Introducción
La vejez es un fenómeno complejo en la vida del ser humano, la cual tiene una condición sociocultural y no solo biológica. Este proceso se ve reflejado en la prevalencia de Personas Adultos Mayores (PAM) que, de acuerdo a las estadísticas nacionales como lo es la Encuesta Intercensal del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en el 2015, esta población conformaba el 10.4 % de la población total en México, así mismo, de acuerdo con la información de las proyecciones poblacionales del Consejo Nacional de Población (CONAPO), para el año 2030 dicho grupo representará el 14.6 % del total de la población del país 1,2.
Hablar de la vejez es indicar un período vital donde ocurren cambios en las condiciones físicas, mentales, funcionales y de salud de las personas. En cuanto a los aspectos psicológicos, el envejecimiento está asociado con la percepción desarrollada por la persona adulta mayor, la cual suele mirarse como la pérdida del rol social y su vigor físico, así como sexual; no obstante, a pesar de experimentar estas pérdidas, las personas continúan siendo seres que se desarrollan en las diversas esferas, como es el caso de la esfera sexual 3,4. Al conceptualizar la sexualidad, se debe considerar que no es de forma exclusiva la relación con los aspectos sexuales del placer; la sexualidad comprende aspectos como el afecto y las relaciones humanas; por lo tanto, es un aspecto inherente al ser humano, que está presente en el transcurrir de la vida, que hace parte de su bienestar 5.
No obstante, el percibir un comportamiento sexual adecuado podría influir sobre la percepción de los cambios físicos y fisiológicos al llegar a la etapa de la vejez, el cual ocasiona la creencia o actitudes de que son seres asexuados, lo que limita que al ser adulto mayor se persigan los mismos objetivos que en otras etapas de la vida: placer del contacto corporal, comunicación, dignidad y la seguridad emocional, lo que ocasiona sentirse querido 2. En relación con lo anterior, las creencias y prejuicios influyen en la expresión del comportamiento sexual, lo que puede generar una afección en la autoestima sexual, preocupación sexual y depresión sexual 6.
Por otra parte, las actitudes negativas hacia la sexualidad en la vejez, incluyen las creencias generales sobre las normas de una cultura, la percepción de la adecuación de ciertos comportamientos sexuales en la etapa adulto mayor y decisiones personales sobre la permisividad sexual 7. Es por ello, que el presentar una actitud negativa, ocasiona una visión negativa de la vejez que impide la expresión de la esfera sexual en los adultos mayores 2.
Referido lo anterior, la salud pública tiene una función dentro de este estudio al identificar la percepción del comportamiento sexual y las actitudes hacia la sexualidad en la vejez del adulto joven y de mediana edad; no obstante, el mirar la sexualidad en un grupo vulnerable, como son las PAM, desde una esfera invisibilizada, puede disminuir en un futuro la falta de una vida sexual activa y satisfactoria 5. Dicho lo anterior, se plantea el objetivo de determinar la relación de la percepción del comportamiento sexual de adultos mexicanos con las actitudes hacia la sexualidad del adulto mayor.
Materiales y métodos
Participantes
El presente es un estudio descriptivo-correlacional, debido a que detalla las características de la percepción del comportamiento sexual y las actitudes hacia la sexualidad en la vejez en un grupo de adultos jóvenes, también fue de tipo transversal, ya que la obtención de datos fue realizada en un solo momento 8.
La muestra para este estudio fue determinad mediante G* power con un tamaño del efecto de 0.15, probabilidad de error del 0.05 y poder de .095, indicando la inclusión de 567 personas; sin embargo, la muestra final fue de 586 personas. El muestreo seleccionado fue no probabilístico a conveniencia y recolectado mediante la plataforma Google Forms en el periodo agosto-octubre de 2021, cuyos criterios de inclusión fueron: tener entre 18 y 59 años, nacionalidad mexicana, que hayan iniciado con su vida sexual y que contaran con alguna red social (WhatsApp, Facebook, Instagram y Twitter), computadora o dispositivo móvil.
Instrumentos
Previo al inicio de recolección de datos, los participantes tenían que dar lectura del consentimiento informado digital y dar su aceptación para participar en el estudio, posteriormente, se aplicó una cédula de datos sociodemográficos que incluyó edad, sexo, estado civil y religión.
Seguido se administró la escala corta de sexualidad con alfa de Cronbach de 0.83, la cual evaluó la percepción del comportamiento sexual a través de 15 reactivos divididos en tres subescalas: autoestima sexual, depresión y preocupación sexual. La puntuación de esta escala oscila entre 15 y 75 puntos, con un tipo de respuesta es en escala tipo Likert, que va desde total desacuerdo y a totalmente de acuerdo (1 a 5 puntos). Los reactivos del 1 al 5 evaluaron la autoestima sexual, del 6 al 10 la depresión sexual y del 11 al 15 la preocupación sexual. Los resultados indican que, a mayor puntuación, mejor aprecio hacia su comportamiento sexual 9.
