Introducción
Para incrementar la calidad de la educación y la investigación universitarias, ha aumentado el interés por estudiar las características del género “tesis” o “trabajo de grado” (Bunton, 1998; Paltridge, 1997; Thompson, 2001). Este género se ha estudiado ampliamente en varias lenguas y disciplinas; se han analizado la estructura retórica global1 (Bunton, 1998; Hewitt y Felices, 2010; Paltridge, 1997; Paltridge, Starfield, Ravelli y Tuckwell, 2012; Parry, 1998) y los movimientos discursivos2 en las diversas secciones: introducción (Soler-Monreal, Carbonell-Olivares y Gil-Salom, 2011), planteamiento del problema (Nimehchisalem, Tarvirdizadeh, Paidary y Hussin, 2016), revisión de la literatura (Flowerdew y Forest, 2009; Kwan, 2006), metodología (Cotos, Huffman y Link, 2017), resultados (Basturkmen, 2009), discusión (Flowerdew, 2015; Hewitt y Felices, 2010; Lee y Casal, 2014; Samraj, 2013) y conclusiones (Bunton, 2005; Trafford, Leshem y Bitzer, 2014). También se hallan estudios sobre otros rasgos discursivos, como las citas o el uso verbal (Hopkins y Dudley-Evans, 1988; Thompson, 2001).
En líneas generales, los resultados de estos estudios sugieren variaciones entre disciplinas, culturas, lenguas y géneros. Sin embargo, se echan de menos estudios sobre los trabajos de grado y las tesis de Odontología defendidas en el ámbito hispano-americano.3 Dicho vacío contrasta con la existencia creciente de programas de doctorado y maestría que incluyen, como requisito obligatorio, un trabajo especial de grado; incluso, algunos programas de grado han comenzado a exigir un trabajo final para obtener el título universitario que certifica la profesión odontológica (licenciado, dentista, odontólogo o cirujano dental, según la denominación de cada país).
Por lo tanto, en este estudio describimos la estructura retórica de las tesis de doctorado y los trabajos de maestría y de grado, expuestos en universidades hispanoamericanas entre 2000 y 2018, disponibles en la web.
Marco teórico
En este apartado se exponen los fundamentos teóricos que sustentan el estudio. En primer lugar, se define el género discursivo “tesis/trabajo de grado” y se describe su estructura con base en estudios discursivos previos. En segundo lugar, se presentan algunas investigaciones sobre textos académicos de estudiantes. Finalmente, se revisan estudios sobre la escritura académica de la comunidad odontológica.
Tesis/trabajo de grado
La tesis (o trabajo de grado/maestría) es un informe de resultados de una investigación realizada con propósitos evaluativos y promocionales, presentada como requisito para obtener el título de grado, maestría o doctorado. En el ámbito anglosajón no hay consenso sobre el uso de los términos thesis y dissertation (Paltridge, 2002; Thompson, 2013). En el Reino Unido, thesis hace alusión al texto extenso que culmina la investigación doctoral y dissertation designa los trabajos de fin de curso de maestría; en Estados Unidos, en cambio, dissertation se refiere exclusivamente a los trabajos de doctorado, y thesis, a los de maestría (Thompson, 2013).
En algunos países de habla hispana, el término “tesis” se limita a los trabajos que otorgan el título de doctorado, y el de “trabajo de grado o maestría” a los niveles correspondientes -con las abreviaciones TEG (trabajo especial de grado), TFG (trabajo final de grado) o TFM (trabajo de fin de máster). También, los términos “tesina” y “memoria de grado” están bastante extendidos (Arias, 2001; Gil-Salom y Soler-Monreal, 2014; Marinkovich y Salazar, 2011; Tapia-Ladino y Burdiles-Fernández, 2012; Universidad Pedagógica Experimental Libertador -UPEL-, 2006). Sin embargo, frecuentemente se usan de manera indistinta.
Para Venegas, Zamora y Galdames (2016), el trabajo final de grado es un macrogénero, es decir, un documento amplio constituido por diferentes géneros. Venegas (2010, p. 13) lo define como un trabajo escrito, producto de una investigación, realizado con propósitos evaluativos y acreditativos, que los estudiantes universitarios presentan al final de sus estudios como requisito parcial para obtener el título académico de licenciado, magíster o doctor. Además de la valoración del texto escrito, por lo general, se debe exponer y defender oralmente ante un jurado de expertos.
Estructura de la tesis o trabajos de grado
No existe un consenso en la literatura en cuanto a la estructura de las tesis. De hecho, se describen seis formatos (Bunton, 1998; Dong, 1998; Kwan, 2006; Paltridge, 2002; Paltridge y Starfield, 2007; Thompson, 1999, 2001):
1. Tradicional simple: coincide con la estructura del artículo de investigación cuyas partes son: introducción, métodos, resultados y discusión (IMRyD) (Paltridge, 2002; Paltridge y Starfield, 2007). Esta estructura es similar a la descrita por Sánchez Upegui (2016, 2018) para artículos científicos.
2. Tradicional simple modificado 1: agrega, al formato tradicional simple, una sección de revisión de la literatura: introducción, revisión de la literatura, métodos, resultados y discusión (Kwan, 2006).
3. Tradicional simple modificado 2: propuesto por Venegas et al. (2016), similar al de Kwan (2006), con una sección de conclusiones: introducción, revisión de la literatura, métodos, resultados, discusión y conclusiones. Este formato es parecido a la estructura de artículo científico descrito por Sánchez Upegui (2016, 2018).
