INTRODUCCIÓN
La Organización Mundial de la Salud (OMS, 2018) reconoció en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) al Síndrome de Quemarse por el Trabajo (SQT) (también llamado Síndrome de Desgaste Ocupacional o simplemente de Burnout) como un problema de salud asociado al empleo que se presenta como resultado del estrés laboral crónico.
La Organización Internacional del Trabajo señala a México como uno de los países con mayor estrés laboral, que al igual que el SQT puede producir afectaciones muy variadas y tener impacto en ámbitos diversos, se encuentra asociado al consumo de alcohol y tabaco, los accidentes laborales, la baja productividad, la falta de motivación entre otros. Como ya se mencionó una de las consecuencias más importantes del estrés laboral es el propio SQT (Aldana et al., 2020; Aranda et al., 2016; De Fransisco et al., 2016; Echerri et al, 2019; Espinoza et al., 2018; Flores, 2021; González, 2020; León, 2017; Martínez y Martínez, 2018; Miranda-Ledesma & Batista-Anache, 2018; OIT 2016; Quito et al., 2018).
A su vez el Síndrome supone costos importantes en diversos aspectos como lo es el individual, lo organizacional o lo económico. Estos costos se pueden ver específicamente como errores en el trabajo, ausentismo, rotación de personal, baja moral e incluso enfermedades mentales (Amutio et al., 2008; Barradas et al., 2017; De Francisco et al., 2016; García et al., 2020; García et al., 2021; Guang, 2020; Maslach & Leiter, 2017; Medina et al., 2020; Marrau, 2004; Méndez, 2004; Sánchez & Fontalba; 2017; Shirom, 2009).
Un aspecto importante del Síndrome es que está asociado a los profesionales dedicados al trato con personas; en México el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI, 2020) reportó que las actividades económicas de los servicios conformaban el 63,4 % del PIB nacional para el último trimestre del año.
Los factores de riesgo psicosocial son condiciones de trabajo que pueden afectar la integridad psicológica o física del trabajador, en este caso el docente, algunos factores de riesgos psicosocial señalados por los especialistas son; carga de trabajo, jornada laboral, interferencia en la relación trabajo familia, liderazgo, apoyo social, violencia laboral, entre otros (Dávila, et al., 2018; Freire & Corrales, 2018; Monroy-Castillo & Arturo Juárez-Garcia, 2019; Unda, et al., 2020).
Algunos estudios en México realizados en población docente han reportado prevalencias del Síndrome en torno al 40 % (Aldrete et al., 2008; Fernández et al., 2021; Hidalgo et al., 2019; Villamar et al., 2019; Villaruel et al., 2018; Villaverde et al., 2019), en contraparte a estos estudios otras investigaciones han reportado prevalencias alrededor del 10 % (Pando-Moreno, Aranda, Aldrete et al., 2006; Pando-Moreno, Castañeda-Torres et al., 2006; Unda et al., 2007).
Con respecto a la evaluación del Síndrome, Díaz y Gómez (2016) señalan que el Maslach Burnout Inventory (MBI) es el instrumento más utilizado en América Latina aunque mencionan algunas dificultades psicométricas, al respecto Juárez et al. (2020) quien realizó una revisión sistemática de la evaluación del SQT en México encontró en los artículos realizados con el MBI ocho puntos de corte diferentes para determinar si un caso presenta o no el Síndrome, así como 10 diferentes para determinar un valor como alto o bajo. En los estudios de Aranda et al. (2016), y, Arvizu y Uribe (2017) realizados en población mexicana, las alfas del instrumento en la subescala de Despersonalización son inferiores a 50 %, mientras que Pando-Moreno, Aranda y López (2015) quienes trabajaron con población hispanohablante, encontraron dificultades semejantes. Por el contrario, Juárez et al. (2020) y Rivera-Ávila et al. (2017) encontraron alfas aceptables.
