Introducción
En Colombia, Chiroptera es el orden de mamíferos con el mayor número de especies (217) registradas (Ramírez-Cháves et al., 2021). Los murciélagos son mamíferos voladores que contribuyen al mantenimiento de los ecosistemas a partir de la dispersión de semillas, la polinización de las plantas y el control biológico de insectos y vertebrados; además, son indicadores biológicos de la calidad del hábitat y ofrecen diversos servicios ecosistémicos que benefician directa e indirectamente a los humanos (Fenton et al., 1992; Medellín et al., 2000). Los puntos de percha y refugio naturales usados por los murciélagos pueden ser permanentes, como las cuevas, las grietas y los troncos huecos, o temporales, como el follaje, los nidos abandonados y los termiteros. También pueden usar refugios artificiales de forma temporal o permanente, por ejemplo, minas, alcantarillas, casas, edificios, o puentes, entre otros, que utilizan para el descanso o exclusivamente para la alimentación o reproducción (Tirira, 2007; Vargas-Contreras et al., 2012; Muñoz-Saba et al., 2019).
Factores antrópicos como la expansión agropecuaria y urbana y el desconocimiento general que se tiene sobre este grupo biológico (asociado con diferentes enfermedades emergentes, mitos y concepciones erradas), exacerban los conflictos entre humanos y murciélagos, favoreciendo su quema y la de sus refugios (Romero-Ruiz et al., 2012; Casallas-Pabón et al., 2019; Muñoz-Saba et al., 2019; Andersen et al., 2020; Ali et al., 2020; Irving et al., 2020; Jin et al., 2020; Latinne et al., 2020; Hu et al., 2021). El problema se acentúa por la creencia generalizada de que todas las especies son hematófagas y atacan el ganado (Segura-Trujillo & Navarro-Pérez, 2010; Cajas-Castillo et al., 2013). La eliminación de los murciélagos ha disminuido las poblaciones y, en algunos casos, ha llevado a la extinción local de algunas especies (Saunders et al., 1991; Atagana et al., 2021; Cabrera et al., 2016). Estos factores constituyen problemas de conservación que se ven reflejados en la pérdida y degradación de los hábitats y la reducción de la oferta alimenticia y los refugios para especies nativas y migratorias y, por ende, en la disminución de la biodiversidad (Wilkinson & Fleming, 1996; González, 2013).
Una alternativa de manejo y conservación consiste en el uso de refugios artificiales dirigidos, conocidos como cajas para murciélagos (bat boxes), efectivos para especies de regiones templadas de Europa y Estados Unidos, pero cuyo éxito es aún limitado en condiciones tropicales (Alberico et al., 2004; Ciechanowski, 2005; Kelm, 2008; Leighton & Casallas-Pabón, 2012; Schöner, 2012; Dodds & Bilston, 2013; Rodríguez et al., 2015; Rueegger, 2016). Otros esfuerzos de conservación, promovidos en gran medida por las ONG, se han enfocado en el trabajo de divulgación y educación en comunidades humanas (Kingston et al., 2006), con lo que se han obtenido importantes avances en el reconocimiento de los murciélagos como un grupo de importancia económica y de conservación.
En el corregimiento de Pasuncha (municipio de Pacho, Cundinamarca, Colombia), hay casas abandonadas y en construcción que los murciélagos utilizan como refugios. No obstante, debido al desconocimiento de su importancia por parte de los pobladores locales, están en riesgo de ser demolidas, lo que afectaría a los murciélagos allí establecidos. El objetivo de este estudio, adelantado en el marco del macroproyecto "El conocimiento de la diversidad biológica al servicio de las comunidades regionales", fue contribuir a la comprensión de la quiropterofauna del área a partir del conocimiento del ensamblaje de las especies; la propuesta de un nuevo modelo de caja para murciélagos de especies tropicales como posible estrategia de mitigación de los conflictos entre humanos y murciélagos, y el reconocimiento de la comunidad del rol que cumplen los murciélagos en la conservación de los ecosistemas mediante la educación ambiental basada en la ciencia ciudadana.
