Introducción
Indonesia es un País al que debe considerársele como líder natural del Sudeste Asiático; es un Estado al que siempre se le escucha y, muchas veces en el espacio de acuerdos regionales, se le sigue en su hoja de ruta trazada. Con una larga historia1, una gran diversidad humana2. y una ubicación estratégica, en medio del paso entre el Océano Pacífico e Índico, entre Asia y Oceanía, la prominencia regional de este país obedece a múltiples razones.
En materia de Relaciones Internacionales, hay elementos que acotar y resaltar. Bajo el espectro de las relaciones Indonesia-Colombia, haciendo uso de la visión geopolítica actual (periferia-periferia), este escenario bilateral está por fuera de las hegemonías del área, China y Japón para Indonesia, por ende, Brasil y E.U. para Colombia3. Estas relaciones bilaterales manifiestan igual un potencial por trabajar a futuro. El espacio de acercamiento entre estas dos naciones genera una oportunidad de mediación entre la población musulmana de Asia y la población cristiana (Católica, Ortodoxa y Protestante) de América, y por lo de acercamiento de civilizaciones, para parafrasear a Huntington (1996).
Además, los dos Países, se encuentran entre los cinco territorios de mayor Biodiversidad en el mundo. Contar con este acervo natural, puede convertirlos en una llave determinante en los organismos multilaterales, Foros y Acuerdos para proponer una defensa a santuarios naturales y políticas con respeto a especies en extinción. Otro elemento para destacar es la ascendencia de Indonesia en el intercambio económico y las relaciones culturales en Asia. La experiencia comercial y cultural de la República de Indonesia frente a los Países de ASEAN (Indonesia, Brunei, Malasia, Thailandia, Filipinas, Singapur, Birmania, Camboya, Laos, Malasia y Vietnam, el Nuevo Milagro Asiático), el reconocimiento del su liderazgo histórico en este bloque debe estimular a Colombia a buscar sinergias con este país amigo, no solo en lo comercial, sino que permitan la sensibilidad cultural para acercarse con resultados positivos y sustentables a estos países. El interés de Colombia de hacer parte del APEC, como miembro en pleno derecho, depende del apoyo de este posible socio estratégico.
Finalmente, a sabiendas de que este es un país proveedor de commodities alimentarios y materias primas de biocombustibles para todo el Asia, es importante conocer más sobre posibles alianzas con empresas de tradición con base en Indonesia y que llevan más de medio siglo comerciando estos productos de manera exitosa en esta parte del mundo, que a diario incrementa el consumo de estos bienes por especializarse en bienes de valor agregado y como en el caso de China, por el movimiento cada vez mayor de población históricamente agraria a las Ciudades satélites.
El artículo se estructura de la siguiente manera. Primero, se presenta una contextualización histórica de la importancia de Indonesia a partir del análisis del descubrimiento de América. En seguida, se presenta una descripción de sus políticas económica y exterior, las cuales han sido coadyuvantes en el desarrollo del país, y se cierra con las potencialidades que ofrece éste como socio estratégico de Colombia en la internacionalización hacia el Asia Pacífico.
El descubrimiento de américa: evidencia de las indias orientales como la despensa del mundo en los siglos XVI AL XVIII
Estaba despegando el metalismo como principio social y se daban los primeros pasos hacia el capitalismo moderno (Wallreinstein, 1983) en un momento de primera modernidad (Beck, 1998). En esta época las Relaciones Internacionales evolucionaban a través de los intercambios de corte regional, el grado de internacionalización era mínimo y hablar de globalización como se manifiesta hoy día, era una utopía (Beck, 1998, 57-64). Se revelaba esta regionalización (de Sousa Santos, 2003, 192-230), por el acercamiento de Europa, con el Norte de África (Magrebh) y con el Lejano y Medio Oriente, a través del mediterráneo. Por otro lado, el Imperio4 dominante y de mayores extensiones geográficas, era el Otomano5.