Modelo de Maslach (MBI)
En el modelo que fundamenta al MBI, se define al SQT como un síndrome psicológico; este surge como respuesta a las exigencias y estresores interpersonales que se presentan de manera crónica en el trabajo; se caracteriza por los sentimientos de cansancio emocional, actitudes negativas, y cínicas asociadas al trabajo con el cliente, así como la baja realización personal; tales síntomas son no físicos en su mayoría y son reconocidos por la CIE-11. Se evalúa a través de las siguientes subescalas (Maslach & Jackson, 1981; Maslach & Jackson, 1986; Maslach et al., 2001; Maslach & Leiter, 2016; Maslach, 2017):
Cansancio emocional: Para Maslach es el aspecto clave del SQT, evalúa la carga emocional y el agotamiento de los recursos emocionales producto del trabajo, es la respuesta emocional al estrés laboral, un individuo que presenta Cansancio emocional no se siente al nivel psicológico en su trabajo, es decir cuando un individuo puntúa alto en esta subescala se está hablando de afectación.
Despersonalización: Es el aspecto interpersonal del síndrome, evalúa actitudes cínicas, negativas, insensibles y/o impersonales hacia las personas a las que se presta el servicio o atención, es producto de la autoprotección; el profesional pone distancia entre él y los problemas deshumanizando a los usuarios del servicio prestado. Al igual que con el cansancio emocional supone afectación cuando presentan puntuaciones altas.
Realización personal: Evalúa el sentimiento de ser competente y exitoso. La afectación en este caso se presenta cuando un puntaje es bajo, esto supone una tendencia a autoevaluarse negativamente, esta evaluación a su vez dificulta la realización del trabajo, así como la vinculación con otras personas en el entorno laboral. No debe ser considerada forzosamente como opuesta a las otras dos dimensiones.
En este modelo se consideran varias teorías del desarrollo del Síndrome, una de ellas es que los mejores y más idealistas empleados son los más propensos a desarrollar SQT, otra (ya mencionada) dice que el Síndrome es producto de la exposición a estrés crónico propio de desbalances en el trabajo, una tercera afirma que el desarrollo se da mediante fases, que corresponden a las dimensiones; en este último caso no hay consenso en el orden en el que se presentan las fases, aunque hay un orden que se destaca entre los demás en el que el Cansancio emocional y la Despersonalización se desarrollan de manera simultánea seguidos de la baja Realización personal (Maslach & Leiter, 2016; Maslach et al., 2001).
Modelo de Gil-Monte
El segundo modelo más utilizado para la evaluación del SQT en México y América Latina es el del Cuestionario para la Evaluación del Síndrome de Quemarse por el Trabajo (CESQT) (Díaz y Gómez, 2016; Juárez-García et al., 2014; Tabares-Díaz et al., 2020).
En el modelo que subyace al CESQT, el SQT es definido como una respuesta psicológica al estrés laboral crónico, que caracteriza (aunque no exclusivamente) a las profesiones de los servicios, es una experiencia subjetiva de carácter negativo que se presenta como cogniciones, emociones y actitudes hacia los destinatarios del servicio prestado (en este caso alumnos o familiares) o simplemente hacia el rol profesional, algunas de sus consecuencias son disfunciones conductuales, psicológicas y fisiológicas, es decir repercusiones nocivas para las personas y para la organización (Gil-Monte, 2005; Gil-Monte, 2019; Gil-Monte et al., 2005; Gil-Monte et al., 2009; Gil-Monte et al., 2013; Gil-Monte et al., 2017).
