La enfermedad de Chagas, también conocida como tripanosomiasis americana es una zoonosis causada por la infección de Trypanosoma cruzi. Se estima que 8 millones de personas están infectadas con T. cruzi en 21 países endémicos, los cuales tienen una población total de 531 millones de personas 1. Se considera que la existencia de esta enfermedad en seres humanos se presenta de forma accidental, puesto que el hombre, al entrar en contacto con los focos naturales, originó desequilibrios ecológicos que forzaron a los triatominos infectados a ocupar viviendas humanas e iniciar procesos de domiciliación, al encontrar refugio y alimento en personas y animales domésticos 2.
Existen diversos factores colectivos e individuales en las poblaciones humanas de regiones determinadas que se relacionan con la dinámica de transmisión de la enfermedad, particularmente las migraciones humanas estacionales y permanentes, los materiales de construcción del domicilio, hábitos de higiene, hacinamiento, disposición del peridomicilio, convivencia con animales domésticos y silvestres, los mitos, creencias, actitudes y prácticas derivadas de la larga convivencia con el vector y la falta de relación causal con la patología 3-7. Otros autores también dan importancia a variables como ventilación, iluminación, dormir junto a la pared, área de construcción de la vivienda, anexos a la vivienda y cobertizos 8-9. Estos factores, junto al componente ecológico y epidemiológico, definen las condiciones de transmisión de la enfermedad en una región o localidad y conllevan al planteamiento de acciones de promoción, prevención y control ajustados a las necesidades propias.
El departamento de Vichada es un territorio que históricamente reporta casos esporádicos de la enfermedad de Chagas en el país; se han reportado siete casos en el periodo 2006-2009, cuatro de ellos en mayores de 67 años y dos sin registro de edad en los archivos; además, se desconoce el sitio de origen de la infección, puesto que fueron diagnosticados en fase crónica y se ignora los desplazamientos a diferentes lugares que realizaron a lo largo de su vida. Sin embargo, se reportó en este mismo periodo un paciente con enfermedad de Chagas de 9 años en fase indeterminada en el municipio de Santa Rosalía, el cual manifestó no haber salido del municipio, lo cual podría indicar una transmisión activa de la enfermedad; también se han encontrado algunas especies de triatominos de importancia médica en el intradomicilio, como Rhodnius prolixus (infectados con T. cruzi según reporte de la Unidad de Entomología del Laboratorio de Salud Pública de Vichada) y Triatoma maculata.
La situación anteriormente descrita hizo necesario establecer si existe realmente una transmisión en la zona, si sus vectores están domiciliados o hacen ingresos ocasionales a las viviendas en busca de abrigo o alimento y cuáles son las condiciones de las viviendas que favorecen la observación de triatominos en el intradomicilio. El presente estudio se enmarca en el trabajo institucional realizado por la vigilancia regular de la Secretaría de Salud del departamento de Vichada, con el objetivo de determinar la correlación entre la observación de triatominos en el intradomicilio y las condiciones habitacionales y ecológicas del entorno como una amenaza de domiciliación de los vectores que pueda favorecer la transmisión de la enfermedad.
MATERIALES Y MÉTODOS
Se realizó un estudio transversal descriptivo durante el segundo semestre de 2010, por medio de encuestas estructuradas no aleatorias, implementadas en 162 viviendas del municipio de Santa Rosalía. Fueron seleccionadas siete localidades rurales localizadas al margen del Río Meta, una localidad periurbana correspondiente a un resguardo indígena y una localidad más en la cabecera municipal. Este municipio se encuentra localizado en el extremo noroeste del departamento de Vichada a una distancia de 328,6 km de Bogotá, la capital de Colombia. La población estimada de Santa Rosalía en 2010 era de 3 659 habitantes: el 43,0% correspondía a población rural y el 23,6%, a población indígena.