La milenaria cultura China, más avanzada para entonces que la Europea (Needman, 2003), y gobernaba la Dinastía Ming, y tenía una población de sesenta millones de habitantes y era denominada como “El país de la Seda” 6. Sus comerciantes tenían como punto clave en el intercambio de doble vía al Batán, hoy Indonesia, que hereda su estrategia comercial, procesamiento de la seda (creación de prendas y telas) y técnicas de navegación.
Este periodo se caracteriza por el dominio de los Otomanos (Imperio Turco Otomano), la caída de Constantinopla, a manos de los Turcos Otomanos en Mayo de 1453, el avance en el trasporte marítimo, acompañado por la desvirtualización Patrística sobre la preconcepción del mundo “plano”, y la “carrera” entre los Europeos, para ver cual lograba obtener de primero una ruta alterna que los llevase a obtener especias7 en la Indias orientales. Ampliemos esta estructura histórica.
El entonces Reino de Portugal, sediento de poder, llevaba casi 300 años como reino y su iniciativa en navegación, lo llevó en plena era mercantilista,8 a crear una de las flotillas más poderosas en el mar y convertirse en uno de los reinos más ricos, lo que implicaba tener ejércitos poderosos y bien armados. Procurando llegar a encontrar primero la ruta alternativa hacia las “Indias Orientales”, para comerciar con éxito en Europa la pimienta9, el clavo, nuez moscada, y el jengibre, se tomaron a Ceuta en 1.415. Este lugar desde entonces fue punto de embarque de los esclavos, primero hacia el mismo reino de Portugal y luego hacia el reino de España (que tomo la Ciudad en territorio Marroquí desde 1.640 a la fecha) y de ahí, hacia las “Indias Occidentales”10. En procura de esta ruta, rompen la línea denominada “el fin del Mundo”, finis mundis, ubicada al sur de las Islas canarias, lo que los llevo, con Vasco de Gama en 1.498 a encontrar la ruta anhelada de las Indias Orientales, al doblar el cabo de la Buena Esperanza.
Para el reino de España, este proceso de expansión no le era ajeno a sus intereses. Los moros durante cinco siglos habían tomado gran parte del Reino y durante las primeras cinco décadas del siglo XV se generó la expulsión de estos con el matrimonio de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón y la toma del último bastión árabe, Granada. Encontrar esta otra ruta era vital, más aún, después de la caída de Constantinopla11 a manos de los Turcos Islámicos (1.453), que cerraba el camino a los reinos católicos hacia las Indias Orientales.
Se ataron muchas situaciones frente al descubrimiento, la escasez de algunos productos del consumo diario europeo humano, la búsqueda de un liderazgo comercial y con él, el político-militar. Además, parte del pensamiento histórico encabezado por los nuevos hombres de negocios del mar y algunos políticos de las ciudades-Estado de Italia particularmente, querían avanzar en el espacio racional y geográfico. Frente a este último, hay que anotar la evolución en el conocimiento de la navegación y del paradigma acerca de la tierra plana que implicaba replanteamientos en ambos aspectos.
En la primera materia, la instrumentación de la navegación ya contaba con la brújula, el astrolabio y cartas de navegación, que ubicaban las embarcaciones lejos de costas conocidas. A ello, la entrada de las carabelas hacia 1.440,12 desplazaron los pesados y lentos barcos de remo. Frente a lo segundo,13 los preceptos de la Biblia, como los plasmados en los textos de la Patrística,14 chocaban con los intereses comerciales de los navegantes ya planteados por el tema de las rutas, los viajes hechos por Marco Polo y de los Escandinavos en el siglo XI hacia Norte América.
Cristóbal Colón, vivió en el Reino Lusitano entre 1.481 a 1.485, periodo durante el cual desarrolló y ofreció su proyecto a los Portugueses, quienes lo rechazaron pues la Junta de Notables que estudio el proyecto negaba la redondez de la tierra. La Corona Española revaluó el proyecto y luego de un primer intento fue aprobado. Para el viaje, Colón estudio un documento hecho por el matemático, astrónomo, geógrafo italiano Paolo del Pozzo Toscanell (1.397-1.482), que había avanzado en su intento por crear un mapa y trazar la distancia de las Indias por el lado occidental de Europa, siguiendo los datos de Marco Polo. Este “azar” y esta nueva cartografía, lo trae a la “Española”, hoy República Dominicana y Haití, en principio al llegar y verificando estos datos cartográficos, lo hace pensar que ha llegado a las Indias Orientales y por ello denominó a sus nativos, “Indios”.
