Introducción
La sociedad y las personas siempre buscan mejorar su calidad de vida; por lo tanto, se espera que los modelos que miden la calidad de vida consideren todos los factores que representa este concepto. Lo anterior es relevante debido al impacto 1 que estos factores 2 pueden causar en el bienestar que experimentan las personas y; por ende, en la sociedad. Al respecto, Barrón-Rivera y Torreblanca-Roldán 3, plantean que una mejora de la calidad de vida se relaciona con el bienestar social, emocional y físico. De hecho, Lima et al. 4, descubrieron que la actividad física se asoció positivamente con una mejor calidad de vida. En consecuencia, se vuelve fundamental analizar el impacto 5 y qué se entiende por calidad de vida, al igual que descubrir cuáles son los factores que la determinan, porque ellos pueden incidir en las directrices sanitarias que adopten los países.
En concreto, la calidad de vida es un concepto evolutivo 6 y multidimensional que ha cobrado gran relevancia (7, 8) y que posee diversas definiciones 9, así mismo, está compuesto por varios factores 2,8,10. De hecho, González-Aguilar 11, señala que debido a la complicación para precisar el concepto de calidad de vida, se prefiere realizar una propuesta a través de diferentes dimensiones. A la vez, López-Carmona y Rodríguez-Moctezuma 10, señalan que la calidad de vida considera la evaluación de las características personales, al igual que la evaluación de los factores externos, como las enfermedades y el tratamiento, involucrando una evaluación tanto objetiva como subjetiva de estos factores, los cuales pueden ser internos o externos.
Al respecto, González-Aguilar 11, afirma que la calidad de vida posee una perspectiva integradora porque involucra elementos internos, así como la influencia de los contextos sociales sobre las personas. En efecto, Armas-Vega et al. 12, señalan que es importante considerar que las situaciones sociales condicionan el estado de salud de las personas y; por ende, este factor también incide en su calidad de vida.
En concreto, existen diversos factores que forman parte de la etapa de análisis estratégico, la cual está dentro del proceso de dirección estratégica de las instituciones e incluye un análisis interno y externo, al igual que el estudio de las directrices estratégicas que guían a los establecimientos 13.
En efecto, según Velarde-Jurado y Ávila-Figueroa 8, los factores como la vivienda, servicios públicos, empleo, urbanización, entre otros, influyen en la calidad de vida. Lo anterior se produce debido a que la calidad de vida abarca múltiples áreas 14.
Por otra parte, también se han construido instrumentos genéricos y otros específicos para medir la calidad de vida 7,10. Lo anterior, evidencia que existe mucho interés por estudiar la calidad de vida de las personas, enfocándose algunas investigaciones hacia los instrumentos que miden la calidad de vida 7,10, o el ámbito laboral 15, y al contrario, otros poseen un enfoque clínico asociado a una patología en particular 3,11,16,17. Y aunque existen investigaciones que permiten visualizar la incipiente relación entre el área de dirección estratégica con el ámbito de salud, como el estudio de Dos Santos y Giovanella 18, que analiza las estrategias de la dirección regional de salud, o el artículo de Ceola Schneideret al. 19, que estudia el seguimiento de estrategias y el estudio de Onocko-Campos et al. 20, que evalúa las estrategias innovadoras en los organismos de salud, entre otros, no se visualizan artículos que relacionen la calidad de vida de las personas con las directrices estratégicas sanitarias de un país a partir del área de dirección estratégica. Al respecto, la misión organizacional solo ha sido consideraba como un ítem dentro de la dimensión de bienestar individual de calidad de vida en el estudio de Hernández-Vicente et al. 15.
En concreto, las directrices estratégicas reflejan los lineamientos que poseen los establecimientos, regiones o países y que permiten guiar la actuación de las personas, a partir de la visión, misión, objetivos e incluso, de las estrategias que implementan las instituciones, lo cual incide en su estructura organizacional, debido a que esta última es parte de la etapa de implementación 21 del proceso de dirección estratégica 13. En particular, en materia de salud, los países se guían por las metas sanitarias, las cuales se vuelven vitales para mantener la salud y la calidad de vida de la población y, es por ello, que se busca desde diferentes áreas entender cómo la calidad de vida de las personas incide en las directrices que se formulan, al igual que en la estructura organizacional que adoptan las instituciones sanitarias, a partir de la identificación de los factores internos y externos que la representan y miden. En particular, esta investigación pretende contribuir a la comprensión de este fenómeno desde el área de dirección estratégica. Considerando los argumentos anteriores, a continuación, se plantean las hipótesis bajo estudio y el modelo propuesto en la Figura 1:
Hipótesis 1: los factores internos y externos, presentes en el análisis estratégico, impactan en la calidad de vida de las personas, ceteris paribus.