De igual manera, se utilizó la escala de actitudes hacia la sexualidad en la vejez, que consta de 18 reactivos divididos en 4 subescalas: decisiones personales sobre la permisividad sexual, hombres ante la sexualidad, conocimientos de cambios fisiológicos y mitos hacia la sexualidad. Las opciones de respuesta se encuentran en escala tipo Likert con puntuaciones que van desde 1 (total desacuerdo) a 5 (totalmente de acuerdo). La puntuación total oscila entre 18 y 90 puntos, a mayor puntuación, mayores actitudes positivas hacia la sexualidad en la vejez. Esta escala cuenta con un alfa de Cronbach de 0.87 10.
Procedimientos
En primera instancia se invitó a participar en el estudio a adultos de 18 a 59 años mediante redes sociales, como Facebook, WhatsApp, Twitter e Instagram, para ello, los participantes debieron contar con algún dispositivo móvil para responder a los instrumentos mediante la plataforma de Google Forms. Previamente, los participantes firmaron el consentimiento informado electrónico y posteriormente, se procedió con la administración de los instrumentos.
Análisis de datos
El análisis de datos fue realizado mediante el programa SPSS versión 22 con estadística descriptiva como frecuencia, porcentaje, media y desviación estándar. De igual manera, se realizó una prueba de normalidad, identificándose distribución no normal en todas las variables (p<.05), debido a lo anterior, la relación de las variables se realizó con la prueba de Sperman y la diferencia de medias de la sexualidad y actitudes entre hombres y mujeres con U Mann Whitney.
Consideraciones éticas
El presente estudio fue aprobado por el Comité de Ética e Investigación de la Facultad de Enfermería de la Universidad Autónoma de Coahuila y se apegó a lo señalado en la Declaración de Helsinki (1964), en la Ley General de Salud en materia de investigación para la salud y el Código de Núremberg.
Resultados
En el estudio participaron 586 personas, de las cuales, el 71.2 % (417) eran mujeres y el 28.8 % (169) hombres, con una media de edad de 25.61 años (DE=7.56), el valor mínimo de edad fue 18 y el máximo de 59 años. Con respecto al estado civil, el 70.8 % (415) eran solteros, el 18.4 % (108) casados, el 8.2 % (48) vivían en unión libre y el 2.6 % (15) divorciados. De acuerdo con la religión, el 77.8 % (456) eran católicos, el 11.1 % (65) no pertenecían a ningún tipo de religión, el 8.5 % (50) eran cristianos y el 2.6 % (15) pertenecían de otras religiones.
Por otra parte, la descripción de las variables de actitudes hacia la sexualidad en la vejez y sexualidad se muestra en la Tabla 1. Al comparar las variables por sexo, la percepción del comportamiento sexual y las actitudes hacia la sexualidad en la vejez fue diferente significativo (p<.001), siendo mayor las actitudes favorables hacia la sexualidad en la vejez en mujeres y mejor aprecio hacia su conducta sexual en hombres.
Variables | To | tal | Hom | bre | Mu | jer |
---|---|---|---|---|---|---|
M | DE | M | DE | M | DE | |
Actitudes hacia la sexualidad en la vejez | 50,69 | 7,985 | 48,66 | 7,87 | 51,51 | 7,89 |
Deseo sexual | 14,24 | 2,635 | 13,79 | 2,77 | 14,42 | 2,55 |
Actitud de hombres ante la sexualidad | 7,60 | 1,911 | 7,15 | 1,93 | 7,79 | 1,87 |
Mitos sobre la sexualidad | 18,58 | 3,123 | 18,04 | 3,37 | 18,80 | 2,99 |
Conocimientos de cambios fisiológicos | 10,26 | 2,223 | 9,68 | 2,13 | 10,50 | 2,21 |
Percepción de comportamiento sexual | 38,37 | 5,722 | 40,43 | 6,49 | 37,53 | 5,15 |
Autoestima sexual | 15,36 | 2,024 | 15,51 | 2,34 | 15,30 | 1,88 |
Depresión sexual | 13,90 | 2,071 | 14,29 | 2,59 | 13,74 | 1,79 |
Preocupación sexual | 9,10 | 4,595 | 10,63 | 5,24 | 8,49 | 4,15 |
Nota: M= media, DE= desviación estándar, Max= valor máximo, Min= valor mínimo.
Fuente: elaboración propia.
En la correlación de las variables se observa que, a mayor edad, mayor actitud favorable hacia la sexualidad en la vejez, mayor mitos sexuales y conocimiento de cambios físicos. Así mismo, a mejor aprecio hacia su comportamiento sexual, mayor actitud favorable hacia la sexualidad en la vejez (ver tabla 2).
