Es difícil expresar los sentimientos ante la pérdida de un colega y amigo que fue parte del Instituto Nacional de Cancerología (INC) y un gran líder clínico en el campo de la mastología a nivel nacional. El Dr. José Fernando Robledo realizó sus estudios de cirugía general, cirugía de mama y de tejidos blandos en el INC desde 1983 hasta 1989 donde entró a formar parte del Grupo de mama y tejidos blandos.

Desde un principio se destacó por su interés en las diferentes áreas de la especialidad, con particular énfasis en la reconstrucción de mama e inició este proyecto fundamental para el manejo integral de las pacientes con cáncer de mama con los doctores Miguel Orticochea y Gloria Ordoñez.

En 1992 fue nombrado Jefe de Educación Médica y trabajó en el desarrollo de los diferentes programas de segunda especialidad en Oncología, tanto en el área médica como en la quirúrgica. José Fernando se retira del INC en 1996 y se dedica a su práctica privada en la Clínica del Country donde conforma un grupo multidisciplinario, con nuestros colegas Claudia Ramírez y José Joaquín Caicedo. Uno de sus principales logros fue el diseño y la creación de la Unidad de mama en la Clínica del Country, en donde implementó y manejó el concepto de unidad funcional de cáncer de mama que involucra todas las especialidades relacionadas y conformó un grupo de trabajo para su implementación, el cual siempre se destacó por su papel protagónico a nivel nacional.

En 2004, junto con José Joaquín Caicedo y Claudia Zaa, crean la asociación AMESE para el apoyo de pacientes y familiares con cáncer de mama. Durante su práctica profesional lideró múltiples proyectos de gran relevancia en nuestra especialidad, como la ya mencionada reconstrucción mamaria, la técnica del ganglio centinela, la implementación de las pruebas genómicas y genéticas, entre otros.

En este largo devenir formó una hermosa familia con Beatriz y sus hijas Verónica, Laura y Maria José, que fue fundamental para obtener todo este desarrollo profesional exitoso. Sin embargo, un accidente le arrebató a Maria José, su hija menor, situación que José Fernando trató de aceptar, pero el dolor fue mayor y muere el 21 de enero de este año.

Recojo las palabras de su entrañable amigo del alma José Joaquín: José Fernando fue un maestro y un caballero de la mastología colombiana, que dejó un gran legado a las generaciones venideras y será ejemplo a seguir por siempre.