Hipótesis 2: La calidad de vida de las personas incide en las directrices sanitarias del país, ceteris paribus.
Materiales y métodos
La presente investigación es cuantitativa; en primer lugar, se identificaron los factores internos y externos, utilizando la última base de datos de la Encuesta Nacional de Calidad de Vida y Salud de Chile (ENCAVI) 2015-16 22, disponible al 14 de septiembre del año 2019 en la página web del Ministerio de Salud de Chile 23: http://www.minsal.cl. En segundo lugar, para analizar la incidencia de la calidad de vida en las directrices sanitarias, se realizó:
El análisis de la visión, misión y metas del Ministerio de Salud de Chile, a través del Informe sobre los Objetivos Sanitarios de la Década 2011-2020 24, disponible en la página web del Ministerio de Salud al 14 de septiembre del año 2019;
Además para observar cómo la calidad de vida incide en las directrices de las 15 regiones del país, se analizaron los 29 servicios de salud (SS) de Chile, a partir del Perfil Institucional de los Servicios de Salud 25 (OCHISAP, 2015). Con este informe se determinó la incidencia de la calidad de vida en las directrices en salud, considerando para ello el esfuerzo sanitario en mejorar la calidad de vida de las personas, a través del número de servicios de salud por región, número de camas hospitalarias por región y número de establecimientos por región, debido a que estas variables representan las decisiones estratégicas que se toman a nivel directivo, transformándose en una evidencia de la directriz sanitaria implementada por región;
Finalmente, a partir de la página web de los servicios de salud de Chile, al 4 de octubre del año 2019, se obtuvo información sobre si la calidad de vida para el paciente se encuentra representada en la estructura organizacional. Para ello, se revisaron todas las páginas web de los servicios de salud y se verificó que estuvieran presentes en la estructura. Debido a que su presencia explícita en la estructura es producto de una directriz estratégica que toma la autoridad sanitaria.
A continuación, en la Tabla 1 se presentan las variables del estudio y su forma de medida (véase Tabla 1).
Variables | Descripción | Valora |
---|---|---|
Calidad de Vida (CV) | General: Variable categórica que refleja la percepción de la población sobre la calidad de vida, de forma directa. | La CV tomará el valor “1” si es percibida como Muy Mala, “2” si es percibida como Mala, “3” como Ni Buena Ni Mala, “4” Buena y “5” Muy Buena. |
Calidad de Vida (CV) | Satisfacción: Variable categórica que refleja la percepción de la población sobre la satisfacción. | Tomará el valor “1” si la persona está Completamente Insatisfecha y tomará el valor “10” si está Completamente Satisfecha. |
Análisis Interno (AI) | Variable que representa el conjunto de factores internos que impactan en la percepción de la CV. | Variables cuantitativas como Edad e Ingresos; variables dicotómicas como Estado Civil (1: casado, 0: no casado), Nivel Educacional (1: básica-media, 0: superior); variables como puntaje total en escala Likert tales como Nivel de Endeudamiento y Relación Interpersonal. |
Análisis Externo (AE) | Variable que representa el conjunto de factores externos que impactan en la percepción de la CV. | Variables obtenidas a través de un análisis de correspondencias múltiples como indicadores compuestos tales como Discriminación, Infraestructura, Urbanización, Uso Medicamentos y Diagnóstico Enfermedad. |
Directrices Estratégicas (DE) | Variables numéricas que reflejan el esfuerzo sanitario por mejorar la calidad de vida de las personas por región. | Variables cuantitativas como n.° Camas Hospital, n.° Establecimientos Asistenciales y n.° Servicios Salud; variables dicotómicas como Calidad del Paciente en la Estructura (1: presente, 0: ausente) y Calidad de Vida en Directrices (1: presente, 0: ausente). |
Nota: a Incluye el valor que puede asumir cada variable.
