 > 0,05). 38 grupos (42 %) registraron un total de 176 investigadores de tiempo completo, es decir, 11,3 % de los integrantes (media por grupo = 1,9, mínimo = 0, máximo = 24, desviación estándar = 4,049).
Los líderes eran profesionales de medicina veterinaria (44,4 %), medicina veterinaria y zootecnia (22,2 %), zootecnia (17,8 %), biología (4,4 %), ingeniería agronómica (3,3 %) y otras profesiones o que no registraron (7,8 %). En 62 grupos (68,9 %), el líder registró título de doctorado, 24 (26,7 %) de maestría, 1 (1,1 %) de especialista y 3 (3,3 %) universitario.
La contribución de las ciencias veterinarias a la generación de conocimiento rural en Colombia
Se registró un total de 2219 publicaciones rurales entre 2006 y 2016 de los 90 grupos orientados a las CV (media por grupo = 24,9; mínimo = 1; máximo = 198; desviación estándar = 30,6), y entre estas se identificaron 79 duplicados, por haber sido registrados por más de un grupo. Aunque se observó diferencia significativa en los grupos a través del tiempo (Anova: n = 90; F = 2,61; p =0,001 > 0,05), el número de publicaciones por grupo no estuvo influenciado por el de sus integrantes (Anova: n = 90; F = 0,708; p = 0,742 > 0,05), los investigadores de tiempo completo (Anova: n = 90; F = 0,32; p = 0,861 > 0,05), ni la formación del líder (Anova: n = 90; F = 1,993; p = 0,549 > 0,05).
El artículo en revista fue el recurso más utilizado por los investigadores para divulgar su producción rural (91 %), y no se observó cambio en la tendencia a través del tiempo (figura 3). Los investigadores prefirieron los medios nacionales y el idioma español para publicar, y se observó incremento en la publicación internacional en inglés y español entre 2006 y 2015 (figura 4).
Fuente de datos: Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias). Plataforma ScienTI-Colombia [internet] 2016. [citado 2016 jul 5]. Disponible en: http://www.colciencias.gov.co/scienti
Fuente de datos: Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias). Plataforma ScienTI-Colombia [internet] 2016. [citado 2016 jul 5]. Disponible en: http://www.colciencias.gov.co/scienti
La temática rural más publicada en 2006-2016 fue producción (48,2 %), principalmente en genética y mejoramiento animal, acuacultura, tecnologías reproductivas (sin incluir patología) y nutrición y forrajes; seguida por salud animal (19,1 %) con énfasis en diagnóstico; ambiental (13,2 %) por silvopastoriles, biodiversidad, servicios e impactos ambientales, y epidemiología (7,5 %). En la figura 5 se muestra el número de publicaciones anuales por temáticas en el periodo 2006-2015.
Fuente de datos: Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias). Plataforma ScienTI-Colombia [internet] 2016. [citado 2016 jul 5]. Disponible en: http://www.colciencias.gov.co/scienti
Visibilidad de las ciencias veterinarias en la ruralidad colombiana
Las exploraciones "veterinaria AND rural" y "veterinaria rural" no arrojaron resultados en Google Trends debido al bajo volumen de datos, mientras "medicina veterinaria" mostró bajo impacto y ningún tema emergente o relacionado registrado concernió directamente a la ruralidad. Por otra parte, la consulta realizada en el motor de Google en el periodo junio 2006-junio 2016 expuso tendencias ascendentes para los resultados "veterinaria" y "veterinaria, rural", pero también el aumento de la brecha entre las dos (figura 6).
La revisión en profundidad para caracterizar los resultados de la palabra clave "veterinaria, rural" en Google identificó 1310 para junio de 2016, de los cuales desplegó únicamente 433 debido a la similitud entre los resultados. Durante el análisis se descartaron 283 por no contener "veterinaria", por lo cual quedaron 150 (figura 7). De las entradas, 87 (37 %) se relacionaron con "servicios", caracterizadas mayoritariamente por clínicas veterinarias y solamente tres se refirieron a servicios veterinarios en el campo. Les siguió "comercio" con 48 entradas (20 %) relacionadas con establecimientos como: droguerías, guarderías, insumos y peluquerías asociados a un servicio veterinario; en ninguno se observó correspondencia con ruralidad. 33 resultados de "educación" (14 %) se dirigieron a programas académicos, capacitaciones y cursos, y los 29 de "noticias" (12 %) fueron variados.
