INTRODUCCIÓN
Las infecciones asociadas a la atención en salud (IAAS) se establecen como consecuencia del tipo de atención médica que reciben los pacientes y representan un problema de extraordinaria gravedad, dado que se asocian con mayor morbimortalidad y costos hospitalarios1,2. Dentro de estas se encuentran las infecciones asociadas a catéter vascular (IACV), se estima la adquieren aproximadamente 80,000 personas a nivel mundial, extiende la estancia hospitalaria hasta 7.5 días, mortalidad de 24,000 personas y costos asociados a la gestión hasta de 414 millones de dólares anualmente3–5.
La terapia intravenosa es un procedimiento invasivo; en México hasta un 95% de los pacientes hospitalizados requerirán un acceso vascular, lo que favorece la adquisición de la IAAS relacionada a catéter vascular al menos en un 5.8% del total de la población que requiere terapia intravenosa6.
En este mismo país, la Norma Oficial Mexicana 022-SSA3-2012 que instituye las condiciones para la administración de la terapia de infusión en los Estados Unidos Mexicanos y el Protocolo para el Manejo Estandarizado del Paciente con Catéter Periférico, Central y Permanente de la Secretaría de Salud, establecen los requisitos mínimos e indispensables que el personal de salud deberá cumplir, así como las condiciones generales relacionados a los insumos a utilizar7–8. A pesar de la existencia de estos protocolos existe una falta de apego a estos, un ejemplo de esto es un estudio realizado en 53 hospitales, que ha demostrado que sólo el 74% del personal utilizaba máxima barrera de protección para la colocación de dispositivos intravasculares, el 92% los antisépticos recomendados y el 95% soluciones antisépticas compartidas entre varios pacientes, lo que incrementa el riesgo de bacteriemia con alta mortalidad6. Una revisión acerca del riesgo biológico en el personal de enfermería, establece entre uno de sus principales causas de accidentes de trabajo es la no utilización de elementos de la barrera máxima, generando una prevalencia de accidentes en el personal de enfermería del 34 al 96% respectivamente9, aspecto por lo cual es primordial la creación de guías y protocolos instituciones que garanticen los cuidados de enfermería en indicaciones de la terapia intravenosa10.
Diversos estudios refieren el uso de intervenciones fundamentadas en evidencia, las cuales favorecen a la prevención y reducción de IACV. Un ejemplo de esto es la higiene de manos11, uso de apósito estéril transparente12, programas de educación establecidos en correcta instalación y mantenimiento de acceso vasculares13–14, uso de clorhexidina como antiséptico para la preparación de la piel15–17, uso de la barrera máxima durante la inserción y mantenimiento18–25, así como uso de listas de verificación (check-list) de procedimientos26.
Se sugiere como opción para la prevención de IACV el uso de un kit prearmado desechable en la práctica clínica, debido a que genera mayor apego del uso de material de barrera, se garantiza el cumplimiento a las buenas prácticas de inserción y mantenimiento de catéteres vasculares, así como a la reducción de tasas de bacteriemias y disminución de errores27–29.
Un kit favorece en la optimización de recursos humanos, reducción de costos directos e indirectos como; material, proceso de esterilización, salario de personal, tiempo necesario para la realización de los procedimientos, así como en la propia gestión hospitalaria30.
Por lo anterior, el objetivo de este estudio fue demostrar la optimización en los tiempos, movimientos y apego a protocolos al implementar el uso de kits desechables en procedimientos de inserción y mantenimiento de catéter vascular en comparación con el método tradicional en instituciones de salud pública en México.
MATERIALES Y MÉTODOS
Se trata de un estudio cuantitativo, prospectivo, comparativo y cuasiexperimental, el universo de estudio conformado por los pacientes de los diferentes servicios hospitalarios en 7 instituciones de salud de segundo nivel en el Estado de México, Nuevo León y Jalisco; realizado en el periodo de junio a agosto del 2014. Se recolectó una muestra de 600 pacientes sometidos a los procedimientos de terapia intravenosa como: 1) instalación de catéter venoso periférico corto (ICVPC), 2) instalación de catéter venoso central (ICVC) y 3) curación del sitio de inserción de catéter venoso central (CSICVC). Fueron divididos en 2 grupos, en el primero se realizaron los procedimientos bajo el método tradicional, el cual se entiende como el material utilizado cotidianamente, en este método se recoleta cada insumo por separado. En el segundo grupo se emplearon los kits desechables, fueron 3 diferentes, cada uno correspondiente a los procedimientos a realizar, ICVPC, ICVC y CSICVC; estos cuentan con todo el material mínimo necesario, integrado dentro de un kit estéril y desechable.