Las variables consideradas como explicativas, y que caracterizan las viviendas incluidas en el estudio, corresponden a tipo de localidad, número de habitantes, tiempo de residencia en el sitio, actividades regulares del programa de control de vectores, materiales de construcción, condiciones de ventilación e iluminación, aprovisionamiento de agua, disposición de residuos sólidos, disponibilidad de energía eléctrica, instalaciones anexas y la presencia de animales domésticos y silvestres. Como variables respuesta y estimación de la infestación, se definieron la observación previa de triatominos en la vivienda por parte de los habitantes y la posterior identificación del vector con muestras entomológicas reales de diferentes especies vectores y sus diferentes estadios (huevos, ninfas y adultos).
El análisis de los datos se realizó en tres etapas con el paquete estadístico SPSS. Durante la primera etapa, o de análisis univariado, se describieron las variables mediante sus frecuencias y el cálculo de estadísticos descriptivos. En la siguiente etapa, correspondiente al análisis bivariado, se estimó el grado de asociación y correlación entre las variables consideradas para la caracterización de las viviendas y la observación de vectores con el cálculo de la razón de momios (OR) y su respectivo intervalo a 95% de confiabilidad (IC95%), entre las variables nominales, y el estadístico de Pearson entre las variables numéricas. Durante la tercera etapa o de análisis multivariado, se ajustó un modelo de regresión logística binaria para medir la relación entre la observación de triatominos y los atributos de las viviendas que mostraron OR significativos en el análisis bivariado; el modelo elegido correspondió al de mayor parsimonia implementando el método "introducir", el cual correspondió al de menor número de variables con las predicciones más precisas y válidas.
RESULTADOS
El 63,8% de las viviendas consideradas se ubicaron en localidades rurales del municipio correspondientes a las veredas de Pavanay y Ladera; las comunidades indígenas Buenos Aires, Trompillo y Bambú; y aquellas viviendas localizadas en la ribera del Río Meta. El 15,3% de la muestra se obtuvo del resguardo indígena localizado en zona periurbana de Santa Rosalía y el 20,9% restante de viviendas correspondieron al casco urbano. La media de habitantes por vivienda se estimó en 5,4 (iC95%=4,7-6,0), con un promedio de tiempo de residencia de 12,2 años (IC95% = 10,5-13,9).
El material de construcción del techo de las viviendas más común fue la lámina galvanizada con enel (54,0 %); seguido por el techo de palma, con el 41,1%; el asbesto, con 3,1%; y finalmente el plástico, con 1,8%. Con respecto a las paredes, el 35,6% estaban construidas con ladrillos; el 23,0%, con barro; 14,7%, con madera; el 12,9%, de palma; 9,2%, de lámina galvanizada; 1,2%, de plástico; y el 2,4% restante de las viviendas no contaba con paredes; el material de los pisos más frecuente fue la tierra, con el 52,1% de las viviendas; seguido por el cemento o baldosa, con el 44,2%; y la madera, con el 3,7%.
En cuanto a las condiciones habitacionales de las viviendas, en el 64,4% la ventilación se consideró adecuada y el 39,9% cuenta con una apropiada iluminación. En relación con aprovisionamiento de agua, el 58,3% se realiza desde pozos profundos; el 22,1% desde cursos de agua; y el restante 19,6% de las viviendas cuenta con servicio de acueducto. En el 80,4% de las viviendas depositaban los residuos sólidos dentro de un hoyo, mientras que el 19,6% restante contaba con servicio de recolección de basuras. El 46% de las viviendas no tenía energía eléctrica; el 22,1% disponía de una a seis horas de electricidad al día y el 19,6% restante tenía servicio de energía eléctrica durante 17 horas diarias.