Materiales y métodos
Area de estudio
El estudio se llevó a cabo en el corregimiento de Pasuncha (05°20'00,0'' N, 74°15'00,0'' W), en el municipio de Pacho, provincia de Río Negro, departamento de Cundinamarca, flanco oriental de la cordillera Oriental, entre los 1.000 y los 2.000 m s.n.m., y su clima es cálido húmedo y cálido seco. El corregimiento lo conforman 15 veredas: Aguachentales, Alto Yasal, Bajo Pasuncha, Bajo Yasal, Cerrezuela, El Fical, El Palmar, El Pensil, La Mona, Palancana, Quebrada Honda, San José, San José de la Gaita, Santa Rosa y Venadillo (Prieto et al., 2003; Bello & Páez, 2018). Se establecieron tres sitios de muestreo: la Reserva Roble & Nogal (vereda Santa Rosa, 05°17'08,70'' N, 74°13'21,61" W), y las fincas Patio Bonito (05°16'49,98" N, 74°14'23,78" W) y San Martín (05°17'22,81'' N, 74°14'05,99'' W) en la vereda El Pensil, donde se habían detectado casas refugio, es decir, casas abandonadas con ocupación de murciélagos (Figura 1). Durante el muestreo hubo un periodo de sequía, con una temperatura media entre los 20 y los 21 °C, humedad relativa de 70 a 80 %, precipitaciones bajas y escasa nubosidad (Meteoblue, 2020).
En cuanto al componente biótico, la zona se caracteriza por agroecosistemas donde dominan los parches de áreas agrícolas heterogéneas con cultivos, pastizales, y parches de fragmentos y corredores de vegetación natural, principalmente secundaria, en forma de relictos de bosques subandinos, húmedos premontanos, y vegetación arbustiva y herbácea que forma rastrojos; son relevantes también los bosques de galería asociados con la gran cantidad de nacimientos de agua que tiene el corregimiento (aprox. 210) y las condiciones de humedad de la región.
Ensamblaje de murciélagos
Con el fin de establecer las especies de murciélagos y su organización trófica, se hicieron muestreos entre el 2 y el 4 de septiembre de 2019 en los hábitats asociados con las casas refugio utilizando redes de niebla según la metodología de Muñoz-Saba et al. (2019). En cada sitio de muestreo se dispusieron tres redes de 9 x 2,5 m entre las 18:00 y las 06:00 h.; el esfuerzo de muestreo fue de 761,85 m2/h en la Reserva Roble & Nogal, 613,575 m2/h en Patio Bonito, y 819,675 m2/h en San Martín.
Se tomaron las medidas morfométricas y la información de campo de los individuos capturados con red en cada muestreo (ver siguientes secciones) según Muñoz-Saba et al. (2019). Se registró la longitud total (LT), la longitud de la cola (LC), la de la oreja (LO), la de la pata (LP), las del antebrazo y la tibia (en caso de pertenecer al género Carollia), y la del calcáneo, así como el peso, usando una regleta metálica y un calibrador digital con resolución de ±0,5 mm y ±0,2 mm, y una balanza de resorte de ±1 g. Siguiendo los lineamientos establecidos por Muñoz-Saba et al. (2019), también se registraron en formatos de campo la categoría de edad, el sexo y el estado reproductivo, especificaciones del muestreo y la captura, la identificación preliminar y, en caso de recolección, el tipo de preservación y la especificación de las colecciones asociadas. La identificación de los ejemplares recolectados fue corroborada en laboratorio siguiendo las claves taxonómicas de Díaz et al. (2011).
Los seis ejemplares recolectados (Roble & Nogal: número de colección TRP001, TRP002; San Martín: TRP004, TRP005, TRP007; Patio Bonito: TRP006), más tres adicionales de un muestreo complementario (municipio de Topaipí, vereda Mamerta, quebrada El Infierno: TRP008-TRP010), fueron sacrificados siguiendo los principios éticos sugeridos en Muñoz-Saba et al. (2019) y se depositaron en la Colección de Mamíferos Alberto Cadena-García del Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia (ICN-MHN-Ma 24769-24777; proyecto de investigación, código Hermes: 46961).