4. Tradicional complejo: propuesto por Thompson (1999, 2013) y Paltridge (2002), equivale a un subgrupo de la estructura tradicional simple. Incluye resultados de más de un estudio, por lo que se inicia con una revisión de la literatura, siguen varias secciones que describen cada una un aspecto independiente por separado (como en el formato IMRyD y su variación IMRDyC, que incluye una sección de conclusiones, según Sánchez Upegui, 2016, 2018), y termina con las conclusiones.
5. Basado en el tópico: estudiado por Bunton (1998), Paltridge (2002) y Thompson (2013), la estructura de este formato es similar a la del artículo de revisión (Morales, 2010), que consiste en una serie de capítulos en torno a un tema central: comienza con una sección introductoria, sigue el desarrollo (secciones o capítulos cuyos títulos se guían por el contenido) y finaliza con el capítulo de conclusión.
6. Compilación de artículos publicados: en el que cada artículo asume el formato IMRyD (Paltridge, 2002; Kwan, 2006) o IMRDyC (Sánchez Upegui, 2016, 2018). Con la intención de dar el sentido de unidad, empieza con la introducción y acaba con las conclusiones (Thompson, 2013).
En la Tabla 1 se sintetizan las estructuras de organización de las tesis observadas en la literatura.
Estudios sobre textos académicos de estudiantes
En los últimos años ha habido gran interés por estudiar el discurso académico con base en la perspectiva del análisis de género (Samraj, 2008), desde la publicación seminal de Swales (1990) con el modelo “Crear un espacio de investigación” (Create a Research Space, CARS) para describir la estructura de la introducción. Predominan los estudios de la estructura de artículos de investigación y de las secciones que la constituyen (Hopkins y Dudley-Evans, 1988; Hyland, 2000; Swales, 2004). Aunque en menor medida, también se han analizado los textos académicos escritos por estudiantes (de grado y posgrado) en lenguas y disciplinas distintas, con el objetivo de proponer estrategias para su enseñanza formal fundadas en la evidencia científica obtenida (Bunton, 2002, 2005; Dong, 1998; Kwan, 2006; Ridley, 2000; Swales, 2004; Thompson, 1999, 2001, 2005).
En relación con las tesis y los trabajos de grado, algunos estudios han analizado su estructura retórica global en Ciencias Naturales, Ingeniería, Artes, Educación, Humanidades y Ciencias Sociales (Bunton, 1998; Castro y Sánchez, 2015; Paltridge, 2002; Paltridge y Starfield, 2007; Ridley, 2000; Starfield y Ravelli, 2006; Venegas et al., 2016). El “resumen” (o abstract), considerado como un género discursivo independiente, ha sido muy estudiado en diferentes disciplinas. Se ha analizado su estructura retórica, la cual se ha contrastado con el artículo de investigación; también se han comparado los rasgos discursivos de abstracts escritos por hablantes nativos del inglés y de otras lenguas (Ebadi, Nguyen, Rawdhan y Weisi, 2019; El-Dakhs, 2018; Jawad y Saleh, 2018; Male, 2018).
La “introducción” ha sido investigada en Química, Ecología y Biodiversidad (Bunton, 2002); en Biología, Filosofía y Lingüística (Salman y Yaseen, 2014; Samraj, 2008); en Lingüística Aplicada (Kawase, 2018) y en Química y Lingüística (Jara, 2009). Entre otros aspectos de la “introducción”, Jalilifar, Firuzmand y Roshani (2011) estudiaron el planteamiento del problema de investigación en tesis de Lingüística Aplicada; Lim, Loi y Hashim (2014) Lim (2014), el planteamiento de preguntas de investigación también en Lingüística, y Lim, Loi, Hashim y Liu (2015), la formulación del propósito en estudios experimentales en Educación. Igualmente, se ha estudiado la construcción de la introducción de tesis de maestría desde la perspectiva etnográfica, combinando el modelo cognitivo de la escritura, la nueva retórica estadounidense y el modelo CARS de Swales (Pereira, 2018).
Sobre la sección “revisión de la literatura” o “marco teórico”, resaltan los estudios de Abdullah (2018); Gil-Salom y Soler-Monreal (2014); Khoo, Na y Jaidka (2011); Kwan (2006); Lucido (2018); Ridley (2000); Swales y Lindemann (2002) y Tapia-Ladino y Burdiles-Fernández (2012).
Por otro lado, Basturkmen (2009), Bruce (2018), Dastjerdi, Tan y Abdullah (2017), Hewitt y Felices (2010), Lee y Casal (2014) y Samraj (2013) analizaron las secciones de “resultados” y “discusión” de tesis de maestría y doctorado en varias disciplinas. Hussin, Syamimi y Nimehchisalem (2018) estudiaron la estructura y los movimientos discursivos de dichas secciones en el trabajo final de curso en Filología Inglesa de estudiantes malayos.
En la “conclusión”, destaca el estudio en Arte, Educación, Ciencias Sociales, Arquitectura, Ingenie-ría, Ciencias, Medicina, Odontología, Economía y Manejo Ambiental de Bunton (2005). Acerca de este tema, Jalilifar y Shahvali (2013) investigaron las “recomendaciones para futuras investigaciones”.
