La hipertensión arterial (HTA) es una enfermedad no comunicable, generalmente asintomática que afecta a un gran porcentaje de la población adulta y genera daños a órganos nobles como corazón cerebro y riñón. Según la Organización Mundial de la Salud 1, la HTA como enfermedad no transmisible, será una de las causas principales de discapacidad funcional en las próximas dos décadas. Por tal motivo, la HTA es un problema de salud pública debido a su magnitud, los riesgos, la dificultad en la gestión, los altos costos médicos y sociales y las graves complicaciones cardiovasculares y renales 2. Para el año 2008, la HTA afectaba a más del 40 % de los adultos mayores de 25 años a nivel mundial 3, y que se espera aumente en un 60 % los casos de enfermedad en 2025 debido al aumento y envejecimiento de la población 4. Esa prevalencia se ha incrementado en todo el mundo, en parte porque existe una definición más estricta de la HTA.
En América del Sur se enfrentan a un alto crecimiento de la población adulta, lo que trae como consecuencia el aumento de las enfermedades crónicas, donde se incluye el HTA 5,6. El costo anual directo estimado del tratamiento HTA en Brasil fue cerca del % del total de los costos de salud: 1,43 % del total de gastos para el Sistema Único de Salud y 0,83 % de los gastos para el sistema privado de salud. En USA el costo equivalió al 0,08 % del P1B de 2005 7. En Venezuela, dentro del grupo de EC la HTA (I10-I15) representa una de las tres causas más importantes de mortalidad (Figura 1).
La tasa de mortalidad por HTA (TEM) en los últimos doce años pasa de 14,38 a 17 por cada 100 000 habitantes 8,9 (Tabla 1). La tasa de incidencia de la HTA ha evolucionado a través del tiempo para tener un valor promedio de 15,66 pacientes por cada 1000 habitantes (Figura 2).
Fuente: Datos de los Anuarios de mortalidad del MPPS y de la Instituto Nacional de Estadísticas. Tasas específicas de mortalidad (Tasas Específicas de Mortalidad) 8,9
Si bien se observa una tendencia hacia la baja, es importante acotar que el número de consultas sobre el total de la población también ha bajado, por lo cual puede existir subregistro. Por otro lado, es importante señalar que estos datos son parciales ya que los centros privados de salud, en la mayoría de los casos, no tienen obligación de reportar la morbilidad general; sólo las enfermedades de denuncia obligatoria.
La complejidad de la intervención pública exige que los Estados empleen herramientas que les permitan lograr el objetivo de alcanzar una mayor calidad de vida de sus habitantes, por tal motivo, para el mejoramiento de esta problemática se funda en 1959 la División de EC del Ministerio de Sanidad y Asistencia Social (MSAS) y se desarrolla el primer "Programa de Lucha contra las EC" 10. El Programa más actualizado data del 2004 11. Allí se pone de manifiesto el hecho de que no es producto de un consenso entre otras organizaciones que se desempeñan en ese campo científico, aun cuando se observan tentativas para que se involucren 12.
En dicho programa se determinan cuáles son los factores de riesgo en cuanto a las enfermedades cardiovasculares e HTA: a. Los modificables (dislipidemias, sedentarismo, obesidad, diabetes mellitus, inadecuados hábitos alimentarios, estrés, hábito tabáquico, y consumo excesivo de alcohol etílico), y; b. Los no modificables (herencia, edad, sexo, raza). Sin embargo, en el caso de las EC hay evidencia empírica que las relacionan con algunas condiciones socioeconómicas, Fasceh con el sistema educativo 13,14,15 y con la influencia de factores ambientales. Por tal motivo las EC deben ser analizadas como un proceso multivariado en el cual el sistema de salud, es apenas un componente que en algunas ocasiones no es el más significativo.
Debido a la fragmentación de la información existente y el subregistro de la data reflejada en los anuarios epidemiológicos, el objetivo de este trabajo es determinar la prevalencia de la Hipertensión Arterial en Venezuela y sus factores de riesgo. De esta manera se obtiene la evidencia para formular recomendaciones de políticas públicas más pragmática, que logren su disminución en la sociedad venezolana.
METODOLOGÍA
La Revisión de la literatura se realizó en dos bases de datos: LILCAS y Pub Medline. La estrategia de búsqueda se explica en la Tabla 2.
Con base en estos criterios de selección se dividieron los trabajos en dos, los trabajos excluidos e incluidos. Para su análisis se siguieron los lineamientos conceptuales de Letelier 16, y Villar 17. En la Tabla 3 los criterios de selección de los trabajos.
RESULTADOS
En la RSL se analizaron en total 92 trabajos y se redujeron a un análisis detallado 20, siguiendo los criterios de selección y de exclusión de la literatura seleccionada (Tabla 4).