El proceso de desarrollo del SQT en este modelo es un conjunto de síntomas que constituyen un bucle; este inicia con el deterioro de la organización (fenómenos como la inequidad, conflictos interpersonales, agresiones, conflicto de rol, sobrecarga laboral, entre otros); este deterioro de la organización influye en el deterioro cognitivo (o baja realización personal) y en el deterioro emocional (o desgaste psíquico) de los individuos que se encuentran en la organización; el deterioro cognitivo y emocional a su vez influyen en las actitudes negativas hacia el trabajo (como la indolencia), y todo esto a su vez influye en la presencia de sentimientos de culpa, esta culpa puede llevar al profesional (en este caso maestros y personal de la escuela) a tener una mayor implicación con el trabajo, si el deterioro de la organización no disminuye esta nueva mayor implicación puede agravar el problema (Gil-Monte, 2005).
Al igual que en el MBI, en el CESQT las dimensiones evaluadas ajustan a la definición del CIE-11 (Gil-Monte, 2005; Gil-Monte, 2019; Gil-Monte et al., 2005; Gil-Monte et al., 2009; Gil-Monte et al., 2013; Gil-Monte et al., 2017; Llorca-Rubio et al., 2021; Rabasa et al., 2016):
Ilusión por el trabajo: se refiere al deseo de alcanzar metas laborales debido a que estas le suponen una fuente de placer personal al profesional, es decir el individuo percibe su trabajo como atractivo. Esta dimensión es similar a la Realización personal del MBI, pero a diferencia de esta la Ilusión por el trabajo incluye un indicador de autoeficacia.
Desgaste psíquico: que es la presencia de agotamiento físico y emocional producto del trato con las personas (en este caso alumnos o padres de familia) que presentan o causan problemas. Similar al Cansancio emocional (su equivalente en el MBI) solo que el Desgaste se distingue por incluir aspectos físicos del agotamiento y no solo psicológicos.
Indolencia: que describe actitudes y conductas negativas de carácter cínico, insensible e indiferente hacia los alumnos o padres de familia. Esta subescala del CESQT es similar a la Despersonalización del MBI, una puntuación alta en esta dimensión es reflejo de afectación.
Culpa: en algunos casos se presentan sentimientos de culpa producto de las conductas y actitudes indolentes. Esta dimensión es propia del modelo y no tiene un similar en el MBI.
El modelo del CESQT permite al evaluador promediar las tres primeras dimensiones (Baja Ilusión por el trabajo, Desgaste psíquico e Indolencia) y así poder diagnosticar el SQT, la Culpa por su parte permite distinguir entre dos tipos de perfil para el diagnostico del SQT, el primero (perfil 1) con baja Ilusión por el trabajo, alto Desgaste psíquico, alta Indolencia pero bajos niveles de Culpa, y un perfil 2 que se diferencia del primero por sí presentar niveles altos o críticos de culpa, se considera que el segundo perfil refleja un mayor grado de afectación; es importante señalar que la Culpa constituye un elemento que ayuda a la conceptualización del Síndrome (Gil-Monte, 2005; Gil-Monte, 2011; Gil-Monte et al., 2013).
El CESQT, el MBI, y su validez convergente y divergente
Antes de abordar estudios que exploraron con anterioridad la validez convergente y divergente del SQT es pertinente puntualizar algunas diferencias entre ambos modelos. Además de la Culpa como un síntoma extra, y la respectiva diferenciación que implica al diagnosticar dos perfiles diferentes, la Culpa en el CESQT es reflejo del compromiso del trabajador para con su trabajo y tiene un papel importante durante el proceso de desarrollo del SQT (Gil Monte, 2005). Por su parte, en el MBI predominan los síntomas mentales o conductuales por encima de los físicos (Gil-Monte, 2019; Martínez, 2010; Maslach et al., 2001).
En el estudio de Gil-Monte et al. (2005) quienes trabajaron con una muestra española, se encontró que las correlaciones más altas correspondían a las dimensiones similares del CESQT y del MBI, es decir Ilusión por el trabajo y Realización personal (r=0,61**), Desgaste psíquico y Cansancio emocional (r=0,83**) (la más alta de toda la tabla) e, Indolencia y Despersonalización (r=0,40**), la correlación más baja se encontró entre Ilusión por el trabajo y Despersonalización (r=-0,09), todas las dimensiones de ambos instrumentos presentaron Alfas de Cronbach aceptables salvo Indolencia (Alfa de 0,66) y Despersonalización (Alfa de 0,47).