Casas refugio: caracterización y especies encontradas
En cada casa refugio se caracterizaron la riqueza y el ensamblaje de especies, así como las condiciones físico-estructurales (Figura 1S), según lo propuesto por Muñoz-Saba et al. (2019). El muestreo, a cargo de dos personas, no duró más de 30 minutos y se evitaron el ruido y los movimientos fuertes para no perturbar a los murciélagos.
En cuanto a las casas refugio, se tuvieron en cuenta las siguientes categorías y variables (Tabla 1S): 1) la localización, registrando la ubicación geográfica, la distancia a la vegetación arbustiva-arbórea, y la orientación cardinal; 2) las características estructurales, es decir, las dimensiones externas e internas (longitud, ancho, alto), los posibles puntos de entrada y salida de los murciélagos (aleros del techo, huecos, puertas, ventanas), y las características de los materiales, su textura y estructura (por ejemplo, niveles de la construcción, ubicación de paredes, vigas, vetas), y 3) las condiciones medioambientales (analizadas a la luz del día entre las 08:00 y las 15:00 h) de luz (oscuridad: ausencia de luz, penumbra: escaso ingreso de luz, luz: presencia de luz) y de ruido (ausencia, presencia).
En cuanto a los murciélagos, se tuvieron en cuenta (Tabla 1S): 1) las características de percha: ubicación espacial de los murciélagos dentro de la casa refugio, tipo de estructura usada para percha, y material de la percha; 2) la agregación (forma de distribución de los individuos): solitarios, aglomerados (contacto en sentido horizontal), racimos (contacto en sentido vertical), el número de individuos por manada registrado con un contador manual, y el número total de individuos a partir de la suma de individuos de cada una de las manadas; 3) el tipo de colonia: monoespecífica (una sola especie), monogenérica (varias especies de un solo género), intergenérica (varias especies de diferentes géneros), y el número de especies y gremios tróficos, y 4) el uso de las casas refugio (inferido a partir de la presencia, ubicación y cantidad del guano formado por la mezcla de los excrementos de murciélago y otros vertebrados, cadáveres y material regurgitado): fijo u ocasional, la abundancia del guano: ausente, raro (pocas excretas: 1-3 registros), común (montículos pequeños: 4-20 registros), muy común (montículos grandes: > 21 registros), y, por último, la distribución del guano.
Posteriormente, se capturaron manualmente algunos ejemplares usando guantes de protección y redes, con el fin de verificar su taxonomía. Todas las actividades con el equipo de protección individual para minimizar los riesgos asociados al contacto con el guano, el daño a los murciélagos e investigadores, y el estado de deterioro de las casas (guantes de látex y de tela, protección ocular y respiratoria, botas de campo y chaleco).
Estructura poblacional de las especies en la comunidad de murciélagos
Debido al proceso de demolición de la casa y a la inminente pérdida del refugio, se definió la estructura poblacional de las especies presentes en la casa de la Reserva Roble & Nogal, la cual se bordeó con redes de niebla para evitar que los murciélagos escaparan, mientras que dos personas en el interior los recolectaban de forma manual y con jamás.
Los individuos capturados se colocaron en bolsas de tela separadas, en las cuales no duraron más de 30 minutos, y se registró la información de campo de cada uno. Después, se marcaron con un perforador en el plagiopatagio del ala derecha, se liberaron y se ubicaron manualmente dentro de las cajas para murciélagos; las redes instaladas sirvieron para excluir a los liberados y evitar su retorno a la casa refugio.
Diseño e instalación de la caja para murciélagos
Se construyó una única caja para murciélagos con un diseño ajustado a las variables bióticas y abióticas registradas en la casa refugio de la Reserva Roble & Nogal. Con base en la literatura sobre el tema de refugios y la consulta con expertos en murciélagos y arquitectura, se definieron los criterios para el diseño y la construcción de la caja (Figura 2S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217, Tablas 1S,2S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217). La estructura primaria se hizo en Bogotá y se finalizó en el corregimiento de Pasuncha con el apoyo de algunos de los habitantes.