Variables | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 8 | 9 | 10 |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
1. Edad | 1 | .146* | .150* | .033 | .136** | .131** | .016 | .035 | .020 | -.031 |
2. ASV | 1 | .844** | .570** | .829** | .779** | .114* | .011 | .032 | -.174** | |
3. Deseo sexual | 1 | .319** | .640** | .584** | -.068 | -.020 | .055 | -.121* | ||
4. HS | 1 | .300** | .357** | -.115* | .018 | -.046 | -.136* | |||
5. MS | 1 | 524** | -.035 | .036 | .027 | -.098* | ||||
6. CF | 1 | -.143** | .015 | .017 | -.198** | |||||
7. PCS | 1 | .376** | -.385** | .835** | ||||||
8. AS | 1 | -.124** | -.056 | |||||||
9. DS | 1 | .122* | ||||||||
10. PS | 1 |
Nota: * = p < 0,05, ** = p < 0,001, ASV= actitudes hacia la sexualidad en la vejez, HS= actitud de hombres ante la sexualidad, MS= mitos sobre la sexualidad, CF= conocimientos de cambios fisiológicos, PCS= percepción de comportamiento sexual, AS= autoestima sexual, DS= depresión sexual, PS= preocupación sexual.
Fuente: elaboración propia.
Discusión
El presente estudio constituye un aporte a la evidencia científica existente, ya que indaga la influencia de la percepción del comportamiento sexual sobre las actitudes hacia la sexualidad en la vejez en adultos mexicanos. La sexualidad en el ámbito de la salud pública tiene una gran importancia, debido a que los individuos son considerados como un ser sexuado y a que esta es una forma de interacción humana y de interrelación, no solo es algo físico, sino que involucra también aspectos emocionales y sociales importantes para el desarrollo y calidad de vida 5.
No obstante, en este estudio la participación de las mujeres fue mayor, esto puede ser explicado porque son más expresivas con su propia salud sexual, estos datos sugieren que este género parece estar más receptivo y tener una percepción más flexible que los hombres cuando se trata el tema de la expresión de su sexualidad 11.
Referente a la variable percepción del comportamiento sexual, se obtuvo una M de: 38.37 puntos, siendo menor a lo reportado en España con una M de 42.32 12. La sexualidad ha sido juzgada como algo inapropiado, teniendo un impacto en el ámbito de conducta sexual, significado que las personas les otorgan a sus propios comportamientos y que se basan en sus ideas, valores y en las percepciones culturales y sociales 13.
Respecto a las actitudes hacia la sexualidad en la vejez, se observó una M= 50.69, siendo menos favorables las actitudes en comparación con el estudio realizado en España con una M=75.23 14. La percepción de la sexualidad en la tercera edad, se enfrenta a una percepción menos favorable debido a la falta de información al respecto, pues esta etapa es generalmente abordada de forma negativa; en especial, en torno a la sexualidad, lo que puede dificultar o influir en la manera de disfrutar libremente del derecho a la sexualidad 13.
Así mismo, se halló que las mujeres tienen mayores actitudes favorables hacia la sexualidad y los hombres un mayor aprecio hacia su comportamiento sexual. Esto tiene similitud con dos estudios, donde se demostró que las mujeres tienen un mayor rechazo hacia la sexualidad, alejándose de los aspectos sexuales, así mismo, en Cajeme (Valle del Yaqui) se reportó que los hombres tienden a tener mayores prejuicios, a diferencia de las mujeres, que tienden a ser más perceptivas a los aspectos sexuales 11,15. Esto, debido a que las creencias culturales mexicanas y los roles arbitrarios de la sociedad cumplen un factor importante, en donde el hombre se debe mostrar con mayor experiencia sexual, mientras que las mujeres tienen un rol que suele limitar su expresión sexual 15,16,17.
Por otra parte, se observó que, a mayores actitudes favorables hacia la sexualidad en la vejez, mejor percepción del comportamiento sexual; siendo similar al estudio realizado por Ramos y Melguizo en el 2017 18, en donde se evidenció que a mayor actitud positiva hacia la sexualidad en el adulto mayor, mayor impacto en su propia sexualidad; de igual manera, Castellano Fuentes en su estudio realizado en Tenerife, reportó la relación entre las actitudes positivas hacia la vejez y un adecuado ajuste emocional 19.
Lo anterior podría explicar que el tener un pensamiento conservador respecto a la sexualidad puede generar estereotipos sexuales negativos; así mismo, generar inseguridad en la expresión de su sexualidad 11, estas actitudes son percepciones socioculturales compartidas 20.
Es por ello que, los cambios que se generan hacia la percepción de las personas mayores, pueden estar asociados con el rol social que es impuesto, así como a los factores socioculturales que pudieran intervenir en la forma como es visto el adulto mayor, atribuyendo prejuicios y descalificativos al concepto de sexualidad para esta edad. Así que parte de esta concepción prejuiciosa de la vejez proviene de la idealización de la juventud que se realiza por parte de la sociedad actual 21.
Conclusiones
En conclusión, se encontró una relación positiva entre la percepción del comportamiento sexual con actitudes hacia la sexualidad en la vejez, teniendo las mujeres mejores actitudes sexuales hacia la vejez y los hombres mejor percepción del comportamiento sexual. Estos resultados señalan la importancia de plantear futuras intervenciones multidisciplinarias donde mejoren las percepciones y actitudes de la sexualidad propia y de diversos grupos vulnerables como son los adultos mayores, con el fin de facilitar la transición hacia la vejez y para que el adulto viva, en un futuro, una vida sexual sana y sin prejuicios.