Introducción
Los avances tecnológicos en el campo de la medicina, han permitido a las personas obtener nuevas formas de tratamiento para alteraciones cardiacas que ponen en riesgo la vida. Desde 1930, cuando apareció el primer marcapaso portátil, la estimulación cardiaca cobró importancia para mejorar la sobrevida de las personas, haciendo que su uso sea más frecuente y tenga un costo-beneficio relevante para los sistemas de salud, en términos de años de vida saludable con calidad de vida -AVAC-1-3. Los dispositivos de estimulación cardiaca tienen tanto funciones diagnósticas como terapéuticas y una gran complejidad técnica. A pesar de su evolución tecnológica a través del tiempo, aún las personas implantadas con este tipo de dispositivos, persisten con dificultades para la aceptación de los mismos en la vida cotidiana, ya que suponen algunas limitaciones y cambios en el estilo de vida2,4-10.
La aceptación como constructo abarca no solo cuestiones de carácter físico, sino también psicológico y social11-14. Constituye una herramienta fundamental para obtener el máximo de los beneficios que ofrece la tecnología. Por tanto, resulta relevante para el profesional de la salud evaluar todos los aspectos que influyen en las condiciones de salud de los individuos en aras de optimizar la calidad de la atención y obtener mejores resultados en términos de bienestar y salud de las personas implantadas. En la literatura actual, son escasos los instrumentos de medición específicos para las personas con dispositivos de estimulación cardiaca. No obstante, se encontró que el instrumento Florida Patient Acceptance Survey (FPAS, su sigla en inglés), es una medida específica para este grupo poblacional y en virtud de sus propiedades psicométricas óptimas, es un instrumento fiable para medir la aceptación de las personas a los dispositivos de estimulación cardiaca de una manera objetiva, definida esta como el alojamiento psicológico y la comprensión de las ventajas y desventajas del dispositivo, la recomendación del dispositivo a los demás y la obtención de beneficios en términos de funcionamiento biomédico, psicológico y social11.
El FPAS consta de 18 ítems con escala de respuesta tipo Likert. Evalúa cuatro categorías o dimensiones: retorno a la vida, distress relacionado con el dispositivo, valoración positiva y preocupaciones de la imagen corporal. La escala fue desarrollada a través de un estudio psicométrico en el 2005, cuando se reportó un alfa de Cronbach de 0,83 para toda la escala, mientras que para cada una de las categorías o dimensiones un coeficiente de Cronbach entre 0,74 a 0,89; así mismo, se demostró validez convergente con la escala de calidad de vida SF - 36 y validez divergente con las escalas CES - D y STAI11. De igual forma, la escala fue adaptada y validada en población danesa, en la que reportan que la validez del instrumento fue confirmada con los cuatro factores con un alfa de Cronbach que va de 0,73 a 0,85, por lo que demostró ser una medida válida y fiable de aceptación al dispositivo en los pacientes que requieren estimulación cardiaca (tabla 1)15,16.
Tabla 1 Validez y fiabilidad del Florida Patient Acceptance Survey (FPAS)

Fuente: Castillo Sierra DM, González Consuegra RV. Intervención de enfermería para la aceptación del paciente al cardiodesfibrilador, aplicada en el preimplante.
Este instrumento de origen anglosajón no cuenta con una versión en español; por tanto, el objetivo de este estudio es obtener la versión en idioma español adaptada al contexto colombiano, que conserve la estructura del instrumento original con propiedades psicométricas adecuadas para su implementación en la atención en salud de las personas con implante de dispositivos cardiacos.
Materiales y métodos
Es un estudio de tipo metodológico que aplica pruebas psicométricas para llevar a cabo los procesos de validez facial, validez de contenido, confiabilidad y consistencia interna, en este caso del instrumento “FPAS versión en Español''. La psicometría procura fortalecer y dar evidencias empíricas de una u otra propiedad, conforme al propósito de la medición; garantiza que los instrumentos de medida sean debidamente estandarizados y posean validez17.
Las dos características métricas esenciales para valorar la precisión de un instrumento son la validez y la fiabilidad; la validez de una medida entendida como el grado en que proporciona información del fenómeno que pretende medir y no de otros18. Burns y Grove19 refieren que la validez de un instrumento es la determinación del alcance con que este es capaz de reflejar las características del concepto abstracto que se examina, mientras que para Polit y Hungler20 la validez constituye el segundo criterio de importancia para evaluar la idoneidad de un instrumento cuantitativo; denota el grado en que el instrumento mide lo que se supone que debe medir. En este caso, la validez facial o aparente es el grado en que una situación de medida parece ser válida desde el punto de vista del observador18 y la validez de contenido que se mide para evitar conclusiones inválidas a partir de una escala o instrumento. En esta está la información que se recoge de los ítems debe satisfacer adecuadamente los criterios conceptuales y el alcance de los mismos para explicar un fenómeno en salud18. Esta medición se logra a partir de criterios de un panel de expertos, quienes evalúan las variables con las que se define21.