Trabajo de educación ambiental y ciencia ciudadana
Los aspectos de la biología, la ecología y la importancia de la quiropterofauna, especialmente con relación a las especies identificadas en el área de estudio y los fundamentos del uso de los refugios artificiales dirigidos (bat boxes) como propuesta de manejo y conservación, se integraron a las actividades de educación y participación basadas en la ciencia ciudadana como una estrategia de enfoque múltiple en la mitigación de los conflictos entre humanos y murciélago. El trabajo con la comunidad se hizo con la colaboración de las autoridades locales (el personero, el párroco y el presidente de la junta de acción comunal), y las jornadas educativas se llevaron a cabo entre las 10:00 y 12:00 h en el polideportivo del corregimiento, presentando las actividades con ilustraciones, grabaciones, fotografías y videos.
Las jornadas (Caja 1S) se llevaron a cabo el 7 de septiembre y el 10 de noviembre de 2019 aplicando los métodos de estudios socioculturales y estuvieron a cargo de una de las investigadoras; su desarrollaron en dos sesiones para evaluar los cambios en la percepción de los murciélagos.
Resultados
Ensamblaje de murciélagos
Se registraron dos familias y ocho especies de murciélagos correspondientes a cuatro gremios tróficos en el corregimiento de Pasuncha. El ensamblaje estaba conformado por el gremio frugívoro (62,5 %), con cinco especies de la familia Phyllostomidae (Carollinae: Carollia brevicaudum Schinz, 1821, Carollia castanea H Allen, 1890, Carolliaperspicillata Linnaeus, 1758); el Stenodermatinae (Artibeuslituratus Olfers, 1818 y Sturnira erythromos Tschudi, 1844); por los nectarívoros-polinívoros (12,5 %) (Glossophaga soricina Pallas, 1766 (Phyllostomidae: Glossophaginae); por insectívoros (12,5 %) (Eptesicus brasiliensis Desmarest, 1819 (Vespertilionidae), y por los sanguinívoro (12,5 %) (Desmodus rotundus É Geoffroy Saint Hilaire, 1810, Phyllostomidae: Desmodontinae) (Figura 2).
Casas refugio: caracterización y especies
Las tres casas refugio eran antiguas y estaban deterioradas, ya que se construyeron en la primera mitad del siglo XX y fueron abandonadas a principios del siglo XXI; se evidenció que para su cimentación se hizo una tala. En su edificación se emplearon árboles de la región como el chicalá (Tabebuia Gomes ex DC; Bignoniaceae), el roble (Quercus (Bonpl.); Fagaceae), y el amarillo (Ocotea Aubl; Lauraceae). Todas las casas tenían techo de zinc en la parte externa y madera en la parte interna (techo de las habitaciones), con vigas de madera de 12 a 15 cm de grosor y superficie corrugada por las vetas de la madera, así como fisuras producto del desgaste natural, la acción de insectos xilófagos y su uso como percha por parte de los murciélagos. El espacio entre el techo inferior (cuartos) y el superior (casa) se evidenció como un punto importante para el movimiento de los murciélagos, que accedían al resto de los cuartos a través de las aberturas del techo inferior (Figura 1S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
La ubicación de los murciélagos dentro de las casas era aleatoria, sin una preferencia evidente por la orientación cardinal, pero sí evitando las fuentes de perturbación (luz, ruido, vibraciones) y restringida a la presencia de estructuras de percha. Los murciélagos se encontraron perchando en el techo y en las vigas y sus vetas, principalmente. El tipo de agregación fue similar (aglomerados, en ocasiones solitarios). En la Reserva Roble & Nogal, el 3 de septiembre se registraron 25 individuos, aproximadamente, pertenecientes a las especies C. brevicaudum, C. perspicillata y G.soricina; en la finca Patio Bonito, se encontraron cerca de 45 individuos pertenecientes a la especie C. perspicillata, y en la finca San Martín, cerca de 861 pertenecientes a la especie C. perspicillata (Tabla 1S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
Estructura poblacional de las especies en la comunidad de murciélagos
En total se identificados 15 individuos, ocho de ellos capturados para medir su edad, sexo y estado reproductivo (Tabla 1).