Definitivamente, el riesgo era manifiesto en función de la obtención de un camino diferente al de Constantinopla para obtener las especies15, la llamada ruta de Marco Polo, estaba ocupada por los árabes y Otomanos, en tiempos donde no se consideraba la tierra como redonda, se tenía conocimiento del canibalismo en el África y con un dominio militar de la zona, por parte de los Otomanos.
Eran tan diversas y de tanto volumen las especias provenientes del Asia, que, en el Archipiélago de Indonesia, existían las Malucas, llamada Isla de Especias o Maluku (Spice Islands) por la riqueza que manifestaba en ellas y su diversidad. Por entonces era la única región del mundo donde se producían las anheladas nueces de moscada. Además, se obtenían de manera abundante el jengibre, la menta, el azafrán, la pimienta negra, que no solo servían para preparar los alimentos, sino para conservarlos.16 Aunque Cristóbal Colón no encontró el camino estas islas, es evidente que su búsqueda de la Ruta a Indonesia descubrió a América.
Indonesia, un tigre asiático de inagotable de riqueza
Aunque el 2.008 fue para el País un año con un saludable crecimiento del 6%, el 2.009 fue el coletazo de la crisis mundial.17 Sin embargo el Gobierno de Indonesia supo reaccionar con prontitud y eficacia. Ese mismo año, en el mes de marzo inyectó USD 6.300 millones a la economía. Lo hizo por la vía fiscal, donde creó incentivos fiscales a privados y a empresas, como, por ejemplo, la disminución del impuesto de sociedades, que le costó USD 4.800 millones. Redujo precios a commodities de alto impacto en la canasta, como el de los combustibles y a fuentes de la producción en la PYME, como fueron las tarifas de la electricidad, por un monto de USD 400 millones.
Cabe decir, que estas medidas de estímulo fiscal, por la vía del recorte de la carga fiscal, estaban previstos desde antes del periodo de crisis, señalando igual, enmiendas al sistema de impuesto que se gravaban sobre la renta de la persona, bajo un enfoque claro, contribuir a la modernización y eficiencia del régimen tributario y ser base en la competitividad de sus firmas, de manera sustentable.
El sector de las PYMES recibió con el Decreto Presidencial 6 del 2.007, un apoyo a través de la creación del llamado Kredit Usuha Rakyat reconocido como KUR. El mismo es un esquema crédito, donde el Estado hace las veces de garante de estos entes ante la Banca en planes de negocios de estas firmas que garanticen la creación y/o sostenimiento de empleo (Bank Rakyat Indonesia, s.f.). La recuperación de la demanda interna fue una tarea que se gestionó desde la crisis de 1.997 sin dejar de lado el tema social asociado a los Objetivos del Milenio18. En tal sentido, se estableció desde el 2.004 un programa de subsidios de alimentación direccionada a la población más vulnerable. Se masificaron los servicios de salud, igual garantizándolos a las clases más necesitadas del País, ello buscando reducir la pobreza a través del Sistema nacional de Seguridad Social. Con el fin de darle un peso presupuestal sustentable a este propósito, se establece un mecanismo de recaudo de fondos obligatorio, que garantiza el cubrimiento de las necesidades básicas a todos los ciudadanos 19.
Es decir, su estrategia fue a través de medidas anticíclicas desde una posición original de corte fiscal estable, dado que su déficit fiscal por entonces era de alrededor de cero (-0,1%) del PIB 20.