En el estudio realizado por Gil-Monte y Olivares (2007) en población chilena se encontraron resultados semejantes a la población española, los valores más altos se encuentran en las dimensiones similares del CESQT y MBI como enuncia a continuación: Ilusión por el trabajo y Realización personal (r=0,35**), Desgaste psíquico y Cansancio emocional (r=0,77**) (la más alta de toda la tabla) e Indolencia y Despersonalización (r=0,39**), el valor más bajo se presentó entre Culpa y Realización Personal (r=-0,16*) todas las dimensiones de los instrumentos utilizados tuvieron Alfas aceptables salvo Despersonalización (Alfa de 0,52).
Al igual que en la población chilena y española, en el estudio de Figueiredo-Ferraz et al. (2013) incluyeron población portuguesa y encontraron que los valores más altos en las dimensiones son similares de ambos instrumentos, es decir Ilusión por el trabajo y Realización personal (r=0,52**), Desgaste psíquico y Cansancio emocional (r=0,68**) (la mayor de la tabla) e, Indolencia y Despersonalización (r=0,45**), el valor más bajo presentado en la tabla fue entre Ilusión por el trabajo y Culpa (r=-0,10*) las Alfas de Cronbach de ambos instrumentos fueron aceptables salvo la Despersonalización (Alfa de 0,65).
El encontrar correlaciones significativas entre los dos instrumentos en los tres estudios es evidencia de validez convergente; por todo lo anterior el objetivo del presente estudio es explorar la validez convergente y discriminante del MBI y CESQT, en población mexicana.
MÉTODO
Muestra
El muestro fue no aleatorio por conveniencia, los profesores participaron voluntariamente, accedieron a contestar el cuestionario después de la publicación de una convocatoria a todas las escuelas primarias y secundarias de la Ciudad de México. Respondieron 483 profesores de 100 escuelas de educación básica, de las cuales 44 fueron primarias y el resto secundarias. Se incluyeron los que en el momento de la evaluación se encontraban laboralmente activos, en los turnos matutino, vespertino y mixto, excluyendo aquellos que no estuvieran ejerciendo actividades dentro de la escuela o reportaran alguna patología mental de origen no laboral. Del total de los encuestados 77,2 % fueron mujeres el resto hombres, la media de edad es de 41 años, con una desviación estándar de 10 años, la edad mínima 21 años y la máxima 77 años. El 32,3 % tenía estado civil soltero, 41 % casado, 9,7 % vivía en unión libre, 9,3 % era divorciado, el 1,9 % era viudo mientras que 5,2 % estaba separado.
Instrumentos
El CESQT validado en México en una muestra de docentes por Gil-Monte, Unda y Sandoval (2009) presentó una confiabilidad aceptable, es una escala tipo Likert compuesta por cuatro dimensiones y 20 ítems, estos ítems contienen ideas sobre el trabajo del evaluado, se debe contestar con qué frecuencia se presentan estas ideas sobre su trabajo en la escala como nunca, raramente, a veces, frecuentemente y muy frecuentemente; de los 20 ítems cinco corresponden a la Ilusión en el Trabajo (Alfa de 89 %) en esta dimensión se pueden encontrar ítems como “mi trabajo me supone un reto estimulante” o “veo mi trabajo como una fuente de realización personal”, otros cuatro ítems corresponden a Desgaste Psíquico (Alfa de 89 %) subescala en donde se pueden encontrar ítems como “pienso que estoy saturado/a por el trabajo” o “me siento agobiado/a por el trabajo”, seis ítems corresponden a Indolencia (Alfa de 83 %) algunos ejemplo de los ítems en esta subescala son “no me apetece atender a algunos alumnos” o “creo que muchos alumnos son insoportables” y los cinco ítems restantes corresponden a Culpa (Alfa de 85 %) algunos ejemplos de los ítems de la dimensión son “me preocupa el trato que he dado a algunas personas en el trabajo” o “me siento culpable por alguna de mis actitudes en el trabajo”, los niveles se establecieron con base al manual de Gil-Monte (2011) y corresponden a muy bajo, bajo, alto y crítico.