El 64,4% de las viviendas cuenta con un gallinero y el 32,5%, con una porqueriza como anexos habitacionales; los animales domésticos más frecuentes en las viviendas corresponden a las aves, con 79,7%; seguidas por los caninos, con 76,0%; los bovinos, con 42,2%; porcinos, con 40,5%; y finalmente los equinos, presentes en el 38,6% de las viviendas. Con respecto a los animales silvestres observados en las inmediaciones de las viviendas, los más frecuentes son los murciélagos, con el 98,1%; seguidos por los roedores, con el 93,8%; las zarigüeyas, con el 76,1%; los primates con el 74,2%, osos hormigueros, con 72,4%; armadillos, con el 68,7%; perezosos, con 67,5%; y finalmente conejos, observados en cercanías del 47,2% de las viviendas. El elemento vegetal más común del peridomicilio corresponde a los arbustos, presentes en el 88,3% de las viviendas; seguido por los árboles, con el 84,7%; los pastizales, con el 74,2%; palma de coco, con el 69,9%; cultivo de plátano, con 67%; palma real y leña, con 38,0% cada uno; palma africana, con el 27,0%; rocas, con 12,3%, y finalmente palma de corozo; presente en el 7,4%.
De acuerdo con la Tabla 1, que resume la frecuencia y la razón de momios entre los factores asociados a condiciones habitacionales y la observación de triatominos, se encontraron diferencias estadísticamente significativas de acuerdo al IC95% del OR y su valor de probabilidad (p) en los siguientes casos: se observó asociación negativa con vivir en zona urbana, el ladrillo como material de las paredes de la casa, la lámina galvanizada como techo de la vivienda, piso del domicilio en cemento, contar con la recolección de las basuras y la apropiación de agua por medio de acueducto; mientras que el vivir en zona periurbana, la hoja de palma como techo de la vivienda, la tierra como piso de la casa y no contar con fluido eléctrico mostraron asociaciones positivas.
Factores asociados a condiciones habitacionales | Observación de triatominos en intradomicilio | ||
---|---|---|---|
Na (%b) | ORc (IC95%d) | Pe | |
Localidad | |||
Urbana | 11(32,3) | 0,4(0,2-0,8) | <0,05 |
Distinta a urbana | 71(55,5) | ||
Periurbana | 18(72,0) | 2,9(1,1-7,5) | <0,05 |
Distinta a periurbana | 64(46,7) | ||
Rural | 53(51,5) | 1,1(0,6-2,1) | >0,05 |
Distinta a rural | 29(49,1) | ||
Material de las paredes | |||
Barro | 19(48,7) | 0,9(0,4-1,9) | >0,05 |
Distinto a barro | 63(51,2) | ||
Fibra plástica | 2(100,0) | 5,0(0,2-105,8) | >0,05 |
Distinto a fibra plástica | 80(60,0) | ||
Hoja de palma | 14(66,7) | 2,1(0,8-5,3) | >0,05 |
Distinto a hoja de palma | 68(48,2) | ||
Ladrillo | 22(37,9) | 0,4(0,2-0,9) | <0,05 |
Distinto a ladrillo | 60(57,7) | ||
Lámina galvanizada | 8(53,3) | 1,1(0,4-3,1) | >0,05 |
Distinto a lámina galvanizada | 74(50,3) | ||
Madera | 13(56,5) | 1,3(0,5-3,1) | >0,05 |
Distinto a madera | 69(49,6) | ||
Sin pared | 4(100,0) | 9,2(0,5-174,3) | >0,05 |
Con pared | 78(49,4) | ||
Materiales de los techos | |||
Hoja de palma | 43(64,2) | 2,5(1,3-4,8) | <0,05 |
Distinto a hoja de palma | 39(41,0) | ||
Lámina galvanizada | 35(40,2) | 0,4(0,2-0,8) | <0,05 |
Distinto a lámina galvanizada | 47(62,7) | ||