Fuente: Elaboración propia.
Específicamente, para la aplicación de este estudio se utilizaron variables a partir de la base de datos mencionada, pero también se construyeron variables de acuerdo al factor analizado, detalladas en la Tabla 1.
Para esta investigación se trabajó con una muestra de 6.818 personas y se utilizaron los programas estadísticos SPSS v.22 y SmartPLS v.2.0. Específicamente, se realizó un análisis descriptivo y se aplicó modelamiento de ecuaciones estructurales por mínimos cuadrados parciales (partial least squares structural equation modeling, PLS-SEM) 26. Este tipo de modelos tiene la ventaja de visualizar las relaciones e hipótesis en una forma gráfica, permitiendo verificar los efectos conjuntos de las variables en estudio, es apropiado para estudios exploratorios sobre las relaciones causales involucradas, no requiere de supuestos distribucionales y funciona de manera eficiente con muestras pequeñas. Además, previamente utilizando análisis de componentes principales se generaron indicadores sintéticos para algunas variables del modelo propuesto. Para la bondad del ajuste del modelo se evaluó primero el modelo de medida, el cual describe las relaciones entre las variables latentes (constructos) con sus variables observadas, y posteriormente, el modelo estructural que describe las relaciones entre las variables latentes (constructos). Para el modelo de medida, se determinó la fiabilidad de los indicadores a través de las saturaciones estandarizadas (standardized ítems loading), y se utilizó el alpha (α) de Cronbach para evaluar la consistencia interna. Así mismo, la validez de constructo, que incluye validez convergente y discriminante, se verificó por medio de la fiabilidad compuesta (composite realiability, CR) y del promedio de varianza extraída (average variance extracted, AVE).
Para evaluar el modelo estructural se consideró el tamaño, signo, significación del coeficiente de trayectoria (path coefficient) y el valor de R2. Se examinó el modelo estructural propuesto, evaluando la relevancia y la significancia de los coeficientes de trayectoria (path coefficients) usando bootstrapping con 10000 repeticiones de submuestras con reemplazo desde los datos originales. Finalmente, para evaluar el rendimiento conjunto de los modelos de medida y estructural, se utilizó el índice de GoF 27.
El estudio recibió la aprobación del Comité de Evaluación de Ética de la Universidad del Bío-Bío y debido a que fue aplicado a través de una base de datos de acceso público, disponible en la siguiente página web: www.minsal.cl no se requirió consentimiento informado; sin embargo, es necesario mencionar en los agradecimientos la utilización de esta base de datos e institución que facilitó la información.
Resultados
Como resultado se puede señalar que al analizar la misión, objetivos y metas del Ministerio de Salud de Chile, se descubrió que solo en una meta, de los 9 objetivos sanitarios, se encontraba de forma explícita el concepto de la calidad de vida. Por otra parte, las características de la población estudiada tuvieron una media de edad 47.2 años, 62.7 % son mujeres, 37.3 % son hombres y el 83.2 % reportó residir en el área urbana. A continuación, en la Figura 2 se presenta el modelo ajustado, reflejando sus impactos positivos y negativos al igual que sus coeficientes de determinación (ver Figura 2).
De acuerdo al modelo propuesto en este estudio, los coeficientes de trayectorias estandarizados (standardized path coefficients), t-values, y la significancia (p-value) de cada trayectoria del modelo estructural, mostraron que los factores internos (FI) y factores externos (FE) provocan un efecto positivo y altamente significativo (p=0,0036 y p=0,0057, respectivamente) sobre la calidad de vida (CV). A su vez, la calidad de vida (CV) produce un efecto positivo altamente significativo (p=0,0068) en las directrices estratégicas sanitarias (DES), tal como se aprecia en la Tabla 2.