El Maslach Burnout Inventory Human Services Survey (MBI-HSS) validado en población mexicana por Placencia et al. (2013), en una población de profesionales de la salud. Es una escala Likert compuesta por 22 reactivos de tres dimensiones, de los cuales nueve corresponden a Cansancio emocional (Alfa de 0,92) (ej. me siento emocionalmente agotado/a por mi trabajo) cinco a Despersonalización (Alfa de 0,60) (ej. Creo que trato algunos alumnos como si fueran objetos impersonales), ocho a Realización personal (Alfa 0,81) (ej. Me siento estimulado/a después de trabajar con mis alumnos).
Tiene cinco opciones de respuesta que corresponden a nunca, algunas veces al año, algunas veces al mes, algunas veces a la semana y diariamente. Las alfas de cada instrumento corresponden al presente estudio. Cuestionario de datos sociodemográficos y sociolaborales de elaboración propia que incluye, sexo, edad, estado civil, escolaridad, antigüedad, turno y tipo de contrato.
Procedimientos
Los profesores participaron de manera voluntaria en evaluaciones colectivas realizadas en las instalaciones de los centros de trabajo (primarias y secundarias). Se pidió a los participantes firmar un consentimiento informado en donde se aclaraba la estricta confidencialidad de la información proporcionada en los cuestionarios, así como el objetivo, y procesos subsecuentes de la investigación.
Análisis de datos
En el análisis de datos se realizó una matriz multirasgo-multimétodo (MRMM), que es un enfoque desarrollado por Campbell y Fiske (1959) para analizar la validez convergente y divergente de dos instrumentos, en este caso de las dimensiones que conforman el MBI-HSS y CESQT. La MRMM está compuesta por un bloque heterométodo donde se correlacionan ambos instrumentos, por triángulos monométodo en donde se correlacionan las subescalas de un solo instrumento consigo mismas, y por una diagonal de confiabilidad donde se presentan las Alfas de Cronbach de cada instrumento. La matriz se realizó a través del programa estadístico SPSS 23,0.
RESULTADOS
La prevalencia del Síndrome conforme al modelo de Gil-Monte (2005) se presentó de la siguiente forma: 26,7 % de los evaluados tuvieron muy baja Ilusión por el trabajo, 26,3 % puntuaron como muy alto o crítico en Desgaste psíquico, 20,1 % tuvieron niveles muy bajos o críticos de Indolencia y la Culpa se presentó en 17,8 %. El total de los profesores que presentaron SQT como muy alto o crítico fue de 23,2 %, de estos 10,8 % correspondieron a perfil 1 y 12,4 % correspondieron a perfil 2.
Conforme al modelo de Maslach y Jackson (1981) la prevalencia se presenta de la siguiente forma: Cansancio emocional se presentó en el 22,8 % de los encuestados, Despersonalización se presentó en 23,8 % y el Bajo nivel de realización personal se presentó en el 29 %. El 8,1 % presentó SQT.
CESQT (Afectación) | MBI (Afectación) | |
---|---|---|
Dimensión | ||
IT/RP | 26.7% | 29% |
DP/CE | 26.3% | 22.8% |
I/D | 20.1% | 23.8% |
C | 17.8% | |
Total de casos con SQT: | 23.2% | 8.1% |
IT: Ilusión por el trabajo, RP: Realización personal, DP: Desgaste psíquico, CE: Cansancio emocional, I: Indolencia, D: Despersonalización, C: Culpa
Respecto a la MRMM se presentaron correlaciones significativas, positivas y diferentes a cero entre los mismos rasgos medidos por diferente método, Ilusión por el trabajo y Realización personal (r=0,40**) Desgaste psíquico y Cansancio emocional (r=0,87**), e Indolencia y Despersonalización (r=0,52**) lo cual supone validez convergente.