Los “agradecimientos”, considerados como un género discursivo independiente, también ha sido investigado en Humanidades, Ciencias Sociales, Biología, Computación e Ingeniería, en tesis redactadas en inglés por estudiantes chinos de máster y doctorado (Hyland, 2003, 2004a; Hyland y Tse, 2004), y en Lingüística Aplicada de autores taiwaneses (Yang, 2012). Igualmente, se ha comparado la estructura genérica de los agradecimientos que acompañan las tesis de Ciencias Sociales y Lingüística Aplicada de iraníes y anglosajones (Fazilatfar, Behbahani y Hosseini, 2018; Mohammadi, 2013).
Adicionalmente, hallamos estudios de las percepciones y representaciones sociales que estudiantes de Humanidades tienen sobre el proceso de producir tesis (Marinkovich y Salazar, 2011; Marinkovich y Velásquez, 2010; Tapia-Ladino y Marinkovich, 2011). Peng (2018), por su parte, analizó las dificultades a las que se enfrentan los estudiantes chinos cuando escriben su tesis en inglés como idioma extranjero.
Es notable la abundancia de los estudios contrastivos de género. Así, Hyland (2002) compara algunos rasgos del artículo científico con las tesis y los trabajos de grado, y revela que los miembros de la comunidad y los estudiantes que están por hacerse miembros emplean estructuras discursivas de posicionamiento distintas. Asimismo, se ha comparado la retórica entre disciplinas y lenguas locales y una lingua franca, cuyos resultados han revelado que existen variaciones genéricas, disciplinares y culturales (Bahadofar y Gholami, 2019; Can y Yuvayapan, 2018; Doğan, Yağız y Kaçar, 2018; Hyland, 2000, 2001, 2002; Katic y Safranj, 2018; Soler-Monreal et al., 2011). Por otro lado, existen numerosas publicaciones, libros y artículos con recomendaciones para escribir tesis y trabajos de grado; sin embargo, la mayoría presenta sus propuestas fuera de contexto, sin considerar las particularidades de cada disciplina (Kamler y Thomson, 2008); en palabras de Paltridge (2002), están reñidos con la realidad.
Estudios sobre la escritura académica en Odontología
Estos estudios son escasos, tanto en lo referido a las publicaciones científicas como a la escritura académica de estudiantes. Karapetjana y Rozina (2016) proponen, a autores no anglófonos interesados en publicar sus trabajos en revistas científicas en inglés, una estructura retórica del artículo de investigación, con base en una revisión de un número no definido de artículos publicados en la British Dental Journal. Sin haber analizado un corpus de forma exhaustiva, estos autores identificaron algunos rasgos retóricos del artículo de investigación que pudieran servir para diseñar estrategias de enseñanza de este género.
Kostenko (2017) analiza algunas características comunicativas y pragmáticas de casos clínicos de odontología publicados en inglés en revistas odontológicas de alto impacto, para fundamentar el diseño de estrategias didácticas dirigidas a las clases de Inglés con Propósitos Específicos. El autor explora veinte casos clínicos publicados en inglés en tres revistas internacionales de alto impacto y halla que su principal propósito comunicativo es convencer al lector de la rareza y la unicidad del caso, con lo que logra distinguirse o diferenciarse de otros géneros.
Por otro lado, Morales et al. (2020) analizan los títulos de tesis escritas en inglés, defendidas en distintas universidades del mundo. Encontraron un promedio de trece palabras por título, siendo más frecuentes los títulos nominales, empleando pre y posmodificadores. El predominio de construcciones nominales es considerado por Soler (2007) como un rasgo distintivo de la escritura académica.
Hay más investigaciones desde una perspectiva contrastiva. Varios trabajos comparan la estructura retórica de diferentes secciones de artículos de investigación. Rahimi y Farnia (2017) analizan setenta introducciones de artículos de investigación escritos en persa e inglés, y publicados en revistas odontológicas reconocidas. Este trabajo se basa en la estructura de movimientos y pasos del modelo CARS, propuesto por Swales para describir la estructura de la introducción4. Los resultados muestran que los tres movimientos están presentes en ambos grupos, con diferencias estadísticamente significativas en la frecuencia de aparición.
Dos estudios se centran en la sección “Discusión”. Basturkmen (2012) compara la estructura retórica en dos disciplinas (odontología y lingüística aplicada) en una misma lengua (inglés), usando también el modelo CARS,5 con un corpus de diez artículos de investigación del British Dental Journal. Los resultados muestran coincidencias en los movimientos 1 (antecedentes del estudio), 3-4 (resultados, síntesis y comentarios) y 6 (implicaciones para la práctica clínica y para futuras investigaciones). Alharbi (2016), por su parte, analiza la estructura retórica de veintiséis discusiones en árabe e inglés, publicadas en revistas odontológicas reconocidas internacionalmente. Siguiendo la estructura de movimientos/pasos de Basturkmen (2012), halla que ambos grupos presentan movimientos similares, con diferencias en cuanto a los pasos incluidos en cada movimiento.
Por otro lado, varias investigaciones contrastan la estructura retórica y los rasgos discursivos del “resumen” o abstract. Vathanalaoha y Tangkiengsirisin (2018) comparan la transitividad y la estructura retórica de los abstracts de 240 artículos de investigación en tailandés e inglés de revistas internacionales, usando la estructura descrita por Hyland (2004b): antecedentes, objetivos, método, resultados y discusión. Los resultados muestran variaciones respecto del movimiento “antecedentes”. En cuanto a la transitividad, se hallan diferencias relevantes en los procesos verbales (Vathanalaoha y Tangkiengsirisin, 2018).