Con el fin de incrementar y estabilizar la demanda interna, además con ello mejorando la competitividad de sus productos invirtió en infraestructura interna por un monto de USD 1.000 millones, sin descuidar sus finanzas, llevó al País a un déficit presupuestario de tan solo el 1,6% del PIB. Esta estrategia que hasta hoy manifiesta, ha blindado la economía de la crisis mundial, logrando que el 60% de su PIB dependa de su reactivada economía interna (Crédito y Caución, febrero de 2011). Bajo esta tendencia su economía logró un crecimiento del 6,1% en el 2010 y del 6,5% en el 2011. Parte de este proceso, se ha debido a la movilización de importantes inversores propios del área, en cuantías representativas. Resalta el caso de capitales provenientes de India. En enero del 2011 varias firmas Indias21 firmaron acuerdos por un monto de USD 15.000 millones, en la procura de mejorar la infraestructura y competitividad en aeropuertos, puertos marítimos, una nueva línea férrea y una nueva fábrica de acero22.
El resultado de la estrategia de recortes fiscales, el apoyo al crédito de las PYMES, EL apoyo a la protección social, logró incrementar el consumo nacional en un 14,5% durante el primer trimestre del 2.009 y un 9,7% para el segundo trimestre del mismo año.
Las fortalezas de la República de Indonesia en el plano Internacional son, por demás, un reconocimiento de su trayectoria, de su privilegiada ubicación y su potencial en materia de commodities a nivel mundial. En materia de Acuerdos, es fundador del Grupo de los 77 (G77), hoy alrededor de 117 lo componen y del Grupo de los No Alineados, lo cual corrobora su liderazgo internacional y del área, como cabeza geopolítica alternativa a la de las grandes potencias.
Esta interacción se refuerza gracias a su relación con China y Japón, grandes consumidores de sus productos a manera de commodities energéticos en cabeza del gas y el petróleo, lo que le permite mantener unos niveles de escala de producción internacionalmente eficientes en estos commodities, a precios igualmente competitivos. Esta atmósfera favorable de relaciones se complementa con la presencia potencial de una de las demandas más abundantes por región, dada en la integración de China con ASEAN (llamado ASEAN+1), que suma aproximadamente 1.800 millones de habitantes, mil más que los 34 países del fallido ALCA, casi la tercera parte de la población total del mundo23.
Es considerada hoy día entre las 20 economías más poderosas del mundo. A sabiendas que varias economías del área están entre las 50 economías más grandes del mundo, sus modelos productivos han dado el viraje especialmente desde la década de los 90s, hacia el sector secundario de alta tecnología e innovación continua, dejando cada vez más su producción primaria, reconversión productiva que ha aprovechado Indonesia y que la ha convertido en una de las despensas preferidas del sudeste asiático. Su potencial parte de su diversificada variedad de commodities, desde los alimentarios hasta los que son base de los combustibles.
En la Isla de Java, se produce y se exporta el azúcar, café, té, cacao, maíz, coco, soja, maní. Algunos de estos productos sirven como materia prima para el resto del sudeste asiático, como el aceite de palma base de los biocombustibles (Biodisel), la caña de azúcar (bioetanol y azúcar refinada), cacao para el chocolate, el caucho para infinidad de productos de la industria liviana y pesada. La gran mayoría de los bosques son propiedad del Estado como en las islas de Borneo y Sumatra, cubriendo casi dos tercios de su territorio. Son fuente de madera en bruto como de teca, ébano, bambú y rota, por ello este País es el primer exportador del mundo de chapa de madera o contrachapado. De igual manera por sus costas, es potencia pesquera. Sus especies el atún, las sardinas, los camarones, la carpa, la caballa. Además, posee una de las refinerías de mayor producción del área y tiene un gran potencial en materia de insumos dedicados a la construcción, como el cemento aparte de la madera como ya se comentó (El Exportador, s.f.).
Indonesia, el socio que Colombia necesita en el centro de la manufactura mundial actual: el sudeste asiático
El devenir de las Relaciones Internacionales y las transformaciones globales han reunido curiosamente a Colombia e Indonesia. En la Ciudad de Bogotá en 1.976, los dos fueron signatarios de la Declaración de la Primera Reunión de los Países Ecuatoriales. En el desarrollo de esta, se determinó que “la órbita geoestacionaria es un recurso natural” solicitándose, por ende, “la soberanía de los estados ecuatoriales sobre los segmentos correspondientes de la órbita geoestacionaria”24.