CESQT | MBI | |||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
IT | DP | I | C | RP | CE | D | ||
CESQT | IT | (.89) | -.19** | -.25** | -.08 | .40** | -.30** | -.20** |
DP | -.19** | (.90) | .55** | .48** | -.32** | .87** | .42** | |
I | -.25** | .55** | (.84) | .56** | -.45** | .62** | .52** | |
C | -.08 | .48** | .56** | (.86) | -.32** | .46** | .46** | |
MBI | RP | .40** | -.32** | -.45** | -.32** | (.81) | -.38** | -.40** |
CE | -.30** | .87** | .62** | .46** | -.38** | (.92) | .53** | |
D | -.20** | .42** | .52** | .46** | -.40** | .53** | (.60) |
IT: Ilusión por el trabajo; DP: Desgaste psíquico; I: Indolencia; C: Culpa; RP: Realización personal; CE: Casación emocional; D: Despersonalización.
P<.01**
Las correlaciones entre dimensiones de diferente método y rasgo (en el bloque de heterométodo) también fueron todas significativas incluidas las correspondientes a la Culpa. La Realización personal tuvo una correlación más alta con la Indolencia (r=-0,45**) que con su similar del CESQT (la Ilusión por el trabajo, r=0,40**). La Indolencia por su parte tuvo una correlación mayor con Cansancio emocional (r=0,62**) que con su similar del MBI, es decir la Despersonalización (r=0,52**). En la diagonal se pueden observar que todas las Alfas de Cronbach son aceptables salvo la de Despersonalización.
En el triángulo de monométodo del CESQT la correlación más alta se presenta entre Indolencia y Culpa (r=0,56**) seguida Desgaste psíquico e Indolencia (r=0,55**), por su parte la Ilusión por el trabajo y la Culpa no presentaron correlación significativa, además de que la correlación entre Ilusión por el trabajo y Desgaste psíquico fue la más baja de la tabla (r=0,19**).
Con respecto al triángulo monométodo del MBI las correlaciones más altas las presenta la Despersonalización con Cansancio emocional (r=0,53**) y con Realización personal (r=-0,40**), por su parte la correlación más baja se encontró entre Realización Personal y Cansancio emocional (r=-0,38**). En general las correlaciones del triángulo monométodo del MBI se presentan de manera semejante a las correlaciones del triángulo del CESQT.
DISCUSIÓN
El objetivo del presente estudio fue explorar la validez convergente y discriminante del MBI y CESQT, en población mexicana. Con base en los datos de la Matriz multirasgo-multimétodo se puede decir que existe validez convergente entre las dimensiones del CESQT y el MBI, este resultado coincide con información encontrada anteriormente, las tres investigaciones revisadas que utilizaron ambos instrumentos presentaron hallazgos concordantes.
En el MBI (Maslach & Jackson, 1981; Maslach & Jackson, 1986; Maslach et al., 2001; Maslach & Leiter, 2016; Maslach, 2017) se considera al Cansancio emocional como el aspecto clave del Síndrome; este planteamiento puede explicar porqué tanto en este estudio como en los estudios previos donde se realizó una MMRM la correlación que presenta los valores más altos es siempre entre Cansancio emocional y Desgaste psíquico.
Por otro lado uno de los números presentados por las correlaciones no fue el esperado teóricamente, específicamente en el caso de la Indolencia, subescala que obtuvo números mayores con el Cansancio emocional que con la Despersonalización (su respectivo similar del MBI), esto puede deberse a la baja confiabilidad presentada por la Despersonalización, aunque en los estudios realizados anteriormente la Despersonalización también presentó Alfas de Cronbach por debajo de los valores aceptables (0,70), a pesar de esto, tales investigaciones encontraron valores esperados teóricamente entre Indolencia y Despersonalización.