Por otra parte, la fiabilidad se refiere a la exactitud con la que el instrumento mide el atributo para el cual está diseñado. Si los puntos que componen una escala miden, en teoría, el mismo constructo, los cuales deben mostrar una alta correlación, la escala debe mostrar un alto grado de homogeneidad22. Cronbach ha expresado que la confiabilidad de un instrumento de medición, se refiere al grado en que su aplicación repetida al mismo objeto o sujeto, produce iguales resultados, es decir a la condición de ser reproductible, en otras palabras la capacidad de mostrar resultados análogos en situaciones similares23.
Procedimiento
Validez facial
La validez facial se llevó a cabo mediante el juicio de expertos: una enfermera experta en dispositivos de estimulación cardiaca, dos enfermeras con experiencia en validación de instrumentos de medición y manejo de pacientes con alteraciones del rimo cardiaco, un enfermero psicólogo especialista en Salud Mental y un médico electrofisiólogo. Cada experto evalúo los criterios de claridad, precisión y comprensión de cada uno de los ítems, asignando el puntaje correspondiente (tabla 2).
Validez de contenido
Se realizó, así mismo, a partir del juicio de expertos. El objetivo del juicio consiste en evaluar qué tan relevantes y representativos son los ítems del instrumento para la aceptación del paciente al dispositivo. Para evaluar la validez de contenido se ha decido trabajar con los criterios de Lawshe modificados por Tristán, en tres categorías: esencial, útil pero no esencial y no necesario24.
Confiabilidad
Se hizo a través de la teoría del ítem, para lo cual se tomaron siete personas por ítem teniendo en cuenta que el instrumento FPAS versión en español tiene 18 ítems. En total participaron 126 personas con implante de dispositivos de estimulación cardiaca: marcapasos, cardiodesfibrilador y cardiorresincronizadores, para llevar a cabo la prueba de confiabilidad, previo diligenciamiento del consentimiento informado.
Consistencia interna
La medida de la fiabilidad se efectuó mediante el coeficiente de alfa de Cronbach de acuerdo con el criterio general de George y Mallery, el cual asume que los ítems medidos en escala tipo Likert miden un mismo constructo y están altamente correlacionados25(tabla 3)
Análisis estadísticos
Para las variables sociodemográficas se realizó un análisis descriptivo, utilizando distribución de frecuencias y porcentajes para realizar la caracterización de la muestra. Para la validez facial o aparente y la validez de contenido, se utilizaron las pruebas estadísticas del coeficiente de kappa de Fleiss, cuyo resultado se evalúa con la interpretación dada por Landis y Koch (tabla 4) y el índice de Lawshe modificado por Tristan, quien señala que se considera como aceptable cuando reporta un CVR’ de 0.5823, independiente del número de expertos que se incluyen (72); de esta manera se estableció la concordancia entre los jueces. La fiabilidad fue calculada a través de la prueba estadística del coeficiente de alfa de Cronbach.
Resultados
Variables sociodemográficas
La media de edad de los participantes fue de 68,37 DS ±14 años (fig. 1); 58,9% pertenecía el género masculino frente a 41,1% del femenino. El nivel educativo fue bajo: el 70,2% correspondió a primaria y el 13,7% sin escolaridad. El 51,6% vivía en el área urbana y el 48,4% en área rural. El 66,9% pertenece al estrato socioeconómico 1. El 35,5% eran de estado civil casado, seguido del 24,2% viudez y 19,4% en unión libre. El 33,9% estaba desempleado, el 26,6% eran trabajadores independientes y el 36,6% trabajaba en el hogar y eran mujeres. En relación con el tipo de dispositivo de estimulación cardiaca, el 58,9% de los participantes tenía marcapasos, el 32,3% cardiodesfibrilador y el 8,9% cardiorresincronizadores. La media de tiempo del dispositivo con fue de 4,06 DS ± 4,5 años de implantación. El 83,9% refirió conocer la indicación médica del dispositivo y 16,1% manifestó no conocerla. En la tabla 5 se aprecian los resultados en todas las variables sociodemográficas
Validez facial
Para determinar el grado de acuerdo entre los evaluadores respecto a la claridad, precisión y comprensión de cada uno de los ítems del instrumento, se calculó el índice de concordancia de kappa de Fleiss y el índice de Lawshe modificado. Los resultados muestran un acuerdo moderado entre los jueces para las categorías de claridad, precisión y comprensión (tabla 6).
