Los coronavirus (CoV) son una familia de virus de ARN envueltos que infectan mamíferos y aves. Principalmente causan enfermedades respiratorias y gastrointestinales 1. Desde finales de diciembre de 2019, se notificó un brote de una nueva enfermedad por coronavirus (COVID-19, anteriormente conocido como 2019-nCoV) en Wuhan, China, que posteriormente afectó a 26 países en todo el mundo 2. Los CoV son una clase de virus genéticos diversos que se encuentran en una amplia gama de especies hospedadoras, incluidas aves y mamíferos. Muchas vacas causan infecciones intestinales y respiratorias en animales y en humanos 3.
La enfermedad por coronavirus (COVID-19) es una infección viral altamente patógena causada por el SARS-CoV-2. La COVID 19 ha dado origen a una preocupación mundial por la salud. Se supone que tiene un origen zoonótico basado en la gran cantidad de personas infectadas que estuvieron expuestas al mercado húmedo en la ciudad de Wuhan, China 4.
Se ha demostrado que la transmisión del virus se da de persona a persona; sin embargo, hasta donde se sabe, no se ha reportado la transmisión del nuevo coronavirus que causa la COVID 19 desde un portador asintomático con hallazgos normales de tomografía computarizada (TC) 5.
El tratamiento actual de la COVID-19 solo es de apoyo y la insuficiencia respiratoria causada por el síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) es la principal causa de mortalidad 6. Varias preguntas son especialmente críticas frente a esta nueva enfermedad. La primera y más importante hace referencia a ¿cuál es el espectro completo de la gravedad de la enfermedad? Dado que, dicha enfermedad puede variar: desde asintomática o sintomática pero leve hasta severa, que requiere hospitalización 7.
La rápida expansión global, el aumento de las muertes, el reservorio desconocido de animales y la evidencia del potencial de transmisión de persona a persona inicialmente se parecían a la epidemia de SARS de 2003 y plantearon preocupaciones sobre la propagación global 8.
Por lo tanto, esta situación necesita frenéticamente una respuesta global coordinada para preparar a los sistemas de salud, de tal manera que se pueda enfrentar este desafío sin precedentes. Los países que han tenido la desgracia de haber estado expuestos a esta enfermedad ya tienen paradójicamente lecciones muy valiosas que transmitir 9.
Las medidas de distanciamiento social y físico apuntan a frenar la propagación de la enfermedad al detener las cadenas de transmisión de COVID-19 y evitar que aparezcan nuevas. Estas medidas aseguran la distancia física entre las personas (de al menos un metro) y reducen el contacto con superficies contaminadas, al tiempo que fomentan y mantienen una conexión social virtual dentro de las familias y las comunidades. Las medidas para el público en general incluyen la introducción de arreglos de trabajo flexibles como el teletrabajo, la educación a distancia, la reducción y la prevención del hacinamiento, el cierre de instalaciones y servicios no esenciales, el blindaje y la protección para grupos vulnerables, las restricciones de movimiento locales o nacionales, las medidas para permanecer en casa y la reorganización coordinada de la atención médica y las redes de servicios sociales para proteger a los hospitales. Estas son medidas que se toman como protección individual contra la COVID-19, como el lavado frecuente de manos 10.
El 17 de febrero de 2020, el Consejo de Estado de China celebró una conferencia de prensa en la cual indicó que el fosfato de cloroquina, un antiguo medicamento para el tratamiento de la malaria, había demostrado una eficacia marcada y una seguridad aceptable en el tratamiento de la neumonía asociada a COVID-19 en ensayos clínicos multicéntricos 11.
El potencial de transmisión, a menudo medido en términos del número de reproducción básico, el tiempo pico del brote, el valor y la duración (bajo las medidas de intervención actuales y en evolución) siguen sin estar claros y justifican una mayor investigación 12. Por ello el objetivo de la presente investigación fue describir las principales características epidemiológicas de la COVID-19.
Sintomatologia y epidemiología
El coronavirus es uno de los principales patógenos que se dirige principalmente al sistema respiratorio humano. Los brotes previos de coronavirus (CoV) incluyen el síndrome respiratorio agudo severo (SARS-CoV) y el síndrome respiratorio del Medio Oriente (MERS-CoV) que se han caracterizado previamente como agentes que son una gran amenaza para la salud pública 13.
Aunque la mayoría de las personas infectadas presentan síntomas leves, como fiebre, síntomas del tracto respiratorio superior, dificultad para respirar y diarrea (o son completamente asintomáticos), los casos graves de infección pueden provocar neumonía, insuficiencia orgánica múltiple y muerte 14.