En estudios realizados anteriormente en población docente mexicana se ha encontrado un aparente aumento en la prevalencia de SQT, aquellos que se realizaron hace cuatro años como máximo (Fernández et al., 2021; Hidalgo et al., 2019; Villamar et al., 2019; Villaruel et al., 2018; Villaverde et al., 2019) han encontrado prevalencias alrededor del 40 %, mientras que aquellas que se realizaron hace más de una década presentaron prevalencias alrededor del 10 % (Pando-Moreno, Aranda, Aldrete et al., 2006; Pando-Moreno, Castañeda-Torres et al., 2006; Unda et al. 2007), los hallazgos del presente estudio coinciden en el aumento, aunque en menor medida que los mencionados, la prevalencia de profesores con SQT de este estudio es de 22,8 %.
En futuras investigaciones se recomienda realizar un Análisis Factorial Confirmatorio del CESQT que complemente la validación del instrumento en población mexicana, así como la validez convergente de este estudio. Además, de acuerdo con investigaciones en las que se ha realizado un análisis multirrasgo-multimétodo (Arraras et al., 2019) es posible tomar en cuenta la evaluación de la consistencia interna y la confiabilidad test-retest a través del coeficiente de correlación intraclase (CCI), lo cual podría ser contemplado en un futuro.
CONCLUSIÓN
La confiabilidad de los instrumentos de medición en psicología como lo son el MBI y CESQT, permite estimar la estabilidad y consistencia. La evidencia empírica en este campo a su vez ofrece información que permite discernir entre instrumentos aquellos que resultan convenientes.
La validez convergente del CESQT con el MBI, las dificultades psicométricas presentadas por el instrumento de Maslach y Jackson (1981), así como la concordancia del CESQT con el criterio conceptual ofrecido en el CIE11 por la OMS, hacen de este último instrumento una alternativa para la evaluación del Síndrome y se recomienda su uso para la población mexicana.
Esto debido a que los resultados muestran que se está midiendo el mismo constructo llamado Burnout en las escalas, esto con base en la MRMM en la cual se presentaron correlaciones significativas, positivas y diferentes a cero entre los mismos rasgos medidos por diferente método lo cual supone validez convergente, además de obtener correlaciones significativas entre dimensiones de diferente método y rasgo en el bloque de heterométodo.
De acuerdo a diversos estudios en los que se realizó un análisis multirrasgo-multimétodo se hace énfasis en que las correlaciones más elevadas se encuentran entre las áreas cuyos contenidos podrían estar más relacionados (Arraras et al., 2019), aspecto que se ha mostrado dentro del triángulo monométodo del MBI realizado, sin embargo, también es de importancia explorar a profundidad el aspecto de la Despersonalización y la correlación con la Indolencia y el Cansancio Emocional, los cuales arrojaron datos diferentes a los teóricos.
Respecto a las limitaciones, la muestra no resulta representativa de la población debido a la realización del muestreo por conveniencia; en algunos casos la autoridad educativa favoreció la evaluación en escuelas donde se consideró habría afectación, lo cual puede o no afectar los resultados, en especial aquellos propios de la prevalencia, por lo que en un futuro se podría plantear la realización del estudio con muestras representativas.
En estudios como el realizado por Peña et al. (2020), en el que a pesar de obtener evidencia de validación convergente y de criterio, además de una fiabilidad adecuada de su escala, hubo limitaciones respecto al tamaño de su muestra, es decir, a pesar de obtener resultados favorecedores se consideró importante ampliar el tamaño de la muestra, aspecto que se ha tomado en cuenta en el presente estudio; se concluye entonces que es de importancia continuar realizando investigaciones con muestras grandes y representativas.