Teja de asbesto | 2(40,0) | 0,7(0,1-3,6) | >0,05 |
Distinto a teja de asbesto | 80(50,9) | ||
Teja plástica | 2(66,7) | 1,6(0,2-12,8) | >0,05 |
Distinto a teja plástica | 80(50,3) | ||
Materiales de los pisos | |||
Baldosa | 2(28,6) | 0,4(0,1-2,0) | >0,05 |
Distinto a baldosa | 80(51,6) | ||
Cemento | 19(29,7) | 0,2(0,1-0,5) | <0,05 |
Distinto a cemento | 63(64,3) | ||
Madera | 4(66,7) | 1,8(0,4-8,7) | >0,05 |
Distinto a madera | 78(50,0) | ||
Tierra | 57(67,1) | 4,1(2,2-8,0) | <0,05 |
Distinto a tierra | 25(32,5) | ||
Condiciones de ventilación | |||
Adecuado | 50(48,1) | 0,7(0,4-1,4) | >0,05 |
No adecuado | 32(55,2) | ||
Condiciones de iluminación | |||
Adecuado | 33(50,8) | 1,0(0,5-1,9) | >0,05 |
No adecuado | 49(50,5) | ||
Apropiación de agua | |||
Acueducto | 10(31,2) | 0,4(0,2-0,8) | <0,05 |
Distinto a acueducto | 72(55,4) | ||
Pozo profundo | 51(54,2) | 1,4(0,7-2,6) | >0,05 |
Distinto a pozo profundo | 31(45,6) | ||
Cauce | 21(58,3) | 1,5(0,7-3,1) | >0,05 |
Distinto a cauce | 61(48,4) | ||
Disposición de basuras | |||
Recolección | 10(31,2) | 0,4(0,2-0,8) | <0,05 |
Hoyo | 72(55,4) | ||
Horas de energía al día | |||
0 | 48(64,0) | 2,7(1,4-5,1) | <0,05 |
>0 | 34(39,1) | ||
1-6 | 24(43,6) | 0,7(0,3-1,3) | >0,05 |
Distinto a 1-6 | 58(54,2) | ||
17 | 10(31,2) | 0,4(0,2-0,8) | <0,05 |
<17 | 72(55,4) |
a Frecuencia absoluta; b frecuencia relativa en porcentaje; c razón de momios; d intervalo al 95% de confianza; e valor de probabilidad.
En la Tabla 2, que resume las frecuencias y medidas de asociación entre las condiciones del peridomicilio y el avistamiento de triatominos, se observaron asociaciones negativas con la presencia de palmas (la palma africana y la palma de coco) y el acopio de leña.
Factor asociado a condiciones del peridomicilio | Observación de triatominos en intradomicilio | ||
---|---|---|---|
Na(%b) | ORc(IC95%d) | Pe | |
Anexo gallinero | |||
Presente | 56(53,3) | 1,4(0,7-2,6) | >0,05 |
Ausente | 26(45,6) | ||
Anexo marranera | |||
Presente | 22(51,2) | 1,0(0,5-2,0) | >0,05 |
Ausente | 60(50,4) | ||
Palmas | |||
Presencia de palmas | 61(45,9) | 0,3(0,1-0,8) | <0,05 |
Ausencia de palmas | 21(72,4) | ||
Palma real | 34(54,8) | 1,3(0,7-2,5) | >0,05 |
Otras palmas | 48(48,0) | ||
Palma de corozo | 5(41,7) | 0,7(0,2-2,9) | >0,05 |
Otras palmas | 77(51,3) | ||
Palma africana | 14(31,8) | 0,3(0,2-0,7) | <0,05 |
Otras palmas | 68(57,6) | ||
Palma de coco | 49(43,0) | 0,3(0,2-0,7) | <0,05 |
Otras palmas | 33(68,7) | ||
Arbustos | |||
Presente | 70(48,6) | 0,5(0,2-1,3) | >0,05 |
Ausente | 12(66,7) | ||
Árboles | |||
Presente | 67(48,5) | 0,6(0,2-1,4) | >0,05 |
Ausente | 15(62,5) | ||
Pasturas | |||
Presente | 60(49,6) | 0,8(0,4-1,7) | >0,05 |
Ausente | 22(53,7) | ||
Cultivo de plátano | |||
Presente | 57(51,8) | 1,2(0,6-2,2) | >0,05 |
Ausente | 25(48,1) | ||
Leña | |||
Presente | 25(40,3) | 0,5(0,3-0,9) | <0,05 |
Ausente | 57(57,0) | ||
Rocas | |||
Presente | 10(50,0) | 1,0(0,4-2,5) | >0,05 |
Ausente | 72(50,7) |
a Frecuencia absoluta; b frecuencia relativa en porcentaje; c razón de momios; d intervalo al 95% de confianza; e valor de probabilidad.