Los constructos calidad de vida (CV) y directrices estratégicas sanitarias (DES) producen efectos positivos y significativos en todos sus indicadores. Además, los valores del alfa de Cronbach (α) se encuentran entre 0.7109 y 0.8318, indicando una buena consistencia interna de los constructos. A la vez, la fiabilidad compuesta (composite reliability, CR) presenta valores entre 0.7265 y 0,8520, lo cual es aceptable para una investigación exploratoria como el presente estudio 28. Los valores de AVE son todos superiores a 0,50, indicando validez convergente, lo que significa que más del 50 % de la varianza del constructo se debe a sus indicadores, tal como se observa en la Tabla 2. Asimismo, los coeficientes de determinación de la Figura 2 indican que la calidad de vida (CV) es explicada en un 48,2 % por los factores internos (FI) y factores externos (FE) y, a su vez, que las directrices estratégicas sanitarias (DES) son explicadas un 32,1 % por la calidad de vida (CV). Finalmente, en este estudio se obtiene un valor del índice global de ajuste GoF de 0.5131, considerado un buen ajuste, dado que excede el valor umbral de 0.36 28.
Discusión
En síntesis, se confirman ambas hipótesis porque se descubrió que los factores internos tienen correlaciones positivas, Estado Civil, Ingresos, Nivel de Endeudamiento y Relaciones Interpersonales, dentro del análisis interno (AI). Lo anterior se puede explicar debido a que más del 60 % de los encuestados son casados, el 50 % o más tiene un ingreso de $500.000 pesos por sobre el ingreso mínimo, además, sobre el 70 % manifiesta tener un nivel de endeudamiento controlado y satisfechos con sus relaciones al interior de la familia. En línea con lo planteado por MontañezHernández et al. 29, sobre la relevancia de los factores socioeconómicos y VelardeJurado y Ávila-Figueroa 8, quienes señalan que la calidad de vida, debe reconocerse en su alcance multidimensional, que incluye estilos de vida, así como la situación económica, entre otros aspectos.
En cambio, correlaciones negativas de los factores internos se producen en los indicadores Edad y Nivel Educacional, esto se explica porque la edad promedio de los encuestados es de 47 años, donde más del 75 % solo ha cursado la enseñanza básica y/o media. De hecho, el estudio de ArmasVega et al. 12, plantea que la calidad de vida y la salud en preescolares ecuatorianos estuvo relacionada con el nivel educativo de sus padres. Al igual que la investigación de Glazer Peres et al. 30, que descubre que los aspectos sociodemográficos 31 de la calidad de vida se encuentran relacionados con la salud en adolescentes, aunque ambos estudios se enfocan en la salud bucal, de manera similar a la investigación de Da Silva Pereira et al. 32, que analiza la calidad de vida en relación con la salud bucodental en adultos mayores. Y, por otra parte, el envejecimiento de la población obliga a considerar la edad como un factor demográfico relevante, debido al costo sanitario que requiere y a su impacto en las estrategias sanitarias que se planteen al respecto. En efecto, Espinel-Bermúdez et al. 16, argumentan que el envejecimiento evidencia el éxito de las políticas públicas, volviéndose un desafío sobre el acceso a los servicios de salud 33.
Además, los factores que impactaron negativamente en el análisis externo (AE) fueron el Uso de Medicamentos y Diagnóstico de Enfermedad. En estos casos ocurre porque más del 90 % de los encuestados no ha sido diagnosticado con alguna enfermedad, así como, no ha tomado medicamentos de manera habitual, lo cual puede afectar su estado de salud y su calidad de vida futura. En efecto, las enfermedades provocan grandes costos, detienen el aumento del PIB y perjudican la calidad de vida de las ciudades, situación que sucede en Chile y en el mundo 22,34.
Por esta razón, estos factores fueron considerados en este estudio para el análisis de la calidad de vida de las personas en general y no solo en el ámbito de los pacientes. A la vez, correlaciones positivas se tienen en los indicadores de Discriminación, Infraestructura y Urbanización. Lo anterior se justifica debido a que más del 90 % de los encuestados manifiestan que no han sufrido Discriminación, sobre el 70 % cuentan con la infraestructura normal de todo hogar (aparatos y servicios de telefonía y televisión por cable), y más del 60 % considera que la Urbanización de su barrio es aceptable.