Diseño e instalación de la caja para murciélagos
Diseño. Se tuvo en cuenta la caracterización biótica y abiótica de las casas refugio, en especial la de la Reserva Roble & Nogal (Tablas 1S,2S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217). La caja medía 70 cm de ancho, 30 cm de profundidad y 100 cm de alto. Se empleó aglomerado de madera por su bajo peso y su superficie corrugada. Se instalaron diez listones de madera a lo largo de la caja en la parte interna del techo, el cual se impermeabilizó con una lámina de acrílico. El refugio artificial se fijó a una vara de madera de 4 m de altura y 15 cm de ancho, y sus superficies interna y externa se impregnaron con guano proveniente de la casa refugio (Figura 2Sa, b,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
Número de liberación | Especie | Sexo | Edad | Condición reproductiva |
---|---|---|---|---|
3 | C. perspicillata | ♀ | Subadulto | Nulípara |
4 | C. perspicillata | ♂ | Subadulto | No testiculado |
5 | C. perspicillata | ♀ | Subadulto | Nulípara |
6 | C. perspicillata | ♂ | Subadulto | No testiculado |
7 | C. perspicillata | ♀ | Subadulto | Nulípara |
9 | C. perspicillata | ♀ | Subadulto | Nulípara |
10 | C. perspicillata | ♂ | Subadulto | No testiculado |
8 | C. brevicaudum | ♂ | Subadulto | No testiculado |
* | Carollia sp. | Individuos observados volando: 5 | ||
* | G. soricina | Individuos observados volando: 2 |
*No capturados
Instalación. La caja se situó en la Reserva Roble & Nogal, en el punto 05°17'07,62" N, 74°13'22,51" W, tomando como referencia los corredores naturales y la presencia de claros dominados por plántulas de Piper L (nombre común: cordoncillo; Piperaceae), y de Vismia Vand (n.c.: punta de lanza; Hypericaceae), indicadores de procesos de sucesión primaria favorecida por las rutas de forrajeo de las especies C. castanea y C. perspicillata (Figura 2Sc,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
Considerando que la vegetación asociada con la casa refugio se caracteriza por los estratos arbustivo (1,51-5 m) y subarbóreo (5,1-12 m), se definió in situ la altura de instalación a partir de los 6 m desde el suelo. Además, se consideró el límite entre el corredor arbóreo inferior (12,1-25 m) y las áreas de cultivo o pastizales como punto de acceso a mayores recursos alimenticios, áreas de percha, protección y forrajeo. La vara de soporte de la caja se enterró a una profundidad de un metro y se aseguró con alambre y guayas al fuste de un árbol de chicalá o flor amarilla (Tabebuia Gomes ex DC (Bignoniaceae)), de una altura de 10 a 12 m, diámetro altura pecho (DAP) de 80 a 90 cm, y localizado entre 40 y 50 m en línea recta en dirección sureste de la casa refugio.
Las posibles entradas de los murciélagos (techos, paredes, puertas) a la casa refugio se bloquearon con polisombra para evitar el reingreso de los murciélagos previamente capturados y medidos; estos últimos, de las especies C. brevicaudum y C. perspicillata, fueron instalados uno a uno manualmente en la caja, teniendo cuidado de que percharan efectivamente.
Trabajo de educación ambiental y ciencia ciudadana
A las sesiones educativas asistieron cerca de 40 habitantes entre los 3 y los 70 años de edad, con un porcentaje aproximado de 50 % de mujeres y otro tanto de hombres. En la primera jornada se evidenció un desconocimiento generalizado de aspectos puntuales como la anatomía y la morfología de los murciélagos, así como la marcada percepción negativa que de ellos tenían algunos de los asistentes. La mayoría de los participantes tenía un gran conocimiento sobre los refugios naturales y artificiales de los murciélagos y algunos conocían bien los servicios ecosistémicos que brindan y la importancia de su conservación (Figura 3SI,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
En la segunda jornada se observó un cambio general en la percepción de la comunidad en torno a los murciélagos, pues se pasó de un conocimiento básico, comúnmente sesgado e incorrecto, a un conocimiento personal amplio y sólido de su biología e importancia. Este cambio fue notable especialmente en aquellos que asistieron a las dos jornadas educativas, e incluso mayor en las habitantes que apoyaron el muestreo (Figura 3SII,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
El material gráfico y los registros recopilados en los conversatorios dieron como resultado el desarrollo del póster informativo "Los murciélagos de Pasuncha", y de una serie de folletos: ¿Qué son los murciélagos?, ¿Qué murciélagos hay en Pasuncha?, ¿Dónde viven los murciélagos?, ¿Qué comen los murciélagos?, ¿En dónde buscamos nuestro alimento?, y ¿Cómo hacer un murciélago? (Figura 4S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217).
