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Vitae

Print version ISSN 0121-4004

Vitae vol.15 no.2 Medellín July/Dec. 2008

 

ATENCIÓN FARMACÉUTICA

 

CARACTERÍSTICAS DEL CONSUMO DE FÁRMACOS PSICOTRÓPICOS EN ESTUDIANTES DE CIENCIAS DE LA SALUD

 

CHARACTERISTICS OF COMSUMPTION OF PSYCHOTROPIC DRUGS AMONG STUDENTS OF HEALTH SCIENCES

 

 

Gloria I. MARTÍNEZ D.1*; Lina M. MARTÍNEZ S.1; Maria de los Ángeles RODRÍGUEZ G.1; Paula A. MESA M.1; Juan E. MUÑOZ M.1; Julián BEDOYA M.1
1 Facultad de Medicina de la Universidad Pontificia Bolivariana. Calle 78 B No 72ª-109, Medellín, Colombia

 

 


RESUMEN

Las estadísticas actuales informan que el consumo de psicotrópicos va en aumento en la población joven y que está relacionado con factores sociodemográficos como la edad y el género, además de ciertos factores psicosociales, como la influencia de amigos y las relaciones intrafamiliares. El objetivo principal de este estudio es determinar las características socio-demográficas y de consumo de fármacos psicotrópicos en estudiantes de ciencias de la salud -medicina y enfermería. Se investigan, además, los grupos farmacológicos y fármacos de mayor uso, la prevalencia, la frecuencia del consumo y la persona que lo motiva. Se realiza un estudio de tipo descriptivo cross-sectional con 820 estudiantes encuestados, el 71,7% de ellos son de género femenino y la edad promedio del grupo es de 21,1 años. La prevalencia de consumo de psicotrópicos es de 18,3% en enfermería y 16% en medicina, sin ser esta diferencia estadísticamente significativa, y es mayor en hombres (19%) que en mujeres (10%), p=0.02. Los hallazgos de este estudio confirman la tendencia a nivel mundial de un alto consumo de medicamentos psicotrópicos entre la población joven, donde el grupo de los antidepresivos figura en el primer lugar (12.9%). Estos resultados no tienen en cuenta si el consumo se hace por prescripción médica o por automedicación.

Palabras clave: Psicotrópicos, psicofarmacología, farmacoepidemiología


ABSTRACT

Current Statistics report that psychotropic drugs consumption is increasing among young people and this is related to social and demographic factors such as age and gender, and also to psychosocial factors as friends influence and personal relations inside the family. The aim of this study is to determine social and demographic characteristics as well as prevalence and patterns of psychotropic drugs use among students of health sciences- medicine and nursery-. Pharmacological groups, the most used drugs, prevalence, frequency, and person who motivates psychotropic drugs consumption are also investigated. A cross-sectional study was carried out with 820 students queried, 71.7% are female, and the group average age is 21.1 years. Prevalence use of psychotropic drugs is 18.3% for nursery and 16.5% for medicine, but this difference is not statistically significant, and it is greater in men (19%) than in women (10%), p=0.02. The findings of this study confirm the world tendency of high psychotropic drugs consumption among young people, where antidepressants appear in the first place (12.9%) independent if the consumption comes of medical prescription or self-medication.

Keywords: Psychotropic drugs, Psychopharmacology, Pharmacoepidemiology


 

 

INTRODUCCIÓN

Los psicotrópicos son compuestos que inducen efectos neurológicos, psicológicos y fisiológicos, debido a su capacidad de modificar la acción de los neurotransmisores en el cerebro e incluyen tanto las denominadas sustancias psicoactivas como los psicofármacos. Se da comúnmente el nombre de psicoactivas a las sustancias que afectan la mente o la conducta, lo cual indica que puede aplicarse tanto a compuestos de uso terapéutico, como son las benzodiacepinas y los neurolépticos, como a sustancias de uso "recreativo" o consumo social con fines no terapéuticos, como la cocaína y la heroína. El término psicofármaco se aplica a los compuestos que modifican tanto las funciones psíquicas como los estados mentales, y son utilizados fundamentalmente para el tratamiento de trastornos mentales como las psicosis, los trastornos de ansiedad, los trastornos depresivos, el síndrome de déficit de atención e hiperactividad, y la enfermedad bipolar entre otros (1).