Luego en la transición del modelo Bipolar ante la caída de la URSS la disuelta Yugoslavia, la Presidencia del Movimiento de los No Alineados por sus siglas NOAL, la ejerció durante 5 años Indonesia, dos más al recibirla del particionado País Báltico. En ese periodo 1.995, durante la reunión de entrega de la Presidencia en Cartagena, Colombia, Indonesia le entregó dicho honor a Colombia. Ello propició que nuestro País trabajara en la agenda con su par asiático en el seno de este organismo durante los tres años de presidencia Colombiana, proceso que conllevó a la visita oficial a dicho País en 1.996. Después, en la ciudad de Cancún en febrero del 2.002, pasaron a ser países fundadores del Grupo de Naciones Mega-Biodiversas Aliadas, donde se reúnen los 12 países que contienen aproximadamente el 70% de toda la biodiversidad mundial25.
Otros puntos de encuentro son el Consejo Económico de la Cuenca del Pacífico, por su sigla PBEC, creado en 1.967 y al cual Colombia ingresa en 1.994 entrada que hizo por entonces con la R.P.Ch. y Rusia. Su enfoque, la cooperación empresarial de los países miembros. El Consejo de Cooperación Económica del Pacífico por sus siglas PECC. Este organismo nace en 1.980 en Canberra Australia. Como foro, convoca siempre a una participación tripartita, a los miembros representativos de la sociedad encabezada por la Academia, la Empresa y el Gobierno. Es el único organismo no-gubernamental observador permanente en el seno del APEC, en tal sentido actúa como apoyo en información y análisis en las reuniones ministeriales, en el puente que hace con el sector real de los países miembros, actuación que también realiza con el Banco Asiático de Desarrollo por sus siglas BAsD26. Su enfoque, mejorar la cooperación y coordinación en políticas dentro de las áreas de inversión, finanzas y comercio entre los miembros (los hay de derecho pleno donde esta Colombia desde 1.994 e Indonesia, asociados; Francia con sus territorios de ultramar ubicados en el Pacífico y los miembros institucionales el PAFTAD y el mismo PBEC). Finalmente está el Foro de Cooperación América Latina Asia del Este, del cual por supuesto hacen parte los dos Estados. Nace desde el 2.001, en la búsqueda de crear un Foro permanente de acercamiento y discusión acerca de los procesos económicos, sociales, culturales, que pueden acercar los dos continentes, vigente y que ha sido un puente muy importante desde entonces entre las empresas y los estados miembros.
Un año después del ataque terrorista a las Torres gemelas en Manhattan, en pleno corazón de EE.UU., las Relaciones Internacionales están enmarcadas en un proceso marcado por la desconfianza global, reordenamiento de las mismas y una aproximación de las mismas, por la vía militar como herramienta disipadora. Precisamente, el País Islámico más poblado del mundo a la fecha es Indonesia, con casi 200 millones de fieles. Sin embargo, ese mismo año y producto de una política pública nacional encaminada al recorte de presupuesto llamado, Plan de Renovación del Estado, el aporte por parte de la Cancillería Nacional fue recortar su presupuesto para el 2.003 en un 20%. Para llegar a esta meta, se buscó recortar 14 Embajadas, Australia (Oceanía), Grecia, Rumania, Finlandia (Europa), Haití, Belice, Barbados, Guyana y Trinidad y Tobago (América), Indonesia, Irán (Asia), Marruecos (África), y diez Consulados (Singapur en Asia y las ciudades alemanas de Bonn, Hamburgo y Munich en Europa, Nueva Orleans en E.U, Vancouver en Canadá, Barquisimeto en Venezuela, Cuenca en Ecuador, Monterrey en México y Aruba.
Es decir, primó lo presupuestal y no las Relaciones Internacionales bajo una visión estratégica, pues como se comentó, Indonesia es un líder natural-cultural de Asia, centro y socio de 9 países del ASEAN de gran tradición y como recién se comentó, el País de mayor población Musulmana del mundo, mayor proveedor de commodities de Japón y de gran tradición comercial ancestral con una ubicación geográfica estratégica, por su cercanía con Oceanía (Australia y Nueva Zelandia) y ubicación periférica central con China, los Tigres del Sudeste asiático y Japón.