De esta manera, la infección por SARS-CoV-2 puede producir una neumonía intersticial y, en muchos casos, daño irreversible en el tejido pulmonar, que deja secuelas graves o conduce a la muerte 15. La neumonía se presenta generalmente en la segunda o tercera semana de una infección sintomática. Los signos incluyen disminución de la saturación de oxígeno, cambios visibles a través de radiografías de tórax, desviaciones de gases en sangre, con anomalías en el vidrio esmerilado, consolidación irregular, afectación interlobular y exudados alveolares 16.
Es importante también señalar que las infecciones respiratorias agudas por coronavirus afectan en la mayoría de los casos a varones en edades medias de vida, con antecedentes de fumadores y con enfermedades de base 17.
En la actualidad, la información sobre la epidemiología y las características clínicas de la neumonía causada por 2019-nCoV es escasa 18. Sin embargo, ya se ha identificado una serie de características importantes de la infección por 20ig-nCoV. No obstante, para calibrar las respuestas de salud pública se necesita una óptima información sobre la dinámica de transmisión 19.
A pesar de la homogeneidad filogenética entre el SARS-CoV-2 y el SARS-CoV, existen algunas características clínicas que diferencian la COVID-19 de las infecciones por SARS-CoV MERS-CoV e influenza estacional 20. Las principales rutas de transmisión de 2019-nCoV incluyen la transmisión directa a través de la tos, los estornudos y el escupir, así como la transmisión por contacto con las membranas mucosas orales, nasales y oculares. A pesar de que las manifestaciones clínicas no incluyen síntomas oculares, los análisis de casos sospechosos y confirmados sugirieron que la transmisión no se limita al tracto respiratorio 21,22 (Figura 1).
El promedio de nuevos casos generados por un caso de coronavirus durante su período infeccioso (R0) se encuentra entre 2,24 (IC 95%: 1,96-2,55) y 3,58 (IC 95%: 2,89-4,39), lo que significa que una persona contagiada puede infectar aproximadamente de 2 a 4 individuos, es decir, la infección puede propagarse ampliamente de una manera rápida entre las personas 22 tal como se puede apreciar en la Figura 1.
Por lo que, debido a esta gran rapidez de propagación, en poco tiempo infectó a otras regiones y aumentó su movilidad global, al punto de ser declarada una pandemia por la Organización Mundial de la Salud, el 11 de marzo de 2020 23.
Con respecto al caso de América Latina, la mayoría de los casos proceden de Europa, sobre todo de las ciudades del norte de Italia, razón por la que Italia, más que China, se ha convertido en uno de los países por tener en cuenta en la sospecha de infección por SARS-CoV-2, seguido por España, para los países latinoamericanos 24.
En este sentido, la evaluación temprana de la gravedad de la infección y la transmisibilidad puede ayudar a cuantificar el potencial pandémico de COVID-19 y anticipar el número probable de muertes al final de la epidemia. Una medida epidemiológica importante de la gravedad es el riesgo de letalidad (CFR), que puede medirse usando tres enfoques diferentes: i) la proporción del número acumulado de muertes de la cantidad de casos acumulados en un momento determinado; ii) la relación entre el número cumulativo de muertes y el número cumulativo de individuos infectados cuyo resultado clínico es conocido (es decir, fallecido o recuperado) y iii) el riesgo de muerte entre los casos confirmados, explícitamente el tiempo transcurrido desde la aparición de la enfermedad hasta la muerte 25.
Actualmente, existe una tendencia de pronóstico de la COVID-19 mediante el uso de modelos matemáticos para calcular la probabilidad de pasar de estados de susceptibles a infectados, y luego a un estado recuperado o fallecido 26.
Situación en Perú
En Perú, el primer caso de COVID-19 fue confirmado el 6 de marzo del 2020. Se detectó en un paciente varón de 25 años con problemas de infección respiratoria aguda leve con antecedente de viaje a diferentes países de Europa 27.
En cuanto a seguridad sanitaria, Perú en la actualidad se encuentra medianamente preparado, con brechas muy importantes en áreas indispensables para la preparación, detección y respuesta frente a la aparición de una epidemia o pandemia 28 (Figura 2).
El número reproductivo básico general de Perú durante el período del brote fue de 2,97; tal como se puede apreciar en la Figura 2, lo que significa que un solo caso podría haber infectado a casi 3 personas diferentes. Lima tuvo un resultado similar con un R0 de 2,88 29.
Fuera del departamento de Lima hay varias regiones que se han visto muy afectadas por el virus (las que más preocupación han generado son Piura y Loreto). Este último por problemas de presencia de enfermedades como leptospirosis y dengue, aunado a la COVID 19 30.