En el caso de "gobierno", aunque representaron 4 %, se caracterizaron por documentos del MADR y alcaldías en relación con servicios veterinarios rurales. Sin embargo, en las consultas de las páginas de este ministerio (13) no se encontró mención sobre las CV. Por su parte, en el ICA (14), en el área de protección animal, se mencionaban los servicios veterinarios en proyectos y actividades del Instituto y en la sección Normatividad estaban disponibles regulaciones de la actividad profesional en los sectores pecuarios. No se encontraron referencias sobre la educación, proceso o evaluación de la prestación de los servicios veterinarios, la legislación veterinaria nacional o el Consejo Profesional de Medicina Veterinaria y de Zootecnia de Colombia (Comvezcol).
Discusión
Los propósitos formulados para la realización del estudio se cumplieron. Las consultas arrojaron información sobre la generación del conocimiento y la dinámica social de las CV en el país con aplicación rural, lo cual demuestra la influencia de las disciplinas que amplían la comprensión del ejercicio y pertinencia de las profesiones (9). Sin embargo, el interés público y de las entidades públicas fue limitado, lo que sugeriría que no se percibe el impacto que podría tener la práctica de las CV.
En el contexto de la infraestructura investigativa registrada por Colciencias (5), las CV parecerían tener un peso bajo, pero hay que resaltar que el 98,9 % de los grupos estudiados registraron publicaciones en el ámbito rural colombiano. Desde el punto de vista de generación del conocimiento para el sector, quizás una de las preocupaciones más importantes es el bajo número de investigadores de tiempo completo por grupo. Esta situación ya había sido registrada para el diagnóstico de zoonosis de origen en vida silvestre (16). Por otra parte, resaltó la interdisciplinaridad de los grupos que derivó en una variada y amplia gama de temas tratados en las publicaciones rurales, así como el nivel de formación de los líderes; 95,6 % registraron títulos de doctorado o maestría.
La presencia de los grupos de investigación por regiones culturales colombianas corresponde a la encontrada para la localización de los programas académicos y la distribución de los profesionales de la medicina veterinaria y la medicina veterinaria y zootecnia. Aquí también hay fuerte presencia en el área andina y preocupa la ausencia en las regiones culturales Amazonía y Pacífico, zonas con problemáticas socioeconómicas y ambientales que requieren el desarrollo de capacidades de investigación e innovación (9).
La divulgación de las investigaciones veterinarias rurales colombianas en 2006-2016 se hizo mayoritariamente en medios nacionales y en español, lo que hace esperar un limitado efecto y visibilidad científica debido a la baja presencia de las revistas colombianas en los índices de citaciones y bases de datos internacionales de mayor relevancia científica, en las que predomina el inglés (17). Sin embargo, más allá de las consideraciones lógicas de índole científica, desde el punto de vista del propósito del presente documento, la pregunta que debe aproximarse es si el nuevo conocimiento generado por los grupos orientados por las CV está contribuyendo a la Colombia rural.
Si se considera que en este estudio la evidencia requería que el trabajo se hubiera realizado en el campo rural nacional y demostrara relación directa para entender y responder a una problemática rural nacional, la respuesta es sí. Sin embargo, hay algunos aspectos que no pueden pasarse por alto, los cuales surgieron durante las consultas y no se evaluaron, pero que podrían limitar el alcance de la información generada para que esté siendo adoptada de manera amplia por el país. Se sugirió en algunos grupos o casos la utilización de las mismas publicaciones recurrentemente, la publicación de una misma investigación en distintos años y con nombres ligeramente diferentes (no se filtraron debido a que eran publicaciones distintas, por lo que se conservaron en los resultados), la repetición de una misma publicación en las citaciones de la base de datos (estas fueron filtradas durante la búsqueda y no se reflejaron en los resultados finales) y la coincidencia de algunas temáticas entre los grupos que podría generar repetición de esfuerzos. Por otra parte, en algunos grupos las líneas de investigación se sugerían muy amplias y vagas, lo que podría distraer el uso de recursos económicos (1).