Discusión
Ensamblaje de murciélagos
La fragmentación de los ecosistemas y la deforestación selectiva, entre otras formas de perturbaciones antrópicas, se encuentran entre los procesos que mayor incidencia tienen en la distribución y abundancia de las especies de murciélagos, las cuales pueden presentar, según su historia evolutiva, un mayor o menor grado de adaptabilidad a las condiciones antrópicas (Presley et al., 2008; Meyer et al., 2016).
Las especies C. brevicaudum y C. perspicillata, registradas en todas las casas refugio, y G. soricina, registrada en la Reserva Roble & Nogal, se encuentran asociadas a ambientes tropicales sujetos a perturbaciones que tienden a aumentar (Pons & Cosson, 2002; Sampaio et al., 2003; Delaval & Charles-Dominique, 2006; Meyer & Kalko, 2008; Meyer et al., 2008; Estrada-Villegas et al., 2010). Estas especies dominan los bosques secundarios en estadios sucesionales tempranos a intermedios (Brosset et al., 1996; Castro-Luna et al., 2007a, b; Willig et al., 2007; de la Peña-Cuéllar et al., 2012; Vleut et al., 2012) y allí participan en los procesos de regeneración mediante la dispersión de semillas y la polinización de las plantas (Muscarella & Fleming, 2007). La predominancia de Carollia spp. en este tipo de hábitats, característicos de las casas refugio visitadas, podría deberse, en parte, a que son especies generalistas y aprovechan diversos recursos alimenticios como los frutos de los géneros Cecropia Loefl., Piper, Solanum L y Vismia Vand, y, además, complementan su dieta con polen, néctar, algunos insectos y hojas (Melo et al., 2004; Oria & Machado, 2007; Maguiña et al., 2012; Alviz, 2014; Ríos-Blanco & Pérez-Torres, 2015; Pereira et al., 2017; Muñoz-Saba et al., 2019).
Así, la presencia de estas especies en las casas refugio se esperaba y concuerda con los hábitats asociados, entre ellos, extensas áreas de cultivos y pastizales, pero también puntos de transición sucesional representada por bancos de plántulas de especies de consumo (v.g. Piper, Vismea) y vegetación arbustiva en la zona ecotonal entre las áreas antrópicas y los remanentes de vegetación secundaria. En las fincas Patio Bonito y San Martín, en donde la vegetación arbórea secundaria era más representativa, la presencia de las especies frugívoras y percheras A. lituratus y S.erythromos se relacionaría con el hecho de que son más abundantes en hábitats conservados o en estadios sucesionales avanzados que ofrecen mejores recursos alimenticios y una mayor cobertura de refugios para la reproducción, en comparación con áreas perturbadas que también pueden hacer parte de su área de distribución (Muñoz-Saba et al., 2019).
En cuanto al ensamblaje de los murciélagos al interior de las casas refugio, solo se comprobó la coexistencia de las especies C. brevicaudum y C. perspicillata con G. soricina en la Reserva Roble & Nogal. La asociación entre C. perspicillata y G. soricina en colonias ya ha sido documentada (Díaz & Linares-García, 2012; Rengifo et al., 2013; Camelo-Pinzón & Esquivel-Melo, 2015).