Shamsabadi, Riahipour y Rasekh (2014) contrastan la estructura retórica de 50 abstracts odontológicos en inglés y en persa en revistas iraníes, y encuentran diferencias en cuanto a los rasgos lingüísticos y la estructura retórica. Otro estudio compara la estructura retórica del resumen publicado en español en revistas hispanoamericanas y en inglés en revistas internacionales de alto impacto, con un corpus de 270 abstracts (90 resúmenes escritos en español, 90 traducidos del español al inglés y 90 en inglés). Los resultados manifiestan diferencias relevantes en la estructura retórica de los tres grupos (Morales, Cassany y Díaz, 2015).
Por su parte, la escritura académica de estudiantes también ha sido objeto de análisis contrastivo. Crosthwaite, Cheung y Jiang (2017) estudiaron las formas de posicionamiento empleadas en informes de investigación escritos por estudiantes y profesionales de la Odontología. Los resultados muestran que los informes profesionales usan menos recursos de posicionamiento que los textos de estudiantes, los cuales tienden a utilizar más variedad de estrategias (atenuantes, intensificadores, marcadores de actitud y automención).
En español, varios trabajos nuestros abordan los géneros discursivos más relevantes de la comunidad odontológica: la estructura retórica y el uso de atenuantes en artículos de investigación, casos clínicos y artículos de revisión tradicionales (Morales, 2010); en casos clínicos (Morales, Cassany, Marín y González, 2008); en artículos de revisión narrativos (Morales, Cassany y González, 2007); en títulos de tesis en inglés (Morales et al., 2020) y en títulos de revisiones sistemáticas (Morales, Perdomo, Cassany y Izarra, 2020). A partir de estudios previos en otras disciplinas, estos trabajos hallan variaciones respecto de la estructura de retórica, los propósitos comunicativos y los usos de los mecanismos de atenuación.
En conjunto, estos resultados, en inglés, español y comparando ambos idiomas, coinciden en señalar que la escritura académica en Odontología presenta rasgos retóricos propios, disciplinares, culturales, lingüísticos y genéricos. Estos rasgos deben ser estudiados y enseñados para garantizar el éxito académico y profesional de los miembros jóvenes de esta comunidad.
Método
En este trabajo descriptivo, de carácter mixto, cualitativo y cuantitativo, adoptamos un enfoque multidimensional aplicado a la enseñanza del discurso académico (applied genre analysis, Bhatia, 2002). Nos basamos en el modelo swalesiano del análisis de género (Bhatia, 1993, 2002, 2004; Dudley-Evans, 1986; Swales, 1990, 2004). El análisis textual consiste en el examen manual del corpus: distintos investigadores leen en varias oportunidades el corpus de textos para caracterizarlos retóricamente e identificar las secciones y las funciones que distinguen a cada una dentro del género.
Corpus
El corpus se obtuvo en Google académico con las palabras clave tesis OR trabajo de grado OR trabajo especial de grado OR tesinas OR memoria de grado AND odontología OR estomatología OR dental. Se encontraron 780 tesis, presentadas en universidades de Latinoamérica y España, entre 2000 y 2018, para obtener un título universitario: licenciatura, posgrado (especialización, maestría) y doctorado. De estas, se seleccionó, mediante un muestreo aleatorio sistemático, una muestra de 272 tesis y trabajos de grado, en formato PDF.
Se analizaron 26 223 páginas y 9 504 105 palabras, aproximadamente. El rango de extensión en número de páginas de los textos oscila entre 24 y 443 páginas. El promedio por texto es de 96 páginas, muy inferior a lo reportado por Bunton (1998), un promedio de 205 páginas. En número de palabras, el rango de extensión también es amplio: entre 9678 y 156 200, lo cual coincide con Paltridge (2002) y Thompson (2013). El promedio por texto es de 34 942 palabras. La Tabla 2 caracteriza nuestro corpus según el nivel educativo.
El tamaño del corpus es suficiente para explorar la estructura retórica de tesis y trabajos de grado de una disciplina sola, como la odontología hispanoamericana. Estudios previos sobre distintas dimensiones discursivas de tesis y trabajos de grado en otras disciplinas, como los descritos previamente, analizan exitosamente corpus menos extensos.
Para este estudio, seleccionamos los trabajos que cumplieron con los siguientes criterios: 1) presentados en universidades hispanoamericanas y españolas para obtener un título académico; 2) de los últimos 18 años; 3) escritos en español por hispanohablantes, y 4) publicados en versión completa en la web (Google Académico y repositorios universitarios).
Análisis de los datos
Para el análisis de los datos, adoptamos un enfoque cuantitativo-cualitativo, recomendado en estudios previos (Biber, 1988; Conrad, 1999; Hyland, 2001). Desde el punto de vista cuantitativo, estudiamos la frecuencia de aparición de la estructura retórica de los trabajos de grado y tesis, y de ocurrencia de cada sección.
La estructura retórica se refiere a la superestructura, el formato global que distingue a un género de otro. Es un esquema abstracto, que existe independientemente del contenido, al cual se adapta dicho contenido. Ejemplo de esto son los formatos IMRyD y IMRDyC, prototípico para los artículos de investigación (Sánchez-Upegui, 2016, 2018).