El Hospital Nacional Edgardo Rebagliati, perteneciente al Seguro Social de Salud (EsSalud) fue considerado como centro de referencia para la COVID-19 en Lima y viene atendiendo una importante cantidad de pacientes hospitalizados en el país, habiendo sobrepasado la capacidad de los ambientes destinados para este fin 31.
Tratamiento y medidas de mitigación de la pandemia
Las medidas de control epidemiológico en los países latinoamericanos han sido distintas, y han traído consigo una serie de consecuencias socioeconómicas, motivo por el que ciertos países se han demorado más en tomar acciones 32.
Las medidas de control y prevención contra el SARS-CoV-2 son las siguientes: las precauciones estándar y las de mecanismo de transmisión; el uso de desinfectantes para superficies inanimadas; el uso adecuado del equipo de protección personal (EPP); la vacuna, en investigación actualmente; y profilaxis antimicrobiana, aunque no se cuenta con suficiente información como para recomendarla 33-38.
Las medidas de distanciamiento social, que disminuyen la frecuencia y la duración de los contactos sociales entre personas de todas las edades, reducen la transmisión del virus de persona a persona. El cierre de escuelas, universidades, guarderías, servicios religiosos, lugares de entretenimiento y otros donde las personas se congregan es una medida importante. Las escuelas y guarderías representan el entorno socialmente más denso 34.
La limpieza a fondo de las superficies ambientales con agua y detergente y la aplicación de desinfectantes de uso hospitalario de uso común (como el hipoclorito de sodio) son procedimientos efectivos y suficientes 39-45. Asimismo, es importante siempre el lavado de manos, que ha sido reconocido como uno de los medios más importantes y efectivos para el control de infecciones, sobre todo frente a la COVID-19, 36,46-50.
Los problemas epidemiológicos clave que determinan el impacto de las medidas de distanciamiento social son qué proporción de individuos infectados tienen síntomas leves y si estos individuos se autoaislarán y con qué efectividad, qué tan rápido se aíslan los individuos sintomáticos para después del inicio de los síntomas y la duración de cualquier periodo infeccioso no sintomático antes de que aparezcan síntomas claros con el problema relacionado de cuán transmisible es la COVID-19 durante esta fase 37 (Figura 3).
En la Figura 3 se aprecia una simulación de línea de base con aislamiento de casos solamente, en rojo; una simulación con distanciamiento social en su lugar a lo largo de la epidemia, allanando la curva, en color verde; y una simulación con distanciamiento social más efectivo durante un período limitado, típicamente seguido de una epidemia resurgente cuando se detiene la distancia social, en azul. Hay que resaltar que estas predicciones no son de carácter cuantitativo, sino, más bien, ilustraciones cualitativas para una gama de opciones de modelos.
En una pandemia, la atención centrada en el paciente es inadecuada y debe ser reemplazada por una atención centrada en la comunidad. Se requieren soluciones para contrarrestar la COVID-19 para toda la población, no solo para los hospitales. La catástrofe que se desarrolla actualmente podría ocurrir en cualquier lugar. Los médicos de un hospital y toda la población necesitan de un plan a largo plazo para la próxima pandemia 38-40.
No obstante, esta pandemia no amerita solo centrarse en los sistemas de salud, dado que la educación también se está viendo afectada por las medidas de confinamiento obligatorio, lo que significa que cualquier programa sostenible debe involucrar a profesionales locales para adaptar culturalmente las intervenciones al sistema administrativo y al entorno regional y comunitario, así como desarrollar material contextualmente relevante para niños y adolescentes 38.
De esta manera, pasar de una estrategia de contención a un enfoque de mitigación podría permitir la optimización de la prestación de atención médica bajo las expectativas del personal y la escasez de suministros en un sistema de atención médica ya tenso. Pautas claras compartidas entre hospitales y estados podrían ayudar a mejorar la capacidad de mantener un enfoque capaz y sostenible para todos los pacientes 41.
Este nuevo coronavirus tiene una morbilidad específicamente alta en los ancianos y en las poblaciones comórbidas. Si bien las políticas de licencia de los trabajadores de la salud son efectivas durante una fase de contención, no lo son en presencia de una propagación continua de la comunidad durante la cual el personal puede estar tan expuesto a la infección fuera del entorno de la atención médica como dentro de este.
Debido a que la pandemia por coronavirus es un problema de salud reciente, la información actual es muy escasa; por ello, se deben desarrollar un mayor número de investigaciones de tal manera que las últimas recomendaciones de atención e información sobre dicha enfermedad se actualicen constantemente y se entreguen de inmediato a todo el personal de atención médica según sea necesario.
Finalmente, el comportamiento individual será crucial para controlar la propagación de COVID-19. La acción de las personas, más que la acción gubernamental, podría ser en las democracias occidentales el tema más importante para mitigar o aumentar la propagación y duración del virus en la sociedad ♠