En resumen, los resultados de esta investigación, aunque a partir de otra perspectiva, fueron similares a los de 35. Cardozo Bortolotto et al. 35, quienes descubren que la edad, el ingreso, la educación, el área donde se vive, el tener una enfermedad, entre otros, son factores significativos como determinantes de la salud y por ello deberían ser considerados entre las necesidades sanitarias.
De manera similar, se confirma que la calidad de vida de las personas incidió positivamente en las directrices sanitarias del país, coherente con el estudio de Hernández-Vicente et al. 15, quienes consideraron a la misión organizacional como un ítem dentro de la dimensión de bienestar individual de calidad de vida. Estos resultados refuerzan la necesidad de investigaciones que consideren los aspectos organizacionales vinculados al ámbito sanitario, tal como el estudio de Palma-Contreras y Ansoleaga 36, quienes analizan la dimensión organizacional en el área de salud, o el estudio de Lara et al. 37, que analizan la calidad de vida en el ámbito universitario, destacando que estas instituciones deben incorporar en su misión, visión o planes estratégicos los valores de la promoción de la salud.
En particular, el modelo exploratorio propuesto alcanzó un R2 de 32,10 %, lo cual evidencia que su ajuste es apropiado, pero también refleja que existen otros factores que no están recogidos en el modelo, tal como señalan Velarde-Jurado y Ávila-Figueroa 7, quienes plantean que la calidad de vida por ser un término multidimensional se vuelve difícil tomar la decisión sobre qué variables se deben incluir, y por ello dependerá de la finalidad del estudio. Por otra parte, debido a que la calidad de vida utiliza mediciones blandas 7,8 y subjetivas 11, se necesitan métodos válidos, replicables y confiables 7 y debido a la dificultad metodológica que enfrenta la medición de calidad de vida 7, este estudio se enfocó en la construcción de un modelo exploratorio de factores internos y externos, que permitiera brindar mayor objetividad al fenómeno bajo análisis, para contribuir con su comprensión y con la generación de políticas públicas al respecto. De hecho, GonzálezAguilar 11, plantea que es relevante considerar si el constructo de calidad de vida es más bien subjetivo o podría considerarse objetivamente y evaluarse por agentes externos. Por ello, se utiliza una fuente de información secundaria a través de una base de datos chilena, la cual es una herramienta consolidada que entrega evidencia a la programación en salud para reducir las enfermedades y mejorar la calidad de vida de la población 22.
Conclusiones
En conclusión, este artículo identificó los factores que impactan en la calidad de vida de las personas y su incidencia en las directrices sanitarias, a partir del área de dirección estratégica. Se evidencia que la calidad de vida posee un carácter multidimensional que se puede visualizar a través de un modelo y, debido a que la calidad de vida es fundamental para mejorar el bienestar de la población, está presente en las directrices sanitarias de los servicios de salud de Chile.
A propósito de ello, un aspecto relevante y diferente de este estudio es la propuesta de un modelo de ecuaciones estructurales por mínimos cuadrados parciales (PLS-SEM) para verificar las hipótesis planteadas, lo que permite identificar los factores internos y externos que afectan la calidad de vida de la población, teniendo un alcance mayor a otros análisis debido a que la fuente de información utilizada permitió analizar la población de un país y no solo de pacientes. Además, esta investigación se realizó evidenciando los pasos seguidos y las variables utilizadas, lo que permite colocar a disposición de la comunidad científica el modelo propuesto para que pueda ser contrastado en otros países. En concreto, se estudia la vinculación de la calidad de vida con las directrices estratégicas presentes en el área de salud, para observar si la calidad de vida está considerada en ellas, lo cual no se encuentra directamente en otros estudios. Por último, se presenta en español, lo que permite replicar la investigación en otros países de habla hispana, sin tener la dificultad de la traducción del modelo, como ocurre con otros instrumentos que se encuentran en otros idiomas, sumando una dificultad adicional al momento de aplicar un instrumento o replicar un estudio.
Finalmente, una limitación fue utilizar una fuente de información secundaria, específicamente del área de la salud, para poder medir la calidad de vida; sin embargo, esta base de datos reunía los factores identificados en la literatura que impactaron en la calidad de vida de las personas. Además, como línea futura de investigación, se plantea aplicar este estudio en otro país para visualizar si los factores y el modelo propuesto arrojan los mismos resultados en otro contexto.