En la Tabla 3, que relaciona las condiciones faunísticas y la observación de triatominos, se evidenciaron asociaciones negativas con la presencia de armadillos y conejos. El tiempo de residencia no se relacionó con el avistamiento de triatominos, puesto que la correlación de Pearson fue de -0,016, lo cual indica que la correlación de esta variable es de carácter inverso, aunque demasiado lábil por su cercanía a cero; de igual manera, el número de habitantes no se correlacionó con la variable respuesta, ya que el estadístico de Pearson se estimó en -0,087.
Factor asociado a fauna | Observación de triatominos en intradomicilio | ||
---|---|---|---|
Na(%b) | ORc(IC95%d) | Pe | |
Caninos domésticos | |||
Presente | 65(52,0) | 1,3(0,6-2,7) | >0,05 |
Ausente | 17(45,9) | ||
Aves domésticas | |||
Presente | 68(52,3) | 1,4(0,6-3,1) | >0,05 |
Ausente | 14(43,7) | ||
Porcinos domésticos | |||
Presente | 33(50,0) | 1,0(0,5-1,8) | >0,05 |
Ausente | 49(51,0) | ||
Bovinos domésticos | |||
Presente | 35(48,6) | 0,9(0,5-1,6) | >0,05 |
Ausente | 47(52,2) | ||
Equinos domésticos | |||
Presente | 28(44,4) | 0,7(0,3-1,3) | >0,05 |
Ausente | 54(54,5) | ||
Roedores | |||
Presente | 75(49,0) | 0,3(0,0-1,4) | >0,05 |
Ausente | 7(77,8) | ||
Armadillos | |||
Presente | 48(42,9) | 0,3(0,2-0,7) | <0,05 |
Ausente | 34(68,0) | ||
Zarigüeyas | |||
Presente | 61(49,2) | 0,8(0,4-1,6) | >0,05 |
Ausente | 21(55,3) | ||
Murciélagos | |||
Presente | 81(50,9) | 2,1(0,2-23,4) | >0,05 |
Ausente | 1(33,3) | ||
Conejos | |||
Presente | 32(41,6) | 0,5(0,3-0,9) | <0,05 |
Ausente | 50(58,8) | ||
Osos hormigueros | |||
Presente | 61(51,7) | 1,2(0,6-2,3) | >0,05 |
Ausente | 21(47,7) | ||
Osos perezosos | |||
Presente | 57(51,8) | 1,2(0,6-2,2) | >0,05 |
Ausente | 25(48,1) | ||
Primates | |||
Presente | 62(51,2) | 1,1(0,5-2,2) | >0,05 |
Ausente | 20(48,8) |
a Frecuencia absoluta; b frecuencia relativa en porcentaje; c razón de momios; d intervalo al 95% de confianza; e valor de probabilidad.
La medición de la relación entre las variables independientes incluidas en la caracterización de las condiciones habitacionales, peridomiciliarias y faunísticas que resultaron con OR significativos y la variable dicotômica de avistar o no triatominos en el intradomicilio se realizó con el ajuste de un modelo de regresión logística binaria. Inicialmente se realizaron regresiones por separado con cada una de las variables que mostraron asociaciones significativas durante el análisis bivariado, con el fin de corroborar que los OR y el coeficiente b (Exp(B)) tuvieran sentido y magnitud similares antes de ingresarlas al modelo. El análisis multivariado de la observación de triatominos evidenció significancia estadística de Exp(B) en dos de las 17 variables que habían mostrado asociación significativa durante el análisis bivariado y que habrían sido incluidas en el modelo de regresión logística binaria. De acuerdo con las magnitudes asociativas obtenidas durante el análisis bivariado, durante el análisis multivariado tanto el piso de cemento como la presencia de palmas disminuyeron su asociación con el evento de observar triatominos en el intradomicilio (Tabla 4).