Se incluyeron procedimientos de la terapia intravenosa en pacientes mayores de 18 años, de ambos sexos; se excluyeron pacientes que retiren el consentimiento para participar en el estudio y menores de 18 años.
Se evaluaron 2 aspectos, el apego al Protocolo para el Manejo Estandarizado del Paciente con Catéter Periférico Central y Permanente de la Secretaría de Salud y protocolos institucionales en relación al uso de barrera máxima. En segundo lugar, se miden tiempos y movimientos relacionados con la preparación de material hasta la realización del procedimiento. Los movimientos fueron definidos como las actividades relacionadas a la recolección del material antes y durante el procedimiento.
La recolección de los datos se realizó a través de un instrumento divido en dos secciones, construido ex profeso por investigadores y validados por expertos en el área de ciencias de la salud y personal especializado en clínica de catéteres. El instrumento resultó en el coeficiente de alfa de Cronbach, un resultado 0.71. Se establecieron variables dicotómicas, asignando un punto en el caso de cumplimiento del protocolo y cero puntos en caso de no cumplir.
Para recolectar los datos se capacitó y asesoró a un grupo de enfermeros, además se asignó a un investigador responsable por cada hospital participante. Se realizó un monitoreo diario de los procedimientos que cumplían con los criterios de inclusión por parte de los investigadores, cabe destacar que la realización de los procedimientos con el método tradicional, así como el uso del kit desechable, fue responsabilidad del personal de salud adscrito a cada uno de los servicios participantes en las instituciones de salud.
Previo al inicio de ambas etapas de estudio, se programó una capacitación curso- taller sobre accesos vasculares y apego al uso de las barreras máximas de protección a todo el personal de los servicios hospitalarios participantes de este estudio.
Para el acceso a las instituciones se obtuvo autorización de las autoridades correspondientes del sistema de salud de cada estado e institución de salud autorizado bajo el oficio número 96.201.1.2.8.1.2./1344/2014). Además, se apegó a los lineamientos establecidos en la ley general de salud en materia de investigación en México que establece el uso de consentimiento informado y protección de datos de los participantes, consideraciones éticas de las instituciones de salud participantes y la declaración de Helsinki31–32.
El material que se incluye en los kits desechables es igual en descripción y calidad al que adquieren las instituciones de salud mediante licitaciones públicas.
Para el análisis de los datos se utilizó el programa estadístico SPSS versión 22, se utilizó estadística descriptiva obteniendo frecuencias y porcentajes, la diferencia entre los kits desechables y el procedimiento habitual se realizó mediante prueba t de student para grupos independientes.
RESULTADOS
Durante la etapa con el procedimiento tradicional se recolectó un total de 322 procedimientos. El 62.4% corresponde a la ICVPC, 28.8 % a CSICVC y 8.7% de ICVC. Con el uso del kit desechable, se recolectó una muestra de 278 procedimientos (61.2% ICVPC, 38.8% CSICVC y 5% ICVC).
Se muestra un incremento en el apego de los protocolos ya mencionados (categoría IA) haciendo uso del kit desechable, favorece el uso de la barrera máxima de protección, esto aumenta un 50% en ICVPC, 36% CSICVC y 8% en ICVC, en comparación con el método tradicional; y con ello la prevención de IACV. (Figura 1).
Con el uso de los kits existe una reducción en tiempos asociados desde la recolección de material, preparación de este mismo y realización de los procedimientos (93% ICVPC, 83% ICVC y 88% CSICVC). En cuanto a los movimientos relacionados a la integración del material, se observó una reducción con el uso de los kits, del 86% en ICVPC, 93% en ICVC y del 83% en CSICVC.
Lo anterior, refiere que el personal de salud tarda más tiempo al realizar el procedimiento cuando no tiene los materiales a su alcance y requiere trasladarse a servicios adjuntos, almacén u otros servicios como la central de equipos y esterilización (Tabla 1).
Media de tiempo de procedimiento | Media de movimientos del procedimiento | |||
---|---|---|---|---|
Procedimiento | Sin uso del kit | Con uso del kit | Sin uso del kit | Con uso de kit |
ICVPC | 70 min. | 5 min. | 9.63 | 1.45 |
ICVC | 219 min. | 38 min. | 21.80 | 1.42 |
CSICVC | 84 min. | 10 min. | 12.27 | 2.05 |
ICVPC: Instalación de catéter venoso periférico corto; ICVC: Instalación de catéter venoso central; CSICVC: Curación del sitio de inserción de catéter venoso central.