La crisis sistemática-diplomática con Venezuela, particularmente desde el 2.008, que significó no solo el cierre de las fronteras, sino la caída del comercio con el entonces segundo socio comercial (el primero E.U.), el despegue de la crisis hipotecaria desde E.U. el mismo año, con la consabida crisis provocada por la caída de los créditos subprime, que ahondó la incertidumbre mundial, con la quiebra del baluarte financiero Lehman Brothers, volcaron al empresariado Colombiano hacia nuevos mercados.
Colombia, en el año 2.009, comenzaba su periodo de elecciones presidenciales que un año después, desembocó en la elección de Juan Manuel Santos como Presidente del País. Ese mismo año, Robert Ward, por entonces Director de la famosa Economist Intelligence Unit por su acrónimo EIU 27 y el CEO de HSBC, el Señor Michael Geoghegan, hablaban del nacimiento de lo que denominaron como CIVETS, siglas de los mercados emergentes de Colombia, Indonesia, el nuevo milagro asiático Vietnam, uno de los países inspiradores de la revolución de la Primavera Turquía, Egipto y Sudáfrica, señaladas por su gran dinamismo actual y proyectado, alternativa a futuro diferente a los BRIC. 28
Los propósitos históricos recientes de entrar al APEC, el Gobierno nacional presentó la solicitud de acceso en 1.995, logrando la condición de observadores, manifiestan la intención de virar hacia el Pacífico nacional e Internacionalmente, como camino alternativo en un horizonte Sur-Sur o Sur-Nuevos Países Industrializados, reforzado por la estrategia de “nuevos amigos” e internacionalización total de Colombia. La visita presidencial en el 2011 a Corea del Sur y Japón, reivindicada casi un año después por la del Ministro del Interior, muestra claramente el interés de Colombia en Asia, consolidando nuevos mercados y acercándose como proveedor al lugar del mundo donde habitan más del 30% de sus pobladores, con socios como Indonesia, gestión que garantizará unas relaciones con éxito y definitivamente duraderas.
Conclusiones
El actual contexto de los CIVETs pone a Indonesia y Colombia en una coyuntura afortunada para estimular el acercamiento diplomático y profundizar las relaciones económicas, y particularmente las comerciales, bilaterales. Por su prominencia, Indonesia se constituye como una puerta privilegiada al mercado asiático. Aun si su economía pareciera menor, a priori, frente a otros gigantes asiáticos emergentes como India o China, sus indicadores económicos son equiparables con los de las dos economías más grandes y dinámicas de América Latina, México y Brasil, y por lo tanto es un socio comercial tan interesante como ellas.
A Colombia y a Indonesia no solo las distancia el Océano Pacífico sino la falla tectónica que las ubica en civilizaciones diferentes, lo cual constituye un reto para ese acercamiento y esas relaciones y, a la vez, aumenta los posibles beneficios a obtener, de tener éxito en semejante empresa. Además de sus virtudes propias, su ascendencia en los esquemas regionales de la APEC y especialmente la ASEAN, y su privilegiada posición geográfica lo convierten en una puerta de entrada al sudeste asiático. La posibilidad de entrar a uno de los mercados emergentes más dinámicos y de mayor crecimiento en las últimas décadas, como lo es el Asia Pacífico, acercaría al país a la deseada diversificación comercial y ofrecería a los productores y comercializadores colombianos condiciones más favorables para su aprovisionamiento y para el acceso de sus productos y servicios.
La explotación de esta oportunidad no se puede dejar solamente a la voluntad política de los gobiernos de turno y sus correspondientes esfuerzos diplomáticos al más alto nivel. También pasa por el conocimiento de las particularidades históricas, económicas, sociales y culturales por parte de los diferentes agentes públicos y privados que posibilitarían y aprovecharían los beneficios de este canal de intercambio. Es a esto último que el presente artículo espera hacer un aporte.