Las secciones retóricas son los apartados identificados explícitamente mediante un título interno o con la identificación de su función y contenido. Consideramos, con propósitos didácticos, la frecuencia de aparición de las secciones retóricas para determinar aquellas que pudieran asumirse obligatorias u opcionales.
También tuvimos en cuenta la manera en que los autores organizan las secciones retóricas de sus trabajos. Es relevante identificar patrones de secuenciación, de modo que puedan incluirse en los programas de escritura académica, para aprender a elaborar proyectos de investigación, trabajos de grado y tesis.
Resultados
Conviene destacar previamente tres particularidades sobre la odontología. En primer lugar, se trata de una disciplina específica, descrita como una comunidad científica autónoma e independiente (Morales, 2010) que utiliza el discurso de manera particular, como muestran los estudios discursivos (Basturkmen, 2012; Rahimi y Farnia, 2017). En segundo lugar, aunque sea una disciplina universal, este estudio analiza solo un corpus en español, presentado y publicado en universidades hispanoamericanas, de modo que no puede explicar la naturaleza de la escritura en otros contextos o idiomas. Finalmente, las tesis o los trabajos de grado constituyen solo uno de los géneros empleados en la disciplina, que incluye una notable complejidad de colonias de géneros (Morales, 2010, p. 6). En resumen, los resultados muestran variabilidad en las tesis y los trabajos de grado: el número de capítulos incluidos, su denominación y organización, la conceptuación de la “introducción” y su función retórica, lo cual coincide con el estudio de Ono (2012) con tesis japonesas y anglosajonas.
Estructura retórica global
Predominan los estudios de paradigma cuantitativo (86 %), lo cual favorece el uso del formato IMRyD o cualquiera de sus variantes. Resaltan ampliamente los estudios transversales y los experimentales in vitro.
El análisis de la estructura retórica de tesis y trabajos de grado indica que hay variaciones relevantes. No se sigue ningún formato uniforme, lo cual coincide con Ridley (2000). Esto puede deberse a que, en esta comunidad, la enseñanza de la escritura y la investigación no se ha sistematizado. A diferencia de lo reportado en la literatura (Bunton, 1998; Dong, 1998; Dudley-Evans, 1999; Kwan, 2006; Paltridge, 2002; Paltridge y Starfield, 2007; Thompson, 1999, 2001), se encontraron seis patrones de secuencialidad en la estructura o formato de las tesis, cada uno con sus respectivas variaciones, referidas a: 1) el orden de las secciones retóricas que lo integran; 2) los elementos incluidos en las secciones; 3) las relaciones entre las secciones y los elementos que las integran; 4) el número de capítulos incluidos; 5) la extensión, y 6) la denominación del género (tesis, disertación, trabajo de grado, trabajo especial de grado) y de las secciones. A continuación, presentamos cada uno de estos patrones.
Cerca del 11 % del corpus estaba organizado siguiendo este patrón 1. Tiene una estructura similar a la descrita para artículos de investigación odontológicos en español (Morales, 2010), con lo cual se intenta dar identidad propia al discurso en esta comunidad.
El patrón 2 constituye el 24 % del corpus. También predomina en estudios trasversales y experimentales. Kwan (2006), Ridley (2000), Thompson (2001) y Venegas et al. (2016) encontraron un formato similar. Esto pudiera estar asociado a que un género discursivo con propósitos promocionales y de evaluación como lo es la tesis requiere que el estudiante demuestre un amplio dominio de la literatura. Por lo tanto, se da importancia al marco teórico y a la revisión de la literatura.
El patrón 3 registra la frecuencia más alta (53 %). Predomina en estudios trasversales y experimentales. Esta tendencia, en lo relacionado con la inclusión del planteamiento del problema, pudiera estar influenciada por otras áreas como las Ciencias Sociales. Generalmente, la enseñanza de la investigación (proyecto y tesis) está a cargo de profesionales de estas áreas (educadores, sociólogos, antropólogos), quienes suelen recomendar un formato similar.
El patrón 4 representa el 5 % de las tesis. Supone una variación disciplinar de la estructura que prescribe la Universidad Pedagógica Experimental Libertador de Venezuela para proyectos factibles presentados en el ámbito de las Ciencias de la Educación (UPEL, 2006). Este tipo de trabajos de grado se usa sobre todo en Venezuela, Ecuador y Perú para la formulación de propuestas (Arias, 2001). Predomina, en consecuencia, en textos de estos países.
Al igual que en el patrón anterior, esta tendencia también pudiera estar influenciada por el área de especialidad del profesorado de investigación.
Este patrón 5 supone el 6 % del corpus. Coincide con la estructura retórica descrita por Morales (2010) para referirse a las revisiones narrativas tradicionales y a las monografías odontológicas. Thompson (1999, 2001) encuentra estructuras similares en tesis basadas en estudios documentales, y Paltridge (2002), en tesis de Filosofía.
La poca frecuencia pudiera deberse a que las revisiones narrativas tradicionales en formato de artículo o de tesis presentan evidencia de poca calidad, con resultados sesgados (Morales, 2010). Por lo tanto, este tipo de tesis no es considerado completamente científico. Progresivamente, se han ido sustituyendo por las revisiones sistemáticas.