DISCUSIÓN
El programa bacteriemia zero establece estrategias básicas como son la higiene de manos, uso de barrera máxima de protección y uso de antisépticos recomendados, entre otras. Este programa forma parte de los compromisos de México con el mundo en material de calidad en salud y este mismo establece, que lo más difícil es vencer la costumbre, cambiar actitudes, creencias al rechazo de las nuevas evidencias y tecnología que favorece en la seguridad del paciente33. En el 2011, se demostró que, en nuestro país en instituciones públicas, no existen políticas respecto al manejo de los catéteres y mucho menos en el uso de métodos de barrera para la colocación y mantenimiento de los mismos6. Este estudio pretendió mejorar el apego al uso de las barreras máximas a través del uso de kits desechables, lo cual se logra claramente expresado en los resultados.
Estudios realizados en instituciones de salud de alta especialidad en la Ciudad de México, reportan que el uso de los equipos desechables reduce tiempos y costos relacionados a la preparación del equipo y actividades del personal de enfermería30,34, esto es similar a lo encontrado, en donde se establecen ahorros en tiempos y cumplimiento a los protocolos institucionales, lo cual se traduce en un ahorro en costos asociados.
Un ejemplo del ahorro en costos asociados lo demuestran en un estudio realizado en 17 hospitales de Melbourn, Australia, se encontró que los kits de inserción de catéter venoso central reutilizables (método tradicional) tenían efectos ambientales considerablemente mayores que los kits desechables de un solo uso, estos hallazgos se explican principalmente por la electricidad de los hospitales y la ineficiencia de energía y agua de los esterilizadores. Para hospitales como estos, que usan anualmente alrededor de 500 kits de inserción de catéter venoso central, el uso de kits de catéter venoso central reutilizables ahorraría $1000, pero produciría 400 kg más de CO2 y utilizaría 12.500 litros más de agua en comparación con los kits desechables35.
Se evidencia que el uso de un kit desechable es una propuesta directa para el personal de salud que reduce el proceso de recolección de material, cumplimiento con la práctica estéril y favorece al control de las listas de verificaciones institucionales. Esto mismo se puede observar en diferentes estudios, que refieren con la estandarización de un kit con todo incluido, se asocian a un mayor cumplimiento de las prácticas estériles y hay una reducción en las tasas de bacteriemia28,36,37.
Las instituciones de salud actualmente al no disponer de los recursos y productos, aumentan el riesgo de no llevar acabo los protocolos por la falta de los mismo37; estandarizar los materiales para los procesos relacionados a accesos vasculares a través de la secuencialidad y colocación de material necesario; concuerda con las líneas federales en seguridad y calidad del paciente, donde mencionan que el mayor reto a superar, consiste en alcanzar el apego al manejo estandarizado de la terapia intravenosa y accesos vasculares en México26.
Se evidencia la importancia de la estandarización de los materiales de consumo. La reducción de costos y la optimización de la asistencia de enfermería al evitar, principalmente, desperdicios de material, tiempo y recursos en los sectores de salud, dependen del trabajo colaborativo entre los equipos de salud, de la identificación de los resultados esperados, del uso de principios y la mejora continua de la calidad asistencial38.
Es importante que las instituciones de salud realicen estudios e investigación que comprueben el funcionamiento de alguna tecnología e intervention en salud en el contexto mexicano, debido a que todavía son escasos en nuestro medio39–43.
Dentro de las limitantes importantes de este estudio se describe que, debido al periodo de estudio, no se incluyeron el mismo número de pacientes por cada grupo de intervention, no se incluye información sociodemográfica y clínica de los participantes, visualizándose áreas de oportunidad para hacer de este estudio aún de mayor interés.
CONCLUSIONES
Se demuestra la efectividad en uso de las barreras máximas estériles, tiempos y movimientos en los procedimientos de terapia intravenosa, lo cual refuerza y mejora la calidad establecida por la normatividad nacional y protocolos institucionales.
El uso de kits desechables que contengan todo el material necesario, facilitan la atención oportuna y ágil del paciente sin descuidar el cumplimiento a las listas de verificación que garantizan una correcta inserción y mantenimiento de un catéter venoso periférico o central.
El ahorro de tiempos y movimientos del personal, favorece a mejorar la calidad del cuidado, evitando el desperdicio de tiempo dedicado exclusivamente al arte de cuidar.
Se establece que el uso de kits desechables es de gran utilizada porque reduce procesos que involucran esfuerzo y productividad del personal de enfermería; sin embargo, este estudio es base para la construcción de futuras investigaciones; las cuales incluyan estimación de costos, impacto epidemiológico al reducir la prevalencia de infecciones intrahospitalarias, dentro de las instituciones de salud, para incrementar la calidad atención en procedimientos de terapia intravenosa.