Validez de contenido
Se evaluó a través de los expertos. Para tal fin se calculó el índice de Lawshe modificado y el índice de concordancia kappa de Fleiss. Para determinar si hubo un consenso entre los expertos se consideró un CVR’ mayor 0,58; el resultado de la prueba estadística arrojo un índice de Lawshe modificado de 0,822, que de acuerdo con la interpretación dada por Tristan es satisfactorio. En relación con el coeficiente kappa de Fleiss, el resultado 0,624, mostró un acuerdo substancial entre los jueces. Por tanto, los ítems evaluados representan el contenido de lo que la escala pretende evaluar, que es la aceptación al dispositivo de estimulación cardiaca (tabla 7).
Confiabilidad
El análisis estadístico se llevó a cabo mediante el uso del programa estadístico SPSS versión 24. La prueba del coeficiente de Cronbach de toda la escala es de 0,724, por lo que el instrumento FPAS versión en español, es fiable para medir la aceptación del paciente al dispositivo de estimulación cardiaca.
Discusión
Los resultados de las variables sociodemográficas permitieron observar algunas tendencias propias del contexto colombiano, en las personas con un dispositivo de estimulación cardiaca. Una de ellas está relacionada con el género, ya que la muestra difiere de otros estudios realizados en este grupo poblacional, en donde predomina el género masculino26-29. Los resultados muestran que la población femenina participante tiene un número importante de representación (H: 58,3% vs. M: 41,1%), dato que puede llegar a ser importante para establecer diferencias por género frente a la experiencia de vivir con un dispositivo de estimulación cardiaca. Otro aspecto relevante tiene que ver con la ocupación de la población implantada, pues se encontró que la mayoría no tiene un empleo o trabaja como independiente, situaciones que afectan el rol social que desempeñan y la calidad de vida de las familias en las que se encuentran inmersos. De igual forma, el 48,4% de la población vive en área rural, otra característica crucial para la atención en salud de las personas implantadas, si se tiene en cuenta que el acceso a los servicios de salud en las zonas rurales colombianas tiene limitaciones significativas, frente a la oportunidad y el nivel de atención requerido para las personas con dispositivos cardiacos30,31.
Por otra parte, la versión en español del instrumento FPAS, en la fase de adaptación transcultural para el contexto colombiano, tuvo modificaciones, las cuales no afectaron la estructura del instrumento original y lo que se pretende medir, hecho que fue corroborado a través de las pruebas de validez y fiabilidad, en las que se obtuvieron resultados aceptables, que son similares a la validación del instrumento original y a la versión adaptada en la población danesa11,15,16. De ahí que la escala permita medir la aceptación al dispositivo de las personas implantadas. Frente a las características sociodemográficas de los participantes, existen algunos aspectos similares, tales como la edad promedio que se encuentra por encima de los 60 años, en su mayoría población masculina, casados; al igual que el estudio de Burns et al.11 este estudio incluyó tres tipos de dispositivos cardiacos, sin embargo, la mayoría de los participantes de esta validación contaba con marcapasos y una proporción menor con otros dos tipos de dispositivos, hecho que difiere del estudio original del instrumento en cuanto a una distribución homogénea de la muestra frente al tipo de dispositivo.
La evaluación por parte de expertos en el área de las alteraciones del ritmo cardiaco y la salud mental, permite abordar de manera más homogénea el cuidado de enfermería y las necesidades de salud que tienen las personas con implante de un dispositivo de estimulación cardiaca en la vida cotidiana. Sin embargo, una de las dificultades de este estudio consistió en encontrar expertos, dado que se encuentran profesionales de enfermería con conocimientos prácticos en el área de Electrofisiología, pero con poco abordaje en la validación de instrumentos. De igual forma, este proceso de validación evidenció la importancia de abordar la aceptación de las personas al dispositivo, más allá de una mirada biotecnológica solamente, sino también de las necesidades psicológicas y sociales que influyen en su calidad de vida y en la manera de aprovechar los avances tecnológicos en la vida cotidiana.
Por consiguiente, cada vez es más necesario disponer de instrumentos de medida en el ámbito de la salud que se puedan utilizar en la práctica clínica e investigación32. La validación del instrumento permite tener una herramienta disponible para la práctica de enfermería en el cuidado de personas con dispositivos de estimulación cardiaca, de fácil acceso y aplicación, identificando necesidades de cuidado, así como estrategias específicas que puedan dar respuesta para mejorar el bienestar y la salud de las personas implantadas. Es importante señalar que una vez analizados los datos, se evidenció que la mayoría de los participantes a quienes se les aplicó el instrumento, pertenece a un estrato socioeconómico y nivel educativo bajo, circunstancia que fortalece la comprensibilidad del instrumento.
Conclusión
El Cuestionario de Florida para la aceptación del paciente, FPAS, en su versión en español, es un instrumento específico, válido y fiable para medir la aceptación al dispositivo de estimulación cardiaca de las personas implantadas en el contexto colombiano. Por tanto, esta herramienta puede ser utilizada en el ámbito clínico y en futuras investigaciones que aborden el cuidado y las necesidades de atención en salud de este grupo poblacional.