Modelo de regresión | Factor asociado | Exp (B)a (IC95%)b | P c | R2d |
---|---|---|---|---|
Observación de triatominos en intradomicilio | Vivienda con piso de cemento | 0,3(0,2-0,7) | <0,05 | 0,194 |
Presencia de palmas | 0,4(0,1-0,9) | <0,05 |
a Coeficiente b; b intervalo al 95% de confianza; c valor de probabilidad; d coeficiente de correlación múltiple.
DISCUSIÓN
El presente estudio muestra una correlación entre la presencia de triatominos en el interior de la vivienda y algunas de sus condiciones físicas y del entorno. Los habitantes tienen un amplio conocimiento del vector: el 79,0% de los encuestados manifestaron conocerlo y el 100% de estos reconocían el insecto con el nombre de Pito. Este hallazgo es de gran relevancia en el impacto de las campañas de sensibilización, puesto que permite unificar un solo lenguaje para el direccionamiento y abordaje comunitario en la implementación de estrategias IEC y movilización social.
Se relacionan de forma positiva, y en consecuencia como posibles factores asociados a la domiciliación de triatominos, la hoja de palma como techo de la vivienda, la tierra como piso de la casa, el vivir en zona periurbana y no contar con fluido eléctrico. El piso de tierra y el techo de hoja de palma son atributos de gran importancia en la epidemiología de la enfermedad de Chagas, dada la asociación entre triatominos y viviendas catalogadas como precarias que, entre otras condiciones, tienen techo de palma y piso de tierra 9-13. En contraste, se presenta una asociación negativa en observar triatominos dentro de la vivienda en condiciones estructurales más favorables, como el ladrillo como material de las paredes, la lámina galvanizada como techo y el piso en cemento o baldosa.
Vivir en la zona periurbana como factor asociado a la domiciliación de triatominos está probablemente más asociado a la condición del resguardo indígena de la etnia Sáliba, cuyas características se corresponden con los atributos habitacionales ya mencionados y que se pueden asociar a la domiciliación del vector. Así mismo, las variables de recolección de basura a través de un servicio público, apropiación de agua por medio de acueducto y tener energía por más de 17 horas, que se presentan como factores protectores, son atributos comunes y exclusivos del área urbana del Municipio. Es importante resaltar que muchos autores consideran que los triatominos silvestres pueden ser atraídos a fuentes de luz artificial 14-17, aspecto asociado de forma inversa en el presente estudio, aunque atribuible a los demás atributos comunes al casco urbano.
El entorno de la vivienda y componente biótico del área de estudio estuvo asociado de forma negativa y, por ende, como un factor de protección de la domiciliación del vector, con respecto al acopio de leña, la presencia de palmas en general y la observación de conejos y armadillos. Al respecto, Cova García y Suárez 18 encontraron Panstrongylus geniculatus en la mayoría de estados de Venezuela asociados a cuevas de armadillos; además, otros estudios recientes de la Orinoquía colombiana proponen un escenario epidemiológico donde la cercanía de palmas Attalea butyracea a las viviendas puede ser una posible fuente de infestación domiciliaria 19-20. No obstante, podría sugerirse que los triatominos que cuenten con fuentes de refugio y alimento en un hábitat natural poco intervenido (poblaciones silvestres) continúen haciendo uso de las palmas como ecotopos naturales y utilicen como fuente de alimentación los mamíferos silvestres de hábitos subterráneos, como conejos y armadillos, y no se aventuren a realizar ingresos recurrentes a las viviendas aledañas. En un escenario de deforestación y transformaciones antrópicas, la dispersión pasiva de poblaciones silvestres de triatominos hacia el ambiente peridomés-tico ha sido bien demostrada. La destrucción de ecotopos naturales y la reducción de las fuentes de la sangre de animales salvajes son determinantes de la invasión de peridomicilios por triatominos en su búsqueda de fuentes de alimento 16,21-22 ♣