La estructura social de C. perspicillata se caracteriza por un patrón de poliginia en la cual se establecen harenes conformados por un macho y varias hembras, en tanto que los machos restantes se mantienen solos o en grupos ( Porter, 1978; Williams, 1986; Knörnschild et al., 2016; Martínez-Medina & Pérez-Torres, 2018). Sin embargo, dicha estructura no se evidenció en la casa refugio de la Reserva Roble & Nogal, ya que la representatividad de sexos fue homogénea (1:1), y todos los individuos eran subadultos sin actividad reproductiva.
Aunque se han registrado estructuras de este tipo, no son típicas en condiciones ambientales estables ( Porter, 1978; Williams, 1986). Los aspectos relacionados con la reproducción no parecen explicar el estado de la población, pues, aunque la fecha del muestreo no coincidió con los periodos reproductivos de la especie (junio-agosto y febrero-mayo) (Cloutier & Thomas, 1992), lo cual podría relacionarse con la nula actividad reproductiva, esta no se asocia con la representación equitativa de los sexos.
Las condiciones climáticas durante el periodo de muestreo y la oferta alimenticia tampoco explicarían la estructura observada, debido, principalmente, al hábito generalista de C. perspicillata y su posibilidad de aprovechar recursos humanos, lo que la convierte en una especie sinantrópica (Voigt et al., 2016).
Por lo tanto, lo más factible es que las diversas intervenciones en la casa refugio hayan alterado las características ambientales y espaciales en su interior, afectando la estructura social, el tipo de residencia, y las relaciones interespecíficas e intraespecíficas (Sedgeley & O' Donnell, 1999). Ello daría cuenta de la fuerte disminución del número de individuos, que pasó de cientos (según lo reportado por los habitantes locales, y lo evidenció la cantidad de guano acumulado y el tiempo de abandono de la casa), a solo 25 (3 septiembre 2019) y 15 (9 noviembre 2019) durante los muestreos, todos ellos subadultos. La hipótesis que planteamos es que esta casa refugio se convirtió en un sitio de paso, pues no tenía las condiciones óptimas para el establecimiento de harenes o colonias de maternidad.
Diseño, construcción e instalación de la caja para murciélagos
El diseño de la caja se basó en la caracterización estructural de las casas refugio. Se tomaron varios de sus elementos como evidencia de ocupación efectiva por parte de los murciélagos y se consideró la historia natural y la ecología de las especies registradas (Tablas 1S, 2S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217). Esto porque la mayoría de la información sobre el tema, en especial de los modelos actuales de cajas para murciélagos, se limita a las especies de la familia Vespertilionidae, propia de climas templados en Europa y Estados Unidos, que no comporten la misma historia natural de las especies neotropicales (Neilson & Fenton, 1994; Brittingham & Williams, 2000; Dillingham et al., 2003; Lourenço & Palmeirim, 2004; White, 2004; Ritzi et al., 2005; Flaquer et al., 2006; Long et al., 2006; Tuttle et al., 2013, Mering & Chambers, 2014, Rueegger, 2016, Garland et al., 2017, López-Baucells et al., 2017; Bideguren et al., 2018).
En contraste, los trabajos sobre los murciélagos del Neotrópico son pocos (Alberico et al., 2004; Kelm, 2008; Kelm et al., 2008; Schöner, 2012; Reid et al., 2013) y los modelos propuestos han tenido resultados variables. Por ello, la propuesta de un modelo dirigido a especies específicas (murciélagos frugívoros, nectarívoros-polinívoros) contribuye a ampliar el campo de uso de las cajas para murciélagos con fines de conservación en el Neotrópico.
El sitio de instalación en el borde del corredor del fragmento de bosque secundario (Figura 2S,https://www.raccefyn.co/index.php/raccefyn/article/view/1603/3217) cumplió con las condiciones registradas por Ortiz-Ramírez et al. (2006) en cuanto a las preferencias en la selección de refugios por parte de C. perspicillata: árboles de gran altura y diámetro en áreas de bosque tropical maduro o en estado de sucesión avanzado. Se espera que este modelo de refugio artificial dirigido permita el establecimiento de los murciélagos trasladados, además de atraer otros individuos. Aunque se evidenció su éxito como estructura en la cual los murciélagos pueden perchar (los individuos trasladados se mantuvieron por unos segundos en el interior de la caja), se debe comprobar su efectividad a largo plazo con estudios adicionales que integren a la comunidad en el proceso de construcción, instalación y monitoreo de nuevas cajas, estrategia adecuada para reducir los conflictos entre humanos y murciélagos y favorecer su conservación (Salazar et al., 2010).