Un factor positivo importante fue la publicación conjunta entre grupos que demuestran la generación de alianzas y el sinergismo en los propósitos y optimización de recursos en el ámbito nacional por parte de algunos grupos. De todas formas, e independientemente de los hallazgos sobre la generación del conocimiento por las CV colombianas que son importantes para el país, no deja de ser llamativo, a pesar de las limitaciones que puede tener un enfoque disciplinar como el del presente estudio, el moderado interés social hacia la medicina veterinaria, principalmente en lo que se refiere a los organismos públicos. Esto respondería a dos elementos fundamentales:
Primero, entre los objetivos de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) está la promoción de los servicios veterinarios al considerarlos como un bien público internacional y una prioridad en materia de inversiones públicas, ya que son fundamentales en el mejoramiento de la salud animal y humana y la implementación de las normas MSF (7). Colombia es un país miembro de la OIE, y a pesar de que esta se enfoca en la necesidad de trabajar con los cuerpos veterinarios para el aseguramiento de la sanidad de las naciones, no se encontró evidencia en el organigrama del sector agropecuario o las direcciones, áreas, programas o proyectos del MADR y el ICA (entidad nacional delegada ante la OIE) de vínculos y acciones dirigidas al fortalecimiento de la educación y prestación de los servicios veterinarios.
Segundo, y relacionado con el primero, hay debilidad de las relaciones entre Comvezcol con el MADR y el ICA, a pesar de que el Ministerio es integrante de este consejo profesional (18). De esta forma, no fue claro cómo las entidades públicas estarían participando conjuntamente en el desarrollo e implementación de la evaluación de la prestación de los servicios veterinarios y la armonización de la legislación veterinaria con las otras normas nacionales del sector agropecuario, lo que es coherente con lo registrado anteriormente (9).
Entonces, es posible que en la práctica el pensamiento nacional sobre los servicios veterinarios no corresponda a los de la OIE, lo que podría explicarse por la percepción de que las disciplinas agropecuarias no estarían respondiendo a las necesidades de generación de conocimiento y asistencia técnica para el desarrollo rural, por su enfoque primordialmente tecnológico (19). Considerando los resultados del presente estudio, esta tesis podría apoyar a las CV, al menos en parte, al observar que cerca de la mitad de las publicaciones se enfocaron en producción, incluso más del doble de las dedicadas a salud animal. Las temáticas como desarrollo rural (5 %), salud pública (4,3 %), educación (5 %) y política (0,6 %) fueron menos abordadas.
Por consiguiente, y con base en estas consideraciones, es importante para los grupos e instituciones relacionadas con las CV, con el fin de prever su futuro, la revisión de sus agendas en relación con las necesidades nacionales dentro del concepto de una nueva ruralidad para responder a los retos que se proponen para el desarrollo de Colombia (19, 11)
Conclusiones
En el presente estudio se evidenció la contribución de las CV en Colombia. Sus resultados, además de servir a la comprensión sobre qué están aportando y cómo están contribuyendo las disciplinas veterinarias a la ruralidad colombiana, dan información útil para retroalimentar a las instituciones educativas e investigadoras para la planeación e implementación de acciones que busquen responder a los nuevos retos rurales y sanitarios a los que se enfrenta el país.
Es necesario el análisis de la situación y las necesidades del campo colombiano para que los esfuerzos educativos e investigativos generen conocimiento pertinente, aplicable a través de los servicios veterinarios nacionales, y programas de asistencia técnica rural.
Llama la atención el moderado interés del sector público agropecuario por la educación, proceso o evaluación de la prestación de los servicios veterinarios y la legislación veterinaria nacional, y la importancia de integrar estas a las acciones con el organismo veterinario estatutario colombiano Comvezcol, para garantizar la sanidad nacional. Si bien es cierto y comprensible que se realiza la aproximación por cadenas productivas y no disciplinar, en el caso del servicio veterinario esta situación merece revaluarse a la luz de las orientaciones de la OIE.