Los psicotrópicos-psicofármacos se clasifican, según Goodman y Gilman (2), en: antipsicóticos y neurolépticos, ansiolíticos e hipnóticos, antidepresivos, y antimaníacos. Cada uno de estos grupos tiene indicaciones de uso muy precisas en la terapéutica, pero también producen un sinnúmero de reacciones adversas que alteran la conducta, la cognición, el sueño, el apetito e incluso pueden alterar las funciones motoras y autónomas de quien los consume.

Por otro lado, las estadísticas actuales informan que el consumo de los psicotrópicos- psicofármacos va en aumento en la población de adolescentes -menores de 18 años- y adultos jóvenes -entre los 18 y los 40 años- (3,4) y está relacionado con una serie de factores sociodemográficos como la edad y el género (5), además de ciertos factores psicosociales, entre ellos la influencia de amigos y las relaciones intrafamiliares (6).

Los resultados de estudios para determinar la prevalencia de uso de psicotrópicos en población estudiantil (tanto en trastornos patológicos como no patológicos), se han relacionado más con el consumo de sustancias psicoactivas, es decir con potencial de generar dependencia, por lo cual están enmarcados bajo la clasificación farmacológica dada por la Organización Mundial de la Salud sobre este tipo de sustancias, que incluye: los depresores del sistema nervioso, como el alcohol y los sedantes e hipnóticos, los estimulantes como nicotina, cocaína y anfetaminas, los opioides y los alucinógenos (7).

Por esa razón este estudio descriptivo tiene como objetivo principal identificar la prevalencia del consumo de psicotrópicos-psicofármacos en estudiantes de ciencias de la salud: enfermería y medicina, considerando tanto aquellos que tienen una indicación terapéutica precisa y que son controlados por prescripción médica, como aquellos cuyo consumo se hace en forma ocasional, para tener, por ejemplo, un mejor rendimiento académico; y sean consumidos por automedicación o por influencia de familiares o amigos. Se evalúan, además, los grupos farmacológicos de mayor consumo, la persona que motivó el consumo y la forma de obtención de los medicamentos.

Finalmente, el propósito de esta investigación es aportar información que permita establecer las características del consumo de fármacos psicotrópicos en una población de estudiantes de ciencias de la salud y determinar si este consumo está relacionado con factores de tipo socio demográficos como edad, género, estrato socioeconómico, lugar de residencia, estado civil, y con factores de tipo psicosocial, como la presencia de amigos y familiares consumidores de este tipo de fármacos.

 

MATERIALES Y MÉTODOS

Se realizó un estudio descriptivo cross sectional. La población de estudio estuvo conformada por estudiantes de ambos géneros, sin importar su edad y matriculados en el segundo semestre de 2006 en programas de enfermería y medicina de una institución universitaria de la ciudad de Medellín. No se definió muestra, pues se quería incluir el mayor número posible de estudiantes.

Se aplicó la Encuesta de Vigilancia Epidemiológica de Sustancias PsicoActivas - VESPA- modificada (8), la cual fue diligenciada en forma personal y anónima (autoinforme de consumo) por cada uno de los estudiantes encuestados. Las variables incluidas en el estudio fueron sociodemográficas (edad, género, estado civil, lugar de residencia, estrato socioeconómico); relativas al consumo de los psicotrópicos-psicofármacos (consumo en los 12 meses anteriores a la encuesta, grupos farmacológicos, nombre del fármaco psicotrópico, frecuencia de consumo, persona que motivó el consumo, forma de obtención); y variables psicosociales (consumo de psicotrópicos-psicofármacos por amigos o familiares).

Para el procesamiento y análisis de la información se creó una base de datos en el Programa SPSS vr.11.0. A las variables de estudio tomadas a nivel de razón se les estimaron la media con su respectiva desviación estándar, y los valores mínimo y máximo; y a las variables cualitativas se les calcularon las proporciones.

Para la parte analítica se compararon las prevalencias de exposición a factores de riesgo, de acuerdo a que se hubieran consumido o no fármacos psicotrópicos. Para la verificación de diferencias entre grupos se aplicó la prueba x2. Se asumió significancia estadística si el valor de probabilidad era menor de 0,05.