El patrón 6, que tiene el formato de compilación de artículos, es básicamente una antología de artículos del autor de la tesis (publicados o en vías de publicación); cada uno sigue la estructura tradicional IMRyD (Kwan, 2006) o IMRDyC (Sánchez Upegui, 2016, 2018), con un capítulo inicial de introducción y uno final de conclusión (Thompson, 2001, 2013). Esta estructura coincide con la reportada por Dong (1998).
Al igual que Paltridge (2002), en este estudio hallamos solo un caso; sin embargo, sería interesante continuar estudiándolo, dado que es un formato usado en el ámbito internacional que, progresivamente, ha ido cobrando interés en los programas de doctorado hispanoamericanos.
La Tabla 3 sintetiza los seis formatos identificados.
Secciones retóricas
Hallamos mucha variedad en la denominación de las secciones o apartados que componen cada texto. Esto coincide con Gil, Soler y Carbonell (2008) y Thompson (1999), quienes encontraron variaciones por disciplina y por género discursivo.
Aunque no haya uniformidad léxica, las denominaciones corresponden a términos retóricos convencionales o habituales, propios de la estructura tradicional descrita anteriormente: introducción, objetivo, hipótesis, marco teórico, método, resultados, discusión, conclusión. Se registra un promedio de ocho secciones por texto, lo cual es superior a los hallazgos de Bunton (1998).
A continuación mencionamos las denominaciones halladas, con los términos alternativos correferenciales y diversos comentarios sobre su función.
Resumen
Todos los textos incluyeron, al inicio, un resumen en español. Predomina el resumen no estructurado, entre 100 y 700 palabras.
Coherente con el comportamiento del corpus, globalmente, la estructura del resumen varía. Incluye los elementos del texto que acompaña, a excepción de la discusión, lo cual es similar a la estructura de resúmenes de artículos científicos odontológicos encontrada en estudios previos (Morales et al., 2015). También coincide con investigaciones del abstract en inglés (Ebadi et al., 2019; El-Dakhs, 2018; Jawad y Saleh, 2018; Male, 2018).
La variación pudiera deberse a la falta de uniformidad en la enseñanza de la escritura del proyecto y de la tesis, la cual, en la mayoría de los casos, no se basa en criterios científicos vinculados con la odontología.
Introducción (paratexto)
Un alto porcentaje del corpus (63 %) incluye una sección preliminar, en forma de un paratexto, titulada “Introducción”, con fines promocionales (Bhatia, 1997), cuyo principal propósito es informativo, es decir, introducir el contenido del texto: se establece el contexto de la investigación, su propósito general y su alcance o tema central. No suele incluir citas (Bhatia, 2004). Este componente coincide con la sección inicial de muchos libros.
Como desempeña funciones distintas, el paratexto “Introducción” se ubica antes del capítulo “Planteamiento del problema”, que cumple la función de la introducción descrita en la sección siguiente, “Sección “Introducción”, en los formatos tradicional simple modificado 2, proyecto factible y basado en el contenido (véase la Tabla 3).
En nuestro corpus, esta sección comprende tres movimientos: 1) la presentación conceptual del tema/problema objeto de estudio: qué se sabe, qué se ha hecho y qué falta (identificación del nicho); 2) la presentación metodológica del estudio: objetivo y descripción de la metodología, y 3) la presentación discursiva de la estructura del texto: identificación y descripción de cada sección.
No hallamos otras investigaciones que hayan identificado una sección de esta naturaleza en tesis o trabajos de grado. Bhatia (1993) se refiere a la misma, pero no lo considera un componente auténtico del trabajo académico.
Sección “Introducción”
En cambio, cerca del 95 % de los textos incluye uno o varios capítulos o secciones retóricas que cumplen la función de la introducción descrita en estudios previos (Bunton, 1998, 2002; Jara, 2009; Paltridge, 2002; Paltridge y Starfield, 2007; Ridley, 2000; Salman y Yaseen, 2014; Samraj, 2008; Starfield y Ravelli, 2006; Thompson, 1999, 2001). Este componente, ya sea con un único apartado, con subapartados, o con varias unidades del mismo nivel jerárquico, incluye: el problema, la justificación, los objetivos, las hipótesis, las variables, el marco teórico y la revisión de la literatura. Suele concentrar la mayor cantidad de citas.
Esto coincide con Paltridge (2002) y Thompson (2001), quienes encontraron que las tesis, independientemente de la disciplina, incluyen una sección retórica denominada “introducción”, con los elementos antes mencionados. En cambio, Swales (1990) y las numerosas investigaciones derivadas de su estudio seminal (Bunton, 2002; Prior, 1998, 2008) coinciden en señalar el predominio del modelo CARS, el cual contempla tres movimientos retóricos: 1) establecer un territorio, 2) establecer un nicho y 3) ocupar el nicho.
En este estudio no hallamos una estructura convencional uniforme; se presenta en tres variantes:
1. Una sección constituida por una serie de capítulos que establecen el marco teórico referencial del trabajo: planteamiento del problema, la formulación del objetivo, la hipótesis y la justificación.
2. Alternativamente, puede aparecer una única unidad, titulada “Introducción” (Bunton, 1998, 2002; Dudley-Evans, 1986; Gil-Salom, Soler-Monreal y Carbonell-Olivares, 2008), que incluye los movimientos descritos en la literatura para los artículos de investigación (Swales, 1990), generalmente mediante la inclusión de subtítulos, similar a lo mencionado en estudios previos (Dong, 1998; Dudley-Evans, 1999; Paltridge, 2001; Paltridge y Starfield, 2007; Thompson, 1999).
