A pesar de los grandes avances tecnológicos en el diagnóstico de las enfermedades, el examen físico sigue teniendo un papel protagónico en la detección de las patologías gastrointestinales mediante un adecuado examen dermatológico. La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano con una superficie de 2 m2, su espesor varía entre los 0,5 mm (en los párpados) a 4 mm (en el talón) y su peso aproximado es de 5 kg (1). Muchas manifestaciones cutáneas pueden ser indicativos de enfermedades sistémicas. Por su parte, la hemorragia de vías digestivas altas (HVDA) es la emergencia más frecuente en gastroenterología con una mortalidad entre 5 %-14 %; la tasa de incidencia varía geográficamente. Las principales causas son úlcera péptica (40 %) y várices esofágicas (10 %-24 %), las causas raras que corresponden a menos del 1 % de las etiologías son muy difíciles de diagnosticar, pero con un buen examen físico se pueden sospechar (2, 3).
En este trabajo se presentan 4 causas raras de sangrado digestivo que comprometen secuencialmente el esófago, estómago, duodeno y yeyuno, cuyo diagnóstico fue orientado por las manifestaciones dermatológicas.
Caso 1: Pénfigo vulgar
Paciente femenina de 46 años quien durante la hospitalización presentó un episodio de hematemesis con expulsión de membranas blanquecinas por la boca. En el examen físico presentaba múltiples erosiones y escamocostras con vesículas que cubrían toda la superficie corporal. Con diagnóstico base de pénfigo vulgar se llevó a endoscopia y se encontró una esfacelación del epitelio esofágico compatible con esofagitis disecante superficial (Figura 1A y B) (4).
Caso 2: Síndrome de Rendu-Osler-Weber (OWR)
Paciente de 62 años quien ingresó a urgencias por hematemesis y melenas. En el examen físico se evidenciaron múltiples pápulas eritematovioláceas y telangiectasias en el labio, lengua y cara, con lo cual se sospechó de OWR y se llevó a endoscopia, en la que se encontraron múltiples angiodisplasias en el estómago (Figura 1C y D) (5).
Caso 3: Púrpura de Schoenlein-Henoch (PHS)
Paciente de 28 años quien ingresó a urgencias por episodios de melanemesis, asociado refería artralgias, mialgias y presentaba lesiones purpúreas en las rodillas y glúteos. Con sospecha de PHS se llevó a endoscopia y se encontró en el duodeno edema grave, eritema y erosión con engrosamiento e infiltración de la mucosa, por lo cual se tomó una biopsia (paciente con 90 000 plaquetas, no presentó sangrado) con inmunohistoquímica, la cual confirmó la infiltración por inmunoglobulina A (IgA) (Figura 1E y F) (6).
Caso 4: Neurofibromatosis tipo 1
Paciente femenina de 29 años quien ingresó a urgencias por melanemesis, melenas y episodios recurrentes de rectorragia. En el examen físico presentó manchas “café con leche”, múltiples neurofibromas en el cuerpo asociado con escoliosis, se realizó una endoscopia y colonoscopia sin observar lesiones, por un sangrado digestivo oscuro manifiesto se llevó a enteroscopia intraquirúrgica y se evidenciaron en la laparoscopia múltiples masas (10 mm a 40 mm) en yeyuno proximal y medio, los cuales se resecaron y el estudio histopatológico confirmó que eran neurofibromas plexiformes (no teníamos enteroscopia de uno o dos balones, por lo cual se llevó a cirugía) (Figura 1G y H) (7).