Se puede apreciar que los artículos seleccionados recogen información sobre las características y composición del hogar, las viviendas y servicios conexos, gastos del hogar, salud, educación, condición de empleo, ingreso y productividad de los que auto-reportan su condición de padecer HTA. Como ejemplo de este tipo de trabajos, tenemos el estudio realizado por Méndez 18 con una muestra nacionalmente representativa de alrededor de 2.800 personas denominada CRELES (The Costa Rican Study on Longevity and Healthy Aging) y la de Barros 19 con una muestra de 54 213 individuos, denominada VIGITEL (Vigilância de Fatores de Risco e Proteção párrafo Doenças Crónicas Por Inquérito telefónico).
En la tabla 4 se evidencia en forma general las principales características de los trabajos evaluados. En la RSL se analizaron en total 92 trabajos y se redujeron a un análisis detallado 20 trabajos. En el análisis general de los trabajos se determina lo siguiente:
No hay información suficiente para conocer la prevalencia de la HTA en Venezuela. La información está fragmentada, y la mayoría de los trabajos recoge datos de la región Centro Occidental del País (80 %). Dentro de ella la región más estudiada es la urbana (60 %).
Un punto común en todos los trabajos es que no coinciden en la edad de la población en estudio para expresar la prevalencia de HTA. Por lo que es difícil determinarla.
La minoría (35 %) analizan los factores determinantes y la aparición de una EC.
El tipo de investigación más común es la transversal (90 %).
La cantidad de encuestados en la muestra, las más utilizada es la de 30 a 450 encuestados (55 %). Esto se debe a que los trabajos se realizan en ambulatorios y hospitales y no requieren altos presupuestos para su realización.
Las encuestas que se realizan acompañadas con un examen médico son las más utilizadas (95 %).
Los estudios realizados provienen en su mayoría de las Universidades públicas (65,2 %).
De los artículos analizados ninguno recoge información sobre las características y composición del hogar, las viviendas y servicios conexos, gastos del hogar, salud, educación, condición de empleo, ingreso y productividad de los que autoreportan su condición de padecer HTA.
En ningún trabajo se menciona la política pública del Ministerio de Salud en el manejo y tratamiento de las enfermedades cardiovasculares, específicamente el HTA.
En la zona rural de los estados Carabobo y Cojedes la prevalencia es en promedio 33 %, siendo la obesidad medida en la circunferencia de la cintura el mejor predictor de enfermedades cardiometabólicas.
Desde 1985 la prevalencia del HTA en el área urbana de los Estados Zulia, Carabobo, Mérida Dtto Capital y Táchira se encuentra entre 24 % y 31 %. En cuanto a los factores de riesgo de las enfermedades cardiometabólicas coinciden en la obesidad abdominal, HTA, tabaquismo y la dislipidemia. Los trabajos publicados entre 1985 y 1999 sugieren que hay un 20 % que desconoce tener HTA, y que el origen de esa enfermedad es fetal, y la prevalencia se incrementa con la edad.
La prevalencia del HTA a nivel de todo el Estado Lara fue en promedio del 26 %. Lo preocupante es que la pre-hipertensión aumento de 27 % a 46 %, siendo el grupo más joven el que presentó la situación más desfavorable, al aumentar de 37 % a 49 % Sin embargo la prevalencia del HTA en el Zulia es aproximadamente el 40 %. Los factores de riesgo de las enf. Cardiometabólicas son: HTA, obesidad, sedentarismo, raza hispananegra, y dislipidemias.
La prevalencia del HTA para niños y adolescentes del sector urbano del Estado Trujillo y Lara es de 2,5 %. Los factores de riesgo más importantes fueron hipercolesterolemia e hipertrigliceridemia, al percentil 97.
Podemos concluir que de acuerdo a lo analizado no hay data suficiente para poder estimar la prevalencia de Hipertensión Arterial en Venezuela. La mayor información recaudada proviene de la región centro-occidental del país, la cual tiene un rango de prevalencia que oscila entre un 40 % en el Estado Zulia, hasta un 26 % en el Estado Lara. Otro dato que nos llamó la atención es que ninguno de los trabajos revisados nombra el programa de salud que tiene el Ministerio del Poder Popular para la Salud en base a esta enfermedad. Cuando revisamos su página web 26 no encontramos información acerca del programa. Esto nos hace pensar que no se está cumpliendo la función de rectoría del ente principal de salud del País. Con respecto a los factores de riesgo, la obesidad, dislipid mia, tabaquismo y sedentarismo fueron los que predominaron en la revisión realizada. Sin embargo, la información es fragmentada, la cual no es extrapolable para conocer la situación real de nuestro país.
Una recomendación que hacemos es la realización de un estudio multicéntrico que abarque todas las regiones de Venezuela para conocer la prevalencia real de la Hipertensión Arterial, sus factores de riesgos y determinantes sociales. Este estudio debería ser liderado por el Ministerio del Poder Popular de Salud para que tenga el financiamiento y la sostenibilidad en el tiempo para así tener las bases necesarias para el establecimiento de políticas públicas auditables