Cabe resaltar que esta estrategia surge como respuesta a que, inicialmente, muchos de los habitantes no deseaban ver a los murciélagos en ningún tipo de construcción humana, incluidas las casas abandonadas. No obstante, nuevos esfuerzos de pedagogía pueden orientarse hacia la conservación de estas casas abandonadas para mantener a los murciélagos residentes y los servicios ecosistémicos que prestan.
Trabajo de educación ambiental y ciencia ciudadana
Los resultados obtenidos evidenciaron mitos y creencias, en ocasiones fuertemente arraigadas, como la idea de que todos los murciélagos son hematófagos (Cajas-Castillo et al., 2013), que son ratones alados y que se asocian con la oscuridad (Vargas-Contreras et al., 2012), o producen temor y repulsión (Bernal, 2016).
La inclusión de los habitantes en las jornadas educativas y los muestreos, y su integración al componente educativo-participativo, permitió establecer un diálogo que no se limitó a la exposición, sino que favoreció la apropiación del conocimiento de la fauna local por parte de la comunidad, hecho que se reflejó en la elaboración de folletos, posters y carteleras. Asimismo, el desarrollo de las actividades en varios grupos demográficos y a nivel grupal e individual permitió la expresión del liderazgo (incluso de niños), el aumento de confianza, el trabajo en equipo, la difusión de lo aprendido, la asimilación de nuevos conceptos, el reconocimiento de situaciones particulares, y la asociación de eventos en torno a esta fauna, lo que constituye un avance en la construcción de una visión de los murciélagos que reconoce su importancia en múltiples aspectos de la cotidianidad, como la dispersión de semillas, la polinización de plantas cultivadas, los efectos en los insectos plaga y su control, la regeneración de los bosques fuente de recursos, el mantenimiento de procesos ecosistémicos, y los encuentros con los murciélagos consumidores de sangre, entre otros.
Los resultados obtenidos son congruentes con lo observado en varias experiencias con actividades divulgativas similares que cambian la percepción negativa de los murciélagos, como la de la "carpa de los murciélagos", cuya efectividad se ha evaluado en otros estudios (Galarza et al., 2013), la de la "murci-maleta viajera", en la que se usan personajes ficticios y se orienta especialmente a los niños (Briones & España, 2012), y la del "festival de los murciélagos", en la que se dan conferencias al público en general, talleres, cursos, obras de teatro, y foros (Cisneros-Palacios, 2012), así como los diferentes ejercicios sobre el tema liderados por el Programa para la Conservación de los Murciélagos de Colombia (PCMCo, 2020).
La inclusión de las comunidades permite, por lo tanto, establecer estrategias de conservación; sin embargo, las acciones efectivas se logran cuando se integra a las comunidades locales y académicas, las ONG, organismos gubernamentales, e instituciones de finan-ciamiento (Gómez-Ruiz et al., 2015). La experiencia del trabajo con la comunidad de Pasuncha evidenció la necesidad de integrar los centros de investigación y educación y las comunidades, con el apoyo de entidades nacionales e internacionales.
En resumen, se hicieron los primeros registros de las siguientes especies de murciélagos en el corregimiento de Pasuncha (municipio de Pacho, Cundinamarca): A. lituratus, C. brevicaudum, C. castanea, C. perspicillata, S. erythromos (consumidoras de frutas); G. soricina (nectarívora-polinívora); E. brasliensis (insectívora), y D. rotundus (hematófaga). Además, se comprobará la efectividad de la caja para murciélagos en estudios posteriores para proponerla como estrategia de conservación de los ecosistemas, orientando su diseño, construcción e instalación a especies específicas con el enfoque de ensamblaje de murciélagos. Por último, como estrategia para reducir los conflictos entre humanos y murciélagos, deben incentivarse estrategias educativas y de participación que integren los diferentes sectores sociales.