 

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La encuesta fue respondida por 820 personas, el 71,7% de ellas pertenecían al género femenino, el 74,5% de los estudiantes eran de medicina y el resto de enfermería. Casi la totalidad (96,1%), de estudiantes encuestados eran solteros. La edad promedio del grupo era de 21,1 años (DS: 2,8) con un mínimo de 15 y un máximo de 37 años (un solo estudiante).La mayoría de los estudiantes pertenecían a los estratos 3 y 4 y residían en Medellín (véanse figuras 1 y 2).

 

Figura 1. Distribución de los encuestados según estrato socioeconómico

 

Figura 2. Distribución de los encuestados según lugar de residencia

 

En los 12 meses anteriores a la realización de la encuesta, el 16,4% de los estudiantes encuestados consumió uno o varios medicamentos considerados como psicotrópicos, el 16% de medicina y el 18% de enfermería. Esta diferencia no es estadísticamente significativa x2: 0,57, valor de p=0,507. (Véase figura 3)

Similares proporciones de consumo de fármacos psicotrópicos a las de esta investigación, son documentadas por Turrina (15%) y Siciliani (13%) en población italiana (9,10) siendo, por el contrario, mayores a las estimadas por Goldney (2,2%) y Ohayon (6,4%) en población de Australia y Europa (11,12)

Por género se encontró que el 10% de las mujeres y el 19% de los hombres habían consumido medicamentos psicotrópicos en el año anterior a la aplicación de la encuesta, diferencia que sí fue significativa. (x2: 9,61, valor de p= 0,02). (Véase figura 3)

En cuanto a la edad, se observó una prevalencia de consumo en el último año, mayor en las personas de 18 y más años, comparada con la que se encontró en menores de 18 años (17,4% vs 3,3%), la cual fue estadísticamente significativa (x2:4,51, p=0,034).

 

Figura 3. Prevalencia, en el último año, de consumo de psicotrópicos, por sexo, programa y edad en estudiantes de ciencias de la salud

 

La prevalencia de consumo por grupo de fármacos psicotrópicos (véase figura 4), pone en primer lugar a los antidepresivos (13%), muy similar a lo reportado por otras investigaciones (13-17), sin diferenciar si era por autorreporte de consumo o por prescripción médica. El segundo grupo de mayor consumo fue el de los ansiolíticos (5%), luego los hipno-sedantes y los psicoestimulantes (1,5%) cada uno y por último, los antipsicóticos con un 0,9%; muy semejante a lo reportado por Goldney (11) para Australia, aunque con cifras mucho más bajas.

 

Figura 4. Prevalencia anual de consumo de los medicamentos psicotrópicos

 

Al hacer la discriminación por medicamento psicotrópico (véase figura 5) se encontró, en primer lugar, la fluoxetina, [inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS)], seguida por la amitriptilina (antidepresivo tricíclico), luego el clonazepam (benzodiacepina), en el cuarto lugar figuró el metilfenidato, y en el quinto lugar un hipnótico, el zolpidem. El resto de psicotrópicos consumidos correspondió a otros antidepresivos, benzodiacepinas y antipsicóticos. En el estudio de Manzini (17), se informó lo contrario, que el psicotrópico mas consumido entre jóvenes estudiantes franceses fue el zolpidem (43,7%), mientras que la fluoxetina figuró en el tercer lugar de los antidepresivos de mayor consumo (12,5%), después de la paroxetina y la sertralina.

 

Figura 5. Fármacos psicotrópicos más consumidos en el último año

 

Cuando se preguntó a los estudiantes por la frecuencia con que consumían los medicamentos psicotrópicos, se encontró que el 43,7%, lo hacían diariamente, siguiendo en porcentaje los que consumían algunos días al mes con un 18,5%. Es llamativo como el 12,6% de estas personas manifestaron haber consumido psicotrópicos tan solo una vez en la vida (véase figura 6).

 

Figura 6. Frecuencia de consumo de los psicotrópicos

 

Con relación a la forma de obtención de los medicamentos psicotrópicos (véase figura 7), se observa cómo una de cada dos personas que los consumen los compra directamente en la farmacia, mientras que una de cada tres personas los obtiene a través de la EPS.

 

Figura 7. Forma de obtención de los psicotrópicos

 

Al evaluar qué o quién motivó el consumo de los psicotrópicos (véase figura 8), se encontró que la mayoría de las veces fue el médico, seguida por la automedicación, y con menor frecuencia fueron los amigos, familiares u otro personal de salud.

 

Figura 8. Persona que motivó el consumo de los medicamentos psicotrópicos

 

Aunque en este estudio no se pudo corroborar si la prescripción médica de los psicotrópicos a los estudiantes, estuvo relacionada con problemas de salud mental u otros, sí se observó que la mitad de los estudiantes encuestados habían consultado en el último año por trastornos mentales, siendo la depresión, el principal trastorno referido. Por otro lado, Thomas (14), en su estudio sobre tendencias en la prescripción de psicotrópicos en adolescentes americanos, encontró que entre un 14% y un 26% de las prescripciones médicas de estos fármacos, se hicieron para diagnósticos diferentes a los relacionados con trastornos mentales. De forma similar, Manzini (17) y Zito (3), han planteado que muchos de los medicamentos psicotrópicos que se prescriben comúnmente a los adolescentes, son para indicaciones terapéuticas “off label”, es decir no incluidas en las autorizadas al producto para su comercialización y, por lo tanto, hace falta la evidencia suficiente sobre su eficacia clínica y seguridad.

Con respecto al consumo de fármacos psicotrópicos por automedicación, que en nuestro caso fue del 18,6%, es difícil poder confrontar este resultado con otras investigaciones, dado que la gran mayoría de los estudios que se informan en la literatura sobre uso de psicotrópicos en estudiantes (básica secundaria y universitaria), se han realizado tomando las bases de datos de las prescripciones médicas aportadas por los sistemas públicos y privados de salud; sin embargo Mancini (17), en un estudio realizado en el 2002 con adolescentes franceses sugiere que este consumo podría acercarse al 13%.

Por otro lado, consideramos que el entorno social de los alumnos consumidores de psicotrópicos-psicofármacos también puede jugar un papel importante en el aspecto de la automedicación, pues se pudo establecer que la presencia de un amigo o familiar, consumidor habitual de psicotrópicos psicofármacos, figuraba en el 65% de los casos.

Es interesante haber encontrado, entre las personas que consumían psicotrópicos, que el 23,7% utilizaban con frecuencia algún medicamento para quitar el sueño, el apetito o rendir más en el estudio o el trabajo, lo que en la mitad de los casos corresponde a medicamentos considerados psicotrópicos, y en los otros, a compuestos tales como: Cafiaspirina®, taurina, y piracetam.

 

CONCLUSIONES

El consumo de medicamentos psicotrópicos parece haberse incrementado en el mundo durante la última década (1990-2000), especialmente entre los jóvenes y adolescentes, según lo informado en diversos estudios (17-22). Esta tendencia ha sido explicada por diversos factores, como los avances en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos psiquiátricos, el desarrollo de nuevos psicotrópicos psicofármacos, en especial los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (IRSS), la actitud más favorable de los médicos hacia la prescripción de estos medicamentos por sus beneficios terapéuticos en muchos trastornos mentales, y por las estrategias de mercadeo y publicidad utilizadas desde hace algún tiempo por los laboratorios farmacéuticos como medio de promoción de sus productos (23).

Los resultados obtenidos en este estudio hacen una aproximación al problema de consumo de psicotrópicos en una población de estudiantes de enfermería y medicina, y abre interrogantes concretos sobre la problemática del consumo en la población universitaria de áreas del conocimiento diferentes a la de ciencias de la salud, donde podrían encontrarse resultados similares a los nuestros, o al contrario, cifras mayores de prevalencia, por el desconocimiento de los potenciales efectos adversos de estos medicamentos.

Es evidente, entonces, que para muchos jóvenes recurrir al consumo de fármacos psicotrópicos, es una decisión que se toma, muchas veces, por presión familiar o social sin efectuar un balance previo del riesgo o beneficio que esto implicaría en su salud física y mental.

Se plantea entonces la necesidad de continuar realizando estudios farmacoepidemiológicos similares al nuestro, que conduzcan a identificar patrones de consumo de los psicotrópicos psicofármacos en la población estudiantil, y hallar su relación con otros factores de tipo socio demográfico y psicosocial.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Recibido: Mayo 2 de 2008; Aceptado: Agosto 5 de 2008

 

 

* Autor a quien se debe dirigir la correspondencia: gimartinez@upb.edu.co

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