3. Hay también un formato en el que el capítulo “Introducción” precede al apartado de “Revisión de la literatura”, lo cual coincide con la estructura descrita previamente por Kwan (2006). En esta modalidad, también suelen incluirse subapartados guiados por el contenido.
Sección “Planteamiento del problema”
De los textos analizados, el 63 % incluye una sección retórica de “Planteamiento del problema”, independientemente del diseño del estudio y del nivel educativo. Este capítulo siempre va precedido por un paratexto introductorio (100 %). Este capítulo también suele denominarse “El problema” e incluye su definición, la justificación, los objetivos y, en ocasiones, las hipótesis de la investigación.
Estos resultados son similares a los de Hernon y Metoyer-Duran (1993), Jalilifar et al. (2011) y Nimehchisalem et al. (2016), quienes atribuyen a esta sección funciones afines a las de la introducción en los artículos de investigación.
Sección “Marco teórico”
Cerca del 90 % de los textos incluye una sección retórica de marco teórico, ya sea en una unidad o varias. También suele denominarse: “fundamentos teóricos”, “bases teóricas”, “revisión bibliográfica” o “revisión de la literatura”. En el ámbito anglosajón, se usa literature review (revisión de la literatura) de forma casi exclusiva (Feak y Swales, 2009).
Así, esta sección se concentra en revisar críticamente los estudios previos. Coincidiendo con Kwan (2006), hallamos que suele estar integrada por dos componentes: 1) la revisión de la literatura, una relación de estudios previos sobre el problema objeto de estudio, a la cual también se le denomina: “antecedentes”, “reseña bibliográfica”, “revisión y estado actual del problema” o “estado de la cuestión”; y 2) el marco teórico referencial, organizado por títulos guiados por el contenido, el cual contiene, por lo general, un marco teórico propiamente dicho y, ocasionalmente, un marco legal de la investigación. Este segundo componente es menos frecuente que el primero.
Adicionalmente, encontramos algunos casos en los que el marco teórico es una macrosección, que contiene una serie de apartados yuxtapuestos: el planteamiento del problema (problema, justificación, objetivos, variables, hipótesis, antecedentes), la revisión de la literatura (estudios previos) y el marco teórico referencial.
Sección “Desarrollo”
Los trabajos con diseño documental (6 %) incluyen una sección retórica de desarrollo, que resume los contenidos sintetizados en el estudio. Puede constar de un número variado de capítulos, cuyos títulos están guiados por el contenido. Esto coincide con la estructura de los artículos de revisión narrativos en odontología (Morales, 2010) y de las tesis de Filosofía (Paltridge, 2002).
Esta sección se organiza en tres partes: 1) una idea general de lo que se tratará, en forma de organizador avanzado (Clyne, 1991); 2) una serie de apartados, identificados mediante subtítulos temáticos, que exponen el contenido, y 3) una sección conclusiva: síntesis y evaluación de la literatura revisada.
Las tesis realizadas en esta modalidad han sido objeto de múltiples críticas, debido al bajo nivel de calidad de la evidencia aportada y al alto nivel de sesgo, lo cual coincide con las críticas que ha recibido la revisión tradicional (Morales, 2010). A pesar del creciente interés por la odontología basada en la evidencia y de que en los últimos años ha aumentado la publicación de revisiones sistemáticas, no hallamos tesis o trabajos de grado que siguieran este tipo de formato.
Sección “Método”
A excepción de los estudios documentales, la mayoría de los trabajos (94 %) comprende una sección retórica de metodología. Esta se titula mediante un gran número de expresiones correferenciales, como: “estudio empírico”, “material(es) y método(s)”, “sujetos y método”, “diseño o marco metodológico”, “métodos de estudio”, “diseño y método”, “material e instrumental” y “universo y muestra”. A pesar de esta variabilidad, el término “método” resulta el más apropiado, pues incluye los distintos diseños de investigación.
Esta sección consiste en la descripción de la metodología empleada en los estudios, predominantemente cuantitativos. Mediante la inclusión de subtítulos retóricos convencionales, describe la muestra, identifica el enfoque de investigación y el procedimiento de análisis realizado. Estos resultados coinciden en buena parte con los de Cotos et al. (2017).
Sección “Resultados”
Cerca del 94 % de las tesis y trabajos de grado contiene uno o varios capítulos destinados a presentar los resultados. Esta sección retórica aparece con dos modalidades: la primera tiene solo resultados, empleando una variedad de títulos: “hallazgos”, “presentación de los resultados”, “análisis de los datos”, “análisis de la información” y “recopilación de los resultados”. Esta modalidad es la más frecuente. Se inicia con la descripción de la población, el muestreo, los especímenes, los animales de experimentación o los textos revisados. Luego, se presentan los resultados propiamente dichos, los cuales se sintetizan desde dos perspectivas no excluyentes: 1) datos expuestos en prosa sobre resultados numéricos, y 2) datos numéricos presentados en tablas, gráficos y cuadros.
La segunda modalidad integra, en un mismo capítulo, los resultados, su análisis y la discusión. Esta también suele denominarse de forma distinta: “análisis y discusión de los resultados”, “presentación, análisis y discusión de los resultados”, “resultados y discusión” y “análisis e interpretación de los resultados”.
La primera modalidad es la más frecuente en odontología. La segunda se permite excepcionalmente solo en los estudios basados en el paradigma cualitativo, que son poco frecuentes en esta comunidad.
Sección “Discusión”
Esta sección retórica también suele nombrarse como: “discusiones”, “discusión de los resultados”, “discusión, conclusión y recomendaciones”, “discusión y comentarios”. Se incluye solo cuando los resultados se presentan de forma independiente en una sección previa.
Coincidiendo con Bitchener (2010) y Thompson (2013), suele incluir tres movimientos: 1) antecedentes del estudio (objetivo, problema, metodología), 2) síntesis de los resultados, y 3) explicaciones e interpretación de los resultados, contrastándolos con la literatura, las implicaciones y las limitaciones y fortalezas del estudio, y las recomendaciones derivadas de este. Esto coincide con los hallazgos de estudios previos de esta sección retórica en tesis (Hewitt y Felices, 2010; Flowerdew, 2015; Lee y Casal, 2014; Samraj, 2013).
Sección “Conclusiones”
Esta es la sección identificada con mayor frecuencia en el corpus (100 %), coincidiendo con Bunton (2005). También varía su denominación: “sugerencias”, “propuestas de trabajo”, “conclusiones y continuidad”, “recomendaciones”, “conclusiones y recomendaciones” o “limitaciones del estudio”.
Similar a los hallazgos de Bunton (1998, 2005) y Thompson (2001, 2013), suele incluir la actualización del objetivo, la síntesis de los hallazgos, implicaciones prácticas (clínicas) y teóricas, recomendaciones y limitaciones.
Sección “Propuesta”
Esta sección retórica aparece solo en los estudios conocidos como “proyectos factibles” y “proyectos especiales”, presentados predominantemente en Venezuela, Ecuador y Perú (UPEL, 2006). Se emplea, de forma exclusiva, en las tesis y los trabajos de grado dirigidos a hacer propuestas con base en estudios empíricos diagnósticos, lo cual representa un 5 % del corpus. Esta sección también suele denominarse “manual” o “material didáctico”.
Conclusiones
En conjunto, encontramos gran variabilidad en la organización retórica global de tesis y trabajos de grado odontológicos y en los elementos incluidos, aun entre los textos producidos en el marco de un mismo programa académico. Esta variabilidad pudiera deberse a distintos factores, como los siguientes:
1. La comunidad odontológica tiene una cultura investigativa breve o poco consolidada, aún está en proceso de institucionalización; por ello, todavía no se ha estandarizado un formato uniforme para la presentación de tesis.
2. Hay insuficientes estudios epistemológicos, educativos y discursivos en el área. Por lo tanto, no hay mucha información sobre la estructura retórica y sociocognitiva preferente para los miembros establecidos de la comunidad odontológica.
3. Son escasos los programas formales de enseñanza de la investigación y la escritura académica. Dada la poca evidencia en Odontología, estos, en su mayoría, riñen con la realidad discursiva de la comunidad, recurren a otras culturas disciplinares o a manuales cuya eficacia no ha sido contrastada. En consecuencia, las tesis y los trabajos de grado carecen de uniformidad disciplinar. Sin embargo, pese a la diversidad, el formato IMRDyC es la organización retórica que se presentó en un porcentaje más alto. Con base en la frecuencia de ocurrencia de los elementos, los capítulos “Introducción”, “Metodología”, “Resultados”, “Discusión” y “Conclusiones” pudieran ser considerados obligatorios.
La elaboración de tesis y trabajos de grado no es un asunto referido de manera exclusiva a la calidad del producto final (el texto); como documento académico, también importan los procesos involucrados en su producción. Por lo tanto, es necesario volcar la atención en la formación de los estudiantes y docentes involucrados. El análisis global sugiere que se presta mayor atención al contenido que a la forma del discurso (estructura retórica, estilo, títulos, etc.). Probablemente, los planes de estudio dediquen poco espacio a la escritura académica y a la investigación o, coincidiendo con Gil-Salom et al. (2008), Salman y Yaseen (2014) y Thompson (1999), tesistas, directores de tesis, tutores, miembros del tribunal y profesores requieren mayor formación en los aspectos discursivos y metodológicos.
Con base en eso, sería conveniente realizar más estudios discursivos y educativos sobre tesis y trabajos de grado, en el ámbito de la Odontología, de modo que sirvieran para sistematizar propuestas pedagógicas para la enseñanza de la investigación y la escritura de este género que estén basadas en evidencia empírica. Los estudiantes y docentes necesitan tener acceso a las estructuras retóricas de las tesis que hayan sido identificadas en los estudios discursivos, como lo sugiere Thompson (2013).
También parece necesario formalizar la enseñanza de la investigación y la escritura académica en el ámbito odontológico, proceso en el que debiera participar un equipo multidisciplinario de docentes, odontólogos, lingüistas, educadores, entre otros. Como han sugerido Rincón, Narváez y Roldán (2011), lo ideal sería que los docentes tuvieran una doble formación, en el discurso de la disciplina y en los contenidos disciplinares, o que los cursos fueran orientados por equipos multidisciplinarios, integrados por expertos en la disciplina específica del conocimiento (insiders) y por expertos en el área de lengua de la especialidad. Esto podría garantizar el éxito de los cursos de escritura